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Habían pasado varios día desde que los clanes partieron hacia los territorios del bosque, y a Zarpa Oscura estaba cansado.
Por suerte, ya no faltaba tanto. Ya habían pasado el lugar donde se ahoga el sol y pareciera que no habrían problemas.
-¡Ya quiero llegar!-maullo Zarpa Cremada con entusiasmo-¿cuanto más tardaremos Helecho Roto?-pregunto a su mentor
-No mucho Zarpa Cremada, o eso creo-respondio a su aprendiza.-De hecho, allá esta el último sendero atronador. Luego de cruzarlo llegaremos a los territorios del bosque-añadio
Poco a poco los gatos fueron turnandose para cruzar por el último sendero, Hasta que algo los altero.
-¿donde esta el clan del viento?-maullo Hielo Manchado, mentor de Zarpa Oscura.
Al cabo de un momento aparecieron entre la maleza que estaba junto al sendero atronador. Pero un atigrado claro llevaba un inmovil cuerpo blanco a rastras.
A Zarpa Oscura se le helo la sangre al notar lo que había pasado. Un mounstro había atropellado a Estrella de Nube.
Rápidamente la curandera del clan de viento, Flor de Helecho, fue a acudir a su líder junto a un guerrero gris.
Por suerte, al cabo de unos minutos Estrella de Nube abrió lentamente sus ojos. Además, ya habían llegado a los territorios del bosque. Estrella de Nube había sobrevivido, pero a coste de una de sus vidas.
-Bien clan del trueno.-empezó Estrella Gris, al llegar a los cuatro arboles-no sabemos si hay algún peligro en nuestro territorio, así que manténganse juntos hasta que lleguemos al campamento.-
Zarpa Oscura estaba nervioso y se sentía como una presa siendo acechada en ese misterioso lugar. Pero ese miedo fue reemplazado rápidamente por curiosidad, ya que el territorio le parecio muy familiar, aunque nunca había estado allí en su vida.
Pasaron unos momentos hasta que los gatos se escabulleron entre la maleza, por una especie de tunel. Entoces, Zarpa Oscura lo noto, ese era el lugar con el que había soñado hace sólo unos días.
-De ahora de adelante este será el hogar del clan del trueno-maullo Estrella Gris, subiendo a la peña alta-busquen sus guaridas y descansen, mañana será un día largo-
Zarpa Oscura busco su guarida por todo el campamento hasta que noto que los otros aprendices ya la habían encontrado.
El se acostó en uno de los lechos y al poco rato quedó dormido.
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