Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

CAPÍTULO 4-CUARTO ENCUENTRO-

Akira: ¿Quieres algo de comer?

Zac: a ti

Akira: es encerio

Zac: un poco de Akira a el vapor no estaría mal

Akira: —sonrojado y enojado— ¿Sabes que?, Vámonos a mi casa—tomando camino hacia la salida

Zac: eso no estaría mal

Los dos salen de el salón para dirigirse a la casa de Akira, cada paso que ambos chicos daban la mirada de Zac sobre Akira se intensificaba más.

Akira: —sonrojado— ¿Quieres dejar de verme tanto?

Zac: ¿Porque?

Akira: solo no lo hagas

Zac: solo di que te intimido

Akira: ¡¡Deja de decir tantas tonterías!!

Zac: no son tonterías

Sin darse cuenta ambos chicos había llegado a su destino, la casa de Akira

Akira: llegamos—entrando—sientate en el sillón, iré por algo para curar las quemaduras que faktaron

Zac: no es necesario, estoy bien

Akira: estas bien herido, ahora vengo —se va—

Zac: —suspira—gracias—se sienta en el sillón—

En eso llega Akira

Akira: ya llegué

Zac: te extrañe

Akira: ¡¡Zac!!

El peli-rosa empieza a curarlo, colocando un poco de pomada para vendarlo.

Akira: listo

Zac: gracias lindo

Akira: me llamo Akira, espero que con esto las heridas se cubren rápido

Zac: con esa piel suave nomás se sentirla se me quita el dolor

Akira: —sonrojado—¿Quieres algo de comer? Y no me digas cosas raras

Zac: —suelta una risita— lo que tú quieras darme

Akira: ahora vengo

Zac: no te tardes.




En otra parte

Muy cerca de las afueras de Japón se encontraban dos peli-rubios jugando, el peli-rubio mayor que acompañaba a su hermano a visitar el bosque tenía la manía de llevar una paleta en su boca a donde sea que va, este gusto también se le ah pagado a el peli-rubio menor, su hermano.

Estos dos chicos iban caminado tranquilamente hasta que el cielo empezó a nublarse advirtiendo que que una fuerte lluvia se acercaba.

¿?: Rantaro ya va a empezar a llover—hablo el rubio menor—

Rantaro: adelantate a la cabaña Ranjiro, en un momento te alcanzó.

Así lo hizo Ranjiro se fue a la cabaña para refugiarse de la lluvia.

Rantaro de había quedado contemplando el cielo, algo en su interior le decía que esperaria algo pero ¿Qué?

Este se cansó de ver el cielo y al bajar la mirada sintió un golpe en la cabeza.

Rantaro: ¡Auch! —sobandose la cabeza—

Al mirar a el suelo se percato que algo había bajado de el cielo o más bien caído, pues este objeto no tenía ningún rasguño.
Alzó el objeto y se dió cuenta que era un amuleto algo extraño pues no tenía forma de conejo o algún otro animal.

Rantaro: ¿Y ahora que? ¿Me caerá un erizo de el cielo?—dijo burlandose—

Y no estaba muy equivocado puesto que "algo" que cayó de el cielo, hizo que Rantaro cayera de cara, sintiendo un peso más sobre su espalda.

Rantaro: para la otra cierto la boca—dijo reicorporendose—

Al levantarse y ver bien que había caído, se sorprendió y se oculto detrás de un árbol, pues efectivamente, un erizo había caído de el cielo.

Rantaro como lo valiente que es tomo una varita y movió a el animalito.

Rantaro: ahora falta que esa cosa empieza a hablar—dijo posando ambas manos en su cintura burlandose (ya saben cómo solo Rantaro sabe hacerlo :3 XD)—

¿?: ¿A quien le dices cosa humano?

Rantaro se sobresalto al escuchar una voz más

Rantaro: ¿Puedes hablar?—moviendolo con la ramita—

¿?: ¡¡Claro que sí animal!!—enojado

Rantaro: no me digas animal.....animal.....¿Por cierto que eres?

¿?: Soy un erizo ¿No vez? —dijo levantándose

Mostrando a un puercoespin y mitad erizo se veía tan curioso pero sus espinas decían lo contrario. Rantaro iba a tomarlo en brazos pero....

Rantaro:¿Porque estás helado?—dijo casi gritando

¿?: Es algo que no te incumbe

Rantaro: ven te llevaré a casa

El puercoespin como buen erizo que es fue con Rantaro a su casa. Entraron con mucha cautela para que su hermano ni padre, se dieran cuenta de aquel animalito.

Al entrar a el cuarto de el peli-rubio, el animalito se refugió en unas cobijas que se encontraban tiradas.

Rantaro: solo falta que te conviertas en humano—hablo burlandose

¿?: ¿Quieres ver?

Pues como Rantaro dijo, el animalito se convirtió en un chico atractivo peli-rubio oji-azul marino.

Rantaro: para la otra me calló.....¿Cómo te llamas?

¿?: Wakiya, pecado de la envidia

Rantaro: espera...¿Eres el de la leyenda?

Wakiya: ¿Cuál leyenda?

Rantaro: el de los pecados capitales

Wakiya: no se y ni me interesa

Rantaro: ¿Quieres algo de comer?

Wakiya: al fin pregunta, si sí quiero

Rantaro: —se va a la cocina percatandose de un plato con donas en la mesa— vamos a llevarle estas—en eso sale su hermano

Ranjiro: a dónde llevas esas deliciosas donas hermano?

Rantaro: tengo hambre así que las llevaré a mi cuarto

Ranjiro: espera—toma 3 donas dejando 7 —ya puedes irte

Rantaro: gracias—se va a su habitación— ya llegué

Wakiya: que bueno, moría de hambre

Rantaro deja el plato en la cama y Wakiya se acerca para tomarlo y empezar a devorar.

Rantaro: ¿Cómo se que no me estás mintiendo?

Wakiya: aya tu si me crees o no—comiendo otra dona— yo te dije la verdad

Rantaro: ok, dame una

Wakiya: no —apartando el plato—son mías

Rantaro: pero si yo te las di

Wakiya: y ahora me pertenecen

Rantaro: solo una

Wakiya: no

Rantaro: pero tengo hambre

Wakiya: eso a mí no me importa, tú me las diste, ahora son mías

Rantaro: que envidioso

Wakiya: ¿Ahora me crees?

Rantaro: no puede ser....como pudo ser eso posible?

Wakiya: el amuleto que encontraste, me salvaste

Rantaro: —saca el amuleto— encontré un pecado

Wakiya: así es, y es mejor que te vallas acostumbrando

Rantaro: ¿Qué?

Wakiya: olvidalo, tienes una casa muy pequeña

Rantaro: soy pobre pero me gusta mi hogar.

Wakiya: si tú lo dices —comiendo otra dona—

Rantaro: déjame comer una

Wakiya: ¡¡ Qué no!!

Rantaro: pero son muchas donas

Wakiya: mejor, así son todas para mi

Rantaro: ash—quejandose cruzando sus brazos mientras pensaba— *porque alguien tan bello tendría sea pecado *—mueve su cabeza para dejar de pensar en eso—

Wakiya: ¿ahora que te pasa?

Rantaro: nada que te importe

Wakiya: a mí no me hablas así

Rantaro: si sí como digas

Wakiya: no quiero pelear

Rantaro: yo no empecé

Wakiya: ¡Cállate!

Rantaro: ¡Tu no me callas!

Wakiya: ¿¡Qué dijiste!?

Rantaro: ¡Lo que oíste!

Wakiya: ¡Ahora verás!

Y así los dos se empezaron a pelear.

🥇🥇🥇🥇CONTINUARA🥈🥈🥈

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO Y SI FUE ASI APOYENME CON SU VOTO.

Y ABRAZOS PARA TODOS
♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️♠️

Sí me equivoqué en alguna palabra discúlpeme ;-;



Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro