/Narra el autor/
  Los cuatro corrieron hacia la casa de los Haddock. A los cinco minutos llegaron los demás muy preocupados. Stoico no dudo y abrazo a su hijo, acción que imitaron los DunBroch.

  Al día siguiente, todos fueron a la escuela, sus maestros se enteraron de lo ocurrido. Hubo algunas peleas entre ellos con los alumnos hasta que decidieron calmarse

Maui: Estúpida reunión. Me perdí de una buena pelea.

Moon: Estamos ya un poco viejos. Tendremos que mejorar y hacer un poco más estricto el entrenamiento.

Oogway: Concuerdo. Los ataques se vuelven más frecuente. El comandante Zavala no puede enterarse de esto.

Rapunzel: ¿Quién es Zavala?

Maui: No te importa.

Rapunzel: *Sacando sus garras* Si, si nos importa.

Oogway e Hipo: Cálmense los dos.

Oogway: Discípulos, vayan a su recreo. Por hoy no habrá entrenamiento. Será un descanso por lo de ayer.

Los cuatro: Si maestro Oogway.

  Los jóvenes asintieron y se fueron del gimnasio para estar con los demás. Ya en el pasillo uno de los cuatro habló.

Jack: Chicos. Hoy a la mañana oí que las hermanas Arendelle volvieron a cortar con sus novios actuales.

Kristoff: Si, también oí eso.

  ¿Pero que? Kristoff ¿Que haces aquí compañero?

Rapunzel: ¿Yyyy... Qué haces?

Kristoff: Perdón... es que... cómo soy el chico que tiene que vender hielo, no tengo muchos amigo.

Mérida: ¿Y por que vendes hielo?

Kristoff: Cómo vivo en la cantina de la escuela, tengo que trabajar para compensar lo que la escuela hace por mí.

Hipo: ¿Pero... por qué hielo?

Jack: ¿Que importa? El hielo es genial.

                😑😑😑😒😒😒😑😑😑

Hipo: Ya me olvidé de lo que estábamos hablando.

Jack y Kristoff: *Emocionados* De las hermanas Arendelle.

Rapunzel: Ok Jack, sigue.

Jack: Cómo me gustaría salir con Elsa, ella es fría como el invierno y es genial. Es... Bellísima.

Kristoff: Yo prefiero a Anna. Ella me ayudó una vez. Haría cualquier cosa para proteger esos ojos que tiene, su corazón, su cabello. Es... Hermosa.

Rapun y Méri: *Con desagrado* Wacala. Que asco.

Hipo: Yo los ayudo.

Todos: ¿Qué?

Hipo: Si, ya que tenemos un descanso. ¿Por qué no hoy?

  Por desgracia, a la hora del almuerzo todo se fue para abajo. Anna tenía un nuevo novio al igual que Elsa.

Mérida: A esas chicas les gusta salir con muchos chicos por día. Por su bien les recomiendo que no se acerquen a ellas.

/Narra Jack/
  Me gustaría haberme confesado a Elsa cuando pude. Cuando llegamos para almorzar vimos como las dos hermana tenían otros novios.

  Me sorprende lo bien que lo lleva Kristoff, el nuevo miembro del Crew, el sujeto estaba parado ahí, no lloraba, solamente veía a ella como si fuera su mundo, aunque le rompiera el corazón. A eso llamo amor verdadero.

  El tipo este me inspiró, si realmente estoy enamorado de ella, lo volveré a intentar.

  Me di media vuelta, decidido por mi elección.

  Y cómo siempre, el desgraciado de Hipo desapareció... otra vez.

/Narra Hipo/
  Estaba triste por Kristoff y Jack, jamás lo ví babeando por nadie, y cuando me propuse para ayudarlo a conquistarla... adivinen que... exacto. La chica tenía un novio nuevo.

  De repente siento que soy jalado hacia atrás y me taparon la boca, por lo que no pude gritar.

  Ya lejos de la cafetería Vi quién me "secuestró". Era Astrid.

Astrid: ¿Estás bien?

Hipo: Si, pero hubiera preferido que me llamaras antes.

Astrid: *Le da un pequeño golpe a Hipo y hace un puchero* No me refiero a ahora. Sino por lo de ayer ¿Estás bien? - Estoy impactao', la gran Astrid Hofferson se preocupa por mi. Esto es una mentira, una cruel y dolorosa mentira - Todavía no entiendo cómo se te ocurrió hacer eso. Dejarnos y salir a pelear solo contra esas cosas.

Hipo: Tengo unos trucos.

Astrid: Ayer debió ser un horrible día ¿No? Estás comprometido, recordaste tu accidente y tuviste que pelear contra esos monstruos.

Hipo: Colmena.

Astrid: ¿Que?

Hipo: Nada.

  Estábamos en el pasillo y no había ni una mosca. Todo era paz y tranquilidad. Astrid me hablaba, me gritaba y hasta me dió unos golpes. Por un momento sentí como si le gustara.

  Un sonido un poco familiar se iba acercando a la puerta y creí que era algún auto o algo parecido. Cómo éramos los únicos ahí, el ruido debía provenir de afuera.

Astrid: ¿Que... que pasa? ¿Me estás oyendo?

  Un caballero embistió las puertas de la escuela con su espada en mano. Iba a destruirnos. La blandió y casi nos corta.
  
   Corrimos lo más rápido que pudimos. Éramos perseguidos muy de cerca.

Hipo: Algo o alguien lo guío hasta aquí. Debe ser uno de los que escapó.

Astrid: ¿Que?

Hipo: *Agarró la mano de Astrid* Si no corremos rápido nos matará. Vamos Astrid.

Astrid: *Nerviosa* S-s-si.

  El Caballero los seguía persiguiendo mientras que los chicos gritaban por ayuda.

  Hipo trataba de disparar pero esperaba que el monstruo estuviera distraído. Creí que sus superiores podían ver a tras de él.

  Astrid se resbaló y cayó, haciendo que el monstruo se acercará más y más. El castaño no podía permitirlo y corrió hacia ellos.

Astrid: ¡¡No lo hagas Hipo!!

  Una bola de nieve golpeó al caballero, cuando volteó, vio a unos guardianes con sus armaduras, y tres chicos con máscaras.

  Los guardianes eran mis maestros, obviamente, y los chicos eran mis amigos. Ellos nos ayudaron a salir lo más rápido posible. Pero de pronto, el gigante lanzó su espada. Los otros no iban a llegar a tiempo, así que despliegue mis alas y nos cubrí con ellas. La espada se rompió, no me hizo nada ni a mis alas.

Astrid: *Asustada* Hipo ¿Pero que...?

Hipo: Luego te explico.

  Salte de un lugar a otro mientras me ponía mi máscara. Cuando finalmente tuve la oportunidad, le di un disparo de plasma en la cara. Eso lo desequilibró. El maestro Maui aprovecho y lo partió a la mitad con su anzuelo.

  Todos nos ocultamos y escondimos al monstruo en el gimnasio. Nos cambiamos y cerramos el lugar para evitar que lo encuentren.

Kristoff: *Se acerca al caballero* Genial ¿Cómo lograron esto? Es increíble ¿Me enseñan a hacer eso?

Todos: *Asustados y sorprendidos* ¡¡¡AAHHHH!!!

Mérida: Puto Ninja ¿Cuando entraste?

Kristoff: Al mismo tiempo que ustedes y ella lo hicieron *Apuntando a Astrid*.

Jack: Una mejor pregunta ¿Cuándo entró ella?

Astrid: No creerían que me iría sin respuesta ¿O si?

  Hay dioses.