Omega posesivo, alfa caliente.

—Hola guapo— dijo una omega acercándose al cuepo de Nam —¿No quisieras bailar?— preguntó algo inocente, sin embargo mordía su labio inferior provocativa.

—Lo siento linda, ya estoy comprometido— le sonrió a la omega.

—Solo va a ser un baile, no creo que tu omega le moleste— le dijo dando una mirada al omega que bailaba en la pista junto a sus amigos.

Namjoon se había quedado en la mesa, no le apetecía bailar, por lo que les dijo que esperaría ahí y apartaría el lugar. Sus amigos habían bebido demasiado, pero no les diría nada, nunca se sabría cuando volverían a divertirse así. Además era divertido ver las locuras que hacían, y descubrir los lados salvajes que podrían tener.

—No pienso de la misma manera, el suele ser algo agresivo — dijo mientras reía. La omega bufo. Ella quería al enorme alfa frente a ella esa noche, sin pantalones y en su habitación, y no le importaría usar algunos trucos sucios para lograrlo.

—Es una lástima— dijo comenzando a acercar su cuerpo más al alfa, él cual entró en alerta cuando la omega tomó su mano y la dirigió a su cintura. —Todo lo que yo tengo pudo ser tuyo— dijo en voz seductora al oído de Nam, el cual sintió su cuerpo estremecer. La omega comenzó a liberar feromonas para llamar la atención del alfa y acercó peligrosamente su mano a la hebilla de su cinturón.

Namjoon no sabía que hacer, él y su alfa aborrecieron el olor que comenzó a inundar su cuerpo. La omega creyendo estar logrando su objetivo subió lentamente su cuerpo sobre él.

—N-no creo que ses buena idea— le dijo Namjoon intentando se amable y empujó un poco el cuerpo de la chica.

—Shh, solo tienes que dejarte llevar— dijo colocando sus manos alrededor del cuello de Namjoon, molestándolo. Cuando estuvo a punto de apartarla con algo más de fuerza, el ligero cuerpo de la omega fue quitado del suyo.

—Eres una zorra— le gruñó molesto Jin mientras abofeteaba a la chica. Nadie más que algunos de los que se encontraban cerca a ellos, se dio cuenta de lo que sucedía por la musica alta y estar bebiendo. —Él te dijo que no, ya tiene dueño, omega barata, largate y tratara de seducir al alfa de otro—.

La chica iba a responder, sin embargo Jin volvió a golpearla, y antes de que hiciera algo, Namjoon sostuvo a Jin de la cintura y lo arrastró hasta el pasillo del hotel.

—Agh, esa zorra se las va a ver conmigo si intenta algo otra vez con mi alfa— le gruñó molesto mientras intentaba soltar el agarre de Namjoon. Quería ir y matar a esa chica.

—Tranquilo Jin, no es importante — le dijo Namjoon tratando de calmarlo, entonces Jin comenzó a sollozar, alarmandolo. —¿Amor?, ¿qué ocurre?—.

—Querías de-dejarme y-y cambi-arme por esa tipa, por eso no la quitabas de encima, s-se irían a su habitaci-ción, harían el amor, se casarían y-y tendrían hermosos cachorritos, y y-yo estaré como un perro junto a otros perros— dijo sollozando y con dificultad, con su ceño fruncido, realmente molesto.

Namjoon logró ver que su lindo y adorable omega se encontraba totalmente borracho y no sabía bien lo que decía. Quiso reír ante lo absurdo que había sonado lo que Jin había dicho, sin embargo prefirió cerrar la boca, y en su lugar abrazo a Jin mientras éste escondía su cabeza en su pecho, callando sus sollozos.

—Mi amor, eso nunca va a pasar, te amo, yo y mi lobo no queremos estar con nadie más que contigo— dijo para besar sus párpados, limpiando un poco las lágrimas que caían.

Jin lo miró fijamente a los ojos, sonrojado y rodeó su cuello con sus brazos, atrayéndolo con fuerza y comenzó a besarlo. Namjoon rodeó su cintura y correspondió.

—¿L-lo prometes?— preguntó una vez se separaron con voz, insegura, Namjoon sonrió y asintió —¿Entonces eso significa que nos vamos a casar?— preguntó con una voz parecida a la de un niño, mirando la reacción del alfa.

—Bueno, tan así como para casarnos...— dijo Namjoon mientras miraba hacía otro lado y Jin comenzaba a llorar otra vez. —Es broma, es broma— dijo volviendo a atraer el cuerpo de Jin con el suyo mientras éste intentaba alejarse.  Tomo su rostro y besó sus labios con fuerza para hacer que el omega volviera a tranquilizarse. —No hay nada que me haría más feliz que nosotros dos nos casáramos, te amo— murmuró sobre sus labios y beso una vez más de manera suave.

Jin sonrió ampliamente y lo besó, demostrando así lo feliz y emocionado que lo habían hecho sentir esas simples palabras.

(...)

—¡Nos vamos a casar!— la gente comenzó a gritar y aplaudir  mientras Jin tomaba a Namjoon del rostro y lo besaba con fuerza, miró a la omega con una gran sonrisa y ésta hizo una mueca de desagrado.

—Oh, muchas felicidades— les dijo un beta algo borracho mientras se acercaba a la pareja.

—Gracias— les dijo Jin realmente emocionado. Namjoon asintió con una sonrisa.

—Mi esposa y yo estamos aquí por nuestro décimo aniversario, sin embargo al enterarnos de su compromiso quisimos regalarles un viaje a Tokio que hemos ganado, será en un avión privado, por lo que llegaran tan pronto se vayan— les dijo amable y Namjoon frunció un poco el ceño algo desconfiado.

—Gracias por el gesto, pero no podemos aceptarlo— dijo ganándose una mirada confusa de Jin.

—¿Por qué no?— preguntó el hombre.

—Sí, ¿por qué no?—.

—Sin ofender, pero es algo extraño que un desconocido regale un premio a otro— dijo dando su punto de vista y el beta asintió comprendiéndolo.

—No es una trampa, si es lo que piensas muchacho, es solo que mi esposa esta embarazada y no puede viajar, planeábamos tirar los boletos ya que se vencen dentro de dos días, sin embargo preferimos regalárselos a ustedes como primer regalo de bodas, así que acepten, sin miedo— les dijo tendiendo un sobre y Jin asintió.

—Muchas gracias— dijo pero después detuvo sus movimientos y negó levemente —no podemos aceptarlo, mi hijo está en este hotel y no podemos dejarlo solo para ir a Tokio— dijo y Namjoon lo miró alzando su ceja.

—Por eso no hay problema, son boletos familiares, pueden ir hasta cuatro personas por boleto— aseguró.

Jin volvió a sonreír y abrazó con fuerza al beta. Agradeció, tomo los boletos y arrastró rápidamente a Namjoon hasta las habitaciones, despertó a Dongyu quien solo miró confundido como el mayor festejaba y hablaba sin parar.

—Ganó un premio y quiere que vayas con nosotros, son unos pasajes para ir a Tokio— le explicó Namjoon y Dongyu asintió.

—De acuerdo, solo dejen cambiarme o— fue interrumpido por el mayor de los tres quien negó.

—No hay tiempo, vámonos— dijo para arrastrar a los dos alfas hasta el taxi que los betas habían rentado para irse, se irían juntos, aprovechando que vivían cerca al aeropuerto.

(...)

—¡Pero que lindo!— gritó eufórico el omega mirando todo lo que había en la habitación.

La habitación era realmente espaciosa, había una enorme cama king size redonda con almohadas en forma de corazón, las paredes poseían un color rosa, algo opaco, pero que contrastaba bien con la ambientación. Lo que más les llamó la atención fue el inmenso ventanal, por donde se podía apreciar la ciudad de Tokio a lo lejos, debajo de una noche totalmente estrellada.

—Sí, muy hermoso— dijo Namjoon mientras quitaba sus zapatos y se recostaba en la cama. —Ahora, vamos a dormir un poco precioso— le dijo mientras palmeaba a un lado de su cuerpo.

Jin sonrió traviesamente y negó, comenzó a quitarse la ropa de manera seductora bajo la atenta mirada del alfa. El alfa comenzó a sentir calor al ver el hermoso cuerpo del omega, acechándolo con la mirada.

Jin caminó hacia el menor mientras balanceaba un poco sus caderas, Namjoon acomodó su cuerpo recargando su espalda sobre las inmensas almohadas y desabotonó los primeros tres botones de su camisa, mientras no perdía de vista la mirada del omega. Sus ojos brillaban tan intensos que sintió como un pequeño estremecimiento recorría su cuerpo, llegando hasta su miembro. Comenzó a sentir como los pantalones comenzaban a apretarle cada vez más y Jin aprovechó eso para hacer su siguiente movimiento.

—Ahora mismo voy a quitarte el horrendo aroma y el recuerdo de esa zorra barata— dijo mientras arrimaba su cuerpo y comenzaba a masajear lentamente el enorme bulto que el alfa tenía entre las piernas.

Namjoon se dejó llevar y le miró con picardía.

—Dudo que se borré de mi mente, pero podrías intentar— dijo coqueto y jadeó al sentir un poco de la presión que ejercía la mano de Jin.

—Oh, creeme que lo haré— dijo para subirse sobre el alfa y besarlo vorazmente.

Se sentó sobre el bulto de Namjoon, endureciéndolo aun más por sentir como el alfa comenzaba a mover un poco sus caderas simulando pequeñas embestidas. El omega dirigió sus manos a los botones de la camisa del alfa y comenzó a desabrocharlos uno a uno sin romper el beso para después quitársela.

Las manos de Namjoon se acomodaron sobre los glúteos del omega para separarlos, apretujarlos y moverlos a su antojo. Jin gemía en el beso, siendo sus gemidos amortiguados por la lengua del menor.

Los besos de Jin comenzaron a descender por el mentón, cuello y pecho, movió su cuerpo lentamente, para continuar bajando hasta terminar con su rostro sobre el gran problema del alfa.

—Ahora solo relajate y tu omega se encargará de todo— dijo comenzando a bajar los pantalones ajustados de Namjoon junto a su ropa interior, liberando así el enorme miembro del menor.

Namjoon sintió como la suave y pequeña lengua del omega comenzaba a subir y bajar, mientras que con su mano masajeaba sus testículos, sacándole varios gemidos y gruñidos.

La traviesa lengua jugó por un momento con su glande para después sentir como la caliente boca de Jin comenzaba a rodearle completamente. El omega relajó su garganta y engulló lo más que pudo. El alfa no podía aguantar más, así que tomó con su mano la cabeza del mayor y lo hizo levantar un poco su rostro para volver a clavarse en él, así de manera continúa, marcando un vaivén algo rápido pero suave.

—Ahh~ cariño, lo haces muy bien— decía el alfa mientras Jin trataba de respirar por su nariz, absorbiendo todo el embriagador olor a excitación que desprendía del cuerpo de su alfa.

Unas cuantas embestidas más a su boca y sentía como podía liberarse. Sin embargo Jin lo detuvo y volvió a subirse sobre el cuerpo del mayor, solo que esta vez no había nada que pudiera evitar sus roces de pieles.

—Dime de quien eres el alfa dijo Jin mientras tomaba el miembro del mayor y jugaba con su entrada, acercándolo peligrosamente.

—Soy tu alfa Jin, solo tuyo— le confirmó Namjoon para después besarlo mientras se adentraba en él.

—E-exacto, ah~, tu eres mío— dijo con un ligero ronroneo y comenzaba a moverse, cabalgándolo. Jin gemía con fuerza mientras Namjoon marcaba el ritmo de las penetraciones, lentas pero certeras. Jin colocó sus manos sobre los hombros del menor y apretó encajando sus uñas.

Ambos gemían y disfrutaban de tenerse de esa manera. Unas cuantas embestidas más y Jin manchó el cuerpo de ambos mientras Namjoon renovaba su marca. Jin arañó la espalda del menor al sentir como metía de golpe su nudo en él, alargando de esa manera su orgasmo.

—Te amo, yo también soy solo tuyo— le dijo Jin besando castamente sus labios para caer exhausto.

—Tambien te amo— le dijo el alfa abrazándolo y moviéndose con cuidado para recostarse a ambos sobre la cama. —Descansa mi amor—.

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Hola, aquí la parte del Namjin. Me fuí más a lo romántico porque repasando un poco en la historia me dí cuenta que Namjoon no tiene mucho protagonismo, y aunque quiero que sea una persona de pocas palabras, también quiero que sea muy expresiva al momento de usarlas.

La verdad me costó un poco más de trabajo los momentos que trate de hacer románticos, aunque soy un asco en el romance 😹.

En fin, espero les haya gustado, ya que he terminado con el two shot. Me despido.

¡Adiós~!💕😺.