Pequeño Cato dio aplausos rápidos de emoción al ver a Gary arrastrar a su padre a la "pista de baile" (sólo era el pasillo) entre risas y jaloneos. Se hubiera acercado a ellos para unirse de no haber sido porque notó como el rubio tomaba la cintura de su padre pegandolo a su cuerpo, haciendo una mueca instantánea ante la cercanía íntima y desvergonzada de sus rostros. Totalmente incómodo se volteó dejándolos en paz por esa vez.

Si bien era cierto que le encantaba la idea de que sus padres estén juntos, sin contar que era obvio que estaban en camino a ser pareja, prefería no verlo de forma explícita, era muy vergonzoso verlos en esas situaciones, sobre todo cuando notaba que su padre se hacia el difícil por puro capricho. No tenia ganas de ver los juegos coquetos que se hacian todo el tiempo.

Convenientemente Fox y Ash lo llamaron por lo que no estuvo solo, agradecía más que nunca tener amigos de su edad sólo por ese momento. Eran algo extraños si le preguntaban, pero era eso o nada.

La discografía completa se estaba emitiendo por lo que Gary no se preocupó por el tiempo que tendría junto a su minino. Eva pensó que luego de tanta emoción un poco de tranquilidad no vendría mal, por lo que en ese momento se reproducía Meet me Halfway mientras las luces perdían potencia y oscurecia el pasillo, posteriormente los reflectores pasaron a moverse con lentitud y todo se volvió armoniosamente pacífico. Un salon de baile con todas sus letras.

"Perfecto" pensó Gary mientras un plan improvisado para hacer la noche inolvidable se construía en su mente. Puso manos a la acción y los hizo dar una vuelta rapida haciendo a Avocato maullar del susto de la sacudida, fruncio el ceño cuando miró a su compañero.

— No hagas eso. — Recriminó avergonzado y apretando con ligereza el hombro ajeno como una advertencia sin verdadero peso.

— ¿Qué? — Sonrió burlón. — Solo fue un paso de baile.

— Claro, paso de baile, se perfectamente que es una excusa para pegarte a mi. — Acusó.

— Como si fuera el único que lo hace.— Contratacó. Al ver la cara de derrota de su acompañante y que ya no diría más, siguió. — Además, no parece que te moleste.— Subió y bajo sus cejas un par de veces antes de volver a alejarse un paso y hacer que Avocato diera una vuelta en su lugar, esta vez más relajada, y luego volvieron a la posición inicial. — ¿O me equivoco?

— Cállate.

Avocato gritaba por dentro se sólo pensar en lo melosos que estaban siendo y como probablemente todos los estaban viendo. No es que le molestara pasar tiempo con Gary, pero le guste o no la vergüenza le ganaba la mayoría de veces y esa situación lo ponia inquieto. Sabia que actuaba como una adolescente enamorada en un baile de graduación y era humillante.

— Hey, si te sientes mas cómodo... — El humano habló al ver lo callado que se encontraba su compañero. — Cambiemos de lugar. — Propuso tratando de volver el ambiente mas ligero. Tomó las peludas manos ajenas y las posiciono en su cintura mientras que él llevaba las suyas a los hombros contrarios. — ¿Ya?

— Supongo... — Respondió afirmando su agarre. En realidad no estaba incómodo antes, pero prefirió ahorrarselo, probablemente seguiría con comentarios innecesarios que definitivamente no queria escuchar. No en ese momento.

— Ja, te gusta tener el control. — Sonrió juguetón. Avocato iba a responder pero se le adelantó. — Pero no es el momento de eso, estamos en publico... A no ser que te inclines a esos lados.

— ¡Gary!

— Bailar es facil, sobre todo este tipo de canciones, probablemente te des cuenta. — Hablo rápido y juguetón, bajo la mirada sus pies sintiendo la mirada molesta fija en él la cual ignoró. — Das un paso en frente y otro a tras, al ritmo de la musica, claro. Ten en cuenta el seguir a la otra persona tambien para no pisarle. — Se encogió de hombros. — Pero da igual en realidad, puedes moverte como quieras si lo deseas.

Avocato prefirio no gastarse, estaba acostumbrado a bromas así. Lo admitía, a veces las seguía y sin darse cuenta se mantenían una hora de esa forma, aun que pasara pocas veces.

Según él.

Finalmente el felino comenzaba a bailar, siguiendo las palabras de su amigo al pie de la letra. Si era sincero el ambiente si era agradable, con las pocas luces y la vista al espacio a su lado siendo esa la mayor fuente de luz, sosteniendo a Gary y sintiendo su cintura en sus manos. El humano se veía calmado, disfrutando genuinamente la noche, como si compartir aquel momento con él gato fuera todo lo que necesitara en ese momento para estar bien. Lo felicitó por sus pasos, hablando con orgullo ya que aparentemente aprendía rápido.

Quizás el estar demasiado concentrado en eso es lo que le impidió darse cuenta de que era observado con una sonrisa mal disimulada de tonto ventrexiano enamorado, de como estaban apreciando cada una de sus facciones, incluyendo las que se dejan pasar a simple vista.

Pero él mismo lo interrumpio sin percatarse. Todo por otra tontería adorable, pensó el más alto.

— ¡Ah, por fin! — Gary soltó al darse cuenta que la canción estaba llegando a su estribillo — Preparate Avocato, esto será muy romántico. — Sus ojos lo vieron decidido y sus manos tomaron su rostro, se tomó unos segundos para acariciar las peludas mejillas de Avocato hasta que recibio un manotazo. — Este es EL momento, ¡Es el climax! ahora nos miraremos a los ojos y sólo seremos nosotros. El tiempo dejara de correr y nos conectaremos en todo sentido, sentiremos los latidos del otro y nuestras respiraciones. Nos besaremos lentamente y luego—

— Viejo, ves muchas películas.

— Y tu muy pocas. — Se quejó decepcionado.