-Oye ¿Jaekyung se encuentra bien?- Daehyun le preguntó a Josep, después de ver al alfa sentado en el sofá de la sala de descanso... con los brazos cruzados sobre su pecho, pero lo más destacable era que estaba durmiendo.

Josep hizo una mueca y aunque sabía la situación no quiso dar detalles.

-Ustedes sigan entrenando y no molesten a Jaekyung. Él... necesita descansar.

Y si que lo necesitaba. Por lo visto ya habían llegado a esa parte del embarazo y Namwook estaba realmente preocupado.

-¿Qué vamos a hacer?- le preguntó Josep a Namwook al entrar a la oficina.

-Pues no podemos hacer mucho. Lo bueno es que no tiene ninguna pelea programada de momento y si aparece alguna podemos posponerla. Porque en su estado actual sería perjudicial para él.

Josep asintió.

-Entonces hay que aligerar más su agenda y entrenamiento... ya que de este último tiene bastante en su casa.

Namwook asintió y es que lo comprendía.

Cuando los omegas llegaban a esa parte del embarazado donde el antojo era el sexo... los alfas lejos de disfrutar sufrían bastante. Porque tener sexo varias veces al día con un omega que parecía estar en celo... no era algo realmente fácil.

Y Jaekyung tenía que jugar además con que su omega era recesivo y tenía que tener un control férreo para no lastimar a ninguno de los dos. Como resultado apenas dormía en las noches, o descansaba cuando estaba en casa.

***

Jaekyung abrió los ojos al escuchar la alarma de su celular. Solo había sido una hora, pero sentía que había dormido apenas minutos. Era duro reconocerlo, pero estaba realmente agotado... debido al sexo.

Ni siquiera a él que se jactaba de una excelente resistencia podía contra un omega que lo hacía correrse fácilmente dado lo dulces que eran sus feromonas. Nada lo había preparado para ello.

Y es que desde la noche que había comenzado todo, donde Dan le había comido su pene por no sabía cuánto tiempo, chupando, mordiendo ligeramente, lamiendo, casi como si se lo quisiera tragar, y haciéndole llegar al orgasmo más de tres veces sin soltarlo, pues... no pronosticaba lo que vendría después.

En el baño, en la cocina, en el sofá, en la entrada de la casa, en la escalera. Ya ni sabía qué lugar de la casa no habían usado. Y es que cuando Dan lo abrazaba por detrás, soltaba feromonas como nunca antes y lo miraba con esos ojos llorosos pidiéndole que lo follara... pues era complicado decir que no.

-parezco un perro domesticado- gruñó apretándose el ceño.

No había parte de él que no doliera, incluso su pene dolía de tanto sexo, sus párpados por no dormir porque a mitad de la noche podía despertar con el peso del omega ya sin ropa y el extra de su cachorro sobre su vientre, haciendo un desastre sobre su miembro con el líquido que salía de él.

Eso... le estaba pasando factura.

Había tenido que recuperar fuerzas durmiendo durante las horas de entrenamiento en el gimnasio, pues sabía lo que le tocaría cuando llegara a la casa.

Y el consejo que había recibido por parte de Namwook cuando le tuvo que decir dado su estado físico reprobable... era que solo tenía que follar bien a su omega y tenerlo satisfecho, para eso era alfa.

No había una vena de su frente que no hubiera palpitado ante aquella respuesta.

-No soy un maldito consolador, carajo...

Espera. Un consolador.

Eso, si le compraba uno, su omega podría entretenerse con eso y dejarlo descansar y dormir.

-Jaekyung- Namwook fue a ver al alfa cuando este pasó por su lado... como si el piso fuera lava- Oye Jaekyung a dónde vas.

El alfa se detuvo y lo miró por encima del hombro.

-A resolver los antojos de mi omega- y se fue dejando a Namwook con la boca abierta.

-Dudo mucho que funcione, más bien debería aprovechar y recargar baterías para largo- se dijo a sí mismo dada su vasta experiencia y después de haber probado todos los métodos posibles hasta que se rindió y solo disfrutó porque después... vendría la etapa de abstinencia absoluta por un buen tiempo.

***

Jaekyung volvió satisfecho a la tarde a su casa. Tenía una bolsa de tamaño considerable en su mano pues no se había decidido por uno en general. No era mucho de usar esas cosas, casi siempre eran regaladas. Nunca se imaginó que tendría que depender de ellas.

Y alguna seguramente funcionaría. Necesitaba una noche con 8 horas seguidas de sueño de forma urgente. El descanso era parte primordial de su estado como atleta.

Entró a la casa y había un delicioso olor que impregnaba todo. Y sabía que no era solo la comida. Dan no controlaba sus feromonas para nada. Era como si su embarazo le hubiera quitado el tapón que las mantenía dentro de su cuerpo, y ahora estaba por todos lados. Y era como si el omega no se diera cuenta, pero a él como alfa pues realmente lo afectaba.

-Dan- entró a la cocina donde el omega estaba cocinando.

Jaekyung ya había valorado la opción de contratar a alguien para que hiciera las comidas y se encargara de la mayoría de las cosas de la casa, dado que la barriga de Dan ya tenía dimensiones a tener en cuenta. Solo que eso no sería nada fácil. Incluso el personal de limpieza había sido minuciosamente seleccionado y tenía horarios muy específicos para hacer su trabajo. Además, que tendría que hablarlo con Namwook ya que además de entrenador era su manager y si entraban a alguien que después esparciera rumores a la prensa sería un serio problema.

Otra cosa más a resolver. Ah, le estaba doliendo la cabeza. Y por lo que le habían dicho esto solo era el comienzo.

Por el momento primero tendría que resolver los antojos actuales del omega.

Ante su llamado el omega se giró y sus ojos brillaron. Ese brillo que estremeció al alfa. Se notaba a leguas lo que le había pasado por la mente a Dan. Pero antes que el omega llegara a él Jaekyung extendió su mano y le entregó la bolsa.

Dan la agarró entre sus brazos y miró confundido a Jaekyung.

-¿Qué es esto?- preguntó mirando al interior para después ponerse rojo como un tomate.

La vena de la sien de Jaekyung palpitó.

-Te da vergüenza eso y no comportarte como si estuvieses en celo.

Eso hizo que Dan se pusiera aún más rojo de vergüenza. Es que las hormonas cuando estaban disparadas pues... no había tiempo para la vergüenza. Había prioridades. Además...

-pero no lo he escuchado quejarse- dijo Dan con un puchero y en voz baja, aunque Jaekyung lo escuchó.

El alfa gruñó. Como que se había vuelto bastante atrevido últimamente su omega como para decirle aquello. No mentía, no se había quejado abiertamente, pero eso no significaba que hasta él necesitara un respiro. Le estaba pasando factura y grande. Ya apenas podía entrenar como tal.

-Quiero dormir un poco esta noche. Usa eso si tu agujero quiere comerse algo- se resolvió el cabello- Voy a darme un baño... solo- recalcó la última parte.

Y subió la escalera hacia su habitación.

Dan se quedó en la cocina con la bolsa de cosas que no le llamaban precisamente la atención. No tenían feromonas como tal, aun cuando la bolsa olía a Jaekyung. Su puchero se hizo más grande.

Sin embargo, y aunque Jaekyung creyó que tendría una noche de sueño tranquila. Poco después de cerrar los ojos sintió un peso familiar sobre sus caderas. Y no tuvo que abrir los ojos para saber que era.

-Te dije que si te querías comer algo que usaras lo que te compré- dijo con voz cansada. Quería dormir, no era un juego, estaba agotado.

-Pero, esto no sirve- Dan sollozó sobre él.

Jaekyung abrió un ojo por debajo de su brazo y vio al omega sentado sobre él agarrando en una mano uno de los consoladores. Sus mejillas hincadas y rojas y sus ojos aguados.

-Probaste con otra cosa- había comprado varios, alguno debía funcionarle.

Pero Dan volvió a negar. Y a Jaekyung solo le quedó suspirar.

-Solo será una vez y después vete a dormir carajo, yo necesito descansar- dijo gruñendo y levantándose sobre su codo, estirando su mano hasta posarla sobre la nuca del omega y tirando de este hacia abajo- Ven aquí-

Y lo besó. 

aqui capítulo random jeje

Y para no quedarnos fuera. Agradecemos a Beyonce por permitir la publicacion de este capitulo. 🤣🤣🤣

No jajajjaa. Con los comentarios del capitulo anterior morí de la risa.