Dan no pudo evitar que un gemido saliera de su boca donde la saliva se había derramado tanto que era un desastre mezclada con semen. Sus manos intentaban aferrarse a la sábana de la cama, pero le era inútil, su cuerpo se encontraba cansado. ¿Cuántas veces iban ya? No lo sabía.

Ya llevaba un tiempo viviendo con Jaekyung por lo que el sexo era algo tan habitual en su vida que su propio agujero ya no dolía como antes, incluso no necesitaba la misma preparación que al inicio, aunque aún seguía siendo malditamente estrecho como siempre decía al alfa. Razón por la que, entre eso, y además su alimentación había logrado mejorar su rendimiento en la cama, y no perdía el conocimiento en tan rápido.

Y eso parecía que excitaba aún más a Jaekyung que intentaba por todos los medios llevar al límite su resistencia. No importaba las posiciones, ni lo profundo que llegara dentro de él, ni la cantidad de veces que se corriera dentro de él hasta que su vientre terminaba ligeramente abultado de las cargas de semen, su objetivo siempre era burlarse de él hasta que apenas pudiera moverse en la cama y solo le quedaba cerrar los ojos y sumirse en la inconciencia.

Al menos ahora podía despertar en una cama realmente cómoda que aliviaba su cansancio y podía asearse con agua caliente, aunque solía demorar bastante dentro teniendo que sacar todo lo que estaba dentro de él. Y después podía recibir un desayuno cargado y bastante sano. Jaekyung no dejaba que nadie entrara y le cocinaran, era alguien sumamente quisquilloso con su comida, y aunque Dan nunca se lo imaginó en esa faceta, ver todas las mañanas al alfa cocinando era algo fuera de este mundo.

Eso... era de las pocas cosas positivas, dependiendo del estado de ánimo del alfa y de su agenda, podía terminar doblado en la mesa con el pene de Jaekyung dentro o de camino al gimnasio. Era tan impredecible que el mismo Dan ya intentaba no pensar en eso... como ahora.

-AAAHHHHH- intentó ahogar un gemido, pero no pudo.

Su vientre era golpeado una y otra creando un bulto obsceno justo donde estaba su ombligo tanto por el semen que estaba allí junto con las embestidas que le daba Jaekyung.

-Por favor, un poco más suave- intentó suplicar. Apenas podía sentir sus muslos y nalgas, por no mencionar su agujero. Este estaba tan suelto para ese momento de la noche que...

-Aprieta el culo- Jaekyung gimió detrás de él dando una sonora palmada en su nalga. Su rostro mostraba una expresión de satisfacción, aunque su cuerpo se encontraba bañado de sudor por el exceso de ejercicio.

Dan apretó los ojos y negando ante algo que era imposible. No podía sentir los músculos de allí. Más bien, hacía un esfuerzo masivo para poderse mantenerse sobre sus rodillas mientras su pecho inflamado por las mordidas sobre sus pezones, estaba desparramado sobre la cama.

Escuchó un chasquido de dientes detrás de él y acto seguido fue agarrado por uno de sus brazos y alzado. Su espalda chocó contra el pecho duro del alga y su cadera quedó sentada sobre los muslos de él haciendo que su miembro se introdujera más. Dan iba a protestar, pero su rostro fue girado por los dedos de Jaekyung y su boca se vio invadida nuevamente por la lengua del alfa.

Era realmente abrumante. No había otra forma de describirlo. El sexo con el alfa era más allá de lo intenso y la forma en que devoraba el interior de su boca no se diferenciaba para nada de cómo su parte baja era casi destrozada.

Jaekyung soltó su boca y soltó un bufido de burla.

-Te pasas todo el tiempo quejándote y que te duele, pero tú también lo estás disfrutando- definitivamente no era un alago.

-No, no es as...- no pudo seguir, fue interrumpido por un gemido que salió de su garganta cuando los dedos del alfa se envolvieron alrededor de su miembro que para su sorpresa estaba erecto después de todo lo que había hecho esa noche.

Jaekyung alzó una ceja sudada.

-Veamos si todavía aquí queda algo- había una sonrisa de esas que le daba cuando quería jugar... y los juegos con él nunca terminaban nada bien.

Kim Dan quiso huir de él, pero el alfa lo envolvió con su grueso brazo y lo pegó a su cadera mientras este se sentaba sobre sus talones. El pene de él estaba enterrado tan profundamente dentro de él que casi tenía ganas de vomitar, pero a diferencia de otras veces que le era doloroso el vientre de él se estremecía. El beta no sabía si era porque se estaba influenciando con las feromonas del alfa. La habitación debía estar atestada de ellas. Había escuchado una vez de alguien que había comentado que le era imposible entrar al cuarto del alfa después de que este tuviera sexo o durante el acto porque era casi asfixiante.

Pero no era momento de pensar en otros, sino en él. La mano de Jaekyung apretaba con fuerza su miembro mucho más pequeño del que tenía enterrado dentro de él, y se movía de arriba abajo forzando el orgasmo dentro de él. Sabía dónde tocar, además, comenzó a mover su cadera estimulándolo rozando su próstata cada vez que se hundía.

- Jaekyung no, espera- Dan echó la cabeza hacia atrás con lágrimas que se desplazaban por el borde de sus ojos. Era demasiado intenso, estaba agotado, apenas podía controlar su cuerpo y estaba haciendo un desastre de él- No saldrá...na... da.

Pero el alfa nunca aceptaba una negativa y se enfocó en sobar aún más el miembro de Dan como si fuera un simple juguete de goma, no estaba midiendo su fuerza.

-Duele, duele- sollozó el beta casi hipando e intentando detener la mano sobre sus genitales.

Jaekyung pareció reaccionar por unos segundos sobre su monstruosa fuerza por lo que aflojó un poco su agarre, lo que no significó que se detuvo. Por el contrario, se enfocó también en buscar su liberación. No pasaron muchos segundos cuando Dan abrió sus ojos llenos de pánico.

-No, espera, espera- enderezó la cabeza y se removió- la mano alrededor de su miembro no se había detenido- Jaekyung para, para.

No era el típico orgasmo el que venía, ni la salida de semen, venía algo más. Oh dios, no más vergüenza.

- Jaekyung, no- suplicó, pero eso solo lograba excitar más al alfa que insistió hasta que Dan no pudo soportarlo más,

Liquido transparente comenzó a salir de su uretra con la última embestida y un grito salió de los labios de Dan. Su cuerpo se desparramó sobre Jaekyung mientras tenía su primer squirt manchando las sábanas del alfa y no se detenía. Ni siquiera podía pensar en las consecuencias mientras su cuerpo era un mar de temblores.

El le había advertido, no quedaba nada... al menos de semen. Nunca se imaginó que ocurriría esto.

Por su parte Jaekyung se había detenido por dos cosas, la primera era que también para él era la primera vez que veía una imagen como esa. Y más que molestarse por su cama que la podía cambiar como otras veces, era el hecho de la escena. Su rostro se desfiguró en una mueca que sin Dan la hubiera visto se hubiera aterrado. La idea de repetirlo fue tal que quedó grabada en su mente y fue lo que llevó a lo segundo.

Apretó sus dientes y soltó un jadeó mientras su ultimo orgasmos lo recorría y volvía a derramarse dentro de Dan juntando su semilla con la que ya estaba dentro de su vientre. Llevó la mano a la base de su pene donde el nudo comenzaba a crearse y dejó caer a Dan de lado mientras lo apretaba.

Su miembro salió del agujero del beta jadeante, que dejó un rastro blanquecido desde este hasta sus muslos. Apretó su nudo conteniéndolo y este bajó rápidamente al no haber anudado entro de un omega y era algo que no haría. Anudar podría sentirse bien, pero estar atado a una persona por una hora era más de lo que podría tolerar.

-Oye- giró su rostro hacia Dan que estaba acostado debajo de él. Su cuerpo aun temblaba y de su trasero se derramaba el semen del alfa, por no decir que debajo de él también había la muestra de lo que había salido antes de él mismo- ¿Qué se supone que haga yo ahora con el colchón arruinado?

Pues Dan no sabía. Apenas lo pudo mirar por encima de su hombro antes que todo se volviera negro para él. Si Jaekyung lo fuera a castigar por destruir su carísimo colchón al menos que lo hiciera después que él pudiera descansar algo.

***

El sol de la mañana golpeó el rostro de Dan que se removió al otro lado para evitarlo, pero su nariz chocó contra algo. Eso lo hizo abrir los ojos y encontrar que... estaba en la habitación donde normalmente dormía, pero eso no era lo que le llamó la atención.

-¿JAEKYUUUUNG?- gritó para sentarse en la cama soltando un gemido de dolor y echándose hacia adelante. Le dolía todo lo que era posiblemente humano. El sexo del día anterior había sido... no quería recordar.

Sus mejillas se tiñeron de rojo cuando la imagen de él haciendo un desastre de la cama del alfa pasó de nuevo por su mente.

-Cállate- Jaekyung por fin se removió a su lado y tenía el ceño fruncido mientras abría sus ojos- Mierda- fue lo primero que soltó sentándose en la cama.

Dan no comprendía que había pasado. La parte de ellos dos desnudos si, de tener sexo y que aun su vientre estuviese lleno porque la tarea de sacarlos siempre era de él, pero de que Jaekyung despertara junto a él lo que en su cuarto... lo desconcertó.

-Buenos... días- lo miró un poco dudoso.

El alfa con los ojos entrecerrados de devolvió la mirada y Dan no sabía si salir corriendo de allí o esperar su castigo.