10 años antes del juicio, Crimson frenaba fácilmente los tentáculos del karken utilizando un escudo mágico cada vez que esté intentaba golpearlo.

La ciudad estaba más que destruida por los movimientos bruscos del karken y sus lasrgos tentáculos.

Crimson era capaz de destruir al karken con cualquiera de sus hechizos, pero Alister seguía adentro y necesitaba ser la distracción por el momento.

—Una vez que esto terminé, haré sushi con esos tentáculos... Por cierto No es necesario para una deidad comer, pero es un gusto para nuestro paladar—Dijo Crimson como si tratara de charlar con alguien.

El karken sigue tratando de matarlo con sus tentáculos e incluso le lanza ácido por la boca, pero nada funciona y el ácido no derrite ni su piel o su vestimenta.

El Monstruo continúa atacando el escudo, sin embargo Crimson aburrido hace aparecer de la nada una silla y una mesa flotante para sentarse a leer un libro con el título:

"Aprendiendo a cocinar Bestias místicas"

—Cielos, no sabía que los unicornios al igual que la hydra se podían comer... Alexander se voló la barba con este libro, tal vez el sabor sea mejor con algo de aguacate.

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Mientras tanto, Alister se encontraba dentro del karken y su interior era bastante extraño pues no parecía para nada el estómago de una bestia, sino más bien era igual a la casa de Nicolás por dentro.

Las paredes, los muebles e incluso los objetos personales eran los mismo exepto que no había ventana alguna y un solo foco alumbraba el lugar.

Nicolás se encontraba sentado en un sofá manteniendo su forma original viendo el televisor que transmitía todo lo que el kraker hacía por fuera.

—Esa deidad que te acompaña es ciertamente increíble... Ningun ser humano seria capaz de hacer algo así, aunque al final de cuentas se trata de una deidad—Dijo Nicolás volteando su mirada en dirección a Alister.

—Nicolás... Necesitamos hablar justo ahora y necesito que esta vez me escuches—mencionó Alister.

—No te molestes, No voy hacer nada más por el momento... Después de todo perdí en cuanto descubriste mi identidad y ahora puedes regresar en el tiempo para detenerme las veces que sean.

—Solo terminemos con esto aquí... Te diré algo Nicolás y es que el tiempo que pasamos los tres jugando me parecio divertido y quiero que....

—No digas mas... Ya no puedo tener ese tipo de relación con ustedes dos, además odio a Alicia mas que a nada así que es muy probable que la mate en cuanto la vea.

—Alicia no ha hecho nada malo y se que podemos volver a ser amigos todos si te detienes y olvidas todo eso de matar a nuestra amiga.

—Por dios Alister ¿amiga? Ustedes dos son más que amigos... Cambiando de tema...
Tengo que confesar algo y es que yo soy el protagonista de la deidad de la luz.

Alister se sorprendió bastante al escuchar eso, pues si tenía conocimiento de que la luz le otorgó parte de su poder, pero jamás imagino que sería un protagonista.

—¿Protagonista? Se supone que solamente sería yo el único que se encargaría de salvar el mundo ¿ese era también tu objetivo?—
Pregunto Alister.

—¡jajaja! Por supuesto que no, mi objetivo era reunir suficiente energía a lo largo de los años para cuando fuera adulto muriera y se la devolviera a la deidad de la luz para que resucitará—Respondió Nicolás.

—¿Energía? ¿Cómo se supone que reunirías la energía suficiente?

—Matando seres vivos, pero nada de eso me importaba y solo quería matar a Alicia frente a ti o a cualquiera de tus seres queridos para que yo pudiera ver tus hermosas expresiones.

—Bueno eso ya lo sabía... La deidad de la luz escogió mal al elegir a alguien como tú.

—No del todo... También Me encargo dar un mensaje de su parte en caso de perder contra alguien.

—¿Que mensaje? ¿De qué hablas?—preguntó Alister confundido.

Nicolás apaga el televisor y fija su mirada en Alister viéndolo a los ojos sonriendo de forma retorcida.

—Hay un traidor entre las Deidades y es aún más fuerte que la luz... No te puedo decir de quien se trata, pero si te puedo asegurar que su objetivo no es salvar a la humanidad.

Alister se asusta al pensar que hay un traidor entre las deidades así que decide creer todo lo que Nicolás le está diciendo pues no siente mentira alguna en sus palabras.

—¿Cuál es el objetivo de esa deidad?—
Pregunto Alister.

—Salvar a todos los mundo existentes en las diferentes dimensiones y conquistar a los humanos para evitar que se sigan auto destruyendo... Según esa deidad la conquista es la única forma de traer la paz.

—¡Eso no puede ser cierto y sólo le estaría quitando su libertad a todos!—Grito Alister furioso por lo mencionado.

—Las personas con el corazón y almas hechas trizas después de esforzarse paraval final lograr nada... Recurren a medidas desesperadas, eso lo puedo entender—Dijo Nicolás comprendiendo la forma de pensar de la deidad traidora.

—Si me dices de quien se trata yo...—Decia Alister hasta que Nicolás lo interrumpe.

—¿Tú que? No es por molestarte Alister, pero si hubiera querido te podría haber matado en cualquier momento y justo ahora podría hacerlo, aunque estando dentro del kraken no tengo que obedecer a la luz así que no te haré nada—Explicó Nicolás recalcando que Alister es un simple humano.

—Lo entiendo, pero con la ayuda de Crimson seguro podremos hacer algo—Insistia Alister con la idea de hacerlo confesar la identidad de la deidad traidora.

—¡Jajaja! ¿Ese mago? Olvidalo amigo...
Mejor vuelve a tu vida normal y consíguete una novia en el futuro, pero te advierto que Alicia no será esa novia.

Alister siente que algo no cuadra en las palabras de Nicolás pues él está hablando como si ya lo supiera todo.

—¿Por qué lo dices? —preguntó Alister apretando sus puños.

—La deidad de la luz me mostró el futuro por un momento y te aseguro que sufrirás mucho de seguir jugando al héroe así que olvidate de todo eso... Jamas podrás vencer al verdadero villano, bueno no sin ayuda claro esta—Explicó Nicolás sacando un largo cuchillo afilado de un agujero del sofá.

—¿Que estas planeando ahora?—preguntó Alister poniéndose de pie y buscando algun objeto que pueda usar como arma.

—Calmate... Ya te dije que no te mataré,
Porque puede que seas el único capaz de frustrar los planes de la deidad traidora, pero verás a muchos morir... Comenzando por ahora mismo—Decia Nicolás mientras colocaba la punta del cuchillo en su propio cuello con el mango apuntando hacia Alister.

Nicolás extiende su mano invitando a Alister aque se aserque hacia él, mientras sostiene con la otra mano el cuchillo.

Alister no es tonto y sabe lo que Nicolás le está pidiendo hacer, pero él no quiere hacerlo y mucho menos a alguien que considero alguna vez su amigo.

—Si quieres derrotar alguna vez al segundo villano más poderoso que algún mundo haya... Debes empezar por matarme ya que apartir de ahora verás a muchas personas sercanas a ti morir.

—¿Segundo? ¿A qué te refieres? —preguntó Alister confundido.

—El miedo es el primer villano más peligroso y poderoso que algún mundo haya conocido, pero apesar de eso ya no planea hacer maldades... El segundo villano no es mas poderoso que él, no obstante es mucho más cruel y despiadado.

—No veo como el matarte ayude en algo,
¡No pienso volverme un asesino!—Gruto Alister.

—Un asesino no, pero un héroe no puede derrotar a la deidad traidora... Solamente un villano capaz de hacer lo necesario con tal de derrotar a su enemigo podrá hacerlo y por eso debes matarme... Para dar tu primer paso en volverte alguien duro de corazón.

—¡Estas loco! ¡Jamás me convertiré en alguien como tú! —Grito Alister planeando salir del kraken ya que no soportaba más escuchar las palabras de Nicolás.

—Además... Necesito esto... Yo... Ya no quiero matar a nadie, sabes muy bien que la luz ciega mi juicio y hace que olvide que matar esta mal e incluso ahora no siento arrepentimientos por las muertes que cause, pero gracias a que estoy acá dentro es que puedo darme cuenta que hice mal.

—N... Nicolás, por favor ven conmigo y deja de ser el protagonista de la deidad de la luz.
¡Que ganas con morir ahora? —preguntó Alister.

—Lo que siempre quise desde que era niño,
Libertad... Ya quiero descansar y olvidarme de todo esto... Matame ahora o la luz pronto me obligará a matarte... Por favor hazlo—
Suplicaba Nicolás entre lágrimas.

Alister sintiendo lástima por su amigo tomó el mango del cuchillo pensando en que talvez sería la única forma de terminar con todo esto, pero le aterra la idea de llegar a ser como Nicolás.

—Se mi héroe... Apesar de todo te sigo amando y no puedo pensar en mejor forma de morir mas que a manos de la persona que amo—Dijo Nicolás sonriendo de una forma cálida por primera vez en su vida.

—Todo esto es por ese poder que te consume... Si tan solo no hubieras aceptado ese poder... ¡Ese maldito poder! —Grito Alister quitándole el cuchillo y arrojandolo muy lejos.

Nicolás trata de levantarse para recojerlo, pero Alister lo abraza para detenerlo mientras lágrimas recorren las mejillas de ambos.

—Si tan solo pudiera ayudarte de alguna forma... ¡Ayudar a todos para que puedan vivir en un mundo sin tener miedo a los villanos o las deidades!—Grito Alister.

Cuando Alister grito eso, el poder de la luz salió del cuerpo de Nicolás y sin avisar se introdujo dentro del cuerpo de Alister.

—¿Qué acaba de suceder? Siento mi pecho caliente—preguntó Alister al notar que aquel orbe de luz dejó de brillar una vez dentro de él.

—Te acabó de trasladar mi poder y la luz fue quien me lo acaba de permitir... Perdona,
Esto era lo que quería hacer desde el principio... Cuando u protagonista entrega su poder a alguien... Desaparece... En pocas palabras muere—Explico Nicolás mientras su cuerpo se volvía trasparente y brillaba con intensidad.

—¡Espera! ¡Nicolás no mueras!—Gritaba Alister intentando devolverle el orbe de luz, pero Nicolás lo detuvo dándole un cabezazo.

—Este poder ahora es tuyo y en tus manos se que le darás un buen uso, pero ten cuidado porque las deidades consideran este poder un tabú—Explico Nicolás.

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Mientras tanto afuera del kraken, una extraña nube de enorme tamaño apareció de repente y abosorvia por la fuerza a Crimson.

—¿Que rayos sucede? ¡Las deidades me tratan de llevar de regreso!—Exclamó Crimson mientras era Absorvido por la nube poco a poco.

El kraken se desvanecía poco a poco y este cayó al suelo dejando salir de su boca a Alister quien estaba totalmente ileso.

Alister trata de entrar de nuevo, pero Nicolás lo empuja fuera y le sonríe de forma amable mientras las lágrimas salen a cántaros de sus ojos.

—Perdona por todo... Haz lo que quieras hacer, pero te pido que vivas tu vida...
Gracias por ser mi amigo... Te amo...
Alister —Dijo Nicolás por última vez hasta que desapareció por completo.

Crimson al notar que Nicolás desapareció supuso que todo terminó y chasqueo los dedos para avanzar el tiempo dentro de 10 años en el futuro justo antes de ser absorbido totalmente por la nube.

Alister fue llevado a 10 años después de todo esto, pero Crimson no puedo viajar con el ya que la nube se lo impide pues la nube creada por las deidades evitaba que se pudiera mover a tarves del tiempo para escapar.

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10 años después del acontecimiento del asesino. Crimson se encuentra en una sala enorme esperando la hora de su juicio pues hizo cosas que no debió hacer en el mundo humano. Una voz bastante gruesa y aterradora le habla diciendo:

“Crimson se te acusa por haber intervenido bastante en el mundo humano y tu castigo de ser cierto será uno muy severo”

Mientras tanto Alister despierta en su cuarto De un salto y se mira rápidamente en el espejo del baño. Él se da cuenta de que regreso a su línea de tiempo original con la diferencia de que su madre está abajo preparando la cena y su padre viendo la televisión.

—La última vez que estaba aquí, ellos dos habían salido de viaje y yo planeaba faltar a la escuela… ¿Qué tanto cambió todo? —se preguntó Alister viendo con tristeza una foto en un recuadro donde aparece junto con Alicia y Nicolás. Los tres jugando.

—¿Hice lo correcto? —se preguntó Alister.

En ese momento su madre entra en la habitación y le dice algo que le llamó la atención.

—Hijo, Tu novia vino a verte… Está esperando en la puerta así que no la hagas esperar mucho—Dijo su madre.

—Debe ser Alicia, lo logramos Crimson, pero espero verme bien. Después de esto tengo que reunir información de las tres personas que se convertirán en villanos—pensó Alister.

Alister se arregla rápido y baja con prisa para ver a su novia Alicia. Él sabía que debía ser ella pues había otra foto en su cuarto donde sale ella de 18 años y su teléfono está lleno de mensajes entre ellos dos.

—Esa Alicia aún no sabe usar la redes sociales y según los mensajes ella rechaza a cualquier chico que se le confiese, pero
¿Por qué me mando un mensaje diciéndome que me divierta hoy? —pensaba Alister mientras se acercaba a la puerta.

Cuando Alister abrió la puerta vio a una chica parada de espaldas y salto de inmediato para abrazarla.

—¿Tanto así querías verme cariño?—Dijo aquella chica, pero la voz no le era familiar a Alister así que se alejó.

Al verla de frente se dio cuenta de que no se trataba de Alicia y en su lugar era Matilda aquella chica que trata de salvar a su amiga de su tío y una de los tres villanos que destruirán el mundo.

—oh disculpa, pensé que se trataba de mi novia, me disculpo—Decía Alister agacha do la cabeza apenado.

Ella le toma la mano y le besa la mejilla sin preguntarle nada. Esto lo sorprendió bastante.

—Tu novia está justo aquí tonto,
Date prisa que tenemos una cita hoy con los boletos de cine que nos regaló Alicia y después iremos a la policía para denunciar al tío de mi amiga—Dijo Matilda pegando su pecho al de Alister.

—¿Qué? ¿Qué rayos sucede? ¿Esto es una broma cierto? ¿Qué rayos sucedió en todos estos años?—Se preguntaba Alister pues se negaba a creer todo esto hasta que el tiempo se detuvo.

—Esto es real niño—Dijo una voz detrás de él y al voltear espero ver a Crimson, pero en su lugar se trataba de alguien diferente.

Un hombre de 2 metros de altura portando unas enormes alas parecidas a las de un ángel lo señaló con el dedo.

—Alister portador del poder del tiempo,
Necesitamos hablar… Tanto como tú y Crimson están en peligro.

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Felicidades han terminado el arco del asesino.

Siguiente arco:
Los protagonistas de las deidades y la villana que envolvió el mundo en llamas.