Para demostrar que quieres a alguien siempre hay diferentes métodos, muchas personas acostumbran a decirlo de forma directa, muchos otros dan detalles pequeños en sus propias acciones para demostrar lo mucho que aman a alguien, y otros prefieren dar regalos, porque muchas veces las palabras no alcanzan a describir lo que pasa dentro de sus sentimientos. El omega había sido prácticamente jalado por Namjoon para que pudieran ir a ver los diferentes accesorios que se vendían por las calles.

La mano firme de Namjoon casi podía tapar por completo la de Yoongi, cosa que le causaba mucha curiosidad al omega, pues al ver que su mano era casi por completo prisionera entre los dedos y la palma del alfa, esto le causaba un poco de intimidación, pero a la vez le provocaba un leve sentimiento de protección, era cierto que Namjoon se trata de un alfa sumamente alto, y era más que obvio que en definitiva a proporcionalidad, Yoongi se quedaba pequeño a su lado.

Los ojos del omega viajaron a los distintos puestos a los que comenzaron a pasar, observando detalladamente que muchas personas estaban rodeando los distintos puestos, frunció levemente el ceño al percatarse de eso, pero quizás su curiosidad aumento más al ver como una alfa le entregaba a un omega lo que parecía ser una pulsera de plata, el omega de inmediato cubrió su sonrisa mientras que la alfa se colocaba una pulsera en su mano, eran idénticas.

—¿Son accesorios de pareja? —se atrevió a preguntar Yoongi sin quitar su vista de la pareja que había visto.

—Así es —Namjoon detuvo sus pasos, espero a que el omega caminara a su lado, miro su mano sosteniendo la pequeña mano de Yoongi, eran tan suaves y delicadas, le encantaba como se sentía la piel del omega bajo su tacto—, usualmente el alfa siempre compra algo para su omega en este día.

—¿Por qué? —el alfa sonrió ante esa mirada tan curiosa que tenía el omega.

—Porque su significado tiene mayor fuerza cuando se trata del festival de luna —contesto Namjoon—, verás, pequeño omega —Yoongi se sintió levemente tímido al escucharlo decir eso—, cuando un alfa desea la bendición de la diosa luna para pasar esta vida y sus otras vidas con ese omega tan especial, lo mejor es darle un regalo.

Namjoon comenzó de nuevo a caminar, y esta vez más despacio, llevando consigo a Yoongi, sin soltar su mano, apretó levemente la mano del omega para indicarle que seguirían caminando, el omega no tardo en comprender para comenzar a caminar al lado del alfa.

—Puede que inclusive sea algo pequeño, como un anillo, una pulsera tejida a mano, pero todos y cada uno de esos objetos estarán bendecidos por la diosa luna para que cumpla el deseo del alfa —Yoongi dejo de mirar a Namjoon.

—Entiendo —sonrió levemente—, es por eso que todos los omegas se emocionan cuando reciben esos obsequios.

—Es correcto —dio un asentimiento. Namjoon dirigió su mirada hacia uno de los puestos que se encontraba un poco menos concurrido—, mira —no tardo en señalar con su mano libre hacia aquel lugar, Yoongi miro en la dirección señalada—, es allí donde pienso comprarte algo.

Los ojos del omega se abrieron en demasía al escuchar esas palabras.

—¿Q-qué? —Namjoon soltó una suave risa al ver la sorpresa en el rostro del omega.

—No deberías estar tan sorprendido, omega —comento Namjoon—, es normal que un alfa cuando encuentra al omega con el que quiere pasar el resto de sus días, le compre algo como eso —Namjoon soltó la mano del omega—, ven, quiero comprarte un brazalete de plata.

—¿De plata? —Yoongi no esperaba aquello—. Pero, se supone que esos son más costosos, no deberías desperdiciar tu dinero de esa forma —comenzó a caminar para alcanzar al alfa—, puedo conformarme con una pulsera hecha de tela, yo...

Namjoon detuvo sus pasos y giro su rostro para mirarlo.

—El dinero no es un problema, Yoongi —el omega detuvo su andar—, no me importa gastar demás, no es un derroche de dinero porque sé que no lo desperdiciaré —le sonrió para tranquilizarlo—, escucha, omega, deja que te compre ese brazalete, usaremos el mismo para simbolizar una unión —las palabras del alfa lograron que las mejillas del omega se calentaran levemente—, además —dejo de mirar al omega—, dicen que la plata es el mejor material para recibir la bendición de la diosa luna, con eso me asegura que podré estar contigo en este y en las siguientes vidas...

Siguió caminando, dejando al omega atrás mientras se acercaba al puesto en donde los brazaletes de plata brillaban con intensidad, el corazón del omega no pudo evitar sentirse tan cálido con esas palabras, pues prácticamente Namjoon le estaba diciendo que no quería que estudiara lejos de su vida nunca más, puede que desde un inicio Namjoon se negase a estar cerca suyo, o incluso que él haya sido quien primero pensó en que se fuera para que los dejará tranquilos, pero ahora era diferente, y saber que ese alfa lo aceptaba solamente le daba una sensación sumamente agradable que no podía explicar, pero que le hacía sonreír en grande, y esta adorando esa sensación como nunca.

—¡Omega! —la voz de Namjoon lo saco de sus pensamientos—. ¡Mira este! —Namjoon le mostro un brazalete hermoso, el brillo de la plata centelleaba en sus manos, y Yoongi alcanzo a divisar que todo el brazalete parecía un formar hojas de una enredadera entrelazadas hasta formar una circunferencia perfecta—. ¿No crees que es este es perfecto? Se verá muy bien en tu muñeca cuando te lo ponga.

Yoongi sonrió y dio un asentimiento.

—M-me encanta —alcanzo a alzar la voz para indicarle a Namjoon que ese brazalete es perfecto, y era verdad, pues es lo que pensaba Yoongi, ese brazalete es perfecto, tal y como el alfa que se lo iba a regalar.

...

Permanecía con los brazos cruzados por sobre su pecho mientras miraba como algunas personas se dedicaban a bailar bajo el sonido de los violines que eran tocados por una pareja, Taehyung siempre a amado la música, pero había ciertos ritmos que lo mantenían en calma, prefería las melodías lentas y suaves que te permitían disfrutar de un pequeño baile, no las rápidas como la que estaban tocando en ese momento, el baile a veces ni siquiera se podía apreciar del todo bien, rodo los ojos al ver como los alfas le daban un par de vueltas a los omegas, detesta ese tipo de bailes.

—Bailan hermoso —comento el omega a su lado, y Taehyung volvió a rodar los ojos.

—Pensé que tendrías mejor gusto que esto —Yoongi elevo una ceja ante el comentario de Taehyung, el alfa solamente se concentraba en mirar al frente—, solo obsérvalos bien, omega —comento Taehyung—, esos movimientos son bruscos, ni siquiera los omegas pueden lucirse ante su alfa, y ni siquiera el alfa sabe lo que debe hacer después por tratar de admirar a su omega. Se ven patéticos.

Yoongi soltó una suave risa al escuchar a Taehyung.

—Bueno —Yoongi dejo de reír para seguir mirando—, si lo pones de esa manera, es obvio que ellos nunca podrán apreciarse el uno al otro —Taehyung lo miro de soslayo—, pero un baile rápido no significa que sea malo, es artístico, las parejas pueden estar juntas por breves instantes, y anhelar con mucho más fervor la cercanía del otro, puede que las melodías lentas te demuestren que la cercanía es necesaria para mirar a los ojos a tu pareja y volver a enamorarte perdidamente, pero eso no significa que en un baile rápido no sientes lo mismo.

Taehyung sonrió ante ese comentario, quizás el omega a su lado tenga razón, pero él jamás cambiará de opinión respecto a sus propios gustos, a él siempre le han gustado las melodías lentas y suaves con las que puedes moverte y disfrutar cada nota tocada con parsimonia, esa música es simplemente incomparable, miro de nuevo a Yoongi quien mecía su cuerpo ligeramente, parecía que quería bailar, sonrió, no le había dicho nada a Yoongi, pero este era el momento perfecto para hablar.

—Yoongi —el omega lo miro—, planeo tocar la flauta aquí —soltó un suspiro—, quiero que bailes.

—¡Qué! —el omega llevo sus manos a sus labios para obligarse a cerrar la boca, no le gusta gritar, pero no esperaba esas palabras—, ¿q-quieres que baile? —el alfa dio un asentimiento—. P-pero...

—Necesito que bailes, Yoongi —el alfa estaba decidido—, mencionaste que te gusta bailar la música clásica, en lo particular a mí me fascina tocar esas melodías, y un baile las hace sentir mucho más armoniosas y perfectas, así que... —relamió sus labios—, quiero que bailes.

—Taehyung, no he bailado esa clase de música desde hace mucho tiempo, las clases que tome fue cuando tenía unos nueve o diez años, y solamente me perfeccione en ese arte por dos o tres años, yo... —Yoongi no se sentía con la suficiente seguridad para bailar, había tomado clases, sí, pero fue por poco tiempo, quizás ni siquiera se podría mover como antes lo hacía, Taehyung no tardo en mirar la preocupación en el rostro del omega, así que no pudo evitar colocar su mano sobre la cabeza de Yoongi para brindar suaves caricias a sus cabellos, el omega había detenido sus palabras al sentir ese toque.

—Lo harás bien —el alfa alejo su mano—, confió en que así será —le regalo una sonrisa, la tensión sobre los hombros del omega dejo de estar presente con aquel gesto, y justo cuando aquel sentimiento de temor se había ido, la música termino—, han terminado —Taehyung miro hacia las personas que se alejaban con los aplausos de los demás presentes—, vamos.

El omega sintió un pequeño escalofrío recorrer su espalda y más al ver como Taehyung tenía la intención de acercarse, Yoongi en un movimiento rápido tomo a Taehyung por su antebrazo para detenerlo.

—T-taehyung —el mencionado giro su rostro para mirarlo—, por favor, no creo estar listo, es a-algo sorpresivo y...

El alfa soltó una suave risa al escuchar el temblor en la voz del omega, parecía un pequeño cachorro que estaba totalmente asustado por ir por primera vez a una escuela.

—Omega —Yoongi lo miro—, tranquilo, relájate —relamió sus labios—, no te concentres en lo que dirán los demás al verte, tampoco en sí lo harás bien, solamente mírame.

—¿M-mirarte? —el alfa dio un asentimiento.

—Mírame todo el tiempo, seré yo quien toque la música para ti, solamente concentrarte en mirarme y no pienses en nada más, estoy aquí para ti...

El alfa sintió como el agarre del omega disminuyo su fuerza, Yoongi no estaba muy seguro de si eso funcionaría, pero esperaba no ponerse nervioso en el proceso, pero Taehyung le había dado un buen empujón para arriesgarse un poco, jamás en esos años en los que estuvo en clases de baile, le dieron la oportunidad de presentarse en algún recital, y lo agradecía, Yoongi jamás se ha sentido capaz de estar frente al público, mucho menos bailar frente a una multitud, pero por esta vez, quizás lo logré, miro a Taehyung y le regalo un asentimiento con la cabeza, indicándole al alfa que se encontraba listo.

Taehyung le devolvió aquel gesto y comenzó de nuevo su camino para colocarse al frente, en cuanto los presentes lo vieron no dudaron en vitorearlo, todos en Wonju amaban como ese alfa tocaba la flauta, decían que era como escuchar el mismísimo sonido del cielo, Yoongi no se sorprendió, pues sabía del talento de Taehyung, más nunca lo había escuchado tocar en realidad, pero por la reacción de las personas estaba seguro que estaba en frente de un gran artista.

El alfa se posiciono parado a un metro de distancia alejado del omega, mientras que Yoongi lo miraba, Taehyung no tardo en acercar la boquilla de la flauta cerca de sus labios, y posicionando sus dedos a lo largo de la misma, miro al omega regalándole una sonrisa, esa era la señal que Yoongi se esperaba, el corazón del omega latía en desenfreno debido al nerviosismo, pero podía lograrlo, Taehyung le dijo que lo mirase, que solamente se concentrase en él, y eso es lo que haría.

En cuanto las primeras notas sonaron, Yoongi comenzó a moverse, el silencio a su alrededor podía ser adormecedor, mientras que la melodía se escuchaba tan clara y precisa, las notas eran suaves, y Yoongi no pudo siquiera concentrarse del todo en el baile, pues mirar al artista era lo que quería, porque esas notas acariciaban cada centímetro de tu piel con ligereza e intensidad que daban ganas de cerrar los ojos para saborear cada una de las notas, la música proveniente de aquel instrumento de aire era cálida y llena de fascinante satisfacción que sin que el omega lo quisiera, hacía que su cuerpo se moviera solo, Yoongi ni siquiera notaba que sonreía mientras bailaba. Taehyung no podía apartar su mirada del omega, pues sus movimientos eran lo que él esperaba, limpios, cada paso que daba, cada pequeña vuelta, todo su cuerpo se acoplaba tan perfecto a la melodía que inclusive parecía que había ensayado todo este tiempo solamente para bailar bajo las notas de su melodía.

Cuando la canción termino y Yoongi había dado una ultima vuelta, una que lo llevo a estar totalmente cerca de Taehyung, los aplausos no tardaron en escucharse tan fuertes, las aclamaciones eran tantas, pero eso a Taehyung no le importo, siempre amaba la atención y admiración que le tenían por su pequeño talento, pero ahora eso no le importo, Yoongi miro a los lados mientras trataba de recuperar la respiración, su pecho subía y bajaba, y sonrió, porque todas esas ovaciones que se escuchaban eran dirigidas hacia el alfa que ahora se encontraba muy cerca suyo, sonrió hacia Taehyung, quien parecía totalmente embelesado en mirarlo.

—Tae —hablo Yoongi mientras sonreía—, esa melodía fue hermosa... estuviste en verdad grandioso, y esos aplausos lo confirman.

—La melodía no fue lo único hermoso aquí, omega —Yoongi parpadeo un par de veces al escucharlo—, esos aplausos no solamente son para mí...

—Te equivocas, Tae, yo no...

El alfa dejo caer su flauta al suelo, llamando la atención del omega, pero a pesar de que Yoongi había bajado la mirada, Taehyung no tardo en tomar el rostro del omega con ambas manos para obligarle a levantarlo y mirarlo a los ojos, en cuanto lo hizo, los ojos de Yoongi se abrieron en demasía al percatarse de la cercanía del rostro del alfa con el suyo.

—T-taehyung...

—Jure jamás enamorarme de nuevo —menciono Taehyung mientras disminuía cada vez más la distancia de sus rostros—, creí que los omegas como tú solamente eran unos simples interesados —sus labios rozaron los del omega, provocando que ambos sintieran un leve escalofrió—, pero me equivoque...

No espero a que Yoongi le dijera algo, termino por acortar los pocos milímetros que le faltaban para por fin probar esos finos y delgados labios rosados que tanto le habían tentado todo este tiempo, movió levemente sus labios haciendo que Yoongi soltase un pequeño suspiro que fue silenciado por el contacto entre sus belfos, Taehyung no tardo en separarse para soltar un suspiro, sonrió al percatarse que las mejillas pálidas del omega habían sido pintadas de un tono rosado, la vergüenza había acabado con Yoongi de nuevo.

—Felicidades, Min Yoongi —el alfa sonrió ladino—, me enamore de ti...

Y Yoongi no supo que decir, aunque Taehyung no necesitaba una respuesta en realidad, se conformaba con que el omega no lo hubiera apartado de aquel beso.

...

—¿Gusta que le traiga algo más, mi señora? —pregunto Riel, pero la señora Min parecía mucho más concentrada en sus propios pensamientos, en realidad la mujer se encontraba sumamente preocupada, no faltaba mucho para que el abogado se presentase con el nuevo testamento en manos para que pueda ella aprobar el cambio en el mismo, y eso solamente le hacía sentir un horrible amargo en la boca—. ¿Señora Min?

La anciana mujer dejo de lado sus pensamientos al volver a escuchar a la sirvienta, miro que a su lado la chica se encontraba parada abrazando la bandeja contra su pecho mientras le regalaba una mirada que denotaba preocupación.

—¿Has traído mi té? —Riel dio un asentimiento.

—Se lo he dejado en la mesa, mi señora —la mujer de inmediato dirigió su mirada hacia la mesa frente a ella, y en efecto allí se encontraba la taza de té de valeriana que había pedido—, perdone la imprudencia, pero —la señora Min la miro—, le he preguntado si se le ofrecía algo más, y usted no ha respondido, ¿pasa algo?

Pasaban muchas cosas por la cabeza de la señora Min, y sobre todo ahora que se sentía totalmente arrepentida con lo que estaba a punto de hacer, pero no había vuelta de hoja, tenía que hacerlo, sino las riquezas de la familia e inclusive el negocio familiar se irían a la ruina total, y no podía dejar que eso sucediera, muchos menos porque sabía que muchos de los empleados dejarían de tener trabajo si es que todo se va por la borda, lamentablemente Jindae era su única y más viable opción para dejar las riquezas en "buenas manos" aunque ella jamás considerará que Jindae sea la persona correcta para esto.

Soltó un largo suspiro mientras pasaba una mano por su frente, sintiéndose totalmente impotente por no poder hacer algo más por el pequeño Yoongi, si tan sólo Yoongi estuviera con vida las cosas serían diferentes.

—¿Señora Min?

—No olvides llamar a mi abogado para confirmar que vendrá el día de mañana por la tarde para arreglar lo del testamento —dijo la mujer, Riel bajo la mirada levemente antes de dar un asentimiento.

—Sí, señora Min —dio una pequeña reverencia antes de salir y dejar sola a la mujer.

La señora Min miro por el gran ventanal que se encontraba cerca, la noche estaba presente y la luna llena hacía acto de presencia en el cielo, iluminando un poco más el lugar en donde ella se encontraba, la mujer soltó un largo suspiro mientras miraba a la luna.

—Diosa luna —menciono mientras la miraba—, ¿será posible que me puedas regresar a mi querido nieto? —sonrió levemente, burlándose de ella misma por pedir algo imposible, pero deseaba que sus suplicas fueran escuchadas por aquella bella luna que vigilaba los cielos nocturnos.