Dan miró la comida en la mesa apenas sin tocar la suya.

-Voy a llevársela.

Jaekyung tragó su comida.

-No le vayas a meter un cuento sobre la cigüeña y que trajo a los gemelos o tendremos un problema más a la lista- arrugó el rostro cruzando los brazos sobre su pecho- ¿A quién demonios habrá salido tan inteligente?

Una gota de sudor corrió por la sien de Dan. Eso... era complicado de responder. Mium... estaba por encima de ellos dos en muchas cosas y eso que aún era pequeño.

Agarró el plato y caminó en dirección a la habitación. Se alegró que Jaekyung le había enseñado a no cerrarla aun si estaba sumamente molesto. Entró encontrándola apagada la luz, solo con la lamparita de estrellas encendida. El cachorro se había quedado dormido hecho una bolita en una esquina de la cama.

Dan dejó el plato sobre la mesita de juegos donde había unas compotas y galletas que el alfa le había llevado antes de merienda. Debía estar lleno por la cantidad, es que Jaekyung nunca entendería cuando era poco.

Se sentó en la cama y miró al cachorro dormir con los ojos hinchado y eso lo hizo sentir mal. Odiaba cuando Mium lloraba. Se acostó y le pasó el brazo por encima para atraerlo contra él. Y fue como si este lo sintiese pues se giró y se apretó contra él sonriendo de forma ligera.

Solo que la idea no le gustó para nada al alfa cuando entró al cuarto y se dio cuenta que esa noche... le tocaría dormir solo porque la cama de Mium no era tan grande para que el cupiera. Nada más estaba él... y el nido... ese maldito, pero cómodo nido.

Chasqueó la lengua.

Carajo.

***

-No quiero problemas- Jaekyung estaba parado en la puerta a punto de irse a una sesión de fotos de improvisto que le había salido.

Tanto Mium como Dan estaban... como si nada hubiera pasado los últimos días y eso... acaso debía preocuparte. Simplemente después de despertarlos a los dos en la mañana estaban bien, como si solo dormir juntos hubiera solucionado todo. Después del desayuno Dan le había dicho que aprovecharía el momento que estarían solo para conversar con él.

Esperaba que todo saliera bien, ya le dolía la cabeza por tantos problemas y que rezaran por solucionar sus cosas porque no dejaría que el omega durmiera otra vez fuerza del cuarto. Dan era de él, ya bastante que su hijo lo acaparaba durante el día.

-Cuida de Dan- le dijo Jaekyung a Mium revolviendo su cabeza y se inclinó besando la boca del omega tras taparle los ojos al cachorro. Como que... tras hacer eso vaciló si ir.

-Debes ir a trabajar o tendremos a Namwook tumbando la puerta- Dan se había dado cuenta de sus intenciones.

Jaekyung gruñó.

-Tengo suficiente dinero para irme de vacaciones por años, porque demonios debo ir a trabajar.

Dan se quedó pensativo.

-¿Los impuestos?

La sien del alfa palpitó.

-Ya Namwook te está influenciando- gruñó y se dio media vuelta para irse.

Dan se quedó con Mium parados en la sala hasta que el alfa se fue.

-¿Y bien? ¿A qué te gustaría jugar?- comenzaría con eso para aligerar el ambiente ya que tenía que aprovechar que tenía energía.

Mium se quedó pensativo.

-¿Al escondite?-

Dan asintió.

-Está bien, comenzaré yo- dijo el omega y caminó hacia una columna y comenzó a tocar.

Mium sabía que no podría ganar tan fácilmente ya que sus padres con su olfato lo detectaban rápidamente. Y quería aprovechar que su papi quería podía jugar con él, así que comenzó a moverse buscando el mejor escondite.

Dan terminó de contar y se giró encontrándose solo en la casa. Sonrió. Solo debía... escuchó la puerta abrirse y Jaekyung apareció.

-¿Qué ocurrió?- Dan caminó hacia él.

-Se me quedó la billetera- dijo el alfa mortificado- ¿Qué hacen ustedes dos?

-Jugando al escondite- Dan caminó detrás de él con una sonrisa- No me vayas a decir donde está Mium, parece que se escondió bien.

Jaekyung encontró la billetera en la mesa del comedor y la guardó, pero antes de irse se giró y rodeó la cintura de Dan con su brazo atrayéndolo a él. Su boca al momento atrapó la del omega abriéndola con sus dientes y metiendo la lengua hasta el fondo. El rápido movimiento tomó desprevenido a Dan que si no fuera por el brazo alrededor de él hubiera colapsado.

-Hmmm- todo el cuerpo de Dan tembló y se recargó contra Jaekyung, normalmente se besaban de esta forma antes de dormir... al despertar, pero al alterarse su rutina... no se había dado cuenta de cuanto lo necesitaba.

Y el celular de Jaekyung interrumpió el momento. El alfa gruñó sonoramente aun en la boca de Dan y se negaba a sacar su lengua, pero jodían demasiado.

-Carajo, tengo que irme. Ya me escucharán cuando llegue- gruñó, pero antes de irse mordió ligeramente el costado del cuello de Dan- no gastes tu energía con Mium que después me toca a mí.

Y Dan sabía muy bien a que se refería. Vio como la espalda del alfa desaparecía con las mejillas rojas y el cuerpo caliente.

Bueno, se abofeteó mentalmente, era hora de seguir en lo que estaba, su hijo era capaz de salir de su escondite y decirle que ya no lo buscara que él se buscó solo.

Sin embargo... tras más de 20 minutos buscando, y sin sentir el olor de Mium, Dan ya no sentía que aquello fuera un juego y lo comenzó a llamar... sin respuesta.

***

Jaekyung apenas a comienzo de la sesión de fotos escuchó como su celular sonaba y era Dan. Al momento descolgó, el omega no solía molestarlo cuando trabajaba por lo que debía haber pasado algo.

Y no se equivocó.

-Jaekyung- estaba llorando- Mium, desapareció.

-¿Qué carajos?

Y Feliz Año nuevo a todos y que hayan tenido buenas fiestas. Nos espera un año de nuevos proyectos, conclusión de otros, y por fin mis trabajos en físico ya que mi segunda ciudadanía me lo va a permitir.