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Capítulo dos

INSEGURIDADES

Wake from your sleep. The drying of your tears. Today we escape. 
Exit Music (For A Film) by Radiohead

París Graham.

Me acosté con mi compañero de banda. Rectifico: me acosté con mi posible y futuro compañero de banda, si es que me aceptan. Tengo que admitir que ya no tengo algo como las primeras veces, pero esta es una primera vez complicada. Una vez salí con un chico que era fan del grupo en el que estuve, pero no es lo mismo.

— ¿Estás nervioso? —pregunta Greta con una suave sonrisa, sus brazos están cruzados sobre su pecho y parece nerviosa aunque intenta ocultarlo—, tranquilo, lo harás bien, tu voz es genial. Qué bueno que tu hermano use su cabeza primaria.

—Solo cuando le conviene.

Greta muerde su labio para contener la risa, y es cuando el grupo se acerca. Sé muy poco del grupo, ni siquiera vine tan preparado como con los anteriores grupos en los que participé porque Greta me contactó media hora antes, pero lo que conseguí en google es que es un grupo nuevo, sin página web o redes registradas, participaron en varios festivales y tienen un set list de 6 canciones, pop/rock.

—Bien, puede audicionar —dice uno de los chicos que parece llevar la batuta. Llama la atención porque es el más alto de los tres, delgado y estilizado mientras sus uñas son de un bonito color gris oscuro y sus ojos están maquillados oscuros. Lindo—. La decisión será tomada entre los tres cuando termine.

Asiento y me alejo.

Camino por el gran auditorio es hermoso, rojo y de pisos de madera, me gusta mucho este tipo de lugares, me recuerda al teatro donde participé muchas veces en mi adolescencia. Me muevo al centro del lugar donde está ubicado un micrófono.

El chico que me habló tiene cierto dominio y liderazgo que le gusta ejercer, puedo notarlo por la forma en que estaban peleando con los otros miembros apenas llegué. No puedo reconocer a ninguno, excepto por esa única excepción de la cual debería ignorar a todo riesgo, mierda, ni siquiera sé cómo se llama.

— ¿Te sabes alguna de nuestras canciones? —Pregunta el chico a la izquierda. Es carismático, un poco menos intimidante que el de uñas grises, con rasgos cuadrados y cuerpo delgado, cabello que está atado en una coleta y ligeramente disuelto.

—No, pero aprendo rápido.

El de la batuta cuadran sus hombros y asiente. Está a la defensiva. A su derecha, el otro chico parece indiferente, no ha mirado en mi dirección.

—Bien, ¿tienes alguna pieza que vayas a cantar?

Sonrío y asiento, saco mi teléfono para volver a asentir. Greta me da la señal y empiezo.

Slow down, you're doing fine

You can't be everything you wanna be before your time

Although it's so romantic on the borderline tonight

Tonight

Too bad, but it's the life you lead

You're so ahead of yourself that you forgot what you need

Though you can see when you're wrong

You know, you can't always see when you're right

You're right

You've got your passion, you've got your pride

But don't you know that only fools are satisfied?

Dream on, but don't imagine they'll all come true

When will you realize

Vienna waits for you?

Cuando terminó de cantar las últimas notas de "Vienna" de Billy Joel el lugar cae en un suave y tenso silencio. Subo la vista para encontrar cuatro pares de ojos sobre mí: sus miradas no delatan nada que pudiera decidir, hasta que el "líder" aplaude, y como si hubiera roto una brecha, los demás también aplauden en consecuencia. Greta sonríe y aplaude encantada por la situación.

¿Significa que lo había hecho bien? ¿Me quedaría? Una vez también le aplaudí al cantó de mi hermano y cantó horrible, pero tenía un par de copas encima así que a lo mejor no signifique nada. Bien, lo máximo que pueden hacer es rechazarme o volverme a mandar a clases de canto.

Bajo del escenario con el corazón desbocado y las manos heladas para acercarme al grupo. Tengo que reconocer que hace tiempo que no canto en un escenario y mi voz tiene poca soltura, además la resistencia tampoco es tan buena como antes, a lo mejor tendré que seguir practicando, y quizás...

—¡Estás dentro! —Por eso decía: "tenemos que tener confianza en nosotros mismos". —Mi nombre es Ciro —señala al chico de la izquierda, el cual sonrie como idiota—, Gaspar —señala a su derecha y es cuando sus ojos por fin se enfocan en mi—, y Darcy, conformamos 7 minutes in Heaven. El sábado tenemos una presentación así que vamos a tener que esforzarte el doble para aprenderte las canciones.

Asiento con una sonrisa en el rostro.

—Bueno —Interrumpe Greta, sus manos chocan en un aplauso que hace que me enfoque en ella—. La parte legal es la mas aburrida de todo trabajo, pero es la más necesaria, la presentación del sábado es en dos días, por lo cual haremos un contrato temporal así que durante ese periodo de tiempo no puedes salirte de la banda, después si existe alguna anomalía, puedes separarte del grupo, si decides quedarte a todos los presentes se le hará firmar un contrato de un año como garantía de que no pueden salirse de la banda, esto puede tener plazos de mayor tiempo si los CD's que enviemos sean aprobados por las disqueras, después del nuevo festival. ¿Alguna duda?

Mi nacimiento.

Trago grueso y niego.

Greta sonríe y empieza a caminar hacia su maletín que está ubicado al comienzo de las filas de los asientos.

— ¿Ya conoces a Greta? —pregunta Gaspar haciendo que frunza el ceño.

—Sí, es amiga de mi hermano.

—Con razón —termina diciendo Ciro con una sonrisa en su rostro.

—Con razón... ¿qué?

—Nunca es tan amable con nosotros —termina diciendo Darcy, sus ojos están fruncidos y parece más sugestivos de lo que recordaba. Muerdo el interior de mis mejillas, pero Greta no tarda en llegar.

—Si estás de acuerdo con lo antes presentado te entregaré el contrato original y lo necesito firmado para mañana, tómate tu tiempo en leerlo. Claro está pueden salir antes pero tendrían problemas legales, una multa de 500 euros por daños.

Tomo el contrato que apenas tiene unas cinco hojas y las ojeas de reojo.

— ¿Esto lo hicieron con el miembro anterior? —Me atrevo a preguntar.

Ciro suelta un suspiro, pero no dice nada. Greta aplana los labios y niega con la cabeza.

—Los miembros originales no suelen desertar cuando hay pocos días para conciertos importantes —dice Gaspar.

—Me imagino.

—En todo caso, hoy te entregaremos el set list de las canciones que han sacado la banda, deberás aprenderlas para el día de mañana, te pasaran la dirección en donde practicarán para los ensayos.

— ¿Entonces ya podemos irnos? —pregunta Ciro, él golpea su pie contra el piso como si tuviera un rencor personal contra el mismo.

—Si, y quiero informar que no estaré en el ensayo de mañana, pero los estaré guiando el día del concierto —Informa Greta, mientras los demás se alejan para agarrar sus cosas —. ¿Quién le dará el set list? —ella grita eso y mis mejillas parecen incendiarse, pero no le importa. Ciro se despide y Gaspar se acerca con una sonrisa en el rostro, Gaspar obtiene mi numero y no pasa mucho tiempo en que termine recibiendo un mensaje

NÚMERO DESCONOCIDO: [ Ubicación en tiempo real] 16:04 pm

NÚMERO DESCONOCIDO: Esta es la dirección para el ensayo de mañana 16:04 pm

NÚMERO DESCONOCIDO: También te enviaré los números de los chicos por si los necesitan en algún momento. 16:04 pm

NÚMERO DESCONOCIDO: Ciro +1*****6. Darcy +1*****8. 16:05 pm

NÚMERO DESCONOCIDO: ARCHIVO ADJUNTO. 16:05 pm

—Eso fueron muchos mensajes en un corto periodo de tiempo.

—Si, puedo escribir más rápido, pero mi teléfono tarda en enviar las cosas.

Guardo el contacto como "Gaspar" y meto mi teléfono en el bolsillo trasero. Gaspar me da la mano y sus caninos están marcados cuando sonríe, lo cual me hace sonreír.

—Vamos a tomar unas cervezas después del evento.

Asiento, para luego notar como Darcy está cerca de la puerta del auditorio, saliendo del lugar.

—Adiós —dice, pero no mira a nadie en particular.

—Esperame, idiota —Gaspar corre y se lanza sobre el cuerpo de Darcy, pero antes de que pudiera notar algo mas la puerta se cierra.

¿Será que son algo...? La duda recorre mi cuerpo como una gruesa capa de piel haciendo por un momento la relación se tensé, eso tendría sentido, pero el sabor amargo en mi boca causa que quiera vomitar. No puedo haberme metido con alguien con pareja, mierda, no, eso nunca.

— ¿Qué pasa? —Greta se acerca con el ceño fruncido—, parece que has visto un fantasma.

— ¿Son pareja? —pregunto y al instante me arrepiento.

—No, por obvias razones no mezclamos amor con negocios, termina mal.

—Lo sé.

— ¿Te gustó Gaspar? —Sonríe con cierta complicidad haciendo que niegue sonriendo. Ella toma mi brazo y me saca del lugar con bolso en mano y caminando con lentitud—. Son lindos, si, pero por favor no intentes nada con ninguno de ellos, me harias quedar mal con ellos, te acabo de contratar.

—No intento meterme con ninguno de ellos, gracias.

—Si tu lo dices.

Avanzamos hasta su auto en el cual vinimos y por un momento, en lo único que me puedo enfocar es en el hecho de que ayer me acosté con mi compañero de banda. ¡Greta me mataría si se entera! No, olvídenlo, si no se entera, no perjudica en nada, era algo pasajero, sin repercusiones. Sólo hablaré con él y pasaremos páginas. El viaje fue rápido porque Greta no paró de hablar de cómo consiguió este nuevo festival que es más reconocido que los anteriores, que traerá consigo grandes fanaticadas de personas, según sus palabras.

Greta se detiene frente al taller de mi hermano, pero decide no entrar ya que al parecer la espera Janeth en casa.

Abro la verja de la entrada del taller para luego cerrarla con candado. El lugar está vacío porque la gran mayoría se tuvo que haber ido después del mediodía, algunos autos están por la mitad y las manchas de aceite que están en el piso no pueden deshacerse por nada, me recuerda el porqué este lugar es mi segunda casa.

—Vegas —gritó—, ¿Dónde mierda andas?

El lugar, aunque no es muy grande tiene una pared divisoria que es donde están las oficinas de los jefes del taller, mi hermano puede estar allí como trabajando en un auto, lo cual no me parece extraño. Le gusta estar más en los autos que en la oficina, a pesar que James, igualmente lo ascendió para que no estuviera ensuciando sus manos de aceite.

Un sonido sordo hace que busque hacia el fondo del lugar donde una luz amarilla ilumina parte de la estancia. Mierda, esperaba jamás participar en una situación sobrenatural porque no podría dormir tranquilo el resto de mi vida. Trago grueso y me obligo a caminar por el lugar.

Vamos, intento darme ánimo, fracasó pesadamente cuando un nuevo sonido hace que salte en mi lugar.

No puedo pasar por esto ahora, no hay nada nuevo en la estancia, no hay una ouija o un ente en la pared, ninguna leyenda urbana circula por el lugar. Es el mismo lugar donde he estado casi toda tu vida, no puedo ser un puto cobarde.

Se escucha un nuevo golpe contra el duro asfalto y es cuando bajó la vista hacia el carro. El cuerpo de mi hermano está debajo de un posible auto en reparación. me obligo a no golpearlo hasta desfallecer.

—Hey idiota ¿porque no me respondes?

Su cabeza sigue cubierta por el auto, me terminó de acercar y pateó su pierna haciendo que ruede sobre la patineta y se quite los audífonos en el proceso. Mi hermano aparta su cuerpo por completo del auto, antes de levantarse y darme una mala mirada, quizás por interrumpir su trabajo o por interrumpir su música. Se levanta y agarra uno de los trapos que están en los carritos de apoyo, para limpiarse las manos.

— ¿Y bien? —dice.

— ¿Bien, que?

Lanza el trapo con el que se seca las manos y lo atajó casi por instinto, manchando las manos de grasa a lo que él se ríe.

—No recuerdo que te hayas caído de la cuna cuando eras pequeño, pero por tu torpeza habitual, debiste haberlo hecho.

Arrojó el trapo de vuelta y giro hacia los lavados del lugar para enjuagar mis manos.

—Eres un imbécil —grito en la distancia y escucho su risa—, y si me fue bien, lo deberías preguntar como todo hermano normal.

—Calláte —Saca su teléfono y se pone a teclear—. Deberías agradecerme por conseguirte la entrevista.

Aún debo leer el contrato, mierda.

—Le agradezco a Greta.

—Yo conseguí que Greta te diera una oportunidad.

— ¿Cómo te soportas?

—Con dos cigarrillos y una pepsi, traeme una pepsi por favor.

Dios, te lo llevas o te lo mando.

Me dirijo a la oficina de mi hermano que parece estar más vacía que de costumbre y voy a donde está el mini refrigerador y sacó dos pepsi. Regreso para entregarle una a Vegas y la otra la abro para beberla. El sabor dulce y efervescente de la bebida se siente reconfortante en mi cuerpo, puedo deducir que Vegas es básicamente un adicto al azúcar, pero es resistente como nadie que conozca.

—Quiero comida china.

— ¿Tengo cara de haberte preguntado? —cuestiona Vegas, sin embargo sé que me va a complacer porque me tiene en un ligero pedestal de hermano menor. Se aleja con teléfono en mano. Debería ponerme lo que queda de tarde en leer el contrato y practicar un poco mi voz—. Mandaron delivery así que está pendiente.

—No entiendo como conquistas mujeres con esa actitud —bromeo.

—No es como si quisiera conquistarte —Vegas chasquea la lengua cuando ve el contrato que sacó del bolso—. ¿Va en serio?

—Claro que sí —Vegas frunce el ceño—. Esta vez lo voy a tomar en serio, firmaré el contrato.

—No voy a repetirlo, pero tu inseguridades están demasiado ligadas a tu vida.

—No lo estoy dudando —refutó—, firmaré el contrato.

—Te doy dos semanas antes de que pienses que es demasiado y te retires.

—Vete a la mierda, Vegas —Voy a lograrlo, esta vez, voy a lograrlo, lo sé—. Puedes ser amable por una vez en tu vida y ayudarme con el contrato.

Vegas se encoge de hombros.

—Te ayudaré con el contrato.

—Ya decía yo que un año de derecho y medio semestre aprobado tenían que valer la pena en algo.

—Eres un idiota.

Vegas se va a lavar las manos y me deja solo por un tiempo. El repartidor llega al lugar y pagó para ir a la oficina de James, en donde suele estar Vega mucho más que en su oficina. James al ser el administrador del lugar suele tener lo necesario para que mi hermano se sienta cómodo en el lugar para cosas administrativas. Dejo la comida en la parte de la mesa individual y me acerco a su escritorio donde Vegas está sentado mientras lee con detenimiento, demasiado cerca del papel para mi gusto.

En la oficina de James siempre hay un par de fotos que me recuerdan a mi infancia, es el amigo más viejo de Vegas, el único que lo soporta y ambos parecen tener un extraño concilio matrimonial platónico.

Puso un nuevo portaretrato, hace mucho que no vengo para acá. Está su hermana menor: Lía con una enorme sonrisa y un vestido azul; y a su lado, Vegas quienes parecen haber celebrado un acto de grado.

— ¿Cuando confesaras tu amor? —cuestiono. Su primera cara es de confusión, su segunda cara es de reconocimiento, esa dura menos, la tercera cara es de completo asco.

—Existen las amistades, París, que tú no hayas tenido nunca amigos, no significa que no existan.

—Eso fue un golpe cruel y frío, Vegas.

—Te lo mereces —Se levanta del lugar para agarrar uno de los recipientes con la comida y lo abre haciendo que mi atención se dirija a las costillas de cerdos: me muero de hambre—. Además, James tiene novia.

—Esperemos que no sea Lili.

Entiende tan rápido la referencia que da miedo.

—Aleja a Harry Potter de la mesa.

—Solo decía... —Muerdo un poco de costilla de cerdo y de inmediato la devoró. Vegas, empieza a comer algo del arroz chino, pero un mensaje entrante lo interrumpe, saca su teléfono para darme cuenta que aleja el teléfono de su rostro para poder leer—. Necesitas lentes.

—Y tú buscar a alguien que te haya preguntado.

Suelto un refunfuño y el repica alzando la ceja.

—Hoy estás más agrio que de costumbre, quizás el hecho de que James...

—Di esa frase por completo y te asesino.

Nunca le tengo miedo a mi hermano, excepto cuando me da esa mirada de "te mataré" con un énfasis exclusivo en "matar". Entiendo la indirecta, el tema de James es delicado, casi tanto como su falta de visión, lo cual me parece ridículo pero lo dejo pasar.

—Bien —Trago grueso y bebo un poco de pepsi—, como te decía nadie quiere morir joven.

Sonrió, pero Vegas rueda los ojos.

Vegas termina de comer y luego retoma la lectura del contrato, después de media hora empieza a explicar, términos legales que empiezan desde la multa por incumplimiento hasta ciertos pagos iniciales que se cubrirán de los gastos apenas empecemos a producir. El contrato es exclusivo por estos tres días, después no tiene más vigencia, pero una vez que los conciertos grandes se den a conocer deberíamos no salirnos de la banda hasta dentro de un año, es lo más común.

Quizás no sea lo suficientemente bueno para quedarme tanto tiempo en algo como esto...

Vegas me mira y niega con la cabeza, pero no dice nada, su silencio es el mayor remordimiento de conciencia que puedo soportar.

Lo firmó y lo ignoró por el resto de la noche. 

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