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Capitulo 1

Este fics es de la Autor/a Ch3rryBl0ss0m365 , y tengo su autorización para traducir su fics

Titulo OriginalThe Phony Royals of Berk

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Astrid no sabía cómo terminó en la situación en la que se encontraba ahora. Tacha eso. Ella sabía exactamente cómo. Ella simplemente no quería admitirlo o aceptarlo. Los rebeldes le habían dado la tarea de asesinar al príncipe heredero y casi lo logró. Desafortunadamente, se había llamado a los guardias y la escoltaron hacia la sala del trono donde estaría respondiendo ante la familia real. Eso no quiere decir que no luchó para salir de eso. Simplemente resultó que había más de ellos dejando las probabilidades a su favor en lugar de a ella. Ahora, estaba siendo arrastrada por el suelo de la sala del trono y arrojada sin contemplaciones a los pies de alguien. Levantándose, miró la cara del chico que conoció en el bosque la noche anterior. El mismo chico que la besó.

Los rebeldes se habían formado no mucho después de que ella naciera. No estaban satisfechos con la forma en que la familia real trataba a sus súbditos y sabían que había que hacer algo. Al principio, robaban sus recursos y entregándoselos a quienes los necesitaban más que ellos. Sin embargo, pronto, no fue suficiente. La familia real aún continuaba cobrando fuertes impuestos a la gente y tomaba todo lo que podía o quería. Fue entonces cuando decidieron que había que hacer algo que los impactaría directamente. Y eso había sido asesinar al príncipe heredero, derrocar a la realeza y encontrar un reemplazo adecuado que gobierne el reino.

El primer paso era matar al príncipe, lo que significaba encontrar al asesino perfecto. O más bien, hacer el asesino perfecto. Cualquier niño de la generación de Astrid fue entrenado en secreto para ser el asesino a sueldo perfecto. Prueba tras prueba, se habían decidido por ella. Era astuta, rápida de pies y pequeña; lo que significa que ella era casi imparable. Sin embargo, hubo alguien que se interpuso en el camino para que ella obtuviera el lugar y ese había sido este misterioso nuevo miembro de la rebelión. Apenas hablaba, ni se mostraba a menudo. A pesar de esos detalles menores, llamó la atención de los líderes con bastante rapidez. Sin embargo, cuando se trataba de elegir, él insistió en que ella fuera la que hiciera el acto. A pesar de saber que él sería mejor para la tarea, sintió un sentido de respeto por él. Él era nuevo en la resistencia mientras que ella se había criado en ella. El parecía que solo se mostraba al atardecer y se iba justo antes del amanecer, prácticamente permaneciendo despierto toda la noche junto con algunos otros de la rebelión.

La semana en que iba a hacer la inscripción, había conocido al joven. Resultó que no está muy contento con la forma en que la familia real está cuidando el reino, aunque no se había enterado de la rebelión hasta mucho más tarde, o al menos eso le dijo. Había mencionado algo sobre estar protegido y esperar que actuara de cierta manera. Cuando ella le preguntó cómo había oído hablar de los rebeldes, él dio una respuesta bastante vaga diciendo simplemente que lo había oído a través de la vid. Aunque la respuesta no la satisfizo. En su opinión, él era demasiado amistoso con algunos de los miembros. A pesar de sus diferentes crianzas, tenían mucho en común. Hijos únicos cuyos padres esperaban mucho de ellos. Sin embargo, aunque ella había superado con creces las expectativas de sus padres, él aún tenía que demostrar su valía, le dijo. Astrid se sintió mal por él y le había ofrecido el honor de matar al príncipe heredero, pero él se negó, diciendo que si alguien lo veía, estaría en muchos problemas.

-¿Quién eres en realidad?- ella le había preguntado, levantando una ceja.

-Nadie de importancia- simplemente había respondido, mirando hacia las pocas estrellas que habían quedado en el cielo.

-De alguna manera, encuentro eso muy difícil de creer. Al menos dame tu nombre-

-No a menos que me des el tuyo, Tormenta-

Ese había sido el problema de estar en la resistencia, no se les permitía dar sus nombres reales en caso de que alguno de ellos se viera comprometido o atrapado. Era una regla simple. Una regla que todos cumplieron. Ella nunca había querido quebrantar esa regla más que nunca.

-Supongo que ninguno de nosotros nunca lo sabrá- ella se encogió de hombros, negándose a moverse. No había forma de que ella hiciera eso solo por un hombre que estaba empezando a conocer.

-Como quieras- el respondió, poniéndose de pie y sacudiéndose las perneras del pantalón -Probablemente debería ponerse en marcha. Supongo que te veré mañana, Tormenta. Si no, entonces definitivamente en la celebración que tendremos cuando mates al príncipe heredero-

-Supongo que sí-

Él había tenido razón. Astrid no lo había visto al día siguiente, sin embargo, regresó la noche antes de que ocurriera el asesinato. La había llevado a un lado y le había deseado buena suerte, aunque parecía bastante nervioso mientras lo hacía, como si fuera él quien estaba a punto de matar al príncipe en lugar de a ella. Si cualquier otro chico sonara o se viera como él con la cabeza inclinada hacia abajo y frotándose la nuca, le habría resultado molesto que fuera tan tímido con ella. Sin embargo, con él, ella realmente encontró el acto entrañable. Dulce incluso.

Ella no se había dado cuenta de lo cerca que estaban los dos hasta que se quedó en silencio y todo lo que ella podía oír, todo lo que ella podía sentir era su aliento sobre ella. Solo eran ellos dos. Todos los demás estaban en algún lugar más cerca del agua mientras ellos estaban en algún lugar en lo profundo del bosque. Solos. Astrid no estaba segura de quién se había inclinado primero, pero pronto sintió sus labios sobre los de ella. Fue un beso bastante simple pero se sintió mucho más que eso. Ella apoyo una mano en su pecho mientras que la otra estaba alrededor de su cuello, queriendo acercarlo más a ella. Aunque se sentía como si no hubieran estado besándose por mucho tiempo, él había sido el que se alejó, jadeando por aire. Astrid estaba completamente cautivada y sorprendida por el joven frente a ella. Quería besarlo de nuevo pero él se alejó de ella antes de que pudiera. Él había murmurado sobre la necesidad de regresar a algún lugar, pero ella no escuchó nada de eso. Todo lo que podía escuchar era la sangre bombeando en sus oídos y su corazón latiendo rápidamente. Cuando finalmente se despertó, vio que él se había ido. No estaba en el campamento. Se acaba de ir.

Pero ahora sabía adónde había ido. Astrid tenía sentimientos encontrados por el hombre frente a ella. Había una parte de ella que quería creer que él era simplemente un sirviente de la familia real que estaba harto y cansado de la forma en que lo trataban. Sin embargo, cuando lo vio bien, al mirar el material de su ropa y la espada en su cadera, no era un sirviente, sino un caballero. Lo que significa que tuvo que haber sido un espía de la familia real. Infiltrándose en la resistencia, ganándose su confianza y luego ciérrala desde adentro. Tenía mucho sentido. Quería patearlo, maldecirlo, hacer algo que mostrara el dolor que sentía por su engaño y fraude.

-Veo que alguien no ha estado haciendo su trabajo, capitán- gruñó el rey, enfatizando el título. -¿Te importaría explicar esto?-

-Discúlpeme, su majestad- el capitán se inclinó -Me aseguraré de darle una charla severa más tarde- Astrid vio que el capitán miraba al chico de la rebelión -¿No es así, Hipo?-

-Por supuesto señor. ¿Qué haremos con ella?- él asomó la cabeza en su dirección, sin mirarla a los ojos mientras lo hacía.

-Enciérrala por ahora. Veremos qué hacer con ella después de ver cómo está el príncipe heredero. Estoy seguro de que está traumatizado más allá de lo creíble-

-Oh, no hay duda de eso- murmuró en voz baja mientras escoltaba a Astrid fuera de la sala del trono y hacia las mazmorras -tenías que ser atrapado, ¿no?- dijo una vez que estuvieron a una buena distancia del resto del personal del castillo.

-Bueno, lo siento. No sabía que todo dependía de mí, Fury- respondió ella, usando su nombre en clave -¿Te importaría explicarte?-

-Es complicado. Por ahora, tenemos que lidiar con esto-

Le dieron un plano del castillo antes de la misión para que supiera dónde estaba todo, así que cuando vio que Hipo no la guiaba hacia la mazmorra sino hacia el patio ella recordo el mapa correctamente, estaba profundamente confundida -¿A dónde me llevas?- ella expresó en voz alta.

-La mazmorra- Justo cuando ella iba a vocalizar su confusión, él continuó -la otra mazmorra que tenemos. Uno secreto. Muy pocos lo saben- Encendió una vela, revelando un pasaje oculto y luego los condujo adentro -Solo el personal mayor y la mano derecha del capitán. Te llevaré allí porque tenemos que hablar. Tú, yo y mi padre-

-¿Quién es tu padre?-

-Yo- Hipo tomó una antorcha y encendió el resto de las clavijas de madera en la habitación, revelando a un hombre que solo había oído hablar -Hola, Astrid, Hipo me ha hablado mucho de ti. Es una pena que las cosas no funcionaran. Realmente te estábamos apoyando-

-Como hizo...-

-Siempre fue una tradición que mi padre bendijera a cada bebé recién nacido y anunciara el nombre a cualquiera que escuchara. Concedido, eso había sido hace mucho tiempo. Ahora, tiene a su hombre de mayor confianza para hacer el anuncio por él. ¿Creo que estás familiarizada con Bocón?- ella asintió con la cabeza -De todos modos, Bocón me entregaría el papel y yo se lo daría a mi padre-

-Eso todavía no explica cómo él sabe mi nombre-

-Eso sería obra de mi hijo- explicó su padre -Una vez que el tuviera la edad suficiente, aprendería el nombre de todos en el reino-

-De vuelta a los negocios. El punto en todo esto era que esperábamos que tuvieras éxito para que mi padre finalmente pudiera salir de su escondite. La familia real no siempre fue tan cruel. Quiero decir, ¿quién crees que inició la rebelión?- Miró rápidamente a su padre.

-Y ahora que has fallado, eso nos hace retroceder cuántos años...- dijo el padre de Hipo, acariciando su barba mientras pensaba -Mi hermano duplicará la seguridad y empeorará las cosas para el reino, ahora que saben que hay personas que están en su contra-

-Espera, ¿eres su hermano? Pero... eso significa...- se volvio hacia Hipo con una mirada de sorpresa en su rostro.

-Sí, el príncipe heredero es mi primo. Patán- dijo Hipo, cruzando los brazos -Pero no obtuvo el título porque su padre es el rey-

-Al igual que mi hermano no consiguió el papel de rey porque fuera el mayor- agregó su padre.

-¿Están... están diciendo lo que creo que están diciendo?- preguntó, dando un paso atrás, sin creer lo que estaba escuchando –Ustedes...-

-¿Son los legítimos gobernantes de Berk? Sí. Mi hermano promulgó un golpe de Estado. Supuestamente me mataron y toma el trono. Hipo era demasiado joven para hacer algo en ese momento. Tuvimos suerte de que Bocón lo acogiera-

-¿Pero nadie se da cuenta de quién eres?- ella cuestionó, mirando a Hipo por una respuesta.

-Era demasiado joven para que me reconocieran de verdad e incluso si alguien lo hiciera, no diría nada. En lo que respecta a todos en el reino, solo soy un niño que Bocon acogió y crio-

-¿Así que Hipo no es tu verdadero nombre?-

-Oh, lo es. Bocon simplemente se lleva el crédito-

-¿Pero no se anunció tu nombre para todo el reino?-

-Lo habría hecho, pero teníamos otras cosas de las que preocuparnos en ese momento- completó su padre -Ocurrieron algunas circunstancias imprevistas, por lo que no pudimos anunciar su nombre. Todo lo que el reino sabía era que yo tenía un hijo y que revelaría su nombre cuando fuera el momento adecuado. Desafortunadamente, ese día nunca llegó-

-Hasta donde sabía el reino, morí junto con mi padre- terminó Hipo antes de suspirar. -Encontraremos algo, padre, no me rendiré-

-Estoy segura de que la resistencia pensará en algo- dijo Astrid, tratando de sonar alentadora. -Señor, le prometo que encontraremos una manera de salir de esto-

-Gracias a los dos, pero creo que debemos enfrentar la realidad. Esta había sido nuestra única oportunidad y fracasó. Hipo, dile a Bocón que disuelva la rebelión. Tendremos que esperar y ver cómo Patán maneja el reino. Da un paso en la forma que puedas-

-Pero papá...-

-No, Hipo. Lleva a Astrid de vuelta al bosque. Olvídate de que esto haya pasado. Estaré bien, hijo-

Asintiendo con la cabeza, Hipo la tomó del brazo y condujo a Astrid por el resto del camino hasta la pared -Contén la respiración- dijo rápidamente antes de abrir la trampilla y saltar al canal. No les llevó mucho tiempo llegar a la superficie, pero aún están empapados y sin aliento cuando subieron -¿Estás bien?- Hipo dijo con voz áspera, jadeando por aire mientras ella tosía el agua que tragó accidentalmente.

-Estoy bien- tosió, arrastrándose fuera del agua y escurriendo el agua de exceso -¿Entonces que estamos haciendo? Porque no hay forma de que me rinda después de esto. Y puedes apostar que la resistencia tampoco se detendrá, sin importar lo que diga tu padre-

-Creo que, por ahora, tenemos que pasar desapercibidos. Mi padre hizo un buen punto. Sin duda, mi tío reforzará la seguridad, pero también despedirá a muchos. Ya no va a confiar en gran parte del personal y los guardias, así que digo que usemos eso a nuestro beneficio. A los rebeldes no les va a gustar, pero creo que es nuestra última oportunidad-

-¿Y eso es?-

-Que se hagan pasar por súbditos leales al rey. Los contratará y, lentamente, los sacaremos. Ponerle cosas a sus comidas para que se enfermen. Traeremos a 'médicos' para 'curarlos' y luego lo terminamos-

-Sabes, eso en realidad suena como un plan sólido. Estoy segura de que estarán dispuestos a hacerlo. No estarán contentos de que haya fallado, pero esto lo compensa. Pero, Hipo, ¿y si tu tío no planea cambiar el personal?-

-Entonces, supongo que el capitán tendrá que sugerírselo-

-¿Y cómo va a suceder eso?-

-Su segundo al mando puede tener que mencionarlo- sonrió mientras se encogía de hombros. -Esto es lo más lejos que puedo llevarte- Hipo dijo una vez que llegaron al borde del bosque. -Solo sigue el camino hasta que llegues al marcador de un dragón en un árbol, luego gira a la izquierda y continúa recto. Llegarás al campamento-

-Gracias- ella asintió antes de volverse hacia él -¿Hipo?- El se dio la vuelta para mirarla. Astrid abrió y cerró la boca varias veces antes de negar con la cabeza. Quería preguntarle sobre lo que pasó anoche, pero no sentía que fuera el momento adecuado. En cambio, se conformó con: -¿Cuándo volverás?-

-Probablemente no por un tiempo. Necesito tratar con mi primo y mi tío y luego tratar de explicarle las cosas a Eret. ¿Quizás dentro de cinco días? Dependerá de cuánto tiempo lleve calmar el castillo. Pero sin promesas-

Astrid asintió con la cabeza y se abrió camino hacia el interior del bosque, dándose la vuelta por un breve momento para ver que Hipo ya se había ido y estaba fuera de la vista. Miró a su alrededor momentáneamente antes de continuar su camino, siguiendo el camino y buscando al dragón en el árbol para ver que era una furia nocturna. El dragón más escurridizo y misterioso de todos. Astrid se rio internamente de la imagen. Le quedaba demasiado bien a Hipo. Tenía sus dudas de que alguna vez lo descifraría. 

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Nota de Ch3rryBl0ss0m365

Originalmente, esto iba a ser un one-shot simple con un final abierto, pero parece que los lectores no están satisfechos con eso. Así que se escribire una segunda parte para saciar su hambre de esta historia. Finalmente. Si bien he estado escribiendo otras historias, Rara Aves es una de mis principales prioridades, ya que quiero terminarla; que casi lo es. Asi que por favor se paciente conmigo. Solo sé que se escribirá una segunda parte (y tal vez más dependiendo de cuán salvaje se pierda mi mente).

14/01/22

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