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Especial de San Valentín 3/3

Mium estaba jugando en el celular esperando a que su papá alfa terminara su cometido cuando escuchó un miau a su lado. Giró su cabeza encontrando un gato negro sobre una de las bolsas.

-Hola- le dijo el niño con una sonrisa, cuando el gato agarró en su boca una de las bolsitas más pequeñas que contenía bombones y salió corriendo- Oye no- gritó Mium- devuélveme eso- y salió corriendo detrás del gato entrando sin darse cuenta en el elevador.

Logró agarrarlo en el interior, pero la puerta se había cerrado y este se movía. Mium apretó el celular y la bolsita duro contra su pecho y dándose cuenta que se había alejado del sitio que su papá le había dicho. Apretó sus labios y tembló de miedo al abrirse la puerta y el escenario frente a él era diferente del anterior.

Salió dudoso después que el gato escapara y miró de un lado a otro.

-Papá- murmuró buscándolo, solo que los pasillos no eran iguales y había muy pocas personas- papá- sollozo con miedo al no verlo.

Pero no se podía quedar allí, tenía que buscarlo. Así que se secó las lágrimas y se llenó de valor caminando por el pasillo y mirando entre las tiendas a ver si lo encontraba. Después de varios minutos se arrodilló en una esquina y esta vez no pudo evitar llorar.

No encontraba a su papá.

Un dependiente se acercó a él al ver su estado y se arrodilló delante de él.

-¿Qué te ocurre cachorro?

Mium sollozó más fuerte.

-No encuentro a mi papáaaaaa- se sobó las mejillas mojadas- Papáaaaaa.

El dependiente no sabía que hacer realmente.

-Vamos, te llevaré abajo, quizás está en la entrada.

Mium negó.

-Mis papás me dicen que no debo ir con extraños- se abrazó más fuerte dudoso y el dependiente se encontró en una encrucijada.

En eso el celular en sus manos sonó. Mium lo miró y era un número desconocido, pero lo respondió de igual forma.

-¿Dónde estás?- había una voz molesta pero a la vez preocupada del otro lado.

-Papáaaaaaa- Mium sollozó más fuerte- papáaaa ven a buscarme.

-Dame un momento- el dependiente le pidió el celular al cachorro y respondió- ¿Hola, es el padre del niño?

-Si, dónde está- el alfa habló rápido.

-En el quinto piso. Parece que se perdió.

-Esperen ahí- y colgó.

No pasó mucho tiempo cuando apareció Jaekyung haciendo que el dependiente lo mirara sorprendido. En cambio, el cachorro se levantó y corrió hacia él con el rostro lleno de lágrimas.

-Papáaaaa- Mium se abrazó a la pierna del alfa y sollozó contra esta- un gato se robó los bombones de papi, fui tras él y después estaba aquí.

Jaekyung suspiró con alivio, aunque no cambió su expresión y sobó la cabeza de su hijo.

-Volvamos- se apretó el entrecejo, demasiadas emociones por todo el día. Y estaba seguro que Dan preguntaría mucho cuando viera el rostro de su hijo y las evidencias de haber llorado.

Cargó al cachorro y este se abrazó al cuello de su padre como si fuera el lugar más seguro del mundo.

-sabes que igual no te escapas del castigo ¿verdad?

-papáaaaa- protestó Mium con un puchero.

***

-Papiiiiiiii- Mium entró corriendo a la casa en dirección a la cocina donde estaba Dan que se alarmó al ver al niño y los ojos y nariz rojos e hinchados, aunque ya no lloraba.

-¿Qué te pasó?- Dan lo cargó preocupado.

-Formó una perreta- dijo Jaekyung dejando las bolsas sobre el sofá y caminando hacia la cocina.

-Yo no hice una perret...- comenzó a decir el niño hasta que vio la ceja alzada del alfa en advertencia en lo que habían quedado. No decirle a Dan sobre lo ocurrido y dejar como que había hecho una perreta normal de un cachorro de 4 años. Sino, además de que tendría que escuchar el regaño de Dan no sería exonerado del castigo- Le hice pasar una pena muy grande a papá- de igual forma Mium no se quedaría de brazos cruzados mientras su padre le echaba toda la culpa.

Después de todo quien dejaba solo a un niño tan lindo como él.

-¿En serio?- Dan lo sentó en la silla en la mesa.

-Siiiii, si vieras su cara- negó con la cabeza como recordando la ficticia escena- No sabía dónde meter su cara.

Dan sonrió imaginándose que podría haber pasado para escuchar un gruñido por parte de su pareja.

-Mium estás castigado- declaró el alfa frunciendo el ceño.

-Papáaaa, no se vale- protestó el cachorro mirando entonces a Dan- papi has algo.

Dan le acarició la cabeza.

-Si Jaekyung te castigó fue porque algo realmente grave hiciste- después de todo entre los dos el más permisivo era el alfa a pesar de que todos pensaban que era al revés.

Mium hizo un puchero y miró a Jaekyung que solo alzó los hombros y se giró a la sala para volver poco después con el ramo de flores y se lo dio a Dan. Este lo miró con los ojos muy abiertos agarrándolo impresionado.

-Esto...-

-Feliz San Valentín- dijo Mium con una sonrisa.

-¿Esto... lo compraron para mí?- Dan se sonrojó sobre todo porque el alfa se lo había dado. Jaekyung no era muy dado a dar regalos de ese tipo.

-Quién más va a ser, hay más en la sala- respondió este para inclinarse al oído de Dan y decirle en voz baja para que Mium no oyera- y ya que te esmeraste tanto para Navidad en tu regalo vas a recibir uno a cambio que te espera entre las bolsas- puso su mano sobre el vientre de tres meses de Dan que se marcaba debajo del suéter.

El omega se sonrojó ante lo dicho y tragó un gemido sabiendo a que se refería.

-¿Papi, tienes fiebre?- Mium le preguntó a Dan cuando Jaekyung se apartó dejando ver el rostro sumamente rojo del omega.

Este negó y escondió su rostro en el ramo. Ah, era aún temprano, cómo podía hacerle aquello.

Y más se impresionó cuando se encontró con lo que había comprado el alfa una vez había llegado la noche y estaba en el baño sacando el conjunto rojo de lencería de corazones. Si antes estaba rojo ahora lo estaría aún más.

-Jaekyung, no me pienso poner esto- protestó Dan saliendo y encontrando al alfa sentado en la cama esperándolo. Este había acostado a Mium mientras se suponía que el omega se cambiase, por eso gruñó al ver que aún no estaba listo.

-Te pones una cinta en todo tu cuerpo, pero no te pones eso- alzó una ceja.

-pero es que... es que...- Dan estaba avergonzado.

-Vístete- ordenó el alfa y Dan apretó los labios, nervioso, oliendo lo excitado que ya estaba el alfa. Su erección se notaba debajo de la bata negra que apenas cubría su cuerpo, y podía jurar que había visto una cinta roja por el costado de su muslo.

Minutos después Dan volvió a abrir la puerta y salió vacilante.

-Jaekyung, esto... esto es muy revelador- Dan intentaba cubrirse inútilmente.

El conjunto de tul con sujetador con un vuelo largo, la tanga pequeña, y las medias apenas podían esconder su piel y la barriguita hinchada de gemelos mucho más grande que cuando traía a Mium en ese tiempo.

-Carajo, te queda bien- Jaekyung no pudo evitar sonrojarse ligeramente por la excitación- Ven acá. Le dijo abriéndose la bata dejando a la vista la otra parte y la más especial de ese día.

-Jaekyung... eso...- dijo el omega sonrojándose aún más al ver la cinta roja en forma de lazo en la base de pene del alfa.

-Feliz San Valentín Kim Dan.

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