Sakura caminaba sin rumbo por Konoha. Sus manos estaban metidas profundamente dentro de los bolsillos de su chaqueta y su cabeza colgaba baja. Incluso si era invierno, hacía más frío de lo habitual. Su chaqueta de invierno más cálida ni siquiera podía mantenerla abrigada en este momento. Se estaba congelando un poco, pero no parecía importarle. Por alguna razón ella estaba de mal humor.

Eso no era inusual en estos días. Desde que comenzó a salir con Sasuke, algo parecía sentirse... mal. Aunque debería estar feliz de finalmente estar con el chico que amo toda su vida, no era nada de lo que esperaba. No había mariposas en su estómago y Sasuke nunca logró hacer que su corazón se saltara un latido igual a cuando era una niña. Sus citas, e incluso toda su compañía, parecían una reunión entre viejos amigos y camaradas de equipo. Ese no debería ser el caso, ¿verdad? Después de todo, se amaban, ¿no?

Pensó que estar ocupada la ayudaría a distraerse, pero hoy no tenía turno en el hospital. Entonces, decidió pasar tiempo con alguno de sus amigos, pero todos estaban ocupados: Shino estaba con sus estudios para ser profesor de la Academia, Kiba fue a una misión con Tenten y Choji, Shikamaru estaba en Suna, Hinata estaba fuera de la aldea por asuntos de su clan con su familia, Rock Lee estaba entrenando a sus estudiantes en el dominio de las Puertas Internas, Sai estaba reemplazando a Shikamaru como asistente del Hokage y Naruto estaba haciendo una misión especial en Iwagakure. En cuanto a Ino, ella dijo que ya tenía algo que hacer y salió corriendo.

Aunque si no mal le fallaba la memoria, Naruto volvería hoy de su misión. Tal vez pueda ir a recibirlo y pasar tiempo. Hace mucho que los dos no disfrutan un momento a solas, debido a que ella ha estado ocupada en el hospital y él con misiones y sus estudios que lo prepararían para ser Hokage en un futuro.

Aunque también podría servir para aliviarle un poco el animo. Cuando ella y Sasuke comenzaron a salir, él estaba irritado y cabizbajo, como apagado. Siempre intentaba irse lo más pronto para dejarlos solos o parecía sentirse incómodo e irritado. Al inicio ella pensó que era porque quería darle tiempo a los dos después de todo lo vivido, pero ahora cree que puede haberse sentido incómodo al sentirse una tercera rueda. Tal vez Sakura deba compensarle todo eso.

Sakura suspiro. Había leído tantos libros sobre romance y... otras cosas, pero su relación con Sasuke no se parecía a lo que se describía en esos libros. Nunca experimentó esos momentos de "enamorados" que siempre pensó que tendría una vez que él volviera y entraran en una relación seria.

Pero como que sea, esos libros probablemente eran exageraciones de todos modos, ¿verdad? Ambos, aunque aun jóvenes, ya eran adultos y no necesitaban de cursilerías de libros para ser pareja. ¿Verdad?
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Después de un rato de caminar sin rumbo, Sakura noto que ya no estaba en las calles de la aldea, sino que se estaba adentrando en el campo de entrenamiento donde el Equipo 7 se había formado por primera vez en aquella prueba con los cascabeles que Kakashi les hizo pasar. Este lugar era especial para los tres por esa razón.

Levanto la vista e inspecciono el lugar, encontrándolo igual a cuando ella y Naruto enfrentaron a Kakashi después de que el segundo volviera de los tres años de entrenamiento con Jiraiya. El equipo que se encarga de la mantención y reparación de los campos era muy bueno, ya que Sakura recordaba claramente como había destrozado el suelo con su puño.

Sus ojos se abrieron un poco de sorpresa al notar que, donde estaban los tres troncos de madera, estaba Naruto, vistiendo su atuendo negro con pantalones naranja que había empezado a usar desde que entro en la mayoría de edad y se corto el cabello, aunque personalmente, Sakura prefería ese cabello salvaje y puntiagudo.

Los ojos de Sakura se iluminaron cuando vio a Naruto. Ella no sabía por qué, pero estaba muy feliz de verlo. Recientemente no pasaban ningún tiempo juntos. Incluso cuando Sasuke estaba ocupado con misiones fuera de la aldea, Naruto siempre tenía algo que hacer también.

-¿Cuando volvió?- Se pregunto. Sabía que volvería hoy, pero apenas era poco más de mediodía, así que esperaba que volviera en la tarde. Aunque, recordando la rapidez que Naruto es capaz de alcanzar, de seguro no le tomo ni un día volver a Konoha. -Ese tonto... ¿por que no aviso?-.

Naruto parecía que estaba entrenando aquí. La nostalgia sobrecogió el corazón de Sakura al recordar una vez más cómo fue aquí donde tuvieron su primera pelea juntos en la prueba contra Kakashi. Ella nunca lo admitiría, pero Naruto había sido la razón de que triunfaran aquella vez. A veces el cabeza hueca tiene las mejores ideas, por más excéntricas y raras que sean.

La melancolía anterior de Sakura se desvaneció inmediatamente, pero justo cuando quería correr hacia él, Sakura se dio cuenta de algo.

Naruto tenía las manos encima de un pescado que estaba arriba de un rollo dentro de un círculo hecho de símbolos. En las manos de Naruto se manifestaba un aura de Chakra verde.

-¿Esta entrenando Ninjutsu Médico?- Pensó sorprendida, viendo como después de unos minutos, el pescado empezaba a moverse y saltar, lo que provoco que Naruto sonriera y gritara de triunfo. -¿Pero porque?-.

Aunque estaba feliz de que Naruto expandiera sus habilidades a un área en la que ella era experta, no le veía sentido que de todos, Naruto intentara aprender Ninjutsu Médico. El rubio tenía una habilidad de sanación absurda que podía curarse casi al instante de cualquier herida.

Pero aun con esa confusión, se sentía muy orgullosa de Naruto. Pensar que alguien como él, que nunca parecía estar interesado en aprender cosas que no fueran de su interés, fuera disciplinado para aprender algo tan difícil y complejo como Ninjutsu Médico. Junto con un gran orgullo había otro sentimiento que Sakura realmente no podía identificar. Solo ver a Naruto triunfar hizo que su corazón saltara por un segundo.

-Lo hiciste bien, Naruto-.

Una figura femenina se acerco a Naruto y le dio una bebida con una sonrisa. Era una mujer joven, delgada, con figura curvilínea y voluptuosa, con el pelo largo y rubio que le llega hasta los tobillos y un largo mechón que cubre el lado izquierdo de su rostro . Lleva una camisa corta de color morado que deja expuesto su abdomen, una falda larga morada que tiene un corte para la movilidad de las piernas y una falda negra corta debajo, tiene redes en los codos y piernas, sus ojos son verdes, aunque solo el derecho es visible por el mechón rubio.

Era alguien con quien Sakura estaba muy familiarizada: Ino Yamanaka, su mejor amiga de la infancia y antigua rival por el amor de Sasuke. No era un secreto que Naruto e Ino se habían hecho muy amigos últimamente a partir de una misión que tuvieron los dos donde fueron ayudar a un equipo de Konoha en la frontera contra ninjas renegados que no les gustaba la paz actual. Desde entonces y por un tiempo, han comenzado a andar en la aldea y salir en misiones juntos, para tristeza, frustración e ira de las admiradoras de Naruto.

Los más fanáticos, o los más obsesionados, comenzaron a esparcir rumores de que ambos estaban en una relación secreta por todas las veces que se les ve juntos, pero Sakura no creía eso. Conocía bien a sus dos amigos y sabía que, aunque Ino podía encontrar atractivo a Naruto, no era su tipo y Naruto era demasiado despistado que estaba segura que no sabía diferenciar el amor romántico con el de una amistad, algo que ella y otros amigos han intentado enseñarle.

-Por supuesto que lo estoy haciendo bien, tengo a la mejor maestra después de todo- dijo Naruto con una amplia sonrisa en el rostro tras hacer desaparecer al pez con el que había estado entrenando con una explosión de humo y enrollar el pergamino y guardarlo.

-¿L-La mejor? Creo que estas exagerando, Naruto- dijo Ino, sonrojándose y mirando a otro lado, avergonzada por el cumplido tan sincero.

Ninguno de ellos se había dado cuenta de la presencia de Sakura todavía. Tanto por la distancia en la que estaban, como por solo estar prestando atención el uno al otro.

-Hmm...- Naruto frunció el ceño y le dio una mirada inquisitiva a la rubia.

-¿Ha-Hay algo malo?- Pregunto Ino ante tal mirada.

Era muy inusual ver a la temperamental y orgullosa ninja tartamudear así.

-Solo me preguntaba si tienes frío, ya que siempre usas ropa que muestra la piel y me preocupaba que te pudieras resfriar- dijo Naruto.

Ino parpadeo, antes de sonreír. -Ah, eso. No. Sabes que los ninjas podemos usar el Chakra para mantener el calor en nuestros cuerpos, además que el abrigo que me diste, con la bufanda son realmente cálidos-.

En ese momento, Sakura recién noto que Ino llevaba un abrigo negro encima, aunque no era suyo, ya que le quedaba grande.

-Y...- Ino se sonrojo y miro hacía otro lado para que Naruto no viera su cara roja, aunque fuera imposible. -El calor que emite tu cuerpo se derrite incluso en el invierno más frío-.

Ino no sabe de donde saco el valor para decir esas palabras que, en voz alta, sonaban vergonzosas, pero no se arrepentía. Naruto tenía el don de calentar su corazón con solo una sonrisa.

-Eso es genial- comento Naruto un poco más aliviado. -Odiaría que te resfriaras o algo así porque te pedí que me enseñaras el medicina-.

La sonrisa de Naruto fue honesta y genuina. Una sonrisa que la misma Sakura ha visto varias veces antes, pero había pasado mucho tiempo desde que ella misma la experimentó. El hecho de que esta sonrisa no estuviera dirigida a ella la hizo sentir incómoda por decir lo menos.

-Por cierto, ¿era necesario entrenar al aire libre? No es que me este quejando, ¿pero no podíamos entrenar bajo techo o en algún hospital?-.

-Si lo es. En el campo de batalla, aunque se lleva a los heridos a un espacio para atenderlos, a veces se tendrán que aplicar primeros auxilios o tratarlos en el mismo lugar y uno no puede elegir donde será o como estará el clima- explico Ino, sonando profesional.

-Espera... ¿entrenar? ¿Le pidió Naruto a Ino que lo entrenara? ¿Era eso lo que Ino dijo que tenía que hacer?- Pregunto Sakura en su mente, sorprendida por lo que estaba aprendiendo de sus dos amigos. Ella nunca sugirió enseñarle a Naruto porque no creía que fuera capaz de tener la paciencia para aprender y porque no lo veía necesario, para curar heridas, es que ella se había entrenado tanto. Pero ahora, ver a Naruto mostrar tanta disciplina con Ino era desconcertante para Sakura. -¿Por que se lo pediría a ella y no a mi?-.

Una cortina de tristeza cubrió el corazón de Sakura una vez más. ¿Cómo era que algo tan casual y superfluo podría romper un poco el corazón de Sakura? ¿Qué es esta sensación cálida y gentil que siempre siente cuando pensaba en su compañero rubio de todos modos?

-Si te gusta el abrigo y te mantiene abrigada, puedes quedártelo si quieres- ofreció Naruto.

Ino se sorprendió por eso. Era un abrigo bonito y muy cálido, y aunque le quedaba grande, podía ver que tenía hilos para ajustarlos a su tamaño, por lo que podría usarlo sin problemas, pero también podía notar que la tela y la costurera fueron hechas a mano y con mucho cuidado, así que debía ser caro.

-¿Estas seguro? Este abrigo no parece exactamente barato-.

-Esta bien. Fue un regalo de una de las personas en la misión de Iwagakure, y solo lo acepte para no ofenderlo. Además, tu dijiste que podemos usar el Chakra para calentar nuestros cuerpos y con el Chakra de Kurama no habrá problemas- dijo Naruto. -También puedes considerarlo mi forma de disculparme por haberme ido de misión cuando quedamos la otra vez-.

Ino suspiro, recordando el mal humor que tuvo por eso. -Ya te dije que no estoy enojada contigo con eso. De hecho, estaba más enojada con Kakashi-sensei por ser quien te dio la misión tan de repente, pero ya se me paso...- en gran parte. -Pero si insistes, acepto las disculpas con esta ofrenda- le dio a Naruto una dulce sonrisa.

El rubio más alto se sonrojo y aparto la cara a un lado, avergonzado. No estaba acostumbrado a este tipo de cosas todavía, aunque no le disgustaba el sentimiento.

Ino río, enternecida por Naruto. Era increíble como alguien como él, que paso solo y vivió muchas cosas horribles, conservaba suficiente luz en su interior para sonreír de la manera en que lo hacía. No solo eso, sino que también compartía esa luz con otros, iluminándolos e inspirándolos. Aunque Ino no entendía completamente cómo Naruto podía hacer eso, o como hacía que su corazón latiera tan fácilmente, realmente no le importaba mucho. Ella disfrutaba cada segundo a su alrededor por eso.

Los dos se miraron directamente a los ojos durante lo que pareció una eternidad, no solo para ellos, sino también para Sakura que los observaba. Nunca sintió que el tiempo se detenía cuando miraba a Sasuke.

-Todo este entrenamiento me dio hambre. Vamos por algo de comer a Ichiraku. Necesito un buen ramen después de volver de una misión y un entrenamiento- dijo Naruto.

Ino sacudió la cabeza con un poco de exasperación, pero aun manteniendo su sonrisa. -Tu y tu obsesión con el ramen. Te diría que comieras más cosas, pero a este punto ya es una causa perdida-.

Aunque Ino también estaba de acuerdo. También tenía hambre y así podía pasar más tiempo con Naruto. Se sentía como una doble victoria.

-¡Ah! Pero primero tengo que recuperar mi bufanda. Espero que la hayas cuidado bien-.

Cuando Naruto dijo eso, Sakura recién se dio cuenta que, junto con el abrigo, Ino tenía en su cuello una bufanda verde con rayas blancas. La primera vez que lo vio con eso, Sakura pensó que había sido algo que él compro o el regalo de una fan, pero después le explico que había sido tejido por su madre cuando estaba viva y la encontró al buscar en las viejas cosas que guardaba el Tercero con Konohamaru. El valor sentimental en esa bufanda era muy grande para él.

-¿Pero por que? ¿Por que alguien con quien no se relacionaba tanto antes usa algo tan importante para él y a mi ni siquiera me dejo tocarla? No tiene sentido. ¿Por que deja que Ino cerda use eso?-.

La confusión y los celos nublaron la mente de Sakura por alguna razón. Ni siquiera se sentía así cuando Sasuke se reunía con Karin o lo veía recibir elogios de su apariencia o coqueteo en las misiones que estaban juntos.

Antes de que Sakura pudiera ordenar correctamente sus pensamientos, sucedió algo increíble: Naruto se inclinó hacia adelante y presionó suavemente sus labios contra los de Ino.

Al principio pareció sorprendida, pero cerró suavemente los ojos y le devolvió el beso al rubio, teniendo que ponerse de puntillas. Sakura era probablemente la persona menos familiarizada con esta escena, ya que Ino y Naruto no parecían haber hecho esto por primera vez.

-¿Qué significa esto?- A pesar de lo obvio, la mente de Sakura no lograba conectar los puntos. Demasiado sorprendida y desconcertada.

Después de un rato, Naruto se liberó de sus labios y le sonrió después de lamer sus labios. -Delicioso como siempre-.

-¿Por que tan de repente, tonto?- Exclamo Ino juguetonamente con las mejillas muy sonrojadas y no por el frío. Se veía demasiado linda cuando fingía estar enojada. Ino estaba avergonzada, pero feliz de todos modos. Amaba los sentimientos de los cálidos labios de Naruto presionando contra los suyos.

-Creí que a las chicas les gustaban recompensar a sus hombres con un beso después de volver de una misión. Además, te veías demasiado linda que no me resistí- respondió Naruto.

-Alguien se ha vuelto bastante atrevido~- Ino le lanzo una mirada seductora a Naruto, que devolvió con una propia.

No había duda de ello. Actuaban de manera íntima para ser amigos o compañeros. ¿Estaban saliendo juntos? ¿Cuándo paso eso? ¿Cómo diablos ocurrió?

Sakura pensó de nuevo y recordó el momento en que Naruto dejó de parecer cabizbajo o de sentirse incomodos con ella y Sasuke alrededor. En algún momento en el pasado, Naruto comenzó a estar más alegre que nunca. Siempre con una sonrisa en su rostro, tarareando canciones mientras estaba sentado en Ichiraku e incluso cuidando más su apariencia. Su cabello corto lo mantenía bien cuidado y vestía ropa más elegante que antes. Sakura no hizo mucho en ese entonces, pero ahora se daba cuenta de que era alrededor de la época en que Naruto e Ino comenzaron a ser cada vez más amigables.

-Realmente eres un zorrito mimado, Naruto~, pero es lo que te hace tan lindo y encantador- Ino no podía apartar la mirada de los ojos azules de Naruto. Era como mirar al cielo mismo sin alzar la cabeza.

Naruto río por eso, para luego hacer una leve mueca de fastidio.

-¿Es Kurama de nuevo?- Pregunto Ino.

-Si. Elige los peores momentos para despertarse y no sabe guardar silencio- se quejo Naruto.

-Puede que sea gruñón, pero estoy seguro que es una bola de pelos muy cariñosa en el fondo. No por nada me deja subirme a su cabeza o espalda cuando lo visito-.

¿Incluso habla con Kurama? Debería ser imposible, pero como Ino era de un clan de personas que podían meter su consciencia en los cuerpos de otros, eso debe hacer que le sea posible ver y hablar directamente con el Kyubi sin que Naruto tenga que manifestarlo.

-¿Por que? ¿Por que Naruto parece llevarse mejor con Ino que conmigo al punto de hablarle a su Bijuu? No tiene sentido-.

El temperamento y carácter de Ino era similar al de Sakura, pero había mucha más amabilidad y simpatía en la voz de Ino. Era difícil de notar, pero para un chico que no tuvo mucho amor como Naruto al crecer, notar esa sutil diferencia no era un problema en absoluto. Tal vez esa fue la razón por la que está tan de acuerdo en cosas que nunca haría con Sakura. No era como si Sakura no se sintiera así también. Ella no odiaba enseñarle cosas, menos cosas que le apasionan como la medicina, pero Ino era capaz de expresar mejor sus sentimientos sin llegar a ser agresiva.

Ese siempre ha sido el problema para Sakura. Desde que Sasuke se fue de la aldea, ella había construido un muro de hierro alrededor de su corazón para no resultar herida otra vez y siempre ocultaba sus problemas y las cosas que le afectaban. Aunque otros eran capaces de ver a través de ese muro, ella no los dejaba entrar, diciendo siempre un "estoy bien" o "no es necesario que se preocupen" mientras intentaba resolver las cosas sola.

Ino no tenía ese problema. Ella podía ser orgullosa, pero no tenía miedo de expresarse y pedir ayuda en quienes confiaba cuando lo necesitaba. Siempre era honesta consigo misma y con todos, y podía desempeñar el papel del maestro estricto pero afectuoso y confiable que Naruto aparentemente necesitaba.

-Y no hagas cosas indecentes, por favor. Alguien puede vernos- dijo Ino.

-Nadie viene a este lugar, menos con este clima. Por eso lo sugerí para entrenar- dijo Naruto, restándole importancia. -Además, ¿desde cuando es indecente besar a mi novia?-.

-E-Eso puede ser, pero simplemente no quiero que nuestra relación sea conocida por todos todavía. Ya es suficiente que mi madre, Kakashi-sensei y Shikamaru lo sepan. No quiero que las personas comiencen a preguntar sobre nuestra relación y a meterse donde no los llaman-.

¡¿Kakashi-sensei y Shikamaru también lo saben?! Que la madre de Ino lo supiera no era raro, pero que esos dos hombres lo sepan y hayan guardado silencio era increíble. Eso también explicaba porque tenían tantas misiones juntos, ya que Kakashi parece que los apoya y Shikamaru... Ino debió haberlo amenazado para guardar silencio.

-Lo entiendo tómate el tiempo que necesites- a Naruto le da igual si la gente lo sabe o no, aunque es un poco frustrante no poder estar con Ino frente al público como quiere, respetara lo que Ino desea. -Solo quiero que estés cómoda y feliz, no quiero que te sientas como Sakura con Sasuke-.

Al escuchar a Naruto mencionar a Sasuke y a ella, Sakura volvió a congelarse en su lugar.

Ino suspiró irritada con Naruto ante la mención del nombre de Sasuke. A pesar de sus crímenes, no lo odiaba ni nada por el estilo, pero lo que si odia es lo que hace con su mejor amiga y también odia lo tonta que ella es al no darse cuenta de lo mal que esa relación que tienen.

-¿Sabes? Me siento realmente mal por Sakura. Ella está tan profundamente unida a él que ni siquiera se da cuenta de lo malo que realmente es por ella. Sasuke está tan obsesionado en compensar sus pecados y proteger Konoha desde las sombras que descuida tanto a Sakura por sus viajes por todo el mundo. Que alguien como él dé por sentado a una gran chica como Sakura, me enoja-.

Ino apretó el puño y pateo el suelo. Ella pensaba en Sakura como una hermana, y que ella siempre se sintiera tan triste por él era algo que odiaba ver, tanto como odia que Sakura no note lo toxico de esa relación y estar atrapada tanto con Sasuke.

Naruto abrazó ligeramente a Ino y la besó en la frente.

-He intentado hablar con ese Teme, pero se hace el difícil. Cuando lo vea un día le voy a dar un golpe para que reaccione- le dio un par de palmadas en la espalda a Ino. -No te preocupes, Ino-chan, Sakura-chan es fuerte y capaz de cuidarse sola, lo se bien. Aunque son mis amigos, se que ambos encontrarán un equilibrio o se darán cuenta que lo mejor es ser amigos. ¿Deberíamos meternos?-.

Ino negó con la cabeza. -Tienen que verlos por si mismos o no funcionara, aunque a veces me den ganas de darle un par de golpes a esa frentona para que reaccione, pero supongo que hay que darles un poco de tiempo-.

-Estoy seguro que si. Si sobrevivimos a una mujer del espacio y que la luna no destruyera la Tierra, dudo que esto los frene-.

-Probablemente tengas razón...-.

-Por ahora concentrémonos en nosotros- Naruto tiro de Ino y le dio un corto y casto beso en los labios. -Tu tienes una cita conmigo en Ichiraku y yo tengo mucha hambre. Podría comerme diez tazones de ramen-.

-Tu podrías comerte diez tazones de ramen en tu peor día- dijo Ino con el rostro iluminándose, feliz de cambiar de tema a uno más alegre.

Rápidamente se besaron de nuevo y comenzaron a alejarse juntos. Naruto no soltó la mano de Ino y ella apretó su mano con la silla tiernamente, queriendo disfrutar del contacto antes que tuvieran que soltarse para guardar las apariencias. Se prometió a si misma de que no dejaría que esto durara mucho más.

Sakura solo estaba mirando ahora. ¿Sasuke realmente no es el correcto? Eso era absurdo. Ella lo amaba, ¿verdad? Si, así era. No había más... pero no podía ignorar las palabras escuchadas. Tal vez era cierto lo que todos los demás dijeron antes. Que no podía dejar atrás su pasado y su obsesión con Sasuke, por eso cree que lo ama cuando en realidad no lo hace. Tal vez... tengan razón.

Pero esos pensamientos se desvanecieron bastante rápido mientras lo único que podía pensar era en Naruto e Ino alejándose. Se tomaron de la mano y emitieron un aura de dos almas que encajan en una. Algo que Sakura nunca había sentido antes.

Fue más difícil para ella comprender de que Naruto, la persona que ella había dado por sentado que siempre estaría a su lado, sin importar nada, no se diera cuenta del estado desesperado en el que se encontraba ahora.

¿Qué fue lo que hizo que Sakura se sintiera incómoda con solo mirar lo felices que estaban ellos dos? ¿No debería estar feliz de que Naruto finalmente haya madurado tanto y que Ino encontrara el amor? Ella estaba en una relación con Sasuke y Naruto estaba en una relación con Ino. Todo bien, ¿verdad? ¿Por qué no se sentía como un final feliz para Sakura?

Sakura se frotó los brazos con las manos para alejar el frío de su cuerpo, pero no parecía funcionar. Faltaba algo que solía mantener su corazón y cuerpo cálidos en cualquier momento.

Naruto e Ino, felizmente se alejaron en la distancia, emanando un aura invisible de calidez que parecía brillar, como si los dos juntos fueran un sol.

Y Sakura... era un cerezo. Y los cerezos, entre muchas cosas, necesitan sol. Sin sol, no crecen, y mucho menos florecen en el frío.
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N/A: Hasta aquí el one-shot, que tiene potencial para más y puede que un día lo expanda, pero no ahora.

¿Qué les parece? Me inspire en otro fanfic en español, un NatsuxKagura de Fairy Tail, con Erza viéndolos felices y sintiéndose ella incompleta. Es muy bueno.

La pareja de Naruto e Ino es una que me empezó a gustar al leer los fanfics en Wattpad, y que al escribirlo, tiene mucho potencial como material. Es increíble los personajes que existen dentro de una obra que pueden encajar bien sin saberlo.

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.