Después de disparar guardó el arma, bajó del techo y observó a la persona que aún estaba de pie

Valeria:¿Qué esperas?¿Que te dé las gracias?
—¿Tú eres Valeria De la Vega?—
Valeria:¿Enserio crees que te voy a decir quién soy?
—Bueno, no importa, yo sé que sí; vete de aquí y llévate a tus hermanos, están en peligro, vienen para acá—
Valeria:¿Quiénes?
—¿No lo sabes?, ¡Vienen a cobrarles!
Valeria:¿Cobrarnos qué?
—¡Lo que les dieron!—
Valeria:¿Qué nos dieron?
—No hay tiempo, ¡vayanse ya!—
Valeria:Pero tenemos que sacarlas
—Yo los ayudo, pero hay que darnos prisa—

Entraron ambos por la ventana, en esa habitación había ya un hombre desmayado

Valeria:Jerry...

Hizo una mueca rápida parecida a una sonrisa

Valeria:Vas tú adelante
—¿Porqué?—
Valeria:Te acabo de ver asesinar a tu compañero, no confío en ti.

Él obedeció y avanzó hacia la tercera habitación, Valeria iba detrás, cuando entraron se encontraron a varios hombres inconscientes y a un lado de la habitación estaban Jhonatan, Oliver, Santiago y Jerry desatando a algunas jóvenes.

Valeria:¿Están bien?

Todos voltearon mientras asentían pero se pusieron a la defensiva al ver al desconocido, era un jóven de su edad, pero eso no lo hacía menos peligroso, él ignoró su reacción y se dirigió hacia una jóven a desamarrarla, Valeria hizo lo mismo, Oliver fue el primero en liberar a una de ellas que inmediatamente se lanzó a abrazarlo llorando, pero él la apartó rápidamente y le extendió una navaja para que los ayudara a liberar a las demás.

Oliver:Después agradeces

Ella obedeció y aún con los ojos llorosos comenzó a desatar a una mujer.
Una vez que todas estuvieron libres Jerry y Jhonatan las ayudaron a salir por atrás, mientras Oliver y Santiago se dirigieron al jóven que había llegado junto a Valeria
Santiago:¿Y tú quién eres?
—No hay tiempo, váyanse, vienen para acá—
Oliver:¿Quienes?
—Vienen a cobrarles—
Santiago:¿Cobrarnos qué?
—Se nota que son hermanos, todos hacen muchas preguntas pero no hay tiempo, después lo sabrán—.

Aunque no lo conocían (o eso pensaban) pudieron ver que era sincero así que salieron de ahí, Valeria, que iba hasta el final se detuvo en la puerta, giró levemente a verlo y soltó un sincero “gracias”.
Oliver la observaba desde fuera sin que ella lo notará y sus ojos se iluminaron al escucharla decir esa pequeña palabra que no había salido de sus labios durante años.
Valeria comenzó a caminar rápidamente para alcanzar a los demás.

Oliver:No creí que viviría para escucharte decir gracias una vez más
Valeria:Felicidades, ya puedes morir tranquilo
Oliver:No, aún me falta una cosa

Valeria levantó una ceja

Oliver:Verte sonreír de nuevo

Valeria agachó la mirada un momento y siguió caminando.
Cuando estuvieron a una distancia segura se detuvieron

Jerry:¿A dónde las vamos a llevar?
Santiago:Pues a nuestra casa, allá podemos pensar cómo contactar a sus familiares.

Hizo un gesto de dolor completamente involuntario llevándose una mano a su costado izquierdo, percatandose por primera vez de que estaba herido, todos lo vieron con asombro al darse cuenta de que a pesar de que su ropa estaba manchada, la herida ya no sangraba aunque aún permanecía abierta.

Jhonatan:¿Cómo puede ser posible?
Santiago:Creeme que ni siquiera yo lo sé
Oliver:Valeria,¿Cómo estás de la mordida?
Valeria:No quedó ni una marca, mira.

Y efectivamente, no había ni un rastro.
Todos estaban confundidos,¿Cómo podía una herida sanar tan rápido y desaparecer de esa forma?, Pero hablarían de eso más tarde, ya que Santiago no estaba grave, la prioridad eran las jóvenes que aún estaban demaciado aterradas para pensar tranquilamente, las llevaron al lugar acordado, no había nadie como casi siempre por lo que solo estaban ellos, en cuanto entraron todos los del servicio los miraban asombrados, Valeria se dirigió a una mujer que estaba ahí y se encargaba del aseo de los cuartos.

Valeria:Llévalas a mi habitación, les das ropa mía para que se cambien, la que traen puesta se la das al chofer y él que les compré una muda de su talla
—Si señorita, muchachas, por favor, vengan conmigo—
Valeria:¡Hey!, Recuerda que no se abre nada más que el armario
—Si señorita—

Valeria se dirigió esta vez al ama de llaves

Valeria:Llama al doctor
—Enseguida—

Santiago se sentó haciendo una mueca, un momento después llegó el chofer

—Necesito el dinero para comprar la ropa—
Oliver:Claro, ven conmigo

Se retiraron al despacho, Valeria se sentó al lado de Santiago y dejó caer su cabeza hacia atrás soltando un suspiro, después giró hacia su hermano que permanecía sentado con los ojos cerrados.

Valeria:Vas a necesitar otra camisa, ¿Alguna en especial?

Él solo negó con la cabeza sin abrir los ojos, Valeria se levantó y se dirigió a la habitación de su hermano, después bajaron las jóvenes, con ropa de Valeria y mucho más tranquilas, pero aún así no podrían decirles lo que necesitaban, por otra parte, les dirían algo absolutamente increíble.

Oliver:¿Pueden decirnos su dirección?,las llevaremos hasta sus casas

Todas se quedaron en silencio

Valeria:¿Qué esperan?
—Es que... No lo recordamos—
Oliver:¿No recuerdan dónde viven?,¿Nadie?
—Yo sí, y también sé porqué ellas no
Valeria:Pues habla entonces
—No sé si fue hoy en la madrugada o ayer en la noche, pero nos inyectaron algo, dijeron que era una prueba experimental, aún así esperaban una eficiencia del 100%, no dijeron específicamente lo que era pero sí que era para que olvidaramos todo y fuera más fácil vendernos haciéndonos creer lo que ellos quisieran, hablaban frente a nosotras porque se suponía que lo olvidaríamos, y funcionó en todas, pero al parecer yo fui una exepción, también escuché algo de que iban a cobrarle un favor a alguien
Oliver:Ese “alguien”,¿Seríamos nosotros?
Valeria:Es posible, ¿Sabes cuál era su plan?
—Pues en caso de que se tratara de ustedes, ellos ya sabían que iban a ir, no sé exactamente qué pensaban hacer pero el objetivo era llevárselos a su jefe para que pagaran—
Santiago:¡Pero pagar qué!
—No tengo idea eso es todo lo que sé
Oliver:Bueno, como sea, lo que importa es que no nos encontraron y ustedes ya están libres
Santiago:Podemos pedirle a mamá que ponga un aviso en la televisión para buscar a sus familias
Jhonatan: También podemos poner uno en radio
Oliver:De acuerdo, y a todo esto,¿Dónde está Jerry?
—Cuando nosotras veníamos bajando alguien entró a la habitación, no sé si sea él a quien buscan—

Valeria la observó un momento y corrió a su habitación,cuando entró se encontró a Jerry sentado en la cama revisando un cajón del buró, Valeria entró y cerró la puerta