1200 palabras
Boy in plastic bubble!AU, smut suave

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A sus diecisiete años, KyungSoo no había vivido la vida más normal que un adolescente podía llevar. Y es que sus padres siempre lo habían sobre protegido de cada cosa que a su pequeño enfermizo le pudiera suceder.

No bastaba con que su madre lo tuviese casi en una vitrina, sino que había llegado a hacer absolutamente todo lo que estaba en sus manos para que su hijo no contrajera alguna enfermedad, como ponerlo en una burbuja gigante... literalmente.

Do KyungSoo no tenía muchos amigos, la mayoría de las personas y los niños de su edad se terminaban burlando de su condición, había estudiado en casa parte de su vida y cuando entró a la secundaria fue el hazmerreír de la población estudiantil, cuando su madre lo encerraba en su burbuja de plástico para protegerlo de los gérmenes que, según ella y los doctores, podrían terminar con su vida.

KyungSoo conoció a JongIn cuando tenía doce años, sintió un remolino en su interior y las mejillas se le colorearon de un rosado intenso cuando cruzaron miradas por primera vez. Y no supo qué fue lo que más le atrajo de él, si su piel bronceada o su sonrisa brillante, su altanería o la manera en que lo veía, riéndose pero no precisamente de él.

JongIn se convirtió en un gran amigo, le había hablado sin reparos del plástico que lo rodeaba y KyungSoo se sentía especialmente agradecido de ello, mucho más cuando a su madre le parecía bien invitarlo a comer a casa o que pasara un rato con él en el jardín.

JongIn se convirtió en un muchacho atractivo y KyungSoo pensó que lo dejaría de lado, porque seguramente encontraría novia o novio y él seguiría atascado en su burbuja sin gérmenes; sin embargo, hacía un verano que JongIn una noche antes de despedirse le había preguntado si sabía besar y KyungSoo le había respondido que no, por supuesto.

ㅡ Si alguien tiene qué enseñarte, quiero que aprendas conmigo. ㅡ JongIn le sonrió aquella noche con sus mejillas arreboladas y el corazón de KyungSoo se alborotó en su pecho. ㅡ Aprendamos juntos, hyung.

¿Cómo podía KyungSoo negarse cuando él quería aprender con él y solamente con él? No podía negarse.

Desde entonces, JongIn y KyungSoo planeaban un buen día librarse de esa estúpida burbuja y huir lejos, donde los dos descubrieran que probablemente los gérmenes eran idea de su madre y que a KyungSoo no le pasaría nada si tocaba a alguien más.

JongIn se lo demostró a KyungSoo metiéndose a su burbuja para besarlo, para abrazarlo apropiadamente mientras rodaban por el patio trasero de la casa del menor, lejos de la madre de KyungSoo, lejos de alguien que pudiera detenerlos.

Y aunque los padres de JongIn trabajaban la mayor parte del día y su casa era la mejor opción, JongIn algunas noches como aquella, se escabullía por la ventana de la habitación del mayor, para verlo, para estar con él y recordarle a besos sus planes, los planes que con tanto esmero habían creado.

ㅡ Un año...ㅡ JongIn murmuró en voz baja, mientras se recostaba sobre la cama y suspiraba, observando los movimientos del mayor por la habitación. 

KyungSoo asintió con nerviosismo, como cada que JongIn estaba en su cuarto. Amaba que se atreviera a violar las normas de su casa para verlo, pero le ponía de nervios ser atrapado por sus padres, porque seguramente los separarían para siempre.

JongIn se percató de lo que pasaba y se irguió hasta quedar sentado, dando unos golpecitos a la cama para que el otro se terminara de acercar.

ㅡ Ven aquí. Ven conmigo...

ㅡ JongIn... ㅡ KyungSoo pronunció su nombre en un susurro, con el corazón dando tumbos en su interior, acercándose a él.

El moreno se mordió el labio inferior y después se dedicó a abrir el cierre de la burbuja de plástico en que el otro estaba atrapado.  Porque en noches como aquella, KyungSoo necesitaba ayuda para salir de ella, para tener el valor de hacer lo que estaba a punto de. Para acercarse a él, tragando saliva por los nervios y acaparar sus labios en un movimiento suave y gentil.

JongIn lo enroscó con sus manos por el cuello y KyungSoo terminó de salir de su burbuja, dejándose llevar por el beso, intensificándolo mientras mordía el labio inferior de JongIn, que se quejaba y se dejaba caer sobre su espalda, sobre la cama.

En noches como aquella, donde KyungSoo se desnudaba frente al menor y se acariciaba un poco antes de tomarlo entre sus manos, no necesitaba más que escuchar la respiración ajetreada del moreno para imaginarse una vida juntos.

En un lugar lejos de aquel pueblo, en una ciudad, los dos montados en una cama, haciendo el amor entrada la madrugada. KyungSoo quería irse, quería ir a la universidad con JongIn, quería besarlo cada que se le diera la gana, quería apretujarlo contra la cama, la mesa o el sillón de la sala.

KyungSoo amaba cuando JongIn mordía su cuello cada que lo penetraba, se sentía tan bien  rodar por la cama y escucharlo quejarse mientras se acomodaba, seguir el ritmo frenético de los latidos de su corazón en su pelvis, impulsandose hacia arriba para encontrar su cuerpo y ayudarlo en su balanceo, en el constante meneo de sus caderas que lo volvían loco.

JongIn lo enloquecía y KyungSoo no temía a los gérmenes cuando JongIn lo llenaba de semen en el estómago, después de haberlo cabalgado como el gran jinete que era, según sus propias palabras.  JongIn se quejaba sobre su pecho, mordiéndolo para amortiguar sus quejidos mientras KyungSoo lo penetraba unas cuantas veces más y después se dejaba caer sobre su cuerpo, desvaneciéndose una vez que el otro se hubiese corrido dentro suyo.

KyungSoo lo apretujaba contra sus brazos y lo besaba largo y tendido, ambos se veían a los ojos en la penumbra de la habitación y con besos se decían que faltaba poco. Que terminarían sus estudios en ese pueblo y migrarían a la ciudad, que iban a deshacerse se esa estúpida burbuja y JongIn le mostraría la vida a KyungSoo por completo.

ㅡ Quiero que aprendamos a vivir, juntos. ㅡ JongIn murmuró y KyungSoo asintió, con el pecho subiendo y bajando rítmicamente después del sexo.

ㅡ Estoy enamorado de ti, Kim JongIn.

ㅡ Y yo estoy enamorado de ti, Do KyungSoo  ㅡ el moreno se echó a reír, silenciado por los labios de corazón del mayor, que siempre era cuidadoso aunque sus padres no estuvieran en casa. ㅡ Un año...

ㅡ Un año... ㅡ KyungSoo repitió y se relamió el labio inferior, para después besar a su novio, amigo para los demás, novio para él en la oscuridad de su habitación.

El chico que le había sonreído en lugar de burlarse; quien le había ofrecido su amistad, sus labios para aprender a besar y su cuerpo para aprender a lidiar con todas las hormonas que tenía encima.

KyungSoo no se preocupaba más por sus erecciones cuando veía a JongIn bailar, porque sabía que él también lo ponía... con solo sonreír. 

Iban a lograrlo; esperaría un año más para terminar de salir de su cascarón, mientras tanto, ambos se tendrían en su habitación.

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Bienvenidos a la cosa más loca y disparatada que he escrito xd

Vi el prompt en twitter y quise escribirlo porque yolo(?)  :P hay una película y todo pero no quise más dramas, mi sookai en una noche ricolina era mejor.

Gracias por leer.

Prompt: