Iba caminando por el pasillo del colegio me dirigía al baño cuando me dio por mirar al frente pude ver bien que unos niños estaban molestando a mi hermana así que no perdí más el tiempo y me acerqué.

-Hey dejen a mi hermana en paz.-Por suerte son niños de su misma edad.

-Tu hermana es una tonta que no sabe defenderse.

-Miedosa.

-Tonta.

-Ya basta!.-Tome la mano de Anais.-No quiero volver a verlos molestando a Anais tienen suerte de ser más pequeños que yo engendros.-Rápidamente me fui de ahí. Llegue a mi  aula me detuve para hablar con Anais.

-¿Estas bien?

-Si Dulce gracias a ti.-La abracé.

-Eres lo que más quiero en este mundo al igual que Diego.

-Yo también los quiero  mucho.

-Y si ellos o cualquier persona te hace algo que no te gusta vienes y me lo dices inmediatamente yo te defenderé de quien sea y siempre te voy a proteger .

-Si hermanita prometo siempre decirte todo.

-Es por tu bien ahora te acompañó a tu aula que van a empezar las clases.-Antes de irnos paso Diego mi hermano mayor con su grupo de amigos el me miró mal algunos de ellos con indiferencia y otro me sonrió ¿pero que les pasa?
No importa simplemente fui para dejar ami Anais.

Al finalizar las clases no pude salir antes o junto a mis demás compañeros ya que ciertas personas me votaron mis cosas al suelo junto con mis cuadernos y dejaron mi mochila en el basurero juro que las odio.

Me dediqué a guardar todo en casa lo ordenare,  estaba buscando mis tijeras y las encontré a la orilla de la puerta sólo eso me falta.

-¿Cómo llegaron hasta allá?.-Solo las tome.

-Que haces todavía aquí Dulce.

-¡Qué!.-Se apareció un chico de la nada que susto me pego al verle bien la cara supe que es el mismo que me sonrió cuando estaba con Diego. Guarde las tijeras que era lo único que faltaba algún día esas estúpidas me las pagarán con su vida. colgué  mi mochila ya estaba lista para irme pero cierto chico no me lo permitio.

-Permiso.. debo salir.-Otra vez me sonrió.

-Déjame salir!.-Grite bajo.
El tapó mi boca con su mano y me pego contra la pared.

-De aquí no te vas hasta que yo lo diga.-al terminar eso me tiro al suelo intente alejarme pero me alcanzó.

-Y no hay nadie para que te ayude así que no grites.-Se me subió encima intente de todo para quitármelo pero nada funcionó ya que el tiene mayor fuerza al tener mas edad que el de un tirón abrió mi camisa por suerte me puse una remera hoy no fui con el uniforme.

-Quitate!

-Ni lo pienses..-Me quito en unos segundos la camisa y mi remera nos pude evitar que los hiciera tiene mis piernas inmovilizadas  con las suyas también por su peso.  Mis brazos nos son suficientes como para apartarlo.

-Dejame ya!

-Que no.

-¡Esto lo sabrá Diego!

-¿Y piensas que te va a creer?

-Soy su hermana.

-Pero te odia a el no le importa lo que pase contigo.-Hice un ultimo intento y con eso solo consegui una intensa bofetada por su parte..

*
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-No puedo creerlo.-Tome las orillas de mis camisas y las acerque con fuerza a mi pecho mientras caminaba estaba a punto de caerme.
Un chico de 19 años abuso de mi ¿que más falta?.

( Pero te odia a el no le importa lo que pase contigo )

Me pasé todo el camino hacia mi casa llorando.

Ya me imagino que si le cuento esto a Diego se pondrá de parte de su amigo que no se ni su nombre.

Al llegar lo vi a el.
Diego estaba con bolsas de basura se quedo mirándome. Yo lo mire sin enojo sin nada mas que lágrimas en mi rostro.

Y recordé esas palabras.
( Pero te odia a el no le importa lo que pase contigo )

Simplemente pase por su lado.

Después de eso llegue a mi cuarto me desvesti para bañarme pero mire mi pantie tenía restos de sangre. Esto tiene que  ser una maldita pesadilla de cual voy a despertar en cualquier momento
¡tiene que serlo!

No espere más me di un baño largo, largo, largo.

Tan largo que mi hermano empezó a golpear la puerta gritando que necesita usarlo.
Finalmente salí y volví a verlo.

-Ahí lo tienes.

-Espera.-Tomo mi muñeca.
De la misma forma que ese chico enseguida bruscamente me quito su mano.

-¿Que te pasa Dulce?

-Nada.

-Soy tu hermano mayor Dímelo.

-Nada me pasa y ya no molestes.-Fui a mi cuarto.

Me puse la ropa interior.
Una remera y un short  envolví una toalla en mi cabello para sacarlo más rápido. Me quede sentada
Aún puedo sentir su cuerpo encima mio.. El acabo con mi vida.

-¡Dulce!.-Es Anais, abrió la puerta, entro, y se me acercó.

-¿Cómo estás hermanita?

-B-bien ¿y tu? ¿ya comiste?

-¡Si! Diego me hizo la comida.

-Me alegro.

-¿Que tienes ahí Dulce?.-Me pregunto de la nada.

-¿Donde?

-Aquí.-Tocó con su pequeña mano mi mejilla hice gesto de dolor ya que eso sentí.
Recordé la fuerte cachetada también de ese tipo.

-Nada importante.

-¿Estas segura hermanita?

-Si Anais tranquila estoy muy bien.-Mire hacia la puerta me sorprendió encontrar a Diego en ella.
El entró.

-Anais.

-¡Diego!.

-Puedes salir un momento?

-¿Por qué?

-Necesito hablar con Dulce.

-Privado?

-Si privado.

-Está bien nos vemos luego Dulce  te quiero.-Beso mi mejilla y se fue Diego procedió a cerrar la puerta.
Para luego sentarse en mi cama y mirarme fijamente yo mire a otro rincón cruzada de brazos.

-Dulce ¿Quien te golpeó?

-.....

-Responde

-Para que quieres saberlo.

-Sólo dimelo.

-Una chica.

-¿Me dices la verdad?

-Si, y si no me crees es tu problema ya me voy.-Fui a la habitación de Anais.

-¡Dulce!.-Apenas me vio me abrazo fuertemente, no me gustaría para nada que a ella le pasará lo que a mi, no quiero que le borren esa sonrisa tan bonita.

Todo siguió igual.
Paso una semana ya es  Domingo.

-Que hace el aquí.-Pregunte molesta y con nervios mi hermano estaba con la persona que me violo.

-Es mi amigo.

-Mucho gusto.-Me ofreció su mano.

-Dulce no seas grosera.

-No tomare su mano.

-Dulce!

-¡No!

-¿Quien llegó?.-Pregunto Anais.

-Un amigo mío saluda pequeña.-Le dijo Diego.

-Tu no eres grosera como Dulce ¿cierto?.-Volvió a preguntarle.

-Soy Jorge gusto en conocerte.

-Igual.-Yo no quería estar aquí pero Diego me obliga.

Todos se fueron pero me quede sola.

-Me largo.-Me levanté en el camino choque con
Jorge antes de hacer cualquier cosa me sujeto por mis brazos.

-Que haces ¡Sueltame!.-Intente moverme.

-Ay me dejaste con ganas de más.

-No me vuelvas a tocar
¡y déjame!

-Entonces alguien tiene que tomar tu lugar.

-¿Que?

-La pequeña  Anais.

-Si te atreves a hacerlo.

-¡Qué!.-Grito esperando.

-Te mató.

-¿Tu? ¿matarme a mi?
Por favor

-¿A no me crees? Si quieres seguir con vida no me provoques.

-Lo haré de cualquier forma.

-Veamos que dice Diego al respecto sobre que quieres abusar de su  hermana más pequeña el la adora
Y no le gustaría para nada escuchar eso.

-Tu lo haces y le digo que estas insultandome con lo de mi llegada y esto el me creerá a mi.

-Cobarde.

-Tu hermanita Anais será la siguiente.

-Si?.-Me soltó entonces aproveche  para darle una fuerte bofetada.

-Tu que la tocas y te vas arrepentir de haber nacido
¿entendido?.

-Mira no voy a desperdiciar mi tiempo hablando contigo.

-¿Que?.-Me cargo y me llevo hasta la cocina.

-Si gritas ya sabes lo que pasará.

-¡No!.-Volvió a tapar mi boca quito mi short y bajo mi pantie. No puedo romperle un vaso en la cabeza no quiero problemas con Diego.

Otra vez..

-Quítate!

*
*
*
*

Ya ni en mi propia casa puedo estar segura.
Y tendré mis razones.
No saldré de mi cuarto para nada y cerraré con seguro la puerta.

-Que te paso?

-Me duele un poco el estómago.

-Ojala se te pase para que te sientas mejor.

-Gracias.-Nos abrazamos.
Y comencé a llorar.

-¿Por qué lloras TN?.-Me miró.

-Es por el dolor de estómago.

-No te preocupes ya pasará..

Con el pasar pasar de los días me empecé a sentir muy mal vomitaba a cada rato.

-Maldición.-La comida me provoca asco.

Diego lo noto y me llevo al hospital, le dijeron que estoy embarazada.
Luego cuando llegamos ambos estábamos en silencio.

-Me puedes explicar como es que estas esperando un hijo.

-......

-¡Dulce!

-Esque.

-Tienes 15 años no es edad para ser mamá.

-Desde cuando te importó tanto?

-¿Tienes novio?

-No.

-¿Algún amigo con derecho?

-No.

-Y como.-Se quedo callado.
-No me digas que.-lo mire muy callada y sin expresión mis lágrimas caían por si solas.

-¿Alguien abuso de ti?

-....

-¡Contestame!

-Si..

-Quien.

-Que?

-Quien fue.

-No puedo decirlo total tu no me crees.

-Claro que te creo ahora dame el nombre.

-J-jor.

-Jorge?.-Le asentí.

-Y lo hizo dos veces la segunda fue aquí en la casa.

-¡Y por que no me dijiste!

-¡Pensé que te ibas a poner de su parte! Que no me creerías.

-Eso es absurdo yo por algo soy tu hermano para cuidarte.

-También me amenazo con hacerle lo mismo a Anais.

-Es todo yo matare a ese Imbécil.-El me abrazo.

-Yo te quiero mucho Dulce  al igual que Anais que no lo demuestre es otra cosa.

-No pensé que fueras a reaccionar así.-No puedo parar de llorar.

-Igual tenía miedo.

-Tranquila.-Me siento más calmada ahora..

Estaba yo hablando con Anais.

-¡Dulce !

-que pasa?

-Tu hermano se esta peleando con Jorge!

-¡Qué!

-¡Si ven!

-¡Vamos Anais!.-Cuando llegue fue cierto lo que me dijeron.
.
-¡Infeliz con que te gusta abusar de niñas!- Diego le estaba dando una brutal golpiza a Jorge su rostro estaba cubierto de sangre si sigue así lo va a matar.

-¡Diego ya! ¡Basta!  ¡déjalo!.-Llegaron otros amigos de mi hermano para separarlos.

-Calmate Diego.

-Por que golpeaste a Jorge?.-Se dio la vuelta para susurrarle algo.

-¿En serio hizo eso?

-Si, el muy desgraciado.

-Debes denunciarlo merece pudrirse en la cárcel.

-Eso haré.-Diego se me acercó para abrazarme.

-Ya pago..-Me dijo.

Me desvíe un poco del tema pero bueno.

El otro fic si será de asesinatos y esas cosas.
Corregire este cap después. 

-¿Les gusto mi fic?

-Jeff tus fics son terribles :v

-Ay :(

-Bueno adiós!

-¡Comenten! :D

-Bien dicho Mantequita  <3

-Gracias Anje ~♡