Foto de Robert en multimedia.
Pov Robert
Allí estábamos. En el castillo de la Reina Malvada, el que había sido antes de Maléfica. Nosotros nos disponíamos a hablar con nuestros padres. Yo ví a mi madre apoyada sobre la nevera. Suspiré y me acerqué a ella. Mi madre es bastante insoportable. Bastante es quedarse corto. MUY insoportable. Está totalmente obsesionada con recuperar su juventud y vengarse de Rapunzel y Eugene. Pero como es mi madre, la tengo que aguantar. Ella me hizo un gesto para que me acercase y yo así lo hice. Seguro que iba a darme algún sermón sobre algo relacionado con Rapunzel.
-¿Qué quieres, mamá?-le dije de mala manera.
-Hijo, un respeto, que soy tu madre-dijo ella-. Verás, lo que te quería decir es que si encuentras algún descendiente de Rapunzel o, peor aún, a ella misma-dijo haciendo una pausa-, ¡DEBES INTENTAR FASTIDIARLES LA VIDA!
Véis, lo suyo no es normal. Creo que 20 años en la Isla la han hecho enloquecer.
-Mamá, otra vez con el tema, como si todavía no me hubiese enterado de que la odias. Llevas repitiéndomelo desde que tengo uso de razón.
-Sí, pero es que ahora vas a ir a Áuradon, y quiero que te vengues de ella y de todos los demás reyes y reinas que nos metieron hace 20 años en esta asquerosa y putrefacta isla.
-Sí, mamá, lo haré-dije yo, aunque no estaba seguro de que lo fuese a hacer. A mí lo que me interesaba de ir a Áuradon era coquetear con las chicas y apoderarnos del mundo, pero me daba igual si esa tal Rapunzel seguía viviendo como la reina que es. Me daba IGUAL lo que hiciese o dejase de hacer esa tipa.
-Esa es la actitud, mi Robert-dijo ella con un tono cariñoso, lo cual es muy extraño en ella-. Ahora, quiero que te lleves este peine, y si encuentras a alguna hija de Rapunzel, quiero que se lo regales. Esto hará que le crezcan babosas en el pelo-dijo, volviendo a su tono natural, o sea, el maligno, y soltando una de sus insoportables risas malignas. Mi madre, aparte de ser una de las villanas más ambiciosas de la Isla, también es una de esas personas que tienen la risa insoportable.
-Vale, si la encuentro, prometo dárselo-eso tal vez lo haga, será divertido ver a una de esas chicas con el pelo lleno de babosas.
-Bueno, buena suerte con el plan, hijo-se despidió ella-. ¡Ah!Y que no se te olvide, fastídiale la vida a Rapunzel y a su familia.
-Sí, mamá. Adiós-le dije, y acto seguido cogí la bolsa (sí, yo no uso maletas, tengo muy poca ropa y me cabe en una bolsa) y me metí en la limusina. Cuando entré, me encontré a Carlota esperando. Estaba como distante, como si el resto del mundo no le importase. Siempre he pensado que Carlota es rara. No sé, me parece demasiado buena para ser hija del Capitán Garfio. No es que me importe, que haga lo que quiera con su vida, pero temo que no quiera colaborar en nuestro plan. Oh, vamos Robert, cómo no va a querer colaborar. Si no colabora, su padre la matará. Bueno, después llegó mi compañero de gamberradas, Marcos. Nos conocemos desde pequeños y siempre hemos hecho gamberradas juntos: quitarle las manzanas a la vendedora, saltar en los bancos, robarle el café a los duendes...Ay, que recuerdos. Por último, llegó nuestra líder, Lucy. Ella es la más malvada del grupo desde siempre. En aquel momento, la limusina partió y dejamos atrás la Isla. Yo estaba deseando llegar a Áuradon para darle ese peine a la hija de Rapunzel para verla chillar por el pasillo. Estar allí va a ser lo más divertido que haré en toda mi vida.

Hola, chicos. Sé lo que estaréis pensando. ¿Dos semanas para escribir este capítulo tan corto? Lo siento, pero es que he estado liadísima con exámenes y cuando por fin tuve tiempo para publicar, la inspiración no me llegaba. El siguiente fijo que será más largo, a menos que también se me vaya la inspiración. Bueno, esto va dedicado a Clauditaa1D por entenderme siempre. Seguidla, es genial.
PD:En multimedia tenéis a Robert. Es malo, ¿verdad?
No os olvidéis de comentar y votar si os gusta. Gracias por leer mi historia
Bueno, Xao
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