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Capítulo 22

Mierda, mierda, mierda, mierda.

Lo que faltaba.

Ya decía yo que algo no podía salir tan bien, un pequeño error jodio todo.

—Mierda, James apúrate —dijo Dorian quién estaba totalmente alterado y nervioso.

—Carajo, no se puede —dijo el coreano mientras sus dedos se movían de una tecla a otra.

—¿Cómo qué no se puede? —Dante revolvió su cabello.

—No sé, no se puede.

—¿El que no se puede exactamente? —dije.

—Las cámaras —dijo y se levantó de su silla mientras la pantalla de la computadora aparecían letras raras que no entiendo —no se puede, no puedo entrar al sistema.

—No me jodan —dijo Joshua —¿Y ahora que carajos vamos a hacer?

—Que mierda —Logan golpeó la pared con sus nudillos —estuvo tan cerca.

—Lo siento mucho por ustedes, pero unas jodidos cámaras no me van a hacer quedarme aquí —dije.

—¿Qué se supone que harás? ¿Te vas a arriesgar a que te vean?

—Es ahora o nunca, todo está listo, y mañana de todos formas siempre se darán cuenta que nos fuimos.

—¿Y si nos miran? —dijo Diego.

—Corremos y que no nos atrapen.

—¿Y las cámaras? —dijo Dante y cruzó sus brazos —yo no quiero que me miren.

—Siempre sabrán que somos nosotros.

Todos quedaron callados, mientras que asimilaban todo, y aunque estos imbéciles no se arriesgue yo lo haré, tal vez dije que estaría bajo perfil, pero ya me aburrí, yo no soy así.

Mi espíritu libre ya está cansando de estar encadenado en un roca, es ahora que vuelva a salir y cause problemas y que rompa las reglas.

—No quiero que las cámaras me graben. —volvió a decir el pelirrojo. —me quiero ir, pero tampoco quiero que esas jodidas cámaras me graben la cara.

—Pues destruyamos las cámaras —dije.

—¿Cómo? —Joshua frunció su ceño.

Me acerque a mi cama, detrás de ella tenía el bate de béisbol que use para entrar al cuarto donde estaban las cosas decomisadas, tomé el bate pesado de madera y lo mostré.

—Destruyamos las cámaras.

Los chicos asintieron y en sus rostros había una sonrisa de satisfacción, eso me hizo sentirme genial, lo sé, lo acepto a veces puedo llegar a ser un poco egocéntrico.

—También tenemos bates —dijo Joshua mientras agarraba uno que estaba debajo de su cama —yo me largo hoy.

—También me largo —dijo Logan —me costó mucho abrir esa reja, ahora sea como sea yo me voy de aquí.

—Bien, agarren algo con lo que puedan romper las cámaras, si se les aparece alguien en el camino le dan un golpe —Dante agarro su bate. —Mierda, no quiero me miren la cara.

—Usemos las mascaras —dije —nadie se dará cuenta, a menos que se la quiten.

—Desperdicias tu inteligencia en este lugar —Diego puso su mano en mi hombro —vámonos.

—Primero rompemos las cámaras y cuando lleguemos a la salida agarramos las cosas y corremos lo más rápido que podamos.

—Ahora nadie nos verá, todos están en el gimnasio.

Y estábamos seguros que todos estaban ebrios los gritos se escuchan fuerte y la música hacía eco por todo el lugar y nadie estaba en los pasillos.

Así que la salida de la habitación sería fácil, o eso creo.

—Déjeme apago esto —James apago su laptop y la guardo en su mochila.

Teníamos planeado que cuando James apagará las cámaras Logan iba a ir a dejar la laptop y se quedaría ahí esperando que llegáramos, pero ahora James tenía que llevar su laptop en su mochila. Cuando James guardo su ordenador se coloco bien su mochila sobre sus hombros.

Le di una última ojeada a la habitación y mis ojos quedaron en la mesa que esta a la lado de mi cama, las llaves de mi casa estaba ahí ¿En que momento las saqué de la mochila? Agarre las llaves y las guarde en la bolsa de mi pantalón.

Dorian apago la luz de la habitación y salimos, quedamos los siete en una sola fila, observamos la primer cámara, esta no nos estaba grabando porque estaba en otra dirección.

Nos vimos entre sí, y nos colocamos las mascaras, cada uno con una de color diferente pero si del mismo estilo, y con el bate en mano.

Caminamos juntos en una misma fija y cuando llegamos a la primer cámara que nos estaba grabando lo primero que hizo Dorian fue sacar su dedo del medio y lo mostró en la cámara, ajusto sus manos al bate y él destruyó la primer cámara.

—Carajo, se sintió bien —dijo.

—Ya saben solo destruyamos las que estén por donde caminemos. —Logan empezó a caminar más adelante que todos.

Y la segunda cámara se escucho caer al suelo.

Camine observando todo a mi alrededor y ahí vi una frente a mí, tiraba un pequeño punto de luz en color rojo, y me quedé viendo por un momento ese pequeño punto. Ladee mi cabeza, ajuste mis manos al bate y le di un golpe a la cámara, esta calló al suelo, y enserio se sintió jodidamente bien.

No tengo ni idea de cuantas cámaras hemos arruinado pero la salida ya estaba cerca, ahora nuevamente todos estábamos juntos, mientras una puerta era la única que nos dividía de la salida.

Cuando Joshua abrió la puerta salimos corriendo como que si una manada de lobos nos perseguía, todo estaba saliendo bien ¿Verdad?

Pero se jodio, no del todo, somos siete y él solo es uno, un guardia estaba parado de espaldas, aún no se da cuenta de nosotros y mire a mi alrededor, no habían cámaras en esta área, corrijo... En el suelo estaba tirada una, así que ya no hay, se destruyó la única que podía grabar cuando saliéramos del College Sprince.

Quedamos parados detrás del guardia que tenía en sus manos su celular, esta muy distraído jugando Candy Crush.

Los siete nos miramos confundidos, no sabemos que hacer con este señor, si nos movemos nos puede escuchar, el césped está mojado, y para colmo esta brisando, y él se dio la vuelta cuando escucho un ruido que venía de nosotros.

Dorian es un pendejo.

Le dio con el bate en la cabeza al guardia, este calló al suelo y su celular también.

—¿Lo mate? —dijo el moreno.

—No me jodas —James se acercó con paso lento al señor tirado en el suelo —no iré a la cárcel por tu culpa.

Dorian no sabía que hacer esta alterado, se acercó al señor, se inclino y tocó su pulso, un suspiro de alivio salió de él.

—Si esta vivo, seguirá siendo un adicto al Candy Crush —dijo Dorian.

—Si esta vivo larguemonos, ahora —Dante separó a Dorian del hombre —¡Vámonos!

Todos corrimos rápido cuando llegamos a la reja que esta estaba abierta, las mochilas estaban tirada en el suelo y solo podíamos ver la carretera vacía, agarré mi mochila y salimos corriendo.

—¡Mierda! —dije.

Uno de los metales de la reja rozó mi brazo y sentía un ardor en el, pero ahora no me importo nada solo correr antes de que los guardias encontrarán la reja abierta.

Corríamos rápido, las brisas caían, y nos quitamos las máscara, sentí un aire recorrer todo mi cuerpo, mi corazón estaba palpitando rápido y lo único que quiero es descansar un poco.

Me di vuelta para ver hacia atrás, ya hemos avanzando mucho, y ahora el College Sprince se miraba muy lejos pero aún se podía ver las luces que lo iluminaban.

Nos tomamos un rato para descansar y mirar hacia el edificio, tomamos un poco de agua para tranquilizar nuestras respiraciones, y lo que menos nos imaginarnos paso.

Ya se dieron cuenta.

Quedamos parados unos segundos tratando de asimilar todo, una luz blanca iluminó todo el College Sprince y una alarma que hizo eco se escucho.

—¡Carajo, corran imbéciles corran! —Diego grito.

Corríamos más rápido que la primera vez, ¿Y como rayos se dieron cuenta tan rápido?

—Tyler —dijo Dante —¿Dónde está el auto? —dijo Dante mientras corríamos.

Saque mi celular, y mientras corría me dirigía por la ubicación.

—Ya estamos cerca —dije con la voz entrecortada.

Ya podíamos escuchar los autos transitar, y la carretera ya estaba muy cerca, no sabemos si ya se dieron cuenta y nos estén buscando pero aquí ya nos perdieron, entramos a la ciudad.

—¿Dónde está? —dijo Logan.

Seguí la ubicación y como Nathan dijo estaba en un callejón oscuro ¿Es enserio esto fue lo mejor que pudo encontrar?

—Diría algo al respecto, pero por ahora lo único que quiero es irme y que si nos estan buscando que no nos encuentren, suban —Dante abrió la puerta de la camioneta subiéndose en el copiloto.

James abrió la parte de atrás del camión y subimos, Logan se subió también en la parte del frente junto a Dante, y cuando entre al camión lo primero que mi cuerpo hizo fue recostarse en el suelo, fue una gran corrida.

Mire hacia dónde está Dante y lo único que me preocupaba eran las llaves por suerte si estaban, y el auto se empezó a mover, nos largamos de este lugar, lo logramos. Y cuando recordé mi brazo y hice una mueca de dolor.

—¿Quién te lo consiguió? —preguntó Diego y bebía de su botella con agua.

—Mi hermano.

—¿Tienes otro hermano?

Asentí.

—Pues tu hermano es un genio.

Fruncí el ceño cuando escuche eso.

—¿Por qué? —dije.

—¿Quién sospecharía que en un camión de helados van siete chicos que se escaparon del internado más importante de todo ese país?

—Buen punto —dijo James, quien iba sentado en el suelo con su cabeza inclinada hacia atrás mientras su pecho subía y bajaba rápido.

—Pueda ser —me senté y recosté mi espalda en la pared de metal de la camioneta —le daré los créditos cuando lo vea.

—¿Al menos hay helados aquí? —Dorian se paro y empezó a revisar los frízeres —¡Si hay! —dijo emocionado.

Y todo esto es lo que tuvimos que hace para escapar de los secretos que esconde ese lugar, ese secreto nos llevó a un resentimiento, a desconfiar, toda esta mentira de difamación y daños nos estaba jodiendo, y así fue como nuestro escape se realizó, y fue increíble lo bien que salió.

No sé lo que paso en ese internado cuando esa alarma sonó, pero de algo estoy seguro mañana el College Sprince estará en las noticias una vez más.

Esto de ser algo importante me hace pensar ¿Mi sueño se hizo realidad? Si, salir de ese internado era lo que quería.

Sentirme libre y feliz para mí es más que suficiente.

—¿Y ahora para donde agarramos? —dijo Diego mientras le daba un mordisco a una paleta helada.

—Cada uno agarra para su casa —Logan respondió como si fuera lo más obvio.

—Bueno entonces voy a tener que caminar y mucho —dijo James.

—Tenemos —dije —me dijeron que tenía que dejar este carro en un lugar.

Había dado la dirección donde tenía que dejar el auto y también lo dejamos en otro callejón oscuro ¿Cuál es el problema que tienen con los callejones?

Bajamos y estábamos en el centro de la ciudad, toda alumbraba, los autos en un tráfico, la gente caminaba bajo paraguas y nosotros lejos del College Sprince.

—¿Aquí es donde nos perdemos y no nos volvemos a ver? —Dorian se coloco su mochila sobre sus hombros.

—Eso parece, tendremos que organizar una salida pronto —dijo Joshua —bueno, ya saben me escriben imbéciles.

—Tendremos que continuar los estudios, pero en otro instituto obviamente, y uno donde no usemos uniformes y tampoco sea un internado.

Reímos a lo que dijo Diego, nos despedimos con puño cerrado y cada uno agarro por caminos diferentes.

Mi brazo seguía doliendo pero la sangre ya no salía, pero mi brazo quedó manchado con mi propia sangre que ya estaba seca.

Ya había olvidado lo que era caminar a casa una vez más, las calles se sentían tan familiares y el aire era fresco, la brisa caía y mire mi casa.

Toda las luces estaban encendidas, mire la hora y eran las doce a minutos de ser la una de la madrugada, eso se me hizo raro a esta hora se supone que tienen que estar dormidos. Cuando llegue frente a la puerta, saque las llaves de la bolsa de mi pantalón y empecé a abrir la puerta.

Cuando la puerta se abrió lo primero que mire fue a mi mamá y a papá, ellos estaban hablando entre sí, mamá estaba pálida, y papá la tranquilizaba, cuando giraron su cabeza a dirección a la puerta de donde yo estaba, mamá se puso más asustada, no sabia que decir estaba preocupada, en cambio papá solo cerró sus ojos dio un suspiro y negó con sus cabeza ya me imagino en su mente a decir: ¿Qué voy a hacer contigo Tyler?

Cerré la puerta y camine con paso lento quite mi mochila de mis hombros y la dejé en el sillón.

Escuché unos pasos venir de la cocina, y es como si pusieran de fondo la canción Do I Wanna Know de  Artics Monkeys para que Nathan caminara en cámara lenta, el salió de la cocina con un pantalón Jeans negros, una playera blanca que se ajustaba a sus brazos, y unos tenis, su cabello castaño estaba un poco desordenado, sus ojos grises siempre tienen ese toque de picardía y misterio, cuando me vio sonrió maliciosamente y en su mano sostenía una copa de algún vino o yo que sé.

—Esta noche no se puede poner mejor —Nathan rompió el hielo.

—Nathan, no es momento —dijo papá. —¿Qué estas haciendo aquí? —papá me miró muy serio.

—Aquí vivo —respondí.

—Tyler, Tyler, Tyler —dijo Nathan —qué bonita sorpresa, pensé que estabas en un internado.

—Se supone que ahí es donde tiene que estar —respondió papá.

—Papá, la familia está completa. —Nathan le dio un sorbo a la bebida que tenía en sus manos —Esta mamá, papá, Tyler, estoy yo —le dio un último trago a la copa —por cierto se me olvidaba...

Unos pasos se escucharon en las escaleras, mis ojos se quedaron estáticos, mi cuerpo se tenso por completo, su cabello castaño que era largo ahora está corto, sus ojos grises seguían iguales, su piel blanca, sus manos unidas mientras jugaba con sus dedos demostrando sus nervios.

—¿Ya viste Tyler? toda la familia está completa —dijo Nathan.

Era ella.

Carol estaba viva.

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¿Pero que esta pasando?

(jsjs) el capitulo fue algo largo, pero sentí que si lo dividía no tendría ese toque de locura y se perdería el sentido, prosigo ¿que creen que este pasando en el College Sprice? Ahora siete chavos se escaparon, por un descuido.

Déjenle su amor a los chicos del college Sprince aquí.

Tyler.

Dante.

Joshua.

James.

Logan.

Diego.

Dorian.

Les dije que aquí todo puede sorprender, y pueda que tengan demasiadas dudas, por eso pido que las dejen aquí .

Disculpen los errores ortográficos.

¿Qué creen que pase?

¡CAROL ESTA VIVA!

Hasta aquí mi reporte

Besos oscuros 🖤

Saludos desde mi habitación ❤️

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