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Capitulo 7 "La puerta"

Día cinco 25/11/14

#Perrie

No pude dormir en toda la noche ya que el miedo me invadía, tenía miedo de que ese desgraciado apareciera por esa puerta y me violara de vuelta pero por suerte nada de eso paso, pero aparte de tener ese temor dentro mío había algo más, ese chico llamado Calum también ha invadido mi mente casi toda la noche.

Vi, por la ventana, como el sol poco a poco iba iluminando los enormes árboles que había en el sitio. Mi panza rugió como un león, y no literalmente, por la noche no había comido nada, pues estaba tan triste por lo que paso que decidí hundirme en mis pensamientos y lágrimas decidí rechazar la cena mintiendo que me dolía la panza.

Con miedo me acerque a la puerta y la abrí, saque mi cabeza y observe rápidamente y con atención el pasillo, no había nadie. Sin hacer ruido salí de mi habitación, baje lentamente las escaleras, aún me seguían doliendo las piernas y mi zona intima de lo fuerte que me había penetrado ese desgraciado. Una vez que baje las escaleras me encontré con una puerta de madera a mi izquierda y un largo pasillo en mi enfrente, mire la puerta y la abrí, que casualidad estaba la cocina ya había olvidado la ubicación de este. Entre y la observe, antes no le tome atención pero ahora que lo veo me doy cuenta de lo bellisima, grande y delicada que es, sería un verdadero desperdicio ensuciar la cocina.

Investigue toda la cocina hasta encontrar unas galletas de chocolate y un vaso, luego de un tiempo encontré la heladera, nunca pensé que la heladera por fuera era de madera. 

Mientras comía y tomaba recordaba lo que sucedió ayer en la mañana, en la manera que ese hijo de perra me tocaba, me besaba y lo peor de todo, me penetraba.

"Perrie escapa, ¿Qué haces aquí?, aprovecha la oportunidad" repetía mi consciencia, tenía razón que hacía aquí si podía estar escapando.

Tome el vaso de leche y le di un sorbo, escuche un ruidito que hizo que me sobresalto, a consecuencia tire el vaso de leche al suelo. Asustada busque ese ruidito para encontrar a la persona que lo provoco, era un chico morocho, me apuntaba con un arma. Con algo de miedo retrocedí un paso. Lo observe mejor, diversos tatuajes cubría su cuerpo trabajo y perfecto, sus ojos miel se me hacían tan familiar al igual que la forma de esos labios, sin darme cuenta me mordí el labio inferior, lo peor de todo es que este chico tenía que estar en bóxer.

-¿Quien eres?-pregunto el chico, esa voz se me hacía tan familiar, de alguien lado la había escuchado pero estaba tan concentrada en la belleza de este chico que lo tome atención a ese detalle.

-Soy....Soy...Perrie una sirvienta-dije nerviosa. El chico bajo el arma y me miro.

-Pensé que eras un ladrón-dijo el chico regalándome una sonrisa, una perfecta sonrisa, Por el amor a Dios creo que voy a morir.

-Hay de todo en esta casa, y ladrones más de seguro encontras-dije seria.

-¿Qué dijiste?-pregunto el chico con el seño fruncido, pero este chico aunque este enojada es lindo.

-Nada, se supone que no tengo que estar hablando contigo a esta hora con una remera solamente-dije sin importancia, luego me percate de que como estaba vestida-¡No me mires!-exclame alterada.

-Tranquila... Vi cuerpos mejores-dijo con una sonrisa, arquee la seja, este chico puede ser un Dios griego pero es un idiota.

-Ok-dije mirando para otro lado-Mejor limpio esto-dije, mientras más rápido limpie mi desastre más rápido me iré de aquí. Tome un trapo de piso y un balde con agua, empecé a limpiar toda la leche derramada, cuando unas manos toman las mías.

-Si lo haces con brutalidad vas a rallar la cerámica-dijo, levante mis rostro, sus ojos, de algún lugar los conozco, sé que anteriormente los vi pero la pregunta es ¿En donde?-Te ayudo-dijo, juro que de algún lado vi esos ojos. Él recojio los pedazos de vidrios mientras yo "limpiaba más suave" para no rallar la cerámica-noten el sarcasmo-este debe ser gay, demasiado hermoso para ser real; sus manos se posicionaron arriba de las mías, sin motivos aparente sentí como una leve corriente eléctrica recorrió casi todo mi cuerpo, levante un poco mi rostro para encontrarme nuevamente con esos ojos color miel.

-¿Te conozco de algún lado?-pregunte.

-No creo. Yo te conocí ayer-dijo él, pero su mirada se me es tan familiar.

-Juraría por mi vida...-o lo poco que me queda-Que te vi en algún lugar-

-Pues solo si has ido a Italia-dijo él-Vivo ahí....-

-Tienes un buen acento ingles para vivir en Italia-lo interrumpí.

-Nací aquí, viví acá casi toda mi vida, recién a los dieciocho años me instale en Italia-explico, lo mire una vez más, luego seguí limpiando. Ya al terminar deje las cosas en su respectivo lugar-Una pregunta.... ¿En verdad ibas aceptar la propuesta de mis amigos?-fruncí el seño y luego recordé la noche anterior.

-Mis amigas se negaron y yo sin ella no voy a ninguna parte-respondí.

-Osea que si tus amigas se matan ¿Vos también?-asistí sin pensarlo-¿Algún motivo en especial?-

-Ella me aceptan como soy.....-

 -Ya entendí, le tienes miedo a la soledad-me interrumpió.

-No. Puedo tener muchos miedos pero no a la soledad, mi mayor miedo es perderlas-

-¿Por qué?. Si ellas se van podrás tener otros amigos-

-No necesito que ellas se vayan para tener otros amigos. Aparte he pasado por muchas cosas difíciles en mi corta vida. He sido golpeada, maltratada, insultada y vive repetidamente la pesadilla de toda mujer. No tengo muchos amigos por el hecho de que nadie acepta mi pasado, y ellas no les importo eso, al contrario me ayudaron y me apoyaron para seguir adelante y para que sea más fuerte, otros directamente se burlaban de mi. En cambio ellas.... si me caigo me levantan, si me lastimo me curan y si me tropiezo me atrapan antes que caiga, ellas son lo único que me quedan-

-¿Y tu familia?-

-Mi hermano desapareció sin dejar rastros, mi madre al igual que mi sobrina murieron, mi padre ya no es el mismo de antes, mis abuelos.... Pues ellos ya no están; Ellas son lo único que me quedan, si las pierdo me pierdo a mi misma-explique. Él se mantuvo callado, no quise esperar más y me retire para encontrarme con una sorpresa.... A cuatro chicos en bóxer y en la escaleras-¡Ah!-grite, a la vez tapándome los ojos-¡Pero hoy a todos se les ocurrió están en bóxer!-exclame.

-No es para tanto-era la voz del chico de la cocina, creo que lo voy a llamar así-Te recuerdo que tu estas con una remera trasparente y ropa interior-

-Es diferente, yo pensé que todos estaban durmiendo pacíficamente-

-Em... si claro-respondió.

-Solo voy por unas galletas y leche-se escucho la voz de Jade, me quito la mano que cubría mis ojos y mire a Jade que estaba inmobil en la escalera-Leche de vaca-dijo ella levantando las manos, rodee los ojos y subí las escaleras con dificultad, aún me duele el cuerpo-¿Por qué caminas media tuerta?-pregunto, no le tome importancia a su pregunta, la tome del brazo y la empecé a subir a la fuerza-Espera quiero mis galletas.... ¡Jesy!-exclamo.

-¡Por el amor a Dios, están peor que Eleanor y sus antojos!-exclamo Jesy. No sé cuando pero cuando me doy cuenta Jesy estaba atrás de Jade-Lo diré en buena manera. Perrie podrías soltar a Jade y dejarla ir a la cocina por unas galletas-

-No-deje de tirar del brazo de Jade-Dame un segundo-le dije a esta.

-Claro, espero-dijo Jade con una sonrisa, me acerque a Jesy, la tome del mentón y la moví para que viera a los chicos desconocidos en bóxer, luego la moví para que me mire.

-¡Jade, a tu habitación!-exclamo Jesy.

-¡Quiero mis galletas!-exclamo enojada y firme Jade.

-¡Ya cayensen, hay personas que duermen!-exclamaron Eleanor y Leigh. De la nada dos almohadas fueron tiradas, con Jade y Jesy nos agachamos para que no nos golpeen.

-Alguien se despertó de malas-dijo Jesy.

-La verdad-dijo Jade parándose, también me pare, fue entonces cuando veo a Gemma con mala cara acercándose a nosotras.

-Gemma, no. ¡Yo no grite, fueron estas dos sin vergüenza!-exclame, ella paso al lado de nosotras, vi como tomo las almohadas tiradas y empezó a golpear a Jade y Jesy.

-¡Dejenmen dormir!-exclamo Gemma mientras las golpeaba. Sintió como algo suave impacto en mi cabeza.

-¡Quiero dormir!-grito Leigh para después cerrar la puerta con un portazo. Gemma seguía golpeando a Jade y Jesy con las almohadas, yo subí hasta llegar a la entrada del pasillo, vi como los chicos que estaban en boxee seguía ah riéndose, el chico que vi en la cocina me mira y me guiña el ojo sin descaro, fruncí el seño y seguí mirando a mis amigas matándose a almohadazos, cuando de la nada veo a Eleanor a mi lado con una cara de molesta extrema.

-¡Callensen!-todos pero absolutamente todos miraron a Eleanor-¡Dejenmen dormir, pedazos de mierdas. Si no juro que yo los mato a todos!-exclamo alterada.

-Amor-dijo unos de los chicos desde abajo.

-¿¡Qué!?-exclamo irritada.

-Ya son.... las 8:00-dijo el chico con miedo.

-¡Ok, ya me alisto!-exclamo Eleanor más irritada. Eleanor se fue, vi como las chicas se seguían matando pero en silencio, como los chicos seguían riéndose de ellas, mire por última vez al chico que vi en la cocina y me retire para mi habitación.

(...)

-¡Chicas, por favor bajen a la sala!-exclamo Gemma desde la sala. Con Jade, Jesy y Leigh-Anne nos miramos y luego nos encogimos de hombros. Salimos de mi habitación la cual estábamos encerradas charlando. Bajamos y nos dirigimos a la sala. Fue en donde nos encontramos con los mismo chicos de hoy a la mañana y Gemma.

Mire a las chicas la cual todas estaban perdida bien a esos chicos lentamente y con atención, babosas. Mire a el chico que estaba al lado de Gemma, era muy parecido a esta, sus ojos, su nariz, su rostro, todo menos su pelo, Gemma lo tiene multicolor y lacio este chico lo tiene castaño y con rulos.

-¿Es tu hermano?-pregunto mirando a Gemma.

-¿Cómo te diste cuenta?-pregunto Gemma sorprendida.

-Su parecido es grande. Es como la versión tuya masculina, claro pero sin el pelo multicolor-dije con una sonrisa.

-Me presento, soy Harry-dijo el chico amablemente y con una sonrisa.

-Mi nombres es Jade, ellas son mis amigas Jesy, Leigh-Anne y Perrie-dijo Jade, los chicos nos miraron y sonrieron.

-Bueno chicas, ya conocen a mi hermano pero no a mis amigos... Él es Niall-señalo al chico rubio-Liam-señalo al chico castaño-Y él Zayn-señalo al chico morocho, el mismo que conocí en la cocina.

-¿Zayn?-pregunte confundida.

-¿Algún problema con mi nombre?-dijo el chico con seriedad.

-Me parece un nombre extraño, nada más-dije arqueando una seja.

-Digamos que Perrie no es la gran cosa-lo mire y rodee los ojos. Vi como las demás chicas hablaban con esos chicos de lo más normal. Yo por mi parte me fui a la cocina, tengo sed. Al llevar me serví mi vaso con agua fría. Pero todo cambio cuando un ruido extraño resonó en todo el lugar. No sentí miedo, solo curiosidad. El ruido se volvió a escuchar, no me iba a quedar parada sin hacer nada, la curiosidad me mata. Seguí a ese ruido, venía de unas de las últimas puerta al fondo que ofrecía esta hermosa cocina. El ruido seguía escuchándose, con algo de miedo tome la perilla y abrí la puerta por completo, la oscuridad me impedía ver pero al parecer era un largo pasillo y tenebroso para ser sincera. Iba investigar sobre ese pasillo entrando-¿Qué estas haciendo?-se escucho la voz de Zayn, eso hizo exaltarme, cerré la puerta y lo mire con algo de miedo.

-Me asustaste-dije tocándome el pecho, del lado del corazón.

-¿Qué haciendo viendo lo que no te incumbe?-pregunto serio.

-Escuche un ruido y solo quise ver que era-dije con miedo al saber que se me acercaba con firmeza así mi, no iba a bajar la mirada ni la cabeza me iba a permanecer firme.

-No te metas en lo que no te interesa, sirvienta-dijo con una sonrisa de maldad, lo mire con enojo y le di un cachetada.

-Vuelves a tratarme así y....-él me tomo de los brazos y me acorralo contra la pared, elevo mis brazos a la altura de mi cabeza, trate de hacer fuerza pero era débil.

-¿Qué me harás?-dijo desafiante y acercándose a mi más y más. Él sonrió y miro mis labios, ¿me besara? eso sería raro y loco porque solo nos conocimos hoy. Sin despegar su mirada de mis labio se fue acercando más a mi.

-Aléjate-susurre.

-Un beso no le hace mal a nadie-susurro acariciando mis labios y así unir mis labios, unos labios que se me hacían muy familiar. Sin saber el motivo acepte el beso, era tierno, dulce y lento, en pocas palabras perfecto, sentí lo mismo que en la mañana, una leve corriente eléctrica recorriendo todo mi cuerpo. Él se separo de mis labios dejándome con más ganas. Me miro a los ojos al igual que yo y sin aviso me beso nuevamente, esto estaba mal pero no sé porque mis labios no decían lo mismo. Ya cuando pude reaccionar pude zafarme de su agarre y empujarlo con fuerza alejándolo de mi.

-¿Qué mierda te ocurre?-pregunte molesta.

-Vamos, no te hagas la enojada ahora, si te encanto el beso-dijo con una sonrisa coqueta.

-¿Qué?-

-Niégalo-

-Mejor me largo de aquí-dije dirigiéndome a la puerta de salida pero antes de poder abrirla sentí como Zayn me tomo de la cintura y me atrago a él-Suéltame-dije molesta.

-¿Y ahora por qué estas molestas?-

-Porque me siento una cualquiera cuando no lo soy-dije para empujarlo nuevamente e irme de ese lugar rápidamente. Me fui a la sala para encontrarme con una linda sorpresa-¡Calum!-dijo con una sonrisa. Él chico me miro también con una sonrisa y se me acerco a mi, tomo mi mano y la beso.

-Un gusto verte de nuevo-dijo mirándome directamente a los ojos lo que hizo sonrojarme.

-¡Perrie, Perrie!-escuche la voz desesperada de Eleanor. La busca con la mirada hasta que la encontré me acerque a ella con rapidez.

-¿Qué pasa?-pregunte preocupada.

-Las chicas ataron a mi novio en el árbol de afuera-dijo desesperada, fruncí el seño.

-¿Qué?-ella me tomo del árbol y me acerco a la ventana grande del medio del pasillo, me señalo donde se encontraba su novio, cuando vi me sorprendí por lo que hacían las chicas. Tenía al mismo chico que vi hoy a la mañana, atado por las chicas mientras estas le gritaban cosas que por suerte no escucho-Lo hicieron-susurre-Por su culpa perdí a mi novio a las tres días-dije mirando la escena.

-Bueno por lo menos lo tuyo duro más, conmigo termino a las dos horas-dijo Gemma con tristeza.

-¿Me están diciendo que Louis va terminar conmigo?-pregunto Eleanor preocupada. Con Gemma nos miramos, miramos la escena, miramos a Eleanor y volvimos a mirar la escena.

-Puede ser-dijimos a la vez.

-Pero ¿Lo hicieron apenas lo vieron?-pregunte.

-No. Primero se lo presento, la chicas lo iban a matar, se puede decir pero cuando vieron el culo del chico decidieron dejarlo con vida pero esta chica...-señalo a Eleanor-Tuvo que decir que estaba embarazada y después fue un desastre-dijo mientras se reía de la escena.

-¿Embarazada?-pregunte mirando a Eleanor con una sonrisa. Ella asistio con una sonrisa. La abracé con todas las fuerza que tuve, la deje de abrazar y salí de la casa, me acerque al chico alejando a las chicas de él. No me di cuenta que estaba semi desnudo el chico, lo mire directamente a los ojos-Louis ¿Verdad?-dije y él asistio con miedo-Más te vale cuidar a Eleanor como se lo merece, no solo eso, protegela, amala y dedica cada momento a ella ya sea el último-dije y él asistió-Por cierto ¿Cuanto llevan juntos?-pregunte.

-Tres años-dijo con miedo.

-¿¡Tres años!?-exclame yo al igual que mis amigas-¡Date por muerto!-exclamamos las cuatros. Yo me fui de la escena mientras torturan al chico, entre a la casa y cerré la puerta con un portazo, al entrar a la sala lo único que vi fue a Eleanor.

-Tres años-ella bajo la mirada-¿Por qué no nos dijiste?-pregunte algo triste.

-Porque sabía que esto iba a pasar-dijo con una sonrisa nerviosa, sabía que estaba mintiendo pero no quería pelearme con ella, me acerque a ella y la abrace.

-Espero que te haga muy feliz-dije con una sonrisa y acariciando su pelo, ella sonrió y asistió.

(....)

Ya al pasar el tiempo pude conocer más a Calum, era muy tierno, amistoso y confiable, pude notar en él una persona con una luz de paz tremenda, aparte de todo esto era muy caballero no solo conmigo, con todas, nos trataba como si fuéramos princesas y con mucha paciencia. Por otra parte, pude ver aveces de reojo como Zayn miraba a Calum con mala cara, ¿Qué le pasara?.

Luego de otro tiempo los chicos (todos) decidieron hacer una maratón de películas, para entretenernos mejor. Vimos películas como "Somos como niños 2", "Posición infernal", "Contagio", "Carrie" y por último "Espejo siniestro". Las chicas estaban asustados por las películas de terror, mientras tanto yo seguía comiendo los pochoclos de lo más normal. Los chicos pusieron ahora una película llamada "Escupiré sobre tu tumba" dicen que esta muy buena y que nos va a gustar. 

Lo cual todo lo dijeron fue un error. El trama tratada de una joven escritora que se muda de casa, resulta que cuatro hombres llegan de sorpresa en su casa, la torturan y la violan si piedad. La chica se hace pasar por desaparecida y muerta, cuando logra escapar de esos hombres.....

No puedo seguir describiendo las escenas porque todo me hace recordar a mi pasado.

Flasblack

*A los diez años*

-Por favor, tenga piedad-dije llorando.

-Piedad es lo que menos tendré-dijo mi padrastro con un sonrisa de maldad. Me dio una cachetada y me penetro sin piedad.

*A los doce*

-No, no, por favor, no-dije llorando, el hombre me acorralo contra la pared y me toco un seño.

-Eres hermosa, mi vida-me rompió la remera y saco mi sostén como un bestia para luego ocurrir lo peor.

*Ayer*

-Por favor, no me hagas esto, por favor-dijo Perrie con un hilo en la garganta.

-¿Y qué recibiré a cambio?-

-Lo haremos después pero por favor ahora no-

-Para que esperar si lo podemos hacer ahora-

Fin del flasblack

Los recuerdos inundaban mi mente una y otra vez. No podía con todo esto, no podía. Deje caer una lágrima sin aviso, me levante y me fui corriendo del lugar. No me importaba si me veían o no, solo quería estar sola. Me fui a mi habitación y me encerré, en mi mundo, en mi lugar donde se que puedo estar a salvo, aveces.

Tocaron la puerta solo grite, "Quiero estar sola", necesito estar. Los recuerdo me molestaban una y otra vez, bloqueando mis pensamientos. Mis lágrimas salían sin parar. Maldijo el momento en el que tuve que nacer y tener este destino.

*23:50 pm*

Me levante ya que mi panza sonaba con fuerza, he lloraba casi toda la noche, espero que nadie me allá escuchado. Salí de mi habitación, revise el pasillo y no encontré a nadie, solo a la oscuridad y la luz de la luna que entraba por la única ventana que estaba al final del pasillo. Baje y me dirigí a la cocina, tome unas galletas y un vaso con leche, no importa si esta fría, no importa si es invierno, tengo hambre y comeré lo primero que veo. 

Un ruido extraño se escucho, el mismo ruido que había escuchado antes. Me acerque a esa puerta de donde provenía el ruido. Suspire, busque y busque en toda la cocina hasta encontrar una linterna. Prendí la luz y abrí la puerta. El pasillo no era tan largo como yo pensaba, era corto. Me adentre al pasillo, miraba cada rincón, pero no encontraba nada solo muebles viejos y sucios con flores marchitas. Ya cuando llegue al final lo vi como si nada pasara y suspire frustrada. 

Ya cuando había perdido toda esperanza de algo que la verdad no sé que era escuche un ruido, el mismo ruido de antes, escuche nuevamente el ruido, provenía de abajo del suelo, miro el suelo y lo ilumino con la linterna, había una manija. La tomo y la levanto, ilumine el hueco, había una escalera en el medio, baje mediante la escalera para encontrarme con una sorpresa. Un túnel secreto de escape. Sonreí ampliamente cuando lo vi, estaba todo construido a la perfección, mire a mi alrededor y vi unas armas que chocaban entre si por el frió viento.

-Eran estos los provenientes del ruido-sonreí. Me acerque los separe nuevamente. Supuse que Los caballeros de la noche podían haber venido a la casa o algo por el estilo, para no tener problemas decidí irme rápidamente del túnel secreto, cuando subí al pasillo deje todo tal cual estaba antes, fue entonces cuando sentía la mirada de ahí. Salí del pasillo y cerré la puerta, apague la linterna y sonreí, esto es lo mejor que me paso en la vida, por fin nos vamos a poder escapar. Aun sentía que alguien me miraba, busca esa mirada pero no la encontraba, termine de comer y me fui a mi habitación.

Solo cuando estuve encerrada en mi habitación, deje de sentir esa mirada.

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