Felix se encontraba sólo en el apartamento ése día.

Chan había salido a una cita. Sí, a una maldita cita con una linda chica de la cuál Felix no sabía nada, pero era capaz de investigarle hasta saber cómo separarla de su Channie. Claro, sólo eran ideas locas de su mente celosa y posesiva, aunque claramente el mayor no era de él, pero se hacía pensar que sí.

Porque lo quería, lo deseaba.

Y los celos... Los malditos celos no le dejaban pensar bien, tanto así que terminó masturbándose pensando en que era Bang quien lo hacía, para que después le diera una buena follada para que se le olvidarán sus estúpidos celos.

— M-maldido Channie... ¡Amgh! — terminó por correrse en su mano, gimiendo agudo, pero claro, éso no era suficiente. Quería más.

Se sentó en la orilla de la cama para así alcanzar el mueble que estaba junto a está, y así abrir uno de los cajones y sacar un tipo de vibrador que tenía ahí. Era de color morado, no era de gran tamaño, pues su función era otra. Midiendo apróximadamente unos 10 centímetros, y tenía un tipo de hilito para cuando lo quisiera sacar. De paso, saco un tubo de lubricante y cerró el cajón, dejó lo que había tomado en la cama y se acomodó en esta para así abrir las piernas y tener acceso a su propia entrada, la cuál ya estaba muy dilatada, pero aún así necesitaba preparación, claro.

Fue recorriendo su cuerpo con unas suaves caricias, pasando por su pecho, toqueteando sus propios pezones, y de ahí bajo por todo su torso, hasta llegar a su miembro ya medio erecto, dando un suave masaje para así bajar hasta su entrada, tanteandola, y metió el primer dedo. No necesitaba el lubricante para éso, pues ha estado tan caliente que hasta ya estaba un poco mojado.

Movió el dedo en su interior, gimiendo por la sensación, y metió otro, haciéndolos como tijeras para así meter otro, y comenzar a simular embestidas. La habitación se había llenado de gemidos que él mismo se ocasionaba, y se sentía bien, pero claro, si lo hacía Chan se sentiría mejor.

— Estúpido Bang — maldijo entre jadeos —, me tiene tan caliente...

Sacó sus dedos y tomó el vibrador junto al lubricante, para así lubricar un poco el juguete y su entrada. Abrió más sus piernas y fué introduciendo el vibrador en su interior, arqueando la espalda y gimiendo ante la sensación. Lo movió lentamente, en círculos y después lo embistió para que quedará profundo. Tomó el control y lo encendió a una velocidad agradable, pero después fué subiendo la intensidad, quería más, y el juguete se movía en su interior de una manera exquisita. Gemia sin pena, pues estaba completamente solo en el lugar. Cómo pudo, subió la intensidad, intentando así maltratar su próstata.

Pero se vió interrumpido.

Se quedó completamente helado, quieto, sin poder procesar lo que estaba pasando. Ni siquiera pudo apagar el vibrador de lo helado que estaba. Escuchó la voz de Chan, y también la de una chica, la cuál se estaba riendo de algo que Bang le había dicho. Oh no, eso no podía estar pasando.

Escuchó la puerta de su habitación ser tocada, seguido de un: — Felix, ya llegué. Traje a Jisoo, te la quiero presentar.

Al no recibir respuesta, Chan tomó la chapa de la puerta, estaba un poco preocupado de que Felix no respondiera. Y este, al ver eso, rápidamente se subió los pantalones y escondió el lubricante y el control del vibrador bajo una almohada, haciendo que el control se aplastara y por desgracia se apretara un botón para ya subir la intensidad a su último nivel. El juguete aún estaba dentro de Felix, en serio la iba a pasar mal.

Se arregló lo más que pudo, disimulando que en ese momento tenía algo metido en el culo, que se movía muy bien realmente, quería gemir, pero claro que no podría.

Chan abrió la puerta, encontrándose con Felix sentado en la orilla de la cama.

Pero había algo raro en él, y éso le preocupo aún más.

Se viene lo wueno 😝