No hay nada mejor que un sueño para crear el futuro.

¿Alguna vez sentiste un deja vu?  Esa sensación de que algo que viviste en el pasado se repite una vez mas en el ahora.

Extraña para algunos, divertida para otros y aterradora en algunos casos.

¿Qué pasa cuando se vive un momento de gran estrés varias veces?

— ¿Hermano? —

Las voz de Nari fue lo único que se escuchó en medio del bosque, como si la propia tierra se hubiera callado ante tal acto. 

Las manos temblorosas de la pequeña descansaban en su estomago en donde el báculo de su hermano Bellroc la atravesaba de un extremo a otro.

La mirada del semidios fue seria y sin alguna emoción pero al darse cuenta de lo que había provocado rápidamente retiró se báculo del cuerpo de su hermana dejando una gran herida que era incapaz de sanar.

La falta de emoción de Bellroc no cambió, contemplando sus manos en un intento de procesar lo que ocurrió, algo que hubiera seguido así de no ser por el ruido que producía Nari al intentar poner de pie en un intento de alejarse.

Al regresar a su realidad y darse cuenta de lo que estaba haciendo su hermana Bellroc acercó a ella para ayudarla, aun bastante confundido por lo que ocurrió.

— Tranquila, ya estoy aquí —

 Su voz con un obvio miedo se escuchó, sin embargo dispuesto a intentar ayudar a su hermana colocó su mano en el hombro de Nari quien por reflejo dio un golpe en la cara de su hermano que cayo al suelo debido a lo inesperado de esa acción.

— Aléjate — 

Repitió una y otra vez Nari cuyos ojos solo desprendían miedo.

— Rayos —

Los pensamientos de Bellroc estaban llenos de enojo por la reacción de su hermana pero logró ignorar aquello acercándose tan rápido como pudo a su hermana, quien hizo todo lo posible para no verlo a los ojos.

— Nari, quiero ayudarte —

 La voz de Bellroc estaba llena de un deseo genuino por intentar ayudar a su hermana que seguía temblando ya sea por la gravedad de su herida o por el miedo que sentía.

— ¿Por qué lo hiciste? —

 Pregunto Nari mientras el brillo que aún existía en sus ojos empezó a desaparecer pero esta vez no dudo en mirar a su hermano.

— Porque soy un tonto... un tonto que no pudo ayudarte —

 La respuesta del semidios estaba llena de una tristeza rara de ver en el, abrazando a su hermana tan fuerte como pudo antes de que su hermana se volviera cenias.

— Lo siento, por favor regresa — 

Repitió una y otra vez Bellroc, su voz llena de calma pero con una tristeza incapaz de esconderse.

Recuerdo o ilusión eso no importó, aquella escena llevaba tanto tiempo presente en la mente del semidios que se sentía como una pesadilla que le arrojaba sus errores en cara. 

Abriendo sus ojos el mago fue traído una vez mas a la realidad, sintiendo aun aquella sensación de culpa e impotencia de lo que habia experimentado. 

Sin embargo al regresar a su realidad el mago se levantó lentamente de la silla donde se encontraba sentado, caminando lentamente rumbos a otro rincon de su hogar.

El ruido de sus pasos fue lo único que se escuchó solo para ser seguido por el ruido del agua cayendo en el suelo.

Un lento suspiro salió de su bica mientras abrazó sus rodillas y dejaba que el agua de la ducha callera sobre el, sin importarle la temperatura.

 No hubo palabras o alguna acción por parte del mago, aunque si alguien hubiera estado a su lado hubiera logrado ver algunas lagrimas que se perdían con el agua.

— ¿Un hechicero?... ¿Cómo aquellos que aparecen en libros? —

 La pregunta de Jim mostró un interés genuino a quien lo salvó, aunque su voz seguía con ese asombro de lo que habia pasado anteriormente.

— Si... algo así —

Skrael sacudió su ropa mientras su báculo desapareció de sus manos cuya voz a diferencia del cazatroles tenia calma y sin algún signo de fatiga o shock despues de una situación de alto riesgo. 

— Imposible, los hechiceros desaparecieron hacia ya varios siglos —

 La voz del troll azul llamó la atención del pequeño mago que permaneció en silencio mientras observó como aquellos seis ojos lo miraban como un historiador a una antigüedad. 

— ¿Dónde escuchaste eso? — 

Fue la pregunta de Skrael a Blinky que también miraba con cierta curiosidad al troll ya que no habia visto a un troll tan cerca desde tanto tiempo, el cual le produjo un extraño deja vu al verlo.  

—Fabulujoso, primero troles y ahora un mago —

La voz de Toby estaba llena de una emoción que apenas podía contenerse, como un fan intentado encontrar la palabras para pedirle una foto a su ídolo .

— ¿Y tu eres? —

 Preguntó Skrael mirando por un instante a Toby antes de regresar a mirar a ambos troles, los cuales tenían toda su atención en ese momento.

— Puedes llamarme Toby, mucho gusto Krel —

Las palabras que salieron de Toby apenas podían ordenarse, algo que provocó una pequeña sonrisa en el mago aunque nunca la mostró.

— Es... Skrael, con S y A —

Corrigió Skrael a Toby respecto a su nombre.

— Veo que le atraen las relaciones sociales joven mago, pero en esta ocasión deberá abstenerse por el momento — 

La voz de Blinky llego a los oídos del pequeño mago que nunca tuvo tiempo de responder ya que antes de que tomara la palabra ya estaba casi siendo llevado junto a los otros dos, algo que lo hizo sentir ciertamente incomodo, no por el casi secuestro en contra de su voluntad al llegarlo a un lugar desconocido.

Sino porque no sabia como mirar al campeón de Merlín, ¿Debería esta enojado? ¿Debería hablar? 

Era su enemigo ya que Merlín lo era pero ese mago ya no estaba.

No mataría a alguien que guardaba conexión con alguien que ni siquiera conocía, el no era como ese hipócrita de Arturo. 

Sin perder tiempo empezó a seguir a sus nuevos compañeros sin mostrar resistencia aunque en ese trayecto Toby no dudo en preguntarle a Skrael si podía mostrarle algún hechizo, esto último ya se lo habría esperado el mago por lo que todo con tal de quede se callara le mostró algunos hechizos básicos.

No entendía como los humanos eran tan inteligentes pero a la vez tan estúpidos.

— No se separen, ningún humano o mago a pisado el suelo de Mercadotrol —

Las palabras en forma de advertencia por parte de Blinky cayeron en oídos sordos ya que las tres bolsas de carne se habían separado, cada uno abarcando un camino diferente. 

— Es un poco diferente de lo que habia imaginado —

Pensó Skrael mientras sus ojos miraron cada lugar con algo de nostalgia, sintiendo como por un momento regresaba al pasado, donde todo estaba bien, donde eran tres y no dos, donde la vida aun no le habia restregado todos sus errores a la cara. 

 — Que hermoso —

Pensó Skrael cuya mirada se posó en la gran piedracorazón que brilla en una gran intensidad naranja, invitando al mago a desatar todo su potencial.

Se sintió en paz en un momento, sintiendo que todos sus problemas desaparecían a medida que sentía la energía de aquella piedracorazón.

Todo pareció estar bien, hasta que las voces de varios troles trajeron al mago a su realidad.

— Odiosos mortales —

Dijo esta vez Skrael con cierta irritación al haber sido perturbado en un momento tan importante.

Nunca fue alguien que se involucraba en alguna discusión o conflicto a menos que fue algo personal o obtuviera algún beneficio.

Incluso en el hoy nunca cambiaría algunas cosas de su ayer.

Pero ver a los troles confundidos y algunos molestos debido al nuevo campeón de Merlín era motivo suficiente para que el mago mirara el escenario como una obra de teatro.

Aunque había logrado escuchar como también preguntaban acerca de el y la causa del porqué estaba en su hogar.

Aunque aquello no le importo menos.

— Solo lo estás empeorando —

Los ojos de Skrael no evitaron girar al ver a Blinky intentar calmar a la multitud de troles que estaban juntándose cada vez mas. 

Realmente deseaba ver como se desarrollaba aquella escena así como el destino del cazatroles pero aquella piedracorazon cada vez ganaba mas su atención, sintiendo una tentación de acercarse a ella sin importar las circunstancias o consecuencias.

¿Era malo lo que quería? Tal vez, ¿Se metería en problemas? Sin duda alguna. ¿Le importaba eso?.

Por supuesto que no.

Después de todo ya estaba delante de aquella piedra que incluso brillaba con mas fuerza entre mas se acercaba.

Siendo guiado por una curiosidad casi inocente, lentamente acercó su mano lista para hacer contacto con aquella piedra, en ese momento no importó nada mas para el mago, simplemente sintió la magia que desprendía y que no dudaba en responder al mago. 

Nada pudo arruinar ese momento excepto por una descarga que rápidamente hizo apartar su mano de donde se encontraba. 

La piedracorazon no dudaba en extenderle la mano pero no lo dejaría usar nada de ella. 

— Esto... puede que talvez valga mi tiempo, incluso que estar viendo esa novela con Bellroc —

Con algo de humor en su comentario, Skrael dio media vuelta listo para regresar con los demás, aunque en su mano permaneció un pequeño cosquilleo por su pasada experiencia.

Mientras nuestros protagonistas comenzaban a caminar rumbo a la forja del héroe, Jim miraba atentamente las paredes como lo mas interesante del mundo no obstante se llevaría una sorpresa al ver que la armadura desaparecía y el amuleto caía en sus mano.

— ¿Qué acaba de pasar? —

— El amuleto reacciona a sus emociones, parece que esta relajado maese Jim — 

Aquellas palabras por parte del trol al joven humano fueron escuchadas por Skrael que simplemente miro al frente ignorando la conversación que pasaba a un lado suyo.

—Es bastante para un solo cazatroles — 

La mirada de Skrael se centro en aquellas estatuas que estaban en la cima, cada uno habia sido un capeón de Melin y sin embargo el mas actual era completamente a los anteriores. 

Un accidente o tal vez una gran conspiración.

Era un accidente demasiado grave para venir de Merlín, por lo que no debía ser un accidente y eso Skrael lo sabia. 

 — ¿Por qué se llaman cazatroles? suena que se cazan a ustedes mismos —

— Cazar troles malos —

Fue la respuesta que Aaarrrgghh le dio a Toby al escuchar su pregunta.

— Usted maese Jim tiene el deber de acabar con los Gumm-Gumm  —

— ¿Gumm-Gumm? ¿Quién invento ese nombre? suena algo gracioso  —

 Dijo Toby entre algunas risas.

— ¿Sabias que Gumm-Gumm significa "Portador una muerte horrible, lenta y dolorosa muerte calculada a fondo"? —

Fue la respuesta rápida dada por Skrael que miró atentamente como la diversión desaparecía de la expresión de Toby

— Correcto, pero afortunadamente la mayoría de los Gumm-Gumms fueron exiliados a las tierras Oscuras, solo uno anda libre  — 

—Y quiere matarlo — 

Aquellos comentarios dados por Blinky y Aaarrrgghh solo habían hecho sentir al adolescente mas asustado. 

Cada comentario dado por Blinky solo hacia que la curiosidad ganara terreno en la mente del mago que se perdería en sus propios pensamientos hasta que la voz de troll azul lo habia traído nuevamente a la realidad, indicándole que diera un paso atrás. 

Algo que un poco extrañado no dudo en hacer. 

 — ¿Qué esta planeando?  —

Fue la pregunta en la mente de Skrael, la cual habría sido respondida tan pronto vio un hacha dirigiéndose a su posición, por lo que sin dudar levantaría un muro hielo que rápidamente seria destruido por el objeto, obligando así al mago moverse en el ultimo momento. 

— Juraría que mi hielo era mas resistente... maldito Ónix — 

La frustración estaba presente en la voz del mago mientras miraba su fallida protección, aunque seguía moviéndose por todo el lugar su mirada nunca se aparto de los restos de hielo que habían quedado.

 — ¿Tan débil me volví?  —

Las cuchillas iban y venían por lo que mientras que Skrael esquivaba y lanzaba algún hechizo para defenderse, Toby y Jim se mantenían pegados a la pared manteniéndose así a salvo.

— Vamos cazatroles, esto no es tan difícil  —

Lleno de una extraña diversión Skrael se movía como un niño en el área de juegos en un parque.

— Para ti es fácil decirlo, tu tienes magia — 

Se defendió Toby del comentario de Skrael, que aun seguía pegado a la pared como si fuera su salvavida. 

—No todo se trata de magia ¿sabes? — 

Respondió el mago el cual se encontraba sobre una cuchilla listo para saltar y aterrizar sobre el suelo, sin embargo parecía que el universo no estaba de su lado en ese momento.

—Blinkous Galadrigal  — 

Se escuchó la voz de Vendel acercándose cada vez mas, por lo que rápidamente Blinky apagaría la forja.

—Ay no...  —

La mirada de Skrael paso a una de sorpresa ya que debido a la que la forja habia sido apagada de golpe el mago no pudo saltar como le hubiera gustado por lo que ahora se encontraba cayendo al suelo no obstante en el ultimo momento habia logrado crear una pequeña montaña de nieve amortiguando el golpe.

— Blinkous Galadrigal  —

El nombre de Blinky sonó con molestia en la voz de Vendel, cuya mirada parecía juzgar a todos los presentes

— Exijo saber... ¿Por que hay hielo en la forja del héroe? — 

— ¡Fue Nari! — 

Fue la rápida respuesta que dio Skrael, como si se tratara de un reflejo que habia desarrollo hace varios años, aunque antes de que alguien pudiera preguntar acerca de la dueña de ese nombre, volvería hablar esta vez de forma mas calmada, mientras retiraba el exceso de nieve de su pelo. 

 — Lo siento... me disculpo por el hielo, lo quitare en un momento —

— Yo soy Vendel, hijo de Rundle, hijo de Kilfred ¿Este es el cazatroles? produce el amuleto cazatroles —

Las palabras de Vendel llenaron el cuarto mientras miraba a Skrael como si fuera una curiosidad de alguna exposición. 

— Soy Skrael viento del norte  pero el cazatroles es aquel de ahí —

Con su dedo el mago señalo al adolescente que simplemente pudo saludar con una expresión claramente nerviosa.

— ¿Se apellida "Viento del norte"? —

La pregunta por parte de Blinky lo tomó por sorpresa, no por el contenido de la pregunta sino por lo inesperado que habia sido para el. 

— ¿Algún problema? —

Fue la pregunta que hizo el mago respecto a la hecha por el troll, aunque alguno hubieran dicho que estaba molesto, realmente no era así, simplemente no supo en ese momento como reaccionar. 

El tiempo en ese momento fue eterno para Skrael, ya que su máxima distracción era ver como el viejo troll cuestionaba la elección del amuleto, algo que también compartía el mago aunque en una menor magnitud. 

Algo que solo aumentó al ver como aquella "boca de la verdad" se mostraba "incierta" según las palabras dichas por Vendel.

Sin embargo, no todo habia sido una perdida para el, ya que se habia llevado algunas sorpresas al enterarse de que hubo un cazatroles que habia durado solo un día en el cargo, además de una leve risa al ver al cazatroles gritar cuando su brazo habia sido atrapado por aquella reliquia troll.

Aunque mientras aquello ocurrió, en otro lugar olvidado por la historia misma se encontraban dos deidades tan antiguas como las estrellas, quienes intercambiaron varios hechizos con la intención de derribar a su oponente. 

Aunque una era mucho mas pequeña que la otra, eso no le impidió lograr hacerse con la victoria. 

Siendo la creadora de Excalibur la perdedora, la cual a pesar del daño en su cuerpo aun seguía consiente a diferencia de su oponente que apenas podía estar de pie. 

— ¿Cómo has estado, Nimue?—

Algo de respeto y admiración habían en esas palabras aunque por fuera solo habia un claro sarcasmo por la condición en la que se encontraba a quien iban dirigidas. 

— Pequeña buscadora ¿Qué estas buscando? ¿Por qué estas tan perdida? — 

Las palabras de la antes conocida "dama del lago" llegaron a sus oídos y aunque no habia cambiado su expresión si habia logrado que se detuviera por un instante.

Aunque eso de nada sirvió ya que volvió a andar solo algunos segundos despues.

— Puedes oírla ¿verdad? ¿Qué crees que ella piensa de ti? — 

— No necesito su permiso —

Su respuesta fue rápida y segura, no habia dudas respecto a sus acciones o alguna limitación sujeta a alguna regla.

— No eres como ella, incluso su cuerpo te rechaza — 

Aquellas palabras seguían desprendiendo una calma y control pero para quien iban dirigidas habia tocado un punto sensible.

— Los muertos no hablan —

Estaba molesta, su voz lo demostraba pero su expresión no habia cambiado en lo absoluto, no dudando ni un segundo en atravesar a su oponente con sus cuchillas de ónix.

— Tu nunca serás como Nari —

Fue la ultima palabra dicha por Nimue.

Bellroc habia estado todo el día bajo el agua, sin decir alguna palabra y solo con sus pensamientos como compañía, se veía sin algún animo en su expresión pero aquella cambiaria al ver a su hermano en su sala mirando la televisión. 

— ¿Dónde estabas? —

Fue la única pregunta que logró formular, mientras que su mirada solo mostraba un cansancio similar al producido por el insomnio.

— ¿Recuerdas lo que me dijiste? que el cazatroles era un humano —

— ¿Qué fue lo que hiciste? —

Preguntó Bellroc mientras dejaba escapar un suspiro, pensando en lo que habia hecho su hermano.

—Juntarme con el cazatroles —

— ¿Descubriste algo? —

Preguntó sin dirigirle la mirada a su hermano, mientras se sentaba a su lado.

— Es un chico algo raro —

— Ya veo... —

No hubo alguna respuesta por parte de Skrael al escuchar las palabras, simplemente ambos se quedaron mutuamente en silencio, mirando cualquier cosa que estuviera en la televisión.

— ¿No estas enojado? —

Skrael no miro a su hermano cuando preguntó pero aunque deseaba saber la respuesta de su hermano, habia una parte suya que aun sentía un leve temor. 

— ¿Por qué debería? —

Respondió sin darle alguna importancia real a la pregunta de su hermano, el cual solo pudo volver a permanecer quieto todavía mirando al televisor. 

— ¿Por qué te bañas con ropa? —

— Cuando crezcas te lo digo —

Dijo Bellroc de forma curiosamente rápida, tan pronto su hermano volvió a hacer una pregunta.

Y aquí va otro capítulo de esta locura, espero que le haya gustado... Voy a arreglar el capítulo 1 (ya fue arreglado x2)