*Luces como un ángel...

Cuando me besas sé que no te importa dos carajos...

Pero todavía quiero eso, tu amor salvaje...

No puedo sacarte de mi cabeza...*

Savage Love - Jason Derulo ft. Bts (remix)

<<Elizabeth>>

He escuchado varias veces que en el momento en que te encuentras entre la línea de la muerte y la vida, ves tu vida pasar en cámara lenta como si fuera una película, pues en mi caso sucedió todo lo contrario.

Tal vez se deba a que no morí.

El chillido de las ruedas rozar contra el asfalto me aturde justo en el momento que el cinturón de seguridad tira de mí hacia atrás yendo en contra de las leyes de la física y mi pecho se queda sin aire al impactar contra el asiento.

Varios mechones cubren mi rostro y los aparto con rudeza mientras mis ojos se quedan fijos en el espejo retrovisor.

El chico de ojos electrizantes.

Mi cuerpo se queda estático y observo como esos ojos azules miran todo el panorama con desaprobación.

Él hizo esto.

Sus rizos color chocolate, su cara, su piel, todo es tan similar a mí que asusta, solo nos diferencia el color de sus ojos.

¡Es como verme a mí en hombre!

Vuelvo a la realidad cuando Demon suelta una maldición y recuerdo que casi tenemos un accidente.

Lo evalúo pero no parece herido solo un poco consternado por el horrible frenazo.

- De no ser por tus rápidos reflejos estuviésemos muertos -observo el barranco al otro lado de la calle.

- Ese tráiler se metió en nuestro carril a propósito -expresa y noto el enojo en su voz- Si hubiera girado hacia la derecha hubiéramos salido volando hacia el vacío.

Tuvimos la suerte de que ningún auto viniera por el otro carril

Mis ojos vuelven al espejo retrovisor y por un instante me pregunto si lo que vi fue imaginación mía porque ya el Underboss de la Bratva no está y ni hay rastro alguno de que hubiera estado aquí.

- Pues sí que fue necesario el cinturón -bromeo en un estúpido intento de calmar su enojo pero no resulta así que volvemos a tomar la ruta por la que íbamos, en un incómodo silencio.

¿Demon habrá visto al chico, igual que yo?

«Demon»

No estoy loco -al menos no tanto- Sé que Romeo Golkov estaba ahí, en medio de la carretera, observándonos como si sus planes no hubieran dado resultado.

Figlio di puttana

La Bratva nos está pisando los talones y se hicieron esto es porque quieren sangre.

Robarle en sus bodegas no es un hecho tan grave como para arriesgarse a ir a por una de las cabezas de la Famiglia.

La pregunta aquí es si es si quieren la mía o la de alguien más... Elizabeth.

Un escalofrío recorre mi todo mi cuerpo dejándome una extraña sensación.

- Es increíble todo lo que dicen de ti en los diarios -menciona.

Tuvimos que sentarnos en una de las mesas más apartadas ya que estamos en la portada de todos los periódicos por lo sucedido anoche en el palacio. Y la prensa rosa no esperó para hacer de las suyas publicando artículos como: ¿Quién es la misteriosa chica que bailó con el heredero Leone? ¿Acaso el corazón del tigre blanco ha sido cazado?

Se me puso ese sobrenombre al ser visto una vez con Venus, durante uno de mis viajes a Italia.

La extraño.

- El soltero más codiciado ha encontrado a la dama que le pondrá fin a su soltería -lee- Nunca pensé que si saldría en la prensa sería por el rumor de ser una de tus conquistas-coloca una mano en su pecho de manera dramática- He fallado como mujer en esta vida. Bueno al menos no se ve mi rostro, incluso se rumorea que puedo ser la hija de Obama -resopla- Por dios ni siquiera nos parecemos.

- ¿Y no lo eres?

- ¿La hija de Obama?

- No, una de mis conquistas -siento mi miembro palpitar al recordar lo ocurrido esta madrugada.

- No lo soy -responde secamente- ¡Oh mira aquí creen que soy Kylie Jenner, ya quisiera yo tener ese cuerpo!

- Tu cuerpo está bien así -digo y levanta la mirada, me observa por unos segundos y vuelve su vista a los diarios.

Vale, lo capto, no quiere hablar de lo ocurrido y tampoco sé por qué le doy tanta importancia al asunto.

- Necesito hacer una llamada -le informo y la dejo dándole un sorbo a su café mientras finge leer la prensa y no prestarme atención.

Voy hacia un lugar más apartado sin despegarle la vista de encima y marco el número de Akiko, al segundo tono responde.

- Ha llamado al Prostíbulo "Dame por el de atrás" que desea.

- Dios, tú no cambias -resoplo y la escucho reírse.

- ¡Hola bambino! ¿Qué tal Sicilia? Leí lo del incendio en las noticias pero si me estás llamando es señal de que estás vivo.

- No sé, puede que haya señal en el más allá -vuelve a reírse- Necesito una consulta ahora.

- Esto de ser tu psiquiatra gratis es difícil -resopla.

- Tienes acceso gratis a todos los bares y hoteles de la Famiglia, así que escucha. La última vez que hablamos mencionaste dos posibles respuestas para lo que me pasa con Elizabeth-no despego la vista de la misma.

- Ohm ya entiendo por dónde va esto ¿Ha ocurrido algo entre tú y la bambina?

- No le digas niña, que me hace sentir peor.

- A su edad ya yo me montaba orgías, no te preocupes, ahora cuéntame y dame los detalles sucios.

- No te daré ningún detalle sucio pero sí han ocurrido muchas cosas desde la última vez que hablamos.

- Bueno pues te cuento que estuve hablando con algunos colegas respecto a tu empatía por la chica y según tu trastorno eso es poco probable. Los sociópata no suelen sentir el dolor ajeno como suyo propio.

- ¿Eso significa que tal vez mi trastorno de TPA no esté tan desarrollado?

- ¿Has asesinado a alguien en estos días?

- Si, varios.

- ¿Algún conocido?

Pienso en Adriano.

- Puede ser, realmente solo cruzamos palabra una vez.

- Conocías a algún familiar del mismo.

Fiorella.

- Se puede decir que sí.

- ¿Te arrepientes de haberlo hecho?

- No -respondo y es cierto, no me arrepiento.

- ¿Has pensado en el dolor que sentirá su familia o en si tenía planes futuros?

- No.

- Y ahora que lo menciono ¿Qué sientes?

- Nada, me da igual.

- Las otras personas que has asesinado... ¿Has pensado en su familia, en si tenían hijos pequeños, madres, esposas embarazadas, en si su hogar dependía de ellos e hicieron lo que hayan hecho por obligación o porque no tenían otra opción?

Dios por qué me recrimina lo mismo que Elizabeth.

- No he pensado en ello y ahora que lo dices sigo sin sentir culpa.

Realmente no siento nada y aunque todo lo que haya dicho fuera verdad sigue sin importarme.

- ¿Qué sientes al matar?

- A veces nada pero la mayoría de las ocasiones siento ganas de volver hacerlo, sentir la adrenalina correr por mis venas y como la sangre ajena cubre mi cuerpo -tomo una respiración y mi sangre fluye solo de pensarlo- Ver la piel de mi contrincante abrirse con cada impacto de mi puño en su cara o sentir su garganta quebrarse mientras presiono su cuello.

- Tu trastorno no ha mejorado Demon, sigues siendo un sociópata sanguinario y lo que sientes por la Joya Marchetti estoy segura de que no es empatía.

- ¿Entonces qué?

- Ya lo descubrirás tú solo -jadea.

- ¿No me digas que has estado follando mientras hablamos?

- Tú sigue nena -le dice a alguien más- Lo siento bambino pero un cunnilingus es un cunnilingus y más si es con esta belleza -escucho a la otra chica reírse.

- Pensé que estabas con Enzo.

- No soy mujer de una sola persona -hace una pausa- De dos tal vez, cuídate bambino y nos vemos el día 30 en el Underworld para celebrar tu cumpleaños.

- No voy a celebrar mi cumpleaños.

- Eso mismo dices todos los años, así que quiero ver tu traserito apachurrable cruzar la puerta del club el próximo sábado ¡Ciao! -cuelga.

Menuda psiquiatra me he buscado.

Vuelvo a donde está Elizabeth quien luce un poco pálida.

- ¿Todo bien?

Despega la vista de la ventana y me mira.

- Si ¿Problemas en Nueva York?

- Solo hablaba con Akiko.

Su ceño se frunce pero trata de ocultarlo.

- ¿Hablaremos como personas maduras de lo que pasó anoche?

- ¿Estás insinuando que soy inmadura? -cuestiona a la defensiva.

Okey ¿Ahora qué hice?

- No, solo quiero que hablemos de una vez respecto a lo sucedido.

- Antes de que lo digas tú, pues lo diré yo-plantea- Lo que sucedió fue un error, había sido una noche llena de emociones fuertes así que me encontraba en un momento debilidad -dice cada palabra tan rápido que parece que lo hubiera ensayado.

Dejo salir un sonoro suspiro de paciencia.

- Número uno Elizabeth, deja de suponer por mí, aunque coincido contigo que lo que sucedió fue un error. Número dos, sí fue una noche muy agitada pero eso no justifica nada y número tres me quieres decir que estabas en un momento de debilidad y que por eso follamos por encima de la ropa -se escucha una bandeja caerse y miro al camarero que traía las donas de Elizabeth, recogiendo todo muy sonrojado.

- Podrías decirlo de una manera más bonita -susurra igual de sonrojada que el chico.

- Follamos -hago más énfasis en la palabra-Por encima de la ropa y de no ser por mi inexistente autocontrol hubiéramos follado de verdad.

- Pues ya está, eso es lo que haces todo el tiempo con miles de mujeres que una vez lo hallas hecho conmigo no es para tanto, olvídalo genio.

- No tienes pruebas de eso.

- Tu secretaria...-la interrumpo.

- Corrección, la de Padre, y fue solo esa vez que nos viste.

- La asistente de vuelo en el jet, la chica de cabello azul de aquella cafetería, la vendedora del centro comercial, la.viuda Caputo... Y la Yonikua esa que acabas de llamar, apuesto mil dólares a qué también te la... Copulaste con ella.

Ya entiendo...

- Es Akiko, y es mi amiga y psiquiatra, no me la he tirado y tampoco lo haría, eso sería raro, la veo como una hermana.

- Que casualidad, lo mismo decías de mí, que me veías como una hermanita y mira como terminamos.

- Y lo que nos falta -le doy un sorbo a mi bebida mientras disfruta ver cómo los nervios se apoderan de su cuerpo.

- No sé de qué quieres hablar realmente, recuerdo que dijiste que tú nunca repites así que has de cuenta que no pasó y ya está.

- Pues para tu información aún no te como el coño Elizabeth -casi se escupe el café- Así que hablaremos sobre si repito o no después de eso, o tal vez después de que me hunda en tu estrecho y húmedo canal -observo como cruza sus piernas y el camarero de hace un rato se aleja casi corriendo- Y no puedo hacer de cuenta que lo de anoche no pasó porque esto -retiro un poco su bufanda- Me dice todo lo contrario -y observo la bonita marca que dejé en su cuello.

Tenía que asegurarme que no era ni un sueño ni estaba borracho o alucinando.

- Tanta educación privada que pagó Flavio para que no sepas hablar bonito.

- Se hablar bonito pero estoy seguro que prefieres: un voy a hundir mi lengua en tu coño y a devorarte hasta cansarme como la presa exquisita que eres a un voy a beber de las aguas benditas que corren por ese canal glorioso entre tus piernas.

- No suena tan mal -humedece sus labios y mira a cualquier lado menos a mí- Y volviendo al tema ambos coincidimos en que fue un error.

- Y de los errores se aprende, yo aprendí que debo repetirlo.

- Estás loco.

- Lo sé e igual sigo con ganas de comerte el ...

- Vale, ya lo capto -me interrumpe antes de terminar la frase sacándome un risa tonta.

De pronto alguien más entra en nuestro campo de visión y no es otro que mi padre y no... No hablo de Flavio sino de Massimo D'angelo.

Se acerca a saludarnos y me sorprende la confianza con la que se tratan él y Elizabeth.

¿Qué tanto hablaron estos dos en la exposición?

Elizabeth nos mira nerviosa a ambos y no es para menos, somos casi iguales.

- Chicos, cómo están, leí las noticias y me preocupé ¿Todo bien con sus familias? -cuestiona D'angelo

Lo invito a desayunar y hablamos un poco de lo ocurrido sin mencionar los detalles como de que casi nos matan, solo dije lo mismo que la prensa.

- Vaya, supongo que deben estar buscando un lugar donde quedarse ahora.

Realmente me pregunto por qué supone eso si fácilmente podemos estar en un hotel pero no le doy importancia.

- Justo en eso estamos, aún no se sabe muy bien cómo fue todo y la prensa nos acecha a todos lados que vamos -habla Elizabeth y no sé qué rayos está planeando.

- Podrían quedarse en mi casa, es bastante espaciosa y pueden estar allí el tiempo que necesiten -propone mi padre

- No es mala idea -Elizabeth me mira esperando mi aprobación.

- Además así tendría tiempo para mostrarle un poco más de mi arte a mi fan número uno, así como algunas técnicas.

Ambos me miran.

Admito que no suena mal, nadie nos buscaría allí y tendría la oportunidad de ver más de cerca la magia que hace en los lienzos mi mayor influencia, quien también es mi padre biológico y... estaría más tiempo a solas con Elizabeth.

Pero por otro lado pondría a D'angelo en riesgo.

- Estoy segura que habrá muchas obras que captarán tu atención -habla Elizabeth y veo la complicidad entre ella y mi padre.

¿Qué ocultan estos dos?

Termino aceptando solo por curiosidad.

figlio di puttana (hijo de puta)

Wii toy devuelta, gracias por leerme y gracias por votar🥺🥺🥺

Los quiero mucho y estoy abierta a críticas y referencias respecto al libro.

Chaoooo