LONDON BOY 💐🧸

El sol golpeó tu espalda cuando saliste del auto negro y te sumergiste en el calor de Miami. Los rayos del sol parecían disipar tu nerviosismo mientras te quitabas las gafas de sol para ver correctamente lo que te rodeaba.

Tu agente te había dicho que los primeros días en el set siempre eran un poco estresantes, pero esta era tu primera película real, y el hecho de que la mayoría del elenco ya había llegado hasta los Oscar te despertaba aún más los nervios.

Cuando finalmente llegaste al set, te recibieron con los apretones de manos y las presentaciones habituales, hasta que recibiste un abrazo de oso de Millie Bobby Brown. Inmediatamente te tomó bajo su protección, mostrándote los entresijos del set, dónde te quedarías, horarios de filmación, etc.

Al tercer día en el hermoso paisaje, tú y Millie se habían convertido en uña y mugre, te encantaba pasar tiempo con ella, el elenco y los de producción sabían cuando una de ustedes estaba cerca, y la otra también. Hasta que llegó.

Millie te había hablado de Louis y de que no estaría en el set hasta unos días después de tu propia llegada, así que no te molestaste en buscarlo. Estaría aquí muy pronto, y querías conocerlo, no mediarlo.

Cuando llegó, saliendo de ese coche a la hora del almuerzo, luciendo como un ángel descendiendo del cielo, sabías que estabas en lo más profundo.

Cuando se presentó, su voz goteaba como miel.  Cuando sonrió, el sol brillaba más.  Cuando te miró, tu estómago se llenó de mariposas.

Durante el rodaje, nunca creíste que le gustaría de vuelta. Siempre que lo veías filmar, la química entre él y Millie pateaba tu corazón. No importa cuántas veces Millie te dijo que estaba actuando, ambos lo estaban, y te aseguró que también le gustabas, tú la ignoraste con una risa y poniendo los ojos en blanco.

Le agradaste a Louis. Estaba perdidamente enamorado, en todo caso.  Desde el momento en que llegó al set y te vio a la hora del almuerzo, comiéndote un sándwich y riendo de algo que Millie te había susurrado, cayó directamente en el mismo pozo que tú. Ambos estaban enamorados el uno del otro y los dos eran completamente ajenos a que aquel sentimiento era correspondido.

No fue hasta la noche de la fiesta de despedida, cuando Millie te envió al balcón para "ver las estrellas" que te encontraste cara a cara tanto con Louis como con tus sentimientos.

Millie cerró la puerta descaradamente con una sonrisa, dejándolos a los dos atrapados en el pequeño balcón en un incómodo silencio.

—¿Disfrutaste filmar en Miami?—Intentaste conversar apoyándote en la barandilla de metal que rodea la plataforma—Nunca he filmado en ningún lugar extranjero, pero me gusta la idea de ...

—Te amo.

Cortas tus divagaciones en estado de shock, levantando la mirada para encontrar la de Louis. Una pequeña sonrisa nerviosa se asomó a su rostro.
Esa cara...

Nunca habías sido bueno con las palabras, así que actuaste por instinto. Lo besaste.

Sus manos agarraron tu cintura como si su vida dependiera de ello, mientras que las tuyas se enredaron en su cabello. Sus labios se movieron en sincronía, intentando acercarse más que la respiración anterior. Estaban necesitados, desesperados. Se anhelaban el uno al otro, para no volver a separarse nunca más.

No se sentía como fuegos artificiales o mariposas. Hacía calor, como un fuego en la boca del estómago, inquieto pero reconfortante.

Sus frentes descansaban sobre las de el otro, sus narices se rozaban de vez en cuando. 

—Yo también te amo.