Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 44





___ estaba en su habitación, las paredes cerrándose a su alrededor, el peso de todo lo que había pasado y lo que aún le quedaba por enfrentar la estaba aplastando. Su mente corría en círculos, tratando de encontrar algo de paz, pero nada la calmaba. En medio de sus pensamientos caóticos, escuchó unos pasos acercándose a su puerta, y antes de que pudiera reaccionar, la puerta se abrió lentamente.

Era su padre, Reginald Hargreeves. Aunque el hombre se mostraba implacable en muchos aspectos de la vida, esta vez había algo diferente en su postura, como si el peso de los años y sus decisiones lo estuvieran alcanzando finalmente.

—___ —comenzó, su voz grave y controlada, como siempre, pero había algo más en ella, algo que sonaba casi... sincero. —Sé que no he sido el mejor padre para ti, y que te he fallado de maneras que ni yo mismo entiendo completamente.

___ lo miró fijamente, aún desconfiada. El hombre que había sido tan distante, tan inmune a cualquier tipo de emoción o empatía, ahora estaba allí, aparentemente queriendo enmendar su comportamiento.

—Siempre esperé que pudieras manejarlo todo, que fueras fuerte, pero cometí el error de no considerarte una persona con tus propias emociones y deseos. Pensé que te prepararía para el mundo de la misma manera que preparé a los demás... y fracasé contigo —dijo él, su tono más suave, algo que era difícil de creer viniendo de Reginald Hargreeves.

___ no dijo nada, pero su corazón comenzó a latir más rápido. ¿Qué quería él de verdad? ¿Qué clase de arrepentimiento genuino podría haber en un hombre como él?

—Si pudiera retroceder en el tiempo y cambiar las decisiones que tomé, lo haría. Quizá no podría haber sido el padre perfecto, pero te fallé, y no puedo seguir ignorando las consecuencias de eso. No puedo seguir pretendiendo que todo está bien cuando sé que no lo está. Y por eso... quiero pedirte perdón, ___ —terminó, su voz bajando aún más, como si temiera ser escuchado.

___ sintió un nudo en el estómago, la incredulidad y la confusión inundándola. ¿Realmente Reginald Hargreeves estaba pidiendo perdón? ¿Era posible que, en todo su tiempo como padre, este fuera el primer momento genuino de vulnerabilidad que mostraba?

—No sé si esto cambia algo, padre —dijo ella finalmente, su voz quebrada pero firme—, pero... gracias por decirlo. No sé si pueda perdonarte, o si siquiera quiero hacerlo. Pero... ya no quiero seguir cargando con esto sola.

Reginald la observó en silencio, como si estuviera procesando sus palabras, pero no intentó forzar una respuesta. Sabía que había cruzado una línea con ella, y ahora, al igual que él, había algo en su corazón que lo hacía sentirse vulnerable por primera vez en muchos años.

___ lo miró a los ojos por un momento más, antes de girarse hacia la ventana, la luz del atardecer bañando su rostro. Había demasiadas heridas abiertas en su corazón, demasiados recuerdos de dolor y sacrificio que aún no sabía cómo sanar. Pero tal vez, solo tal vez, este perdón —o al menos, esta conversación— podría ser el primer paso para cerrar un capítulo de su vida y empezar a escribir uno nuevo.

—Te dejo pensar en ello —dijo Reginald, comenzando a dar un paso atrás.

___ no respondió, pero tampoco lo detuvo.

Ella se acostó en su habitación y tuvo un recuerdo de ella, Five y Ben antes de que sucediera la pelea y todo lo demás.

—¿Quieres mi humilde opinión? —preguntó Ben mirando su libro.

—No Ben, se lo que hago —dijo segura a la vez que su mirada demostraba totalmente inseguridad.

—Sinceramente no lo parece —se burló mientras sonreía y cerraba su libro—¿ Traerme a tu habitación para darle celos? —cuestionó con burla.

—Es como la quinta vez que te repito que quiero pasar tiempo con mi mejor amigo —le sonríe y le tira una almohada qué estaba en el piso pero la esquivo.

—Ajá y Luther no babea por Allison —si asintió sarcástico y volvió a su libro.

En eso entró Five a la habitación sin tocar,cerando la puerta mientras entraba.

—Es de mala educación entrar sin permiso, ¿no te enseñaron modales Ryan? —dijo disgustada y Five hizo una mueca al escuchar su nombre real.

El solo la miró y no dijo nada.

—¿Qué quieres, Five? —pronunció entre dientes.

—Ben, ¿podrías salir? —miró seriamente al que estaba recostado en la cama y sonrió sarcástico.

—Ben no irá a ningún lado —demandó cortante.

—Si lo hará —dijo desafiante.

—El que se tiene que ir de aquí eres tu, no él.

Ben los miro ambos y siguió leyendo pero se sentía una tensión más fuerte cada vez.

—Estás terminando con mi paciencia, Ben —advirtió realmente irritado.

Ben lo miró y empezó a respirar agitado, mientras su mirada demostraba miedo.

—No me hagas repetirlo.

El hizo una mueca de molestia  y volvió a libro sin importarle nada, están siguiendo el juego de su hermana perfectamente aunque se moría de miedo por dentro.

—No lo amenaces Hargreeves, te lo advierto —das un paso adelante.

Ben no soporto la tensión y se paró cerrando el libro pasando por el lado de ella.

—Te lo dije —susurra para ti.

Ben sale de la habitación de ella rápido.

—¡¿Cuál es tu problema?! —te acercas, molesta.

—Qué curioso, yo tengo la misma pregunta —se acercó de igual manera.

—Fuera de mi habitación ahora —ordenas señalando la puerta, irritada.

—¿Qué hacía el aquí Sammy?

En ese momento ella dejo de recordar por un golpe en la puerta.

—Señorita ____ —habló Pogo qué seguía tocando— El abogado esta aquí, desea verla.

Ella al escuchar eso, se puso sus zapatillas y bajo corriendo una vez que vio al abogado se sentó en el sillón frente a él.

—Tengo una buena noticia, lo logramos —este sonrió y ella también.— Por fin estas divorciada, nada te une a él —le enseñó la resolución— Fue más fácil al no tener hijos con él

—Ahorita me cuenta como fue todo —reviso la resolución— Nunca tendría hijos come ese imbécil, es un patán

Usted tiene la mayoría de acciones —me sonrió y yo le di su paga.

—Gracias no quería su dinero o algo pero lo que si quería es estar libre —sonreí y el se fue.

—Por fin, lo logre Pogo —ella salió abrazarlo y riendo el sonrió también.

Por fin se separaron, por fin ella es libre de nuevo

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro