Capítulo 12
Camila.
Las hojas frente a mí parece que me gritaran, sé que son para mí una gran puerta, pero a la vez no quiero dejarme llevar por las emociones, cuando eres adulto es importante pensar en el futuro, es importante tener un respaldo o eso creo yo, más teniendo en cuenta mi trabajo, aunque sé que necesito un balance entre vivir el presente y pensar tanto en el futuro.
Estoy confusa.
A veces ni me entiendo.
Levantó la mirada y Lauren está con su atención en su celular, su representante se encuentra en una llamada y yo solo espero a que aparezca Simón, está retrasado por el tráfico.
Lo único que compraría a Simón para que yo firme este contrato es un alto beneficio.
La puerta se abre de golpe haciendo que todos miremos hacia ella, Simón me mira fijamente antes de dar largas zancadas y colocar su tablet frente a mí sobre el contrato.
—Cuelga esa llamada, Brenda —es lo que dice, ella solo se aleja sin hacerle caso, me fijo en la tablet y es uno de los vídeos de Will, uno de los últimos, de cuando volvíamos a Los Angeles.
—Creo que puedes calmarte —habla tranquilamente Lauren guardando su celular—, vinimos a hablar del contrato, siendo profesionales, claro.
— ¿Ustedes comenzaron el juego antes? —mira de una hacia la otra—, te dije que no quería esto para tu carrera.
Ese comentario me da ganas de gritarle, es mi carrera, él mismo lo ha dicho.
Pero me mantengo en silencio
—Veo que empezaremos con drama, ¿Qué no te gusta Simón? ¿Qué las chicas representen un papel de homosexuales? —se acerca Brenda.
—Ese contrato es una mala idea, desde que lo leí me pareció de los más absurdo, no quiero que recuerden a Camila por ese papel y además se nota que no haces tu trabajo, no ves el escándalo que hay por este video.
Desliza la tablet hacia el lado de su mesa, Brenda aún así con una calma se sienta al lado de Lauren y toma la tablet.
—Ya sabía de esto, solo que no nos tomamos los rumores inventados por fans como tú…
— ¿Qué rumores hay? —Lauren toma la tablet.
—No te comenté porque ya lo manejé y sabía que no ibas a querer escuchar —le responde su manager tranquilamente.
Lauren ni siquiera ve el video, supongo que con solo ver de cuando es lo recuerda, me mira y yo si vuelvo a revivir lo que pasó, en solo un instante estoy recordando todo.
—Estas camas no son prácticas —me rio cuando trato de acomodarme en un mini espacio que Lauren deja para mí.
Quedamos en ver una película que me recomendó porque hablábamos de algunas películas que trataban ser de terror con vampiros o bestias come personas.
—Ni me digas, cuando vengo a dormir solo sueño con estar en mi cama —tiene una tablet frente a su cara.
— ¿Por qué no la vemos en el espacio del sofá? —cierro la cortina que cuelga a mi lado para taparnos del pasillo y me acuesto de lado mirando hacia ella que busca la película.
—Porque escuché que Will va a grabar y de verdad no quiero aparecer.
Apaga la mini lámpara del espacio, estamos en la que sería su cama, es raro como no hemos dormido mucho en estás camas pero ya esté espacio tiene su olor.
—No me creo que no hayas visto está película, es súper vieja, además creo que no da nada de miedo, pero aparece Megan Fox, no era catalogada por buena, pero si por rara y además yo aún ni entendí porque decidieron ese final.
—Bueno ya tendré mi opinión.
La película no es tan mala, creo que entiendo porque tiene su grupo de fans a Megan el papel de perra loca le queda genial, nada más sus expresiones, en esa película se ve demasiado despampanante.
— ¿Es normal que se vea tan bien matando gente? —Lauren se ríe.
—En esta película la sexualizaron bastante, desde este papel no me la puedo imaginar como la chica buena, no como cuando sale en Transformer, es raro.
—Sí, ahora pienso igual, por algo se llama tentación diabólica.
Y de repente llega el beso que se dan Amanda Seyfried y Megan Fox.
Es raro la intensidad que te hace sentir ese beso, muevo mis pies y mantengo mi mente fija, siento como que se me secara la garganta y me doy cuenta que retengo la respiración hasta que acaba.
—Ese beso a muchas chicas adolescentes las hizo dudar —Lauren se abanica el rostro—, te cuento algo vergonzoso, lo ví un montón de veces.
La miró rápidamente y tiene un leve sonrojo.
—Es que es despampanante, se nota la química y de verdad no sé cómo llegan a tener un beso así en pantalla, los de nosotras se quedan atrás por mucho.
—Creo que dar un beso así es algo más sensorial, menos pensamientos —la película queda en un segundo plano—, la cosa también es divertirse haciéndolo, bueno ví una entrevista de Amanda en aquel entonces y ella habló muy bien de Megan, además mencionó que disfruto grabar ese momento con ella, que no hubo nada de incomodidad.
—Ese beso enloquece a muchos —me rio nerviosamente—, nunca he llegado a algo tan sexual en pantalla, además no creo ser posible de eso.
¿Por qué tantos nervios?
—Es como cualquier beso Camila, nuestro primer beso se asemejó a eso —baja la tablet, olvidando la película que apenas va a la mitad o un poco antes.
—Claro que no, el beso que grabamos no se vio para nada así —se gira hacia mí por lo que nos miramos de frente.
—Me refiero a nuestro beso de práctica —elevo las cejas entendiendo.
— ¿Podemos hacer algo así en pantalla? —una de las comisuras de su boca se eleva.
— ¿Te animas?
—No lo sé —vuelvo a reír.
¿Realmente qué quiero?
Sentir.
Noto mucho más su cercanía, respiro hondo y miró sus ojos.
Lauren Jauregui, mujer despampanante que sé muy bien que me dejaría sin aliento con un beso como ese, está bien que quiera acercarme, sé que puedo ser la libélula buscando la luz.
¿Desde cuánto he estado sola? ¿Desde cuándo solo hago lo que quieren? ¿Desde cuándo no hago nada sin pensar?
Sé que no he vivido como otros.
— ¿Qué piensas? —pregunta en un susurro.
Levanto mi mano y mi dedo índice toca su labio inferior, fijo mi vista en él, ella no se mueve, no se aleja, lo repaso suavemente.
Es un simple beso.
Alejo mi mano y mis labios tocan los suyos, primero tanteo, mantengo mis ojos cerrados y solo me separó ligeramente, mis labios entreabiertos sienten su respiración.
Las alertas se encienden en mi cabeza.
¡Joder!
Estoy por alejarme cuando su lengua delinea mi labio superior, casi puedo imaginar que nosotras estamos recreando el beso de la película.
Mi lengua toca la suya sin miedo, succionó su labio inferior, ella sigue el beso.
Este beso es muy distinto por varias razones, estamos más confiadas, tiene un nivel de tensión que no manejamos antes y lo más relevante, no nos están grabando.
Gira su cuerpo separando solo un poco nuestros labios, sostiene su peso de su codo y vuelve a besarme, tan profundo y húmedo como antes.
Mi mano está en su nuca tratando de acercarla más, es tortuosa la forma en que me hace sentir, es vibrante.
Soy Camila en este momento, no un personaje.
Es tan pequeño el espacio que queda una de sus piernas enredada entre las mías, tira de mi labio inferior y se sobresalta al escuchar de repente a las chicas al principio del pasillo.
Suelto un gemido algo alto cuando su rodilla presiona entre mis piernas, me mira con ojos de asombro, pupilas dilatadas, color verde más oscuro, labios inflamados, más rosados de lo normal.
¿Qué mierda?
Alejo la mano que lleve a mi boca para callarme.
—Saldrá mejor en pantalla… la práctica se nos da bien —me giro y salgo de su compartimiento—, voy a… terminamos la película otro día.
Le cierro la cortina en la cara, me agarró el rostro.
Fue un beso, solo eso.
Escucho a las chicas y de mi cama agarró el primer libro que veo, abro la cortina que nos separa, la cámara de Will enfoca de inmediato mi cara.
—Hola, ¿Cómo les va?
—Normani explicaba lo complicado que es entrar en nuestras camas —me dice Ally, todas me miran raro—, ¿Tú qué hacías?
Dinah tira de un mechón de su pelo y ella disimula empujándola.
—Leía algo —levantó el libro—, pero me dió sed, los saludo rápidamente.
Saludo a la cámara. Todas ríen raro.
Pasó por un lado y llegó a la pequeña cocina.
Mi psicóloga diría que esto pasa por ignorar mis necesidades básicas y por eso terminé acercándome demasiado a Lauren.
Escondo mi rostro entre el libro.
Trabajamos juntas, ¿En qué pensaba? Esa no se creerá esa tontería que dije cuando me fui.
Además aún no grabamos el final de temporada, aún nos quedan escenas juntas.
Resopló.
Soy una tonta.
—Ya me enteré de las teorías en internet —dice sin darle importancia—, gemidos lejanos, Camila con labios inflamados, el libro al revés.
— ¿Te parece tan insignificante que lo dices así? —Simón aleja su tablet.
—Camila no tiene que explicar las tonterías que inventan, además ellos no tienen pruebas, yo me dormí temprano, ni siquiera sabía lo que ocurría con este video hasta que alguien me lo envió.
—Simón, hablas como si las chicas de verdad hubieran estado haciendo lo que dicen los fans y las páginas de chismes, que no tiene ningún problema, pero no sé cuál es tu alboroto —Brenda se cruza de brazos.
—Daña su imagen —me señala—, he trabajado mucho para que Camila esté donde está ahora, no van a ensuciarla y menos con ese contrato.
¿Él ha trabajado mucho? Podría reírme, habla como si yo no trabajará en mi carrera.
— ¿No ves la oportunidad que tienen?
Brenda en ningún momento ha levantado la voz, tampoco lo trata descortésmente, no parece que negocia, ella entiende que Simón tiene un muro contra este contrato.
¿Algún momento preguntó lo que yo quería?
Eso nunca sucede, todo es según lo que es mejor para mí.
Lauren resopla y se pone de pie, me lanza una rápida mirada antes de caminar a la puerta.
Tomó el contrato y lo firmó.
No por ella, no por lo que sea que paso en el viaje, no porque se iba.
Lo firme por mí, porque dentro de los pros y contras, está es una grandiosa oportunidad.
—Espera —se gira, le acercó el contrato a Brenda—, ya está, creo que será genial trabajar con ustedes, le veo éxito a estos tratos.
— ¿Qué acabas de hacer? —el rostro de Simón está rojo—, habíamos quedado en algo Camila, ¿Cómo eres tan impulsiva?
—Tú habías quedado en algo, no yo.
—Los dejaremos hablar —con eso Brenda se despide, Lauren no dice nada, únicamente sigue a su manager.
—No debiste firmar ese contrato —pasa una mano por su cabello con frustración—, estoy en un trato con el manager de Shawn.
Me levanto abruptamente y lo miro confundida aunque me pasa una idea por la cabeza.
— ¿Trato de que puedes hacer con él? Además de que la única conexión que hemos tenido es ese live que él hacía y yo aparecí.
—Quieren una relación pública, sé que con Austin no funcionó, pero tienes mucho tiempo sin salir con alguien y ya creen que eres la solterona aburrida de Los Angeles.
— ¿Cuántas veces voy a tener que decirte lo mismo? No quiero una farsa y no me importa lo que digan —muevo los brazos exasperada.
—Ese es el problema, nadie dice nada de tí —lo dice con fastidio—, solo todo lo referente a la serie y sus ideas de que Lauren está contigo.
—Para eso tenemos este trato con ellas, para las oportunidades de trabajo y ya no puedo seguir hablando de esto —recojo mis cosas—, cuando me envíen la copia del contrato te lo hago llegar.
—No sé cómo puedes ser tan egoísta y hacerme esto Camila —murmura mientras salgo de la oficina.
Masajeo mi sien, el dolor de cabeza comienza a subir, tal vez necesite un descanso de todo.
Los sueños cuestan trabajo y aunque a veces parece que sigo en el mismo lugar, sé que me estoy moviendo y que a pesar de que de vez en cuando quisiera renunciar no dejaré de luchar por ser feliz haciendo lo que amo.
El ruido es tan fuerte que si no estuviera concentrada me aturdiria.
Dinah parece tan en ambiente que solo verla me hace relajarme un poco, Ally no sé queda atrás, mira a los fans con tanto cariño.
Abruma la manera en la que acercan objetos hacia mí para que los firme, estamos caminando por la entrada de la cadena televisiva en dónde haremos una entrevista las tres.
Es en vivo, además de tener público real, hicieron separaciones del elenco para que pudieran hacer entrevistas en diferentes partes, a mí me tocó con la más alta y la más baja.
— ¡Tomate una foto conmigo! —agita su celular en mi rostro—, ¡Te lo pido!
—Claro, no hay problema, ¿Puedo? —me tiende el celular como si le hubiera hecho la pregunta más tonta—, mira que bonitas, sonríe.
Parece que aparecerán corazones en sus ojos, le entrego el celular y lo abraza.
—No puede ser, eres la mejor, muchas no nos sentimos solas gracias a sus personajes.
—Me alegro puedan vernos como apoyo —me despido con la mano cuando una de los guardaespaldas me indica seguir.
—Necesito un aplauso para darle la bienvenida a estos ángeles que cayeron del cielo para iluminarlos —los aplausos aparecen—, acá están con nosotros, Ally Brooke, Dinah Jane y Camila Cabello.
Sonrió ampliamente al entrar, saludó y lanzó algunos besos, cuando nos sentamos en el sofá el entrevistador nos mira asombrado, cruza sus piernas.
—Son realmente hermosas en persona, me moría por conocerlas, ¿Qué se siente ser el top 1 en series reproducidas en 6 países?
—Nunca pensé que íbamos a impactar tanto, pero creo que las cosas pasan por algo, todos en el elenco tienen su historia y un gran logro lo tenemos más que merecido —le doy un apretón a la manito de Ally.
—Claro que es alucinante, las cosas explotaron de repente en nuestra cara —agrega Dinah.
—Creo que trabajamos duro y estamos viendo los resultados —finalizó.
—Es increíble, espero que las tomen en cuenta para las nominaciones de este año —se acerca como si nos fuera a decir un secreto—, ¿Me darán un adelanto del capítulo final? Los fans se muerden las uñas.
—No podemos, somos buenas guardando secretos —murmuró.
—Uy, eso me agrada, ¿Cuántos secretos guardan? —levanta sus cejas—, ¿Hay parejas en el elenco? No he logrado informarme de nada.
—Son secretos de estado —Dinah lo hace reír—, no se puede revelar ni los enredos.
— ¿Hay enredos? —la audiencia hace un coro de gritos—, calma chicos.
—A Dinah solo le encanta enloquecerlos —trato de calmar las aguas, Ally palmea su pierna.
—Bien, ya aprendí que son como una tumba —se rinde Patrick.
Me gusta como lleva la entrevista, sin presiones, trata de conseguir cosas pero entiende la negativa, si había escuchado que Patrick era un encanto con sus entrevistados.
Todo se mantiene tranquilo hasta que hacen la dinámica del público.
La mayoría de preguntas que han hecho son para Ally y ella es un amor con sus fans.
Tomó la botella de agua que me dejaron en la mesa de enfrente a mitad de la entrevista, asiento a lo que dice Dinah mientras bebo de mi agua.
—Primera pregunta para Camila —trago lentamente.
— ¿Qué pasó en el último vídeo del autobús? —alcance a tapar mi boca al comenzar a toser.
Las chicas comenzaron a abanicar sus manos en mi rostro, alguien acercó unos pañuelos, cuando logró calmarme la chica me mira sonriente.
—Lo siento, el agua me pasó mal —mi voz suena ronca, Dinah se ríe.
—Yo odio cuando me sucede eso —le da suaves caricias a mi espalda —, estás muy roja.
—Lo sé —respiro hondo—, respondiendo a la pregunta, solo hicimos un video normal, si te refieres a los rumores, pues son falsos.
Se acaba la ronda de preguntas, Patrick vuelve a tornar el ambiente de la entrevista cómodo y relajado.
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