Dan no podía dormir.

Estaba acostado en su cama, rodeado de la ropa de Jaekyung que dentro de poco tendría que hacer limpieza porque se le estaba acumulando y mucha ya no olía como el alfa. Su mirada perdida en el techo con miles de pensamientos moviéndose de un lado a otro.

Como que... había ido mejor de lo que se había imaginado. Jaekyung lo había tomado... bastante bien para ser... Jaekyung.

Es que el alfa era tan impredecible que daba dolor de cabeza. Se giró de lado, algo que había hecho a lo largo de la noche y no pasó mucho tiempo antes de hacerlo al otro lado. Solo no se acostaba boca abajo debido a su embarazo. No tenía barriga aún pero después de haber estado en el hospital debía ser mucho más precavido.

Poco después se levantó, fue al baño, volvió. Caminó un poco y de pronto la puerta se abrió de golpe.

-¿Por qué carajos no dejas de hacer ruido?- Jaekyung mostraba una expresión de molestia en su rostro y los ojos rojos, marca notable que estaba durmiendo. De las pocas veces que lo hacía.

Fue entonces que Dan volvió a recordar el sueño ligero del alfa y aunque había intentado hacer el menor ruido posible, al parecer había sido inútil. Ahora lo tenía allí siendo una bestia.

-Jaekyung, lo siento, yo...- pero sus palabras quedaron en el aire cuando el alfa se acercó a él y lo cargó como lo estaba haciendo últimamente.

Dan no tuvo más remedio que agarrarse de sus hombros asustado por la reacción de este y lo que podría hacerle. El alfa salió del cuarto con él obviando el nido que Dan tenía en la cama con cada vez más prendas.

-Jaekyung, disculpa, Jaekyung.

Pero para su sorpresa este lo arrojó a su cama.

-Duérmete de una puñetera vez, mañana tengo que levantarme temprano y contigo dando vueltas no puedo dormirme- le dijo el alfa rodeando la cama y acostándose del otro lado poniendo un brazo detrás de su cabeza.

Al momento las feromonas de Jaekyung nublaron el sentido de Dan, no solo las que estaban impregnadas en las sábanas o en cada sección del cuarto, sino que el alfa estaba soltando. Eran leves pero lo suficientemente agradables para que el sueño se adueñara de él y su mente quedara en blando.

Si, al parecer estar cerca del alfa y padre de su cachorro estaba ayudando a relajar su cuerpo.

-Buenas noches Jaekyung- le dijo acostándose de lado hacia él y tapándose con la colcha hasta el cuello.

Pensó que no recibiría respuesta como muchas veces, pero antes de cerrar los ojos escuchó un leve sonido proveniente de la garganta de Jaekyung. Después de eso Dan se quedó completamente dormido al fin envuelto en una agradable atmósfera.

Por su parte minutos después Jaekyung abrió levemente los ojos, algo normal en él cuando su sueño era interrumpido y su insomnio se tomaba el control de su noche. Su nariz aspiró el olor que estaba llegando a él. Miró por el rabillo del ojo al omega completamente dormido en la cama, este... inconscientemente estaba soltando feromonas en respuesta a las de él. Eran pocas y muy dispares pero lo suficiente para que él las sintiera. Quizás era debido a que hacía poco había despertado como omega.

Eso sería un problema que se debía tratar. Un omega no debía estar soltando feromonas por doquier y aunque él lo hubiera marcado y otros alfas no responderían de la misma forma que lo haría si su nuca estuviera intacta, sería algo incómodo y... él no quería estar tampoco cachondo las 24 horas del día por las feromonas.

Tenían un olor suave, como se esperaría de alguien tan delicado como Dan, pero más que eso sus músculos se relajaron, incluso sus párpados se volvieron más pesados.

Acaso la solución para su insomnio eran... las feromonas de su ahora compañero.

-Qué carajo- murmuró, pero el sueño ya se estaba adueñando de él.

Antes de poder seguir protestando, por primera vez pudo quedarse profundamente dormido.

***

La alarma de su celular lo despertó a primera hora de la mañana. Aún le quedaba tiempo para correr y hacer sus cosas, pero... que bien había dormido. Ni siquiera recordaba en que momento había cerrado los ojos como tal. Debido a eso su cuerpo se sentía realmente lleno de vitalidad.

Se removió un poco encontrando que había algo pegado a su espalda. Jaekyung alzó una ceja y miró por encima de su hombro para notar que su espacio en la cama había sido invadido por Dan que aun dormía profundamente.

-Oye Dan- sin embargo, el mayor protestó ante la mención de su nombre y siguió durmiendo pegándose más al cuerpo grande de Jaekyung.

Las feromonas de él ya se habían dispersado, como si nunca hubieran estado allí pero el alfa las podía recordar bastante bien. Con la expresión neutra miró su celular y en vez de levantarse se quedó buscando algunas cosas en la pantalla mientras su omega aún dormía detrás de él.

Todavía tenía tiempo.

Dan abrió los ojos un poco más tarde encontrando que estaba solo en la cama. Alzó un poco la cabeza con el cabello desordenado y se percató de un detalle bien grande. No era esa parte de la cama donde había dormido, sino del otro lado. No sabía cómo había llegado a esa parte de la cama, esperaba que Jaekyung no se la formara por haber terminado allí.

Revisó rápidamente la hora para darse cuenta que el alfa debía estar corriendo para ese momento. El lado donde debía estar acostado antes también estaba frío.

Él ya se sentía mejor y aunque necesitaba reposo estar acostado todo el tiempo era realmente agobiante. Así que se levantó en su clásica rutina para preparar el desayuno y arreglar la cama, donde encontró en la esquina el pantalón de dormir que había usado Jaekyung antes.

Lo agarró dudoso entre las manos, pero ya que el alfa no le decía nada por su nido... como que habría una nueva adquisición.

***

-Oye Dan, acaso piensas mudar todo mi closet a tu cuarto- le preguntó el alfa sentado en la mesa esperando que Dan terminara el desayuno.

Este se giró un poco nervioso.

-No creo tener tanta ropa de usted en la habitación- el omega se rascó la mejilla con un dedo.

El alfa entrecerró los ojos separando la mirada del folleto que tenía entre sus manos y que antes parecía leer con mucha atención.

-¿Tengo que contar cada una de las prendas que tienes ahí? Algunas ya apestan.

-No apestan- Dan reclamó y después se quiso morder la lengua, pero no iba a retroceder- Con ellas... me siento mucho más cómodo cuando estoy ansioso. Es algo de los omegas, aún estoy aprendiendo de ello y no lo puedo controlar- le costaba trabajo reconocerlo delante del alfa, sin embargo, con Jaekyung era mejor irle a lo directo. Era una persona demasiado complicada como para complicarle los temas.

-Y aun así solo te quedaste dormido en mi cama- le refutó el alfa.

-Usted fue el que me llevó a su habitación.

-Porque no te quedabas dormido de una vez, y para colmo casi me botas de mi propia cama.

-Yo estaba dormido, como voy a saber lo que hago.

...

La conversación quedó en un momento muerto. Jaekyung chasqueó la lengua con irritación y desvió su mirada hacia el folleto para seguir leyéndolo.

-Escoge las prendas más recientes y el resto mándalas a lavar. No quiero tener que entrar a tu habitación y que esta esté hedionda.

Dan apretó los labios y quería protestar de nuevo, pero era mejor no hacerlo. Al menos le dejaba tener las prendas que él se robaba en los días más cercanos. Así... quizás si podría ser. De todas formas...

«Tacaño»

Pensó Dan ante la negativa del alfa de dejarle toda la ropa. No es como si se la fuera a vender.

***

-Dan, viniste.

-Hola Dan.

Fueron parte de los saludos que le dieron al omega en cuanto este entró por la puerta junto al alfa en el entrenamiento de la tarde. Este lo había pasado a buscar y habían ido al gimnasio. Jaekyung al momento los miró por el rabillo del ojo a ellos y los demás se tensaron.

-¿Qué está pasando?- Namwook se acercó ante el bullicio- Oh Dan estás aquí. ¿Estás bien como para trabajar?

-Solo estará aquí para darme el estiramiento cuando termine el tratamiento. Déjalo encerrado en la oficina y que no haga nada más- le dijo Jaekyung de forma seca antes de alejarse, pero dejando una bruma dominante de feromonas vertidas sobre Dan y de advertencia a los demás.

-Oh, este está de mal humor hoy- dijo Namwook- ¿Ustedes discutieron?

Dan sonrió un poco incómodo.

-Algo así.

-Ese maldito. Lo primero que dijo el doctor- Namwook iba a ir a pegarle un buen madrazo cuando fue agarrado por Dan.

-Está bien, no fue nada grave. Él se está adaptando... y yo también.

El entrenador frunció los labios todavía sin estar convencido.

-Ustedes sigan entrenando, ya vieron a Dan bien, y escucharon a Jaekyung, no lo provoquen. Dan, tú vienes a la oficina. Hay cosas que tenemos que hablar de cómo serán las cosas por aquí.

Y el omega no se podía negar.

¿Sobre qué tema está leyendo tanto Jaekyung últimamente?