¡Que bueno estar de vuelta! ¡Wuuuuuu! Este capítulo lo tenía pausado por siglos, sin saber cómo o cuándo terminarlo jeje, pero al fin llegó <3

Alerta de lenguaje, en cada capítulo creo que pongo "malas palabras" perdón si les incomoda pero esto es puro humor, ¿sí? :)

15 pinches páginas... Un capítulo suuuuuper largo para compensar mi larga ausencia ;)

Capítulo 21: Campamento (Ruiseñoble)

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Estaba en casa de Marinette pasando el rato. Resulta que Laura, ejem, perdón. Clara Ruiseñor había subido un video nuevo y lo estábamos viendo.

—Don't you stop, listen to the music~

—No sabía que eras fanática de ella, Mari— vi el video, levemente aburrida.

—Ah~ ¿no creen que es fantástica, chicas?— Suspiró la oji azul viendo fascinada a la cantante.

—Hm-hm— Tikki asintió mientras se movía al ritmo de la música. —Sus pasos de baile son geniales.

—Aaaah, no sé. Nunca fui taaaaan fan de Laura Marano— me encogí de hombros.

—¿Quién?— Preguntaron al unísono.

—Laura Marano. Ese es su nombre verdadero. Está inspirada en una chica de mi mundo.

Gaspearon. —¿En serio? Wow...— Marinette miró a la pantalla con los ojos dilatados.

—... Cantar y bailar lo son todo para mí— exclamó la artista sonriente mientras bailaba. —Me alegra compartir mi don con todo aquel que disfrute mi canción.

—¿La oyeron? Es una artista de verdad— fangirleó poniendo sus manos en ambas mejillas.

—...Ladybug y Chat Noir tienen mi amor y admiración...— Continuó la castaña de la pantalla.

—Tal como yo— susurré rodando los ojos.

La azabache cayó al piso, emocionadísima por la canción que su cantante favorita le iba a escribir.

—Primero Jagged y ahora Clara ¿quién sigue? ¿Juanito Alcachofa?— Pregunté retóricamente con tono divertido. Tikki y yo nos reímos.

—... Un pajarito me dijo que ya tienes a tu Chat Noir— Alec anunció.

—Mis labios no lo dirán, pero pronto él se revelará~

—Adrien será Chat Noir— comenté con tono desinteresado.

Tikki y Marinette me vieron inmediatamente, muy asombradas.

—¡¿K?!— Gritó la azabache cayendo al piso.

—¿Cómo lo sabes, ______?— Tikki preguntó.

—Porque yo lo sé todo— moví mis manos para darle misterio al asunto.

El teléfono de Marinette sonó. Ella, arrastrándose como pudo, contestó la video llamada.

—¿Oíste eso Marinette?— Habló Alya.

—¿Oír qué?— Respondió confundida la azabache.

—¿Cómo que "qué"? Clara Ruiseñor busca a una Ladybug y extras para su video musical.

Fui al lado de Marinette y puse ambas manos en sus hombros. —No oyó por mi culpa, le dije que Adrien sería Chat Noir.

—¿Qué? ¿Cómo lo sabes?— Todas se sorprendieron al saber la noticia.

—Me lo contó un pajarito— sonreí juguetona desviando la mirada por un segundo.

—En fin, todas iremos a la audición— Alya señaló a Rosita, Juleka, Alix y Mylène, quienes estaban detrás de ella. —Ustedes también vendrán. Y si Adrien será Chat Noir, Marinette tendrá oportunidad de estar con él.

—¡A-ah! No creo que yo vaya a hacer aaaalgo así de importante como para estar con él y-

Sonreí con simpatía. —Ahí nos vemos— colgué.

—¡¿Pero en qué pensabas?! ¡No podré actuar bien si estoy con él!— Me miró alarmada.

—¡Y ella no puede ser Ladybug!— Tikki apresuró a decir.

—¿Entonces quién?— Pregunté viéndolas.

—¿Tú?— Respondió la kwami.

—Solo en sueños, literal— dije recordando un sueño bizarro donde yo era literalmente Marinette y estaba huyendo de una Chloe robot.

—¿A qué te refier-?

—No quieres saber— dije rápidamente y salí del cuarto de la azabache, con ella siguiéndome.

Llegamos al lugar del ensayo y fuimos a ponernos en la fila con Alya y las chicas.

—¡Ojalá nos den un papel!— Exclamó Rosita muy emocionada.

—Mmm, no sé we, yo solo vine para hacerles compañía. No me sentiré mal si no me dan nada— me encogí de hombros.

—No eres divertida ______— comentó Alya.

—Si ella no quiere entonces que así sea, no la pueden obligar— Juleka me sonrió.

—Gracias Jules, al menos alguien tiene tacto aquí— sonreí burlonamente hacia las demás.

—¿Qué nos habrá querido decir?— Mylène preguntó mientras las otras se encogían de hombros y Juleka y yo soltamos unas risitas.

Pasaron como 20 minutos y las audiciones aún no habían empezado.

—¡Haaaambre!— Gruñí dramáticamente. Alix puso una mano en mi hombro y señaló a una mesa con comida. —¡A webo!— Reí como loca y fui corriendo a dicha mesa.

—¿Señorita?— Escuché a lo lejos. No creí que se dirigían a mí pero volteé a ver por curiosidad.

Casi escupo mi bebida. —¿N-Nathalie?— Dije sorprendida.

Ella me hizo un gesto para que me acercara. Miré a ambos lados y me señalé dudosa. La mayor asintió y fue hacia los remolques que estaban en el lugar.

(Rayos, por tragona me meteré en problemas) pensé y decidí ir, no sin antes llevarme una bandeja de sandwiches que había.

—Si me regañarán por tragona, entonces les daré una buena razón— sonreí agarrando un sandwich de la bandeja. —Buenos días, Nathalie— mordí mi sándwich. —Perdón, es que tengo hambre— sonreí con la boca cerrada después de tragar.

—¿Toda la bandeja? Está bien, no importa— negó con la cabeza. —Soy consciente de... Su estrecha relación con Adrien. Resulta que está muy nervioso por esto— miró al escenario y regresó a verme.

—¿Y qué se le ofrece?— La vi con curiosidad.

—Estoy segura que se tranquilizaría si usted le diese apoyo.

Me sorprendió lo que dijo. —Oh, em ¿claro? ¿Cómo exactamente...?

—Acompáñeme— me llevó al camarote de Adrien. —Tiene 5 minutos— tocó la puerta.

—A-adelante— se oyó decir a Adrien.

—Uy, sí suena nervioso— miré a la secretaria con una mueca.

Ella asintió. —Lo dejo en sus manos.

Me asomé por la puerta y vi a Adrien, vestido como Chat mirándose en el espejo.

—Ey cosa sexy, tengo una bandeja de sándwiches— llamé su atención cuando entré.

—______— soltó un suspiro de alivio, me quitó la bandeja poniéndola en la mesa y se apresuró a abrazarme y cerrar la puerta. —¡No sé qué voy a hacer! Ellos quieren que me vista como Chat, pero se darán cuenta de que soy el verdadero— dijo sin dejar de caminar con nerviosismo.

—Solo esconde la máscara y di que no la encontraste— le recomendé lo que hizo en la serie.

—Buena idea, ¿crees que sea creíble?— Cuestionó un poco inseguro.

—Claro, la gente es tan ciega— Plagg y yo hablamos al unísono y nos sonreímos.

Tocaron la puerta y la voz del asistente sonó. —2 minutos joven— avisó.

—Bueno, te dejo. No debería estar aquí pero Nathalie me dijo que te diera un poco de apoyo moral así que...— Me aseguré de que la puerta estuviera cerrada y le di un beso rápido en la comisura de los labios. —Suerte, ángel— le guiñé un ojo mientras iba por mi plato lleno de sándwiches.

—Gracias ma chère, como siempre me calmas los nervios— soltó un suspiro sonriente.

—Y te calmará más comer un sandwich, ten— le di uno y salí del remolque. —Rómpete una pierna— le deseé suerte y regresé con mis amigas antes de que Adrien finalmente saliera de su remolque.

—¿Dónde estabas?— Preguntó Alix mientras yo regresaba a la fila.

—En sus pensamientos— señalé a todas con una expresión divertida.

—No homo— Respondieron, menos Rosita y Juleka que se miraron soltando una risa.

—Lol, pero no lo negaron— posé como diva. —En fin, tanto sándwich y refresco me hizo querer ir al baño— mentí y mostré el plato lleno de sándwiches. —¿Gustan?

Asintieron y comenzaron a comer a la vez que las audiciones para ser Ladybug comenzaban. Ninguna fue lo suficientemente convincente.

—A webo, rechazó a toda la chusma— le pasé el plato con el último sándwich a Mylène, quien lo agarró y colocó dicho plato en otra mesa vacía.

De la nada, la Laura Marano :v tomó un plato lleno de chouquettes. —Supongo que tienen hambre después de esperar- — no terminó la frase y se tropezó a propósito con sus tacones.

Por reflejo la atrapé antes de que cayera al suelo.

—¿Cómo es que logras bailar con semejantes zapatos?— Le pregunté a la cantante, extrañada.

Ella no respondió pero sus ojos brillaron a la vez que una sonrisa se formó en su rostro.

—¿Qué?— Pregunté y miré detrás de mí para ver si estaba viendo otra cosa, hasta que mis engranes en mi cerebro hicieron clic, haciéndome recordar que...

—¡OH!— Exclamé y puse de pie a Clara. —Nonononono— agité mis manos alejándome unos pasos de ella.

—Sí, sí, sí, sí ¡SÍ!— Exclamó pegando un brinco y se lanzó literalmente a abrazarme. —¡Mi Ladybug serás! ¡En el video brillarás!— Me tomó de la mano y me dio un giro como si estuviésemos bailando.

—¡No! ¡Ni merga!— Me solté de su agarre.

Marinette trató de hablar. —____-

—¡Ni verg* wey!— Me volteé para verla y regresé con Clara Ruiseñor. —En serio, agradezco que me eligieras pero tengo miedo escénico, y solo he bailado frente a un espejo en mi habitación-

Adrien aclaró la garganta, interrumpiéndome. Lo miré fastidiada pensando (sí, recuerdo cuando baile contigo en Notre Dame). Rodé los ojos y seguí con mi discurso.

—Además, solo quiero ser extra y estar con mis amigas— señalé a mi grupo, quienes me vieron con una sonrisa.

Antes de que la cantante hablara, la puerta del lugar se abrió con un portazo y entró Chloe con su peluca chafa de Marinette (que ciega, Dios) y el traje característico de la superheroína.

—Llegó la reina de todo— sonrió con expresión presumida.

Yo me quedé paralizada viéndola con shock.

—¡Cambió de planes! ¡______ estará más que encantada de hacer el papel de Ladybug!— Exclamó Marinette mientras me empujaba hacia un remolque. —Vamos, te acompaño a tu remolque— sonrió con nerviosismo.

Clara estaba que reventaba de felicidad. Chloe por el otro lado, se fue irritada, ni le dejaron hacer nada XD.

Ya en el remolque y con el traje de Ladybug puesto para el video...

—¡¿Qué demonios pasó, Marinette?!— Alcé mis brazos en el aire con fuerza al quejarme.

—¡Me puse nerviosa! ¡No quería que Chloe estuviera cerca de Adrien!— Trató de excusarse.

—Entiendo pero, yo no puedo ser Ladybug, tantas personas me verán sa-sabrán quién soy— tartamudeé con nerviosismo. —No creo que-

La oji azul puso sus manos en mis hombros y me llevó frente al espejo.

—Luces genial. ¿Quién mejor que tú para representarme?

—Pero seré una Ladybug chafa del barrio— hice una mueca.

—Eres una Ladybug original y no un copy paste como Chloe.

Ambas reímos.

—Marinette tiene razón ______. ¡Lo harás muy bien! Has tenido el poder absoluto en tus manos, ¿quién dice que no puedes ser Ladybug en un video musical?— Tikki salió de la bolsa de la azabache.

—Gracias por su apoyo amigas, haré mi mejor esfuerzo para mantener tu nombre en alto— señalé a Marinette mientras ponía mi otra mano en mi cintura.

—¡Así se habla!— La oji azul alzó un puño en el aire.

Tocaron la puerta y Nathalie se asomó.

—Ya es hora.

Asentí y me puse la máscara, ya que no importaba si la traía puesta, no revelaría mi identidad como MegaNova, mi traje es diferente y al menos a mí sí me cambia el pelo, y no soy tan obvia.

—Tú puedes— susurró la kawaii desde el bolso de mi amiga.

Le sonreí y caminé al escenario a la vez que Marinette regresó con las chicas.

—Wow, te ves genial— oí decir a Adrien.

—Gracias, tú te ves igual :v

—Auch. ¿Ni siquiera un cumplido?

—No hay nada que no sepas ya. Recuerda lo que pienso de ti y ahí tendrás tu cumplido— le saqué la lengua.

—Estás jugando conmigo verdad? *-u-*

—Sí— le sonreí divertida. —Pero ya en serio, estás guapo— susurré lo último viéndolo con sinceridad.

Él me sonrió ruborizado.

—¿Dónde está su máscara, joven Agreste?— El director de producción hizo acto de presencia.

—A-ah, no la encontré— se encogió de hombros nervioso.

—¡Yo sí!— Exclamó un ayudante y corrió al escenario dándole la máscara al rubio.

—Oh gracias— fingió una sonrisa y se acercó a mí nuevamente.

—Póngasela— le dijeron. El oji verde llevó el antifaz lentamente a su rostro.

—¡Un momento! ¿Y qué pasa si yo quiero ser Chat Noir?— Pregunté impulsivamente levantando mi mano, salvando a Adrien de ponerse la máscara.

Todos me vieron sorprendidos, incluso Adrien. Le guiñé el ojo. —Ya no puedo ganar más tiempo— murmuré para que oyera.

Clara se acercó al escenario. —Pues-

De repente, la puerta se volvió a abrir bruscamente. —¡Alto! ¡Detenganse! Están violando la ley al hacer un video musical en este lugar.

La pobre de Clara no entendía la situación y trató de defender sus motivos, pero el alcalde prosiguió nombrando numerosas cláusulas y leyes que la cantante "estaba rompiendo".

Chloe sonrió triunfante y rompió el micrófono de la castaña, quien se arrodilló recogiéndolo y salió corriendo y llorando del lugar.

—Oh, que p*rra se comportó hoy. ¿Es que siempre que logra evolucionar como personaje en el siguiente capítulo deben hacerla cruel nuevamente?— Me quejé señalando a Chloe con una mano.

—Algo me dice que la akumatizarán— comentó Adrien.

—Bingo, así que chau— hice un saludo de soldado y lancé la máscara que tenía puesta por los aires. —Ah, y lo olvidaba— le quité a Adrien su máscara y la lancé por la ventana. —Ahora no la encontrarán— sonreí de lado y bajé del escenario.

—Gracias ______— escuché que me habló.

Agité una mano en forma de despedida mientras caminaba sin voltear atrás, para efecto dramático, me sentía bien cool.

Salí del edificio y me pregunté qué podría hacer ahora ya que tal vez yo no saldría en el video como se planeó.

(Quizá le puedo llamar a (M/A), hace 84 años que no hablamos, y luego puedo ir a la panadería de Tom y Sabine, se me antoja un-)

Un estruendo interrumpió mi monólogo mental. Alarmada, subí la vista al techo.

—¡Ah la! ¡Eso escaló rápido!— Miré a la villana. —Sigo pensando que se ve como una copia de Harley Quinn mezclado con Pop Star chafa y otras cosas— alcé una ceja y puse una pose pensativa.

La akumatizada salió al techo persiguiendo a paso lento a Ladybug y Chat. —Este atuendo es hermoso, hace qué quiera cantar, ¿tal ves un dúo?

La chica con peinado de Harley Quinn, se fue acercando a los superhéroes lentamente mientras comenzaba a sonar una melodía.

https://youtu.be/rrU5Iqpkuao

—Hola, mi nombre es Yoseline Hoffman, princesa, rubia y mamona— cantó. —Con voz de fresa gangosa.

(¡¡¡Un momento, yo conozco esa canción. Y dijo que quería cantar un dúo!!!) Me acerqué a la escena y canté lo más fuerte que pude.

—Yo hablo, como microbusero.
Qué pedo pinches culeros
Suscríbanse a mi canal~

—¡Sí! ¡Tú comprendes mi canción! ¡Tienes el don!— Me miró emocionada y dio un giro, como si estuviese bailando.

—¡¡¡No cantes con la akumatizada!!!— Ladybug me regañó.

—¿La neta? ¿Es porque no tengo Autotune?

—¿Auto qué? ¡No importa! ¡¡¡Sal de aquí!!!

—Bien— suspiré fastidiada. Al fin un akumatizado que aprecia mis dotes especiales y los buenos tenían que cagarla.

Seguí cantando mientras salía de lugar saltando como niña pequeña.

Nariz de pinocho o de mosco tal vez.
Me hubiera operado ya las bubis también
Nunca lo penséeeeeee

Soy enojona pateé una lata,
Muy juzgona hice pose de diva
Y orgullosa a morir bailé al ritmo de mi canto.

Mi hermoso celular, interrumpió mi canción.

—Oh, por todas las empanadas. ¿Quién carajos será?— Contesté. —¿Qué hay? ¿Quién es? ¿Qué quiere?

—Adivina quien soooooy~

—Vaya, ya habías tardado (M/A). ¿Cómo te trata el mundo?

—Meh, no me quejo. ¿Y qué tal tú? ¿Alguna novedad?

—Solo que me secuestraron y casi me ahogo, lo usual.

—¡¿Casi te ahogas?! Pero estás bien ahora ¿verdad? ¡¿O eres un fantasma?!

—No mensa, no soy un fantasma. Nino y Alix me sacaron del agua a tiempo.

—¿Y qué dijeron Adrien y Marinette?

—Am, no lo saben— negué sonriendo apenada a pesar que no me podía ver.

—¿Y por qué? Tienen derecho a s-

—¡Ni loca! Se estresan mucho conmigo cuando estoy cerca de los akumatizados, no quiero preocuparlos por algo que ya pasó y trato de olvidar.

—Te entiendo, no mencionaré el tema. Y am... — Hizo una breve pausa, como si estuviera dudando de decir algo o no. —¿Recuerdas aquel campamento que nuestro colegio, bueno, mi colegio hace cada año?

—No tienes con quien ir ¿verdad?

—Noooo— sollozó dramáticamente.

—Lo siento pero, mi mamá ya sabe todo y me dije que no volvería a nuestro mundo sin su consentimiento.

—Ay por favooooor, es solo una semanita chiquitita, diminuta. ¡¡Hazlo por tu BFF!!— Suplicó.

—Ya te dije que n- ¿mh? Espera, alguien me está llamando— contesté la nueva llamada. —¿Sí?

—Hola ______.

—Hola mamá, ¿qué sucede? Justo ahora estoy hablando con (M/A).

—Es solo que recibí una llamada muy extraña... De tu tía en (Tu país).

—¿Cómo?

—Dice que necesita verme en persona y quiere que vaya a verla. Yo le dije que estoy muy lejos y el dinero no crece en los árboles. Y se me ocurrió que...

—Nos fuéramos a nuestro mundo real por una semana— respondí frotándome la sien.

—Sí, así la iría a ver y no pagaríamos pasaje, si no te molesta claro.

—Solo si me dejas ir de campamento con (M/A). Me está rogando para que vaya con ella— rodé mis ojos.

—¡Está decidido! Empezaré a empacar.

—E-espera mamá, no es necesario emp- — cortó la llamada.

Suspiré. —¿Verdad que no se siente lindo que te cuelguen a media oración?— (M/A) resaltó con ese tono de voz de "te lo dije".

—Solo es divertido cuando le pasa a otro— remarqué molesta. —Iré a tu casa.

—Espera, com- —colgué mientras sonreía malignamente.

—Ahora sí es divertido— me dije caminando hacia la estación de buses.

...

En el mundo real...

Toqué la puerta de la casa de (M/A). Estaba lista para ir a acampar. Ya tenía mi saco de dormir, malvaviscos, lo que comen los astronautas, y otras cosas más.

La peli___ abrió la puerta y al verme corrió a abrazarme. —¡Yey! ¡Volvemos a las andadas!

—Sí pero, creí que estabas enojada conmigo— solté una risita mientras me separaba de su abrazo.

—Se me pasó. Es muy lindo que aceptaras perderte una semana allá para venir conmigo y hacerme compañía.

—Para eso son las amigas— sonreí. — Además, mi mamá tenía que ir a ver a mi tía, así que matamos a dos pájaros de un tiro— hice la forma de una pistola con mi mano.

—Bien, pasa. El bus vendrá en media hora por mí.

—¡Wu! Que rápido.

—Ve antes al baño, no quiero que pase lo de la última vez— me miró con seriedad.

—¡Solo fue esa vez! No sabía que lo que comí antes del viaje tenía laxante— me defendí.

—Lo hayas sabido o no, mejor ve al baño ahora— señaló al sanitario de visitas.

—Bueno, pero si el bus viene, no me vayas a dejar— la señalé para resaltar mis palabras.

—No, no. Sino tu viaje hubiese sido en vano— se fue a la cocina para revisar el refri.

(Glotona nace glotona morirá) rodé los ojos mientras entraba al sanitario.

Después de liberar a Willy en el baño, o mejor dicho, imprimir en 3D a Zorraila en el baño, el autobús llegó. Nos subimos y nos sentamos adelante para ver por la ventana frontal.

Cuando me dio hambre, fui lo suficientemente vaga para no sacar mi comida saludable, sino sacar una bolsa de malvaviscos.

—En lugar de traficar rimas traficas comida— mi amiga me vio con cara de "Really Nigga?".

—Ya me conoces— dije al abrir las golosinas.

Comimos la mitad de la bolsa mientras escuchábamos "Wheels on the bus" de Melanie Martínez.

Cuando vimos el letrero con el nombre del campamento a lo lejos, nos emocionamos.

—¿Quién diablos le pone "Wawanakwa" a un campamento?

—¿Qué importa? Con tal de no encontrarnos con una Heather estaremos bien.

Ambas asentamientos y nos bajamos del bus. (Jamás pensé que volvería aquí) respiré profundamente mientras recordaba las excursiones de años anteriores.

—¡¿______?! ¡Pero que sorpresa!— Vi a la maestra de (M/A) y mi ex maestra acercarse. —No creí que vendrías ya que te fuiste a ¿Francia era? ¡Que gran oportunidad!

—Gusto en volverla a ver Miss López. Vine a acompañar a (M/A), espero no sea inconveniente.

—¡Claro que no! ¡Vengan a la cafetería del campamento, quiero que me lo cuentes todo!— Seguimos a la maestra al interior de una cabaña, llena de mesas y en la esquina, estaba donde servían la comida.

—Mmmm, espagueti con albóndigas— mi mejor amiga fue a la comida en un tipo de trance.

La señorita López y yo nos miramos soltando unas risitas y nos sentamos.

—¿Y cómo ha estado todo por aquí Miss López?—

—No es necesario que me llames así, ya no soy tu maestra— me sonrió. —Solo Marissa está bien.

—No me acostumbro.

—Las cosas aquí han estado normales, aburridas incluso, excepto cuando Jonny comienza una pelea de papelitos en clase— señaló al chico con el ceño fruncido, quien estaba debajo de una mesa, acechando a otro niño.

—Ay, ese Jonny— sudé frío y como si el chico supiese que estaban hablando de él, volteó a vernos y nos saludó sonriente.

Le regresé el saludo con la misma expresión y me giré a ver nuevamente a mi ex maestra eh- Marissa.

—¡¿Y cómo está Notre Dame?!— Sus ojos brillaron al mencionar la catedral.

—Hermosa [Quemada :'v].

—Ah~ debe ser un sueño para ti vivir allá— apoyó su cabeza en ambos brazos.

—Sí, todo es tan diferente, simplemente...— Inmediatamente, se me vino una imagen de Adrien. —Perfecto— suspiré.

—Me lo imaginé— me vio dulcemente, alegre por mi situación.

—¡Yaaaaaa vine!— (M/A) puso bruscamente su gran plato de espagueti con albóndigas en la mesa, sonriendo de oreja a oreja y se sentó junto a mí sin apartar la mirada de su comida.

Marissa y yo soltamos otra ronda de risas al ver el comportamiento salvaje de mi amiga, quien generalmente, es tímida como yo.

La joven mayor y yo fuimos por nuestros almuerzos también a la barra de comida y pasamos un buen rato.

(Sin duda, mucho mejor que estar cerca de un akumatizado) pensé mientras disfrutaba del sabor del espagueti.

Luego de ese momento, partimos caminos y nos dirigimos a las actividades planeadas del día.

—¡Ujujuy! ¡Sí! Este es mi año— dijo (M/A) mientras se preparaba para lanzar una flecha con su arco.

—Eres muy mala en los deportes. ¿En serio crees que ganarás tan fácilmente?— Remarqué mientras estaba sentada sobre un tronco viéndola.

—Le quitas lo divertido a la vida. ¿Y qué haces ahí sentada, flojonaza? ¡Participa en las actividades como yo!

—Nah que flojera— dije desinteresada.

—Sí, tienes razón— lanzó el arco y la flecha a un lado y se sentó a la par mía.

Pasaron unos minutos en los que pensamos sobre el sentido de la vida.

—¿Ya quieres practicar arquería?— miré a (M/A).

—Sí— asintió, recogió su flecha y arco, y comenzamos a caminar al área de arquería.

—Presiento que este será tu año— comenté.

—No manches, pinche bipolar, hace rato me dijis-

—¡¡(M/A)!!— Alguien llamó.

Mi amiga y yo nos congelamos.

—No me chingues— susurré y ambas volteamos lentamente con incomodidad.

—Vaya, y aquí está ______— su pequeña sonrisa se volvió levemente forzada y se acercó a paso lento.

—¡Amuleto mágico, me quiero ir! ¡Me quiero ir ya!— Le susurré gritando a mi collar para largarme.

—No me dejes con ella— la peli___ susurró de vuelta a regañadientes.

—¡Ya es tarde, actúa normal!— Apresuré a decir y sonreí mostrando los dientes. —¡Ricarda! Hace un chingo que no te veo.

—Sí— nos saludó a ambas con un beso en la mejilla.

—¿Qué haces aquí Ricarda?— (M/A) no dejaba de verla anonadada.

—¡Soy voluntaria este año!— Sonrió con orgullo. —Amo servir y ayudar, entonces me dije: "¿por qué no ser voluntaria en actividades que me gustan?"— Preguntó retóricamente haciendo un gesto.

—Ah que bueno, te me cuidas— comencé a alejarme de la escena, en dirección hacia las cabañas donde habíamos dejado nuestro equipaje.

—Lo siento Ricarda— oí decir a (M/A). —Me iré con ______, este será nuestro último campamento juntas, ya que pronto se irá.

Volteé rápidamente y le hice una señal para que se callara, deslizando un dedo frente a mi cuello y luego apuntándola amenazadoramente.

—¿Oh?— Ricarda, ajena a mi actitud, se sorprendió. —¿A dónde vas?

(Ugh, lo que me faltaba) refunfuñé. Obviamente no quería contarle de mi nueva vida, ella es una chava que finge ser tierna y cuando le pasa algo sumamente bueno, lo presume a todo pulmón, remarcándonos sutilmente en nuestra cara que nosotras jamás seríamos capaces de tener tan buena suerte. Je, no tiene idea.

—Me voy del país, he vivido un tiempo allá. Solo he venido para arreglar unos asuntos privados— hablé vagamente.

—Uuuuuh, vamos, cuenta el chisme— pasó un brazo por mis hombros.

(¡No me toques, perra!) Pensé disfrazando mi asco. (M/A) me miraba con lástima y apenada.

—París.

—¿En serio? Genial. Recién llegué de mi viaje, les diré todo lo que hice y las noticias de allá. Sin duda es precioso. Que bueno que decidiste ir después de que te anunciara que iría.

Permítanme, me detengo justo aquí... (¿CÓMO QUE "DESPUÉS"? ¿Acaso cree que tuvo influencia en mi decisión?).

—No, no. Cuando me dijiste acerca de tu viaje, ya llevaba un par de meses viviendo allá. Y puedo asegurarte que las noticias son muy diferentes— sonreí ligeramente, escondiendo una malvada. (Dos pueden jugar el mismo juego).

La castaña empalideció ligeramente. —Ah... Pero no te vi— me señaló.

—Eso fue porque no íbamos a los mismos lugares a la vez, he estado ocupada con tareas y mis amigos.

—Ah por cierto— interrumpió mi amiga. —¿Cómo está Nathaniel?

—Bien, todo normal. Y ya conocí a Luka— le di un golpe, divertida.

—¡¿Y está guapo?!— Se apresuró a preguntar.

—Que va— rodé los ojos soltando una risa.

—¡Cuéntame! ¡Preséntamelo!— Me sacudió el brazo.

—Ya está enamorado de Marinette, no tienes chance— me alejé de su agarre, provocando que mirara de reojo a Ricarda. —Perdón, no nos habíamos hablado por un tiempo— nos señalé a (M/A) y a mí.

—Ya veo— entrecerró sus ojos por un segundo. —No creas que me he olvidado de tu bromita. Esa tal Marinette que me presentaste sonaba muy real. ¿Cómo le hiciste?

—¿A qué te refieres? Marinette ES amiga de ______— (M/A) dijo con confusión falsa, se unió a mi juego.

Creo que simplemente pensó que la naturaleza de esa broma que le hice cuando Rockero Rufián atacó, parecía muy rara.

—¿E-están escondiéndome algo?— Nos señaló con sospecha.

—Pueeeeees...— la peli___ y yo nos miramos sonrientes.

—El mundo de Miraculous es real— susurró mi amiga sin contener más el secreto.

—¡¿Cómo?!

—¡¡¡(M/A)!!!— Grité alarmada y la miré furiosa.

—¿Qué? ¡Creí que el plan era que le dirías!— Me vio, entrando en pánico.

La agarré del cuello de su camiseta y me la llevé.

—No pensaba en decirle, pensaba en confundirla y bromear hasta cansarla y que nos dejara en paz. ¡No decirle el mejor p*to secreto de mi pinche vida!

—¡P-perdón, no puede entender esos gestos! ¡N- no me vayas a privar del miraculous que me prometiste que me darías, p-por favor!— Suplicó debido a que podía notar que en serio me enfureció.

—B-bien, solo sígueme y no hables— caminé de regreso con Ricarda.

—Lo conversé con (M/A) y creo que fue fea la broma que te hice y la que te acabamos de hacer. Perdón, solo estábamos celosas de que fuiste a París— sonreí nerviosa.

—Bueno, no importa ya-

—Sí bueno, ¿quién tiene hambre?— (M/A) levantó el brazo para ir al comedor.

—Pero si acabamos de almorzar— me le quedé viendo.

—¡Shh! Pero ella no sabe— me susurró de vuelta a regañadientes.

—¡No pos, órale!— Agarré a (M/A) de la muñeca y salimos corriendo de ahí.

—Oye, en la vida huir de tus problemas no es la solución— dijo mi amiga casi volando por lo rápido que iba.

—En Miraculous sí funciona.

—Pero aquí no es Miraculous, has pasado mucho tiempo metida ahí, es hora de que pongas los pies sobre la tierra.

Solté un suspiro y dejé de correr pero no de caminar. —Tienes razón, mejor dejo todo hasta ahí. No es maduro de mi parte seguirle el juego— sonreí con los ojos cerrados.

—Exacto. Ahora sí, vamos por comida.

—Amén, hermana— le seguí el paso a la cafetería.

P.O.V. Tercera Persona

Ricarda no se movió por unos minutos, cuando lo hizo, empuñó sus manos.

(Detesto cuando se burlan de mí) pensó molesta. Ella quería hacerlas sentir menos, resultó. Pero le regresó el golpe. Sabía que estaba mal, sin embargo, no podía dejar de sentir satisfacción cuando alardeaba su buena suerte.

—Deben tramar algo— susurró para sí. Ricarda no las conocía muy bien, pero si lo suficiente como para saber que están preocupadas por algo.

Sin pensarlo mucho, caminó detrás del par de amigas y las siguió a dónde sea que fuesen. A su cabaña, al comedor, a las actividades, al comedor, a la cocina, al lago, a un puesto de hamburguesas cerca. (¡¡¡¿Qué rayos con estas y su gran apetito?!!! Y ni siquiera engordan. Oh bueno, ______ parece más robusta y (M/A) sigue gorda).

—¡Alguien me dijo gorda!— (M/A) rugió salvajemente mientras miraba alrededor.

—¿Cómo carajos sabes cuando alguien dice eso a tus espaldas?

—Solo lo sé. ¡Alguien dormirá con los peces!

—Ya cálmate, recuerda lo que dijo la psicóloga, inhala y exhala— ______ trató de calmarla.

—Yo no tengo psicóloga, ¡era la tuya!

—Sí cierto uy. Creo que me timaron, sigo igual.

—Siempre loca nunca inloca

—Así no es la frase, pero estoy de acuerdo— ______ se puso de pie. —Vamos, ya es nuestro último día, disfrutémoslo con una caminata en lo que esperamos a que sea de noche— sonrió la chica.

—Bien, así haré la digestión más fácil— (M/A) imitó el acto de su amiga.

—A veces me pregunto por qué sigo siendo tu amiga— sudó frío.

—Tu me amas, y lo sabes.

Se fueron por el sendero.

(No tiene caso) Ricarda salió de su escondite frotándose la sien.

—Ese par es más idiota de lo que pensé— bufó.

Cuando anocheció, todos los del campamento estaban reunidos alrededor de una fogata inmensa, asando malvaviscos y salchichas de paso.

Ricarda se sentó cerca del par de amigas para no sacarlas de vista. El celular de ______ interrumpió su animada charla y contestó.

—Hola mamá... Sí, ¿estás lista?... Bien, en 5 minutos... Adiós— colgó rápidamente. Se giró a (M/A) y asintió.

Ambas se escabulleron entre todos para ir a su cabaña.

(Qué raro, ¿a dónde irán? Ya debieron haber empacado) Ricarda sospechó y fue detrás de ellas.

P.O.V. de ______

—Shh, hay que ser silenciosas— le susurré a mi mejor amiga.

—¡Eso intento!— Susurró gritando y fue a agarrar su equipaje.

—¿Tu mamá ya sabe del viaje?

—No, pero cuando esté en París no podrá decirme que no— sonrió de lado, o eso creo, está oscuro aquí.

Suspiré. —Bien, toma mi mano y larguémonos, ya siento la regañada de Alya— me dio un escalofrío por el miedo al pensar cómo se enojó cuando me fui por primera vez.

—¡Lista! Ah, y preséntame al papucho de Luka— imaginé que hizo cara de 7u7 y tomó mi mano.

Rodé los ojos divertida por su obsesión a chicos ficticios. —Quiero regresar— susurré sosteniendo mi collar con mi mano libre.

La familiar luz dorada iluminó la habitación. Escuché que la puerta se abrió de un portazo y de repente sentí como si me hubiesen tacleado, y caí sin soltar la mano de (M/A).

Continuará...

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Solo para que lo tengan en cuenta:

Luz dorada cuando ______ regresa a Miraculous

Luz blanca cuando regresa a su mundo real.