Cuando Melissa llegó a su oficina el lunes, como ocurría siempre, todos sus empleados ya habían llegado. Pero en esta ocasión, algo fallaba, ninguno se encontraba en sus respectivos sitios. Todos se hallaban entorno a la mesa de Cristina.

—Hola. Buenos días a todos —saludó Melissa a sus empleados.

Ellos al ser cazados fuera de sus lugares habituales, se sobresaltaron y volvieron rápidamente a sus mesas como si se encontraran haciendo algo ilegal.

—Hola, buenos días, Melissa —contestaron todos al unísono.

—¿Qué tal el fin de semana, Melissa? —agregó a continuación Cristina sentada en su escritorio.

—Muy bien, gracias. Pero, ¿a qué se debe la pregunta? —le contestó ella intrigada.

—Porque se te ve muy bien acompañada en la prensa rosa. ¡Qué calladito te lo tenías jefa!

—¿Disculpa? —Melissa no sabía a que se refería su empleada. ¿Por qué habría de salir ella en la prensa rosa?

—¿No lo sabías? —le contestó su empleada extrañada porque ella no supiera que salía en todas la revistas.

—La verdad, Cristina, es que no se a qué te refieres.

—A estas alturas deberías de saber que siendo novia de quien eres, no pasarías desapercibida para los paparazzis. Tu chico es uno de los solteros más deseados y codiciados del país. Yo porque estoy casada que sino te tendría una envidia...

Cristina le tendió la revista que antes habían estado viendo todos sus empleados. En la portada se podía leer el siguiente titular "¿La pareja del verano?" junto a una fotografía de Germán y ella bailando felizmente en la fiesta del solsticio de verano celebrada en la casa de los padres de él. Melissa estaba sorprendida por la noticia. No creía que la relación saliera a la luz pública tan pronto, era un riesgo asumible y para el que ya estaba preparada. Seguramente a su suegro no le haría mucha gracia aquella portada.

—¿Me dejarías la revista? —se dirigió a su empleada.

—Faltaría más, jefa —le contestó Cristina—. ¿Germán es tan guapo en persona como en la tele?

—Gracias —contestó simplemente Melissa omitiendo contestar a la pregunta que su empleada le acababa de formular. A continuación, en voz alta agregó—. Os recuerdo que en diez minutos tenemos reunión de trabajo —enfatizó tocando su reloj de pulsera—, por si ya se os había olvidado.

Melissa giró sobre sus talones y se dirigió a su despacho taconeando. Antes de entrar, saludó a la joven secretaria que sustituía a la habitual que se encontraba de vacaciones.

—Buenos días, Marlene.

—Buenos días, Melissa —le contestó esta.

Melissa finalmente entró en su despacho. Cerró la puerta a su paso y se sentó en su cómodo sillón de oficina. Dejó la revista sobre su imponente escritorio de madera noble. Encendió su ordenador y comprobó su correo electrónico. Cuando terminó sus labores habituales, todavía la quedaban cinco minutos que decidió dedicar a leer la noticia de la revista en la que ella y su pareja salían.

"Germán Domínguez tiene una nueva conquista."

Germán Domínguez, hijo del conocido político Borja Domínguez, acudió a la fiesta que organizaba su familia para celebrar el inicio del verano acompañado de una guapa y desconocida mujer. Parece ser que al actor no solo le va bien en el terreno laboral, ya que la serie en la que ha debutado "Balas perdidas" esta siendo todo un éxito en la pequeña pantalla, sino que también parece que le sonríe la suerte en el terreno amoroso.

Mucho se especuló durante el estreno de la serie sobre el motivo por el que el deseado intérprete no fuera acompañado de ninguna fémina, cosa a la que nos tiene poco acostumbrados. Parece ser que su guapa pareja no es amiga de flashes. Sus anteriores novias siempre han estado relacionadas con el mundo de la farándula. En esta ocasión, por el contrario, la mujer es totalmente anónima, cosa que a las comunes de las mortales nos deja volar nuestra imaginación.

Las primeras imágenes de esta pareja fueron tomadas durante el transcurso de la fiesta del solsticio de verano y entre ellos puede percibirse una gran complicidad.

Durante las próximas semanas les iremos poniendo al día de la identidad de esta guapa mujer y del transcurso de esta magnífica relación.

Desde esta redacción, les deseamos que el amor les dure mucho tiempo. Felicidades Germán. Esperamos que hayas encontrado, por fin, tu media naranja.

—Lo que me faltaba, ser la comidilla de todo el mundo y tener a una recua de periodistas pisándome los talones —sentenció Melissa en voz alta para ella misma tras leer el artículo que hablaba sobre ella.