-¿Cómo que nuestro entrenamiento ha comenzado?- preguntó Susy

-Así es- respondió Miguel

Y en un visto y no visto, Miguel le pegó un puñetazo en la barriga a Susy.

-¡Agh!-

-¡Eh, deja a mi hermana!- gritó Mike

Pero Miguel seguía golpeando a Susy.

-¡Te he dicho que la dejes!- gritó Mike

Miguel hacía caso omiso a los gritos de Mike.

-Déja... me- dijo Susy sangrando

-Pues defiéndete- dijo Miguel

Miguel fue a golpear a Susy, pero ésta, involuntariamente, creó una barrera dorada que la defendió.

-Vaya, interesante- se dijo Miguel a sí mismo

-¡DÉJALAAAAAAAAAAAAAAAAA!- gritó Mike con los ojos blancos y brillantes

Así, Mike se lanzó contra Miguel y le empezó a dar puñetazos en la cara.

-A. MI. HERMANA. NO. LA. TOCAS.- dijo Mike golpeando la cara de Miguel

-¿Mi-Mike?- preguntó Susy levantándose

Mike seguía golpeando, golpeando y golpeando la cara de Miguel, hasta que...

-Suficiente- dijo Miguel parando el puño de Mike con su mano

-¿Eh?- preguntó Mike

Miguel se levantó, le pegó un puñetazo a Mike en la barriga y le dio un golpe seco en el cuello.

Mike volvió a su estado normal.

-Ay- dijo Mike tocándose el cuello

-¿Sabéis? Sois muy poderosos- dijo Miguel -Tú, Susy, eres la defensa. Mientras que tú, Mike, eres el ataque-

-¿Osea que somos un buen equipo?- preguntaron los 2 hermanos

-Así es, pero ahora tenemos que poner en práctica el poder de Dios- dijo Miguel -Aunque antes de nada, déjame curarte tus heridas, Susy-

Miguel curó las heridas de Susy.

-¿Necesitas que te cure, Mike?- preguntó Miguel

-No hace falta, ¡¡estoy perfecto!!- respondió el joven

-Bien, ¡¡vamos allá!!- dijo Miguel

Día 2:

Susy creó una barrera más grande

Mike sigue despertando el poder de Dios a través de la ira

Día 3:

Susy creó dos barreras

Mike pudo controlar un poco su transformación

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Día 20:

Susy creó 2 barreras gigantes con pinchos

Mike controló su transformación

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Día 25:

Susy juntó 2 barreras grandes gigantes con pinchos

Mike pudo usar el poder de Dios en su mano

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Día 31:

Susy creó una barrera, la hizo grande, la duplicó, juntó las dos y les creó pinchos

Mike se pudo transformar a voluntad propia

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-Veo que un mes de entrenamiento ha valido la pena- dijo Miguel

-¡¡Y qué lo digas!!- dijo Mike tirándose en el suelo

-¿Y ahora qué, Miguel? ¿Qué tenemos que hacer ahora?- preguntó Susy

-Ahora tenéis que...-

Pero Miguel fue interrumpido por el grito de un ángel.

-¡¡Todos en posición de recibimiento!!-

-¡¡Hay que salir de templo, vamos!!- gritó Miguel

-¿Por?- preguntaron los 2 hermanos saliendo

Y al salir, vieron que habían un montón de ángeles arrodillados. Mike y Susy hicieron lo mismo, aunque no supiesen por qué.

Y fue ahí cuando por la ladera subía un hombre con traje blanco, zapatos negros, corbata gris, gran sonrisa, ojos rojos, pelo largo azul y sombrero de copa negro. Cuando subió toda la ladera, entró en el templo más grande que había para minutos después asomarse por una especie de balcón.

-¡Ángeles, arcángeles, querubines y serafines! ¡Tenemos que preparar nuestras tropas! ¡El Ejército Infernal se acerca cada vez más a la frontera!- gritó el hombre, con una voz ronca y fría como el hielo -¡Satanás y sus demonios son un peligro para el Cielo y para el Mundo Humano! Es por eso que he decidido una cosa-

-¿El qué, señor Padre?- preguntó un querubín

-Gabriel irá a hablar con Satanás-

Fue ahí cuando todos los presentes miraron a un joven rubio, de pelo largo, ojos verdes, con pecas y 2 alas.

-Señor Padre, ¿qué quiere que le diga?- preguntó Gabriel

-Que no se acerquen a las fronteras, de lo contrario, responderemos de la forma más agresiva posible- respondió el hombre trajeado

-Así será, señor Padre-

Y dicho eso, Gabriel se fue volando del Cielo.

-Todo dicho, hijos míos-

Al decir eso, el hombre se volvió a meter en el templo, para no volver a salir.

-¿Por qué lo llaman "señor Padre"?- preguntó Mike

-Eso, ¿y por qué dijo que sois sus hijos?- preguntó Susy

-Porque él es el que os dio el poder, él es el que nos creó a todos, él es...- dijo Miguel

-No jodas- dijeron Mike y Susy

-...Dios- terminó de decir Miguel

-¿¡QUÉÉÉÉÉÉ!?- gritaron Susy y Mike

-Así es-

-¿Pero Dios no es un señor mayor?- preguntó Mike

-Eso, en todas las imágenes que he visto de él se le representa como un viejito- añadió Susy

-Pues que extraño, el señor Padre tiene muchos años, pero desde el origen de los tiempos ha tenido esa apariencia- respondió Miguel -De todos modos, vamos, tenemos que decirle que estáis preparados-

-¿Preparados? ¿Él sabía que íbamos a venir?- preguntaron los 2 hermanos

-Por supuesto, el señor Padre lo sabe todo- respondió Miguel

Y así, Miguel condujo a Mike y a Susy hacia el templo de Dios.

En el Infierno.

En el castillo de Satanás.

Gabriel había llegado y entrado.

-¿Y tú quién eres?- preguntó Lincoln

-Gabriel, el mensajero de Dios- respondió éste -Y deseo hablar con Satán, si no es mucha molestia-

Lincoln inclinó la cabeza.

-Venga por aquí-

Y así, Lincoln llevó a Gabriel hasta Satanás.

-Su majestad, el mensajero de Dios tiene algo que decirle- informó Lincoln

-Perfecto, pues vete- dijo Satanás

Lincoln se fue.

-¿Qué quieres, Gabriel?- preguntó Satanás enfadado

-Dios dice que dejéis de acercaros a las fronteras- respondió Gabriel

-No nos hemos acercado a las fronteras, cara polla- dijo Satanás

-Si Dios lo dice, por algo será- dijo Gabriel -Y también dice que si seguís así, el Cielo responderá de la manera más agresiva posible-

-¿Se supone que es una amenaza?- preguntó Satanás con una mirada intimidante

Pero Gabriel no se echó atrás ante la mirada de Satanás y dijo:

-Es una advertencia-

Y dicho eso, Gabriel se fue del Infierno.

-Así que el papi Dios quiere jugar, pues perfecto- dijo Satanás -Juguemos a las malas-

Satanás pulsó un botón que ponía: "Cerbero".

-Jujujuju Jajajaja JAJAJAJAJAJAJAJA- rió Satanás

CONTINUARÁ...