Narra Sara
Miedo... ese era el sentimiento que me invadía en esos momentos. El miedo a perder lo mejor que me ha pasado en mi vida. El miedo a la muerte de mi amado. El miedo a que la muerte llegara a Jeff.

Desde afuera de la sala de Traumatología veía como los doctores Smith, Savage y White trabajaban. Lo único que yo podía hacer era esperar, esperar lo mejor de mis compañeros de trabajo para que salven a Jeff.

- Tranquila hija... - me dijo mi papá al tiempo que me abrazaba por la espalda. Suena mal... pero daría lo que fuera porque el que me abrazara así fuera Jeff... - Hija... se que estará bien... - me dijo con una sonrisa. Yo solamente podía pensar en una cosa...

- Papá... ¿porque venías en la ambulancia con Jeff? - le pregunté mirándolo a los ojoa, con unas lágrimas brotando de los míos.

- Pues... - dijo, después de soltar un gran suspiro - me temo que yo le causé la herida... - yo simplemente lo vi a los ojos, con un sentimiento entre odio y miedo, miedo a la razón por la que mi papá fue el responsable.

- ¿Cómo que tu la causaste? - le pregunté. En mi voz se notaban las ganas de llorar que me carcomían por dentro. - ¡CUÉNTAME QUÉ PASÓ PAPÁ!

- Hija... ¿recuerdas cuándo pensaste que acusábamos a Jeff de ser el asesino de todas esas presas? - me preguntó serio mi papá. Eso terminó de destrozar la poca serenidad que me quedaba.

Narra Nick
- Es mentira que fue Jeff papá... yo lo sé... no pudo haber sido él... - eran las palabras que repetía mi hija llorando en mi hombro.

- Se que es difícil de asimilar, pero fue él - le dije mientras la abrazaba, acariciando sus orejas. - Pero te diré algo... la verdad no creo que lo haya hecho por voluntad propia...

- ¿O-osea q-qué lo están obligando? - me preguntó sin dejar de llorar.

- Eso creo - le respondí mientras seguía acariciando sus orejas, recuerdo que eso la ayudaba a dejar de llorar cuando era una cachorrita. - Atraparé al que le hizo eso a Jeff, te lo aseguro Sara.

- Espero papá... - me respondió, y por su tono de voz parecía que estaba dejando de llorar. - Si es necesario te ayudaré...

Narra ???
La bestia fue liberada. Ahora sólo queda esperar a que el depredador Beta haga lo suyo. Zootopia, esa ciudad que me negó lo qué por derecho es mío, por fin caerá en el caos y en la discordia, después de esta noche tengan por seguro que ¡nada será igual! Poco a poco la vida en esta ciudad supuestamente pacífica acabará y yo veré cómo se agota la esperanza de cada uno de los animales qué en ella moran.

El destino de Zootopia esta prácticamente sellado, con rumbo a la destrucción. Mi plan es 98% infalible, aunque ese 2% me preocupa bastante. No sé qué tan fuerte sea el control de BLACK sobre el híbrido, pero espero que sea lo suficiente como para que siga bajo mis órdenes.

En fin, mañana veré si mi plan dio resultado, hoy fue un largo pero exitoso día, y mañana será mejor aún, lo sé, lo presiento. Nadie me podrá parar.

Narra Sara
Se acaban de llevar a Jeff al quirófano para cerrar cualquier herida que ese cuchillo le hubiera llegado a hacer en sus órganos.

Estoy un poco más tranquila, sé que el doctor White es buen cirujano, no dejará morir a Jeff, pero aún así estoy llena de angustia y dudas. ¿Quién es el responsable de esto?

- Sara... - me sacó de mis pensamientos el doctor Smith, - van a llevar a Jeff a cuidados intensivos, ¿quieres ir con él?

- ¡Claro! - Dije moviendo mi cola y soltando lágrimas de alegría.

- Pues adelante Sara, ve - me dijo mi jefe, con una sonrisa. - Supongo que podrás cuidarlo en lugar de una enfermera, ¿o me equivoco?

- No se equivoca jefe - le dije, con una mezcla de sentimientos en mi cabeza, pero de alguna manera pude darle una sonrisa sincera. - ¡Gracias Dr. Smith!

- No me agradezcas sólo a mi - fue su respuesta, - ninguno quería perder a un valioso miembro del equipo de urgencias cómo lo es Jeff.

Sonreí tras lo que me dijo, y proseguí a ir a cuidar a mi amado zorbito a Cuidados Intensivos. ¡Ya quiero que despierte, quiero escuchar su voz de nuevo!

Narra Nick
Cuando Sara se fué a Cuidados Intensivos, me quedé hablando con Jake sobre el estado de Jeff.

- Me alegra que esté bien, no sé que haría si muere a tan corta edad... gracias por salvarlo - le dije.

- Nick, ese es nuestro trabajo - me dijo con una sonrisa, que quito rápidamente. - Sin embargo, noté algo raro en Jeff.

- ¿Algo raro? ¿Cómo que notaste algo raro en Jeff? - le pregunté notoriamente confundido.

- No paraba de llamarse depredador beta y decir algo relacionado con presas - me respondió seriamente, yo ya tenía ganas de arrestar a Jeff, aunque tenía mis dudas de que ese animal fuera el novio de mi hija. - Y también dijo que lo obligaban a hacerlo, aparte de disculparse con tu hija por eso, aunque claramente ella no estaba en la sala.

No sabía que decir. Le agradecí al Dr. Smith y fui a ver cómo estaban Jeff y Sara. No me sorprendió que Sara estuviera abrazándolo mientras el dormía, pues ya había visto antes que así se dormían. Lo que me sorprendió fue ver cómo ellos dos son el uno para el otro. Desde que se conocieron hasta cuándo se tuvieron que separar, siempre sentí que algo especial los envolvía, y me acabo de dar cuenta de que es. Ese algo es el destino, el futuro, que ni el animal más cruel del mundo parece que logró arruinar.

Pero bueno, debo irme a casa, que mañana debo dar aviso sobre lo que ocurrió. No sé qué palabras voy a usar, pero todos se enterarán que los homicidios de presas se acabaron ya.

Narra Judy
Un par de horas después de lo acontecido, escuché que Nick volvía a casa. Yo intentaba calmarme aún. Cuando Nick llegó a mi lado, yo simplemente lo abracé muy fuerte.

– Tranquila... Estás bien cariño – me dijo Nick correspondiendo a mi abrazo. Yo, y estoy seguro que mi zorro también, sentía como mi corazón aún latía rápido por la emoción pasada. – Estoy seguro de que esto ya acabó – me dijo en un tono tranquilizador, lo que afirmaba mi teoría de que el también sentía mi agitación.

– ¿De verdad? – le pregunté mirándolo a los ojos, para sentir más seguridad en sus palabras. – ¿El caso está cerrado?

– Te lo digo de verdad – me respondió mostrándome su sonrisa de siempre, cosa que me tranquilizó un poco. – Sin embargo, el caso aún no está resuelto.

Normalmente entiendo lo que me dice Nick relacionado al trabajo, sin embargo, está vez fue la excepción. No tenía ni idea de lo que mi esposo estaba hablando. Por primera vez no entendía a que se refería.

– Quiero decir que atrapamos a la marioneta, más aún no atrapamos al titiritero – me respondió algo frustrado. – Además, no creerás quién apareció.

– ¡¿Al fin apareció Jeff?! – pregunté algo alegre por mi hija. – ¿Ya se enteró Sara? ¿Dónde estaba? ¿Esta bien?

– Si, pero no creas que es una buena noticia en su totalidad... – me respondió Nick. Baje las orejas, porque eso no podía significar nada bueno. – Jeff era la marioneta.

No sabía que decir. Nick me comentó lo que Jeff estaba balbuceando en la sala de urgencias, e iba maquinando algunas teorías de quién lo pudo haber causado.

– La primera víctima fue Elly Sheepard – le comenté a mi esposo zorro, él sólo asintió. – Las siguientes víctimas fueron ovejas y luego otras presas, así que...

– El titiritero debió de tenerle un resentimiento a Elly – me robó las palabras del hocico Nick. – Y a las ovejas en general. Sin embargo, me sorprende como no le ha pasado nada a Dawn y a Abril Bellwether.

– Eso es verdad – comenté algo sorprendida, – ¿tendrán algo que ver en esto?

– Existe la posibilidad – me respondió Nick, – sin embargo, me intriga el apellido de Abril. Digamos que Wolvgang no es un apellido normal en una oveja.

– Tienes razón en eso Nick, creo que tendremos que ir a hablar con la alcaldesa Dawn lo más pronto posible, para empezar a esclarecer un poco este caso – fue mi respuesta.

–Claro, habrá que dar las misiones mañana lo más rápido que podamos para ir lo más pronto posible a la alcaldía – sugirió Nick.

– O mejor vamos cada uno a algún lugar – le dije viéndolo a los ojos.

– Judy... - me respondió viéndome a los ojos - ¿Y sí el que mandó a Jeff venga a matarte en persona? No me gustaría que te pase nada.

– Claro Nick - le respondí sonrojada y, no voy a mentir, algo molesta de que tuviera lógica su argumento, pero ganó lo romántico de que se preocupó por mí, así que le di un beso antes de ambos quedar dormidos.

Narra ???
Escuché unos golpes de la zona de las "celdas" que se construí, así que fui hacia esa zona.

– Al fin despiertas - le dije al lobo bastante parecido a mí que estaba dentro de una celda, al tiempo que le acercaba un plato con comida y agua. El lobo me gruñó, y empezó a comer en silencio lo que le dí. - Sabes que no mataría de hambre a alguien de la familia, aparte, ya acabé con la que arruinó tu vida hermanito. - Se me quedo viendo. - La secuestradora de Dawn está muerta, ya me lo podrías agradecer.

Dicho eso, me fui de esa zona y me encaminé a la salida. Estaba por salir cuando alguien me detuvo.

– Señor - me dijo un científico - hubo un corte de la funcionalidad de BLACK.

– ¿Puedes recuperar el control? - vi al científico que me detuvo.

– Si, pero tardaré unas cuantas horas señor, más o menos para las 9 de la mañana de mañana creo que podré volver a traer a BLACK en línea.

– Excelente, tomate tu tiempo, pero que sea lo más pronto posible. Y de ser posible, intenta programar alguna acción para atraer a la Jefa Hopps aquí, y así acabar con ella y con la paz de Zootopia.

– Claro señor - me respondió el científico y se fué.

Tengo que conseguirlo, no pararé hasta que Zootopia se vacíe de presas al fin, los depredadores debemos mandar.