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twenty.

Las chicas estaban preocupadas por la mayor, y su preocupación se intensificó en el momento en que llamaron a su celular y Yeji no contestaba.

Fueron a la universidad, pero en vez de entrar a su primer periodo de clases, se encargaron de buscarla por todo el campus, iniciando por su facultad. Tal vez si había regresado, pero está vez fue más tarde y no se dieron cuenta, y también pudo irse más temprano. Tal vez.

Jisu, vió a Yeji cerca del estacionamiento, estaba junto a otra chica. Corrió hacia ambas y pudo notar que la ropa que Hwang llevaba puesta no era la misma que la del día anterior.

ㅡ¡Yeji! ㅡexclama una vez estuvo lo suficientemente cerca.

Yeji la mira con sorpresa, actuando algo nerviosa después.

ㅡ¿Dónde estabas? ¿Por qué no llegaste a casa el día de ayer?

ㅡMe quedé en casa de Jimin, mi amiga de la infancia. ㅡYeji señala a la mencionada, quien saludó con una leve reverencia a Jisu.

Claro, las chicas habían escuchado de Jimin, pero nunca la habían visto, por lo que nunca se les ocurrió que fuese con ella.

Jisu les aviso a las demás que había encontrado a Yeji y les dijo dónde estaban.

ㅡNo deberías escapar de repente sin decirles a tus compañeras a dónde irás. ㅡJimin la regaña.

Yeji simplemente se encoge de hombros, no es como que hubiese terminado en casa de Jimin a propósito, simplemente llegó ahí inconscientemente.

Jisu y Jimin intercambiaron números para avisarse cuando algo así volviera a suceder. Ambas se preocupaban mucho por Yeji, pues esta siempre parecía desconectada de lo que sucedía a su alrededor.

Las demás llegaron unos minutos después, revisando a Yeji para asegurarse que estaba bien. Cuando Yuna la tomó de los brazos, Chaeryeong notó la mueca de dolor que hizo la mayor, pero no dijo nada.

Pero era extraño. Yeji siempre usaba blusas de tirantes o con mangas cortas, y ahora era todo lo contrario, sus brazos siempre estaban cubiertos con blusas de manga larga o suéteres.

ㅡVayamos a clase. ㅡhabla Jisu. ㅡY no vuelvas a escapar así, Yeji, avísanos si volverás o no. el

ㅡClaro. ㅡhubo una pausa extraña antes de que Yeji volviese a hablar. Las miro a todas y después siguió. ㅡLo siento.

Sus amigas le dijeron que no se preocupara, que lo dejarían pasar está vez siempre y cuando no se repitiera.

Esas palabras llegaban como puñaladas directo al corazón de Yeji, porque sabía que lo que había hecho se iba a repetir en el futuro.

Al finalizar las clases, Yeji y Ryujin salieron rumbo al lugar de la señora Park. Su día ahí fue normal. Eunchae y Yujin seguían igual de lindas que siempre, y Haneul también era una buena jefa.

Cuando su turno terminó, Ryujin salió de inmediato, pues había invitado a cenar a Chaeryeong. A Yeji le causaba ternura que después de haberlas atrapado, comenzaron a mostrar su relación más abiertamente, por lo menos frente a ella.

Luego de tomar sus cosas de su casillero, Yeji salió de la sala de empleados y se topó con Sunwoo acompañado de un hombre.

ㅡAh, buenas tardes. ㅡdice Yeji, haciendo una reverencia.

ㅡYeji, el es mi esposo, Jongwoo. ㅡHaneul los presentó.

ㅡUn placer conocerla, señorita. ㅡel hombre extiende su mano para estrecharla con la de Yeji, quien devuelve el gesto de inmediato.

ㅡBueno, me voy ya. Un gusto. ㅡdice Yeji.

Haneul parpadea confundía ante ese comentario algo indiferente de Yeji, pero no dice nada, pues debe ser por el cansancio.

Yeji sale del local al igual que la familia y Yujin. Al parecer Park decidió cerrar temprano. La familia sube a su auto junto con Yunjin, pues siempre la llevaban a su casa, y finalmente se marchan.

Yeji mueve la mano en forma de despedida, hasta que el auto está lejos. Comienza a caminar en dirección a la tienda de conveniencia del otro día, en busca de su leche favorita.

Al igual que la última vez, Yeji entró, tomó su leche, la pagó y salió.

Jeongin, por su parte, se golpeaba internamente por no hablarle un poco.

Sin embargo, notó que Yeji se quedó parada fuera de la tienda, por lo que se alertó y salió a ver si estaba todo bien.

ㅡ¿Se encuentra bien, señorita? ㅡpregunta una vez a su lado.

Yeji lo mira unos segundos; Jeongin comenzaba a asustarse.

ㅡSí, estoy bien. ㅡdice finalmente.

Jeongin asiente y decide regresar a la tienda, mas las palabras de Hwang lo detienen.

ㅡDisculpa, ¿sabes si hay alguna farmacia por aquí cerca?

ㅡUh... Hay una a dos cuadras. ㅡcontesta.

ㅡGracias.

La sonrisa que le dió la chica de nombre desconocido a Jeongin hizo que todos los vellos de su cuerpo se erizaran. Era una sonrisa tan linda que ocasionó que el mundo fuese en camara lenta durante unos segundos. Jeongin estaba seguro que era debido a que era una sonrisa cargada de sentimiento; llamenlo exagerado o loco, pero sintió que contenía tristeza, cómo si en el fondo ella hubiese querido que Jeongin le mintiera y le dijera que no existía una farmacia cerca.

Y si, la intuición de Jeongin era cierta, Yeji no quería que la impulsarán a comparar un utensilio nuevo.

*Una vez más, el nombre de Jongwoo me lo inventé.

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