Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝒞𝒶𝓅𝒾𝓉𝓊𝓁𝑜 𝒳𝒱𝐼

Este capítulo lo hice con ayuda de @Demogorggon, un saludo y agradecimiento para ella ;)



Capítulo 16: Gorizilla

♥ •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•° ♥ •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• ♥


—¡Y-y-y-y me cargó estilo princesa, rompió una ventana con su bastón y ambos salimos del hospital!— Relaté con brillos en los ojos por lo cool que fue mi aventura hace 2 días.

—Hmm-hmm.

—¡Y luego-!— Lo volteé a ver. —Oye ¿me estás escuchando?— Me crucé de brazos.

—Seh, pero dejaste que otro Chat te cargara— Adrien también se cruzó de brazos.

—Pues claro, ¿qué querías? ¿Que me quedara a morir dentro de ese hospital? Muchas gracias— hice un puchero.

—A pesar de que no me alegra, hiciste lo correcto— desvió la mirada.

—No te veo muy convencido— me agaché para estar a su altura, ya que él se encontraba sentado en el suelo de mi habitación. —Pero sé como alegrarte— sonreí y comencé a acariciarle la cabeza. —Con traje o sin traje, eres un gatito.

—Mmm, siempre te sales con la tuya— gruñó pero me abrazó.

—Muajajajaja >:3— me burlé. —En resumen, durante toda mi aventura creí haber fumado algo— suspiré. —Sorry gatito, le prometí a mi mamá ir de compres con ella. Algo así como tarde madre e hija— nos soltamos.

—Vaya forma de decir que me vaya— alzó una ceja.

—No, no, no, no, no... Bueno sí— me encogí de hombros con una sonrisa apenada.

Soltó una risita. —Es broma, ma chère, entiendo. Tengo clase de piano— rodó los ojos. —Y am...

—¿Qué?— Lo vi con curiosidad.

—No quiero molestarte ni nada, pero hay una película en el cine... Solo la pasan hoy...

Me tapé la boca con un gesto de sorpresa. —Sobre tu madre— susurré. Él asintió. —P-perdón, quisiera-

—N-no te preocupes, s-siento como si tuviera que hacer esto solo.

—Te entiendo, ángel. Disfruta la película— besé rápidamente sus labios y le sonreí.

El rubio sonrió agradecido y se fue. Justo dos minutos después, mi mamá entró a mi habitación.

—Al parecer le sigues agradando bastante, ya que viene mucho ¿eh?— Habló sentándose a la par mía en mi cama.

—¿Quién Adrien? Sí, somos buenos amigos.

—¿Y cómo reaccionó cuando lo friendzoneaste? Es obvio que le gustas.

—Oh, sí jeje. Se lo tomó bastante bien. Lo aceptó y ahora somos amiguis— (claro, si "aceptar" significa que me insistió bastante hasta que mis sentimientos no pudieron mentirle más a la realidad y terminamos como pareja) sonreí ocultando mi nerviosismo.

—Que bien. Cambiando de tema, ¿lista para irnos? Estudié el mapa para no perdernos— me mostró el mapa, entusiasmada.

—Que bueno, yo también he recorrido la ciudad por mi cuenta— me levanté e hice un gesto para que nos vayamos.

Entrelazamos nuestros brazos y salimos de casa listas para ir primero a un Centro Comercial y comprar ropa.

—¡Por favor, llamen a la policía! ¡Me está matando!

—Mamá, te dije que no te quedaría ese pantalón— me facepalmeé mientras veía como la ayudante de la tienda y mi mamá estaban luchando para que el pantalón seleccionado le cerrara.

—¡Meta la panza!— Exclamó la señorita, esforzándose para cerrarle el pantalón a mi mamá.

—¡Eso estoy haciendo!— Respondió.

—¿Por qué?— Vi la escena con cara de "Really Nigga?". Rodé los ojos y salí de la tienda de ropa hacia una pastelería. Para mi suerte, estaban dando muestras gratis. (Puedo escuchar los gritos de lucha de mi mamá y la señorita, meh, tardarán un buen rato). Miré con una sonrisa de oreja a oreja a las muestras gratis.


...


—En serio, siento que las panaderías y pastelerías son lo mismo— metí más muestras gratis a mi boca. —O sea, *ñum* *ñum* lo único diferente es el pan y- ¡ay! Que ricas galletas— era muy obvio que me habían gustado bastante.

—G-gracias s-señorita, p-p-p-pero...

—¿Mmh?— Miré con curiosidad al chico que sostenía la bandeja de muestras mientras seguía masticando.

—N-no n-nada— desvió la mirada nervioso.

—Compraré de estas galletas y una caja de macarons— le sonreí después de tragar.

Su rostro se iluminó visiblemente. —S-se lo prepararé de inmediato— se apresuró a reunir lo que pedí.

—Creo que ya reg- — dejé de hablar cuando escuché gritos a la distancia. —¿Otro akumatizado?— Miré afuera de la tienda con una ceja alzada. —Pero los gritos se escuchan muy cerca— me asomé sin soltar la puerta de vidrio. Justo cuando iba a salir para escuchar mejor de dónde venían esos gritos, una estampida de chicas pasó delante de mí, corriendo a una gran velocidad. Quedé en shock. —Eeeeeh, ¿qué acaba de pasar?

—¿Está bien, señorita?— El chico encargado pasó su mano frente a mi cara múltiples veces.

—Sí, sí. Solo acabo de ver una estampida— lo vi extrañada.

—Eso es algo que no se ve todos los días— asentí a su comentario. —Como sea, aquí tiene— me dio una bolsa.

—Gracias— le di el dinero. —No quiero factura y quédate con el cambio— salí de la tienda escuchándolo susurrar un "gracias".

Regresé con mi mamá, quien tenía un vestido puesto, pero sus brazos estaban enredados con los tirantes.

—No preguntes, solo ayúdame a salir de esta m*ldita cosa— refunfuñó.

—¿Con esa boca besas a mi abuela?— Puse mis manos en mi cadera ofendida.

—Perdón— bajó la mirada apenada.

—Ok, te perdono. Ahora te ayudaré— dejé mis postres a un lado.

Luego de unos minutos, mi mamá compró un par de calcetas y nos fuimos de ahí.

—Estoy triste— habló haciéndose la víctima mientras caminábamos hacia la parada de buses.

—Hm— respondí viendo el mapa con desinterés.

—¿A dónde vamos ahora?

—Quiero ir a la Torre Eiffel contigo— le sonreí. —Sé que tú querías venir a París solo por mí. Así que apuesto a que no has ido ¿no?

—He estado ocupada con el trabajo. Enséñame el camino y subiremos hasta la cima.

La miré con brillos en los ojos. Tomé su mano y comencé a trotar, casi correr, hacia la torre.

Después de comentar sobre la hermosa vista y de contarle a mi mamá que ya vine con Chat Noir, bajamos por el elevador y caminamos por la plaza.

—¿Qué tanto haces en el celular? Se supone que ibas a apagarlo para nuestra salida— la vi con la ceja alzada.

—Estaba revisando si tenía correos del trabajo...— Su rostro adoptó sorpresa. —Mira (T/A)— me mostró su celular. Había un artículo abierto, titulado: "Adrien Agreste corre de los paparazzis con la que se cree es su novia". La palabra novia retumbó varias veces en mi cabeza. —Adrien y Marinette, no sabía de ellos. Con razón no le dolió tanto tu rechazo— me sonrió aliviada.

—Ajá— Me dio un tic en el ojo. —Son el uno para el otro— hablé a regañadientes; sin embargo, no lo notó porque siguió sonriendo despreocupada.

—Bueno, nunca he ido al metro. ¿Te parece si damos un recorrido en el?

—Sí, lo que quieras, vamos— dije con menos entusiasmo y acelerando el paso.


...


—Parece un bus— dijo con decepción viendo el vehículo parado.

—¿Y qué esperabas? No es el Startrain, ni estamos en Japón— me crucé de brazos con el ceño ligeramente fruncido.

—¿Qué es el Startrain?

—Un tren que aún no construyen. Irá bajo el mar hacia Londres— no esperé su impresión ante mi conocimiento. —O-o es lo que he escuchado— sonreí nerviosa mientras sudaba.

—Que genial, ¿tú crees que será barato el pasaje?

—Nel- — los gritos de una multitud me interrumpieron. —Por la gran p- ¡AH!— Algo se estrelló contra mí y retrocedí unos pasos. Gruñí enfurecida. —No estoy de humor, y me vale madres ser cortés ya- — gaspeé y abrí los ojos como platos al darme cuenta de que Adrien y Marinette fueron los que chocaron conmigo.

—Hey ______— ambos dijeron al unísono. Los saludé con la mano y sonreí forzosamente de lado, inevitablemente mi vista bajó hacia sus manos entrelazadas.

—A-am, lo siento— el oji verde fue el primero en disculparse.

Retrocedí un paso, aún fingiendo mi alegría de verlos. —No importa, solo a ustedes los perdono. Perdón por gritarles y am, mamá— me giré hacia ella. —Ese es nuestro tren— señalé y la jalé dentro del tren. Al estar dentro, me asomé por la puerta. —¡Lo siento, pero tenemos prisa! Eh, chau— me despedí de mi novio y mejor amiga justo antes de que se cerrara la puerta y el metro avanzara.

Me negué a ver a Adrien mientras el vehículo avanzaba cada vez más rápido.

—¿Qué fue eso?— Mi mamá me vio confundida.

(Hora del show). —Me apené. Es que a Marinette le gusta Adrien y al fin están juntos, dudo que como novios por el momento, pero no quise entrometerme en su tiempo. M-merecen un rato de calidad para conocerse bien— (creo que mi corazón se quebró levemente al decir eso).

—Aww, que dulce de tu parte— acarició mi mejilla para luego ir a sentarse y disfrutar el viaje.

—Sí, je... Dulce— murmuré con tristeza.

Me senté a su lado y aparté la mirada de ella para que no se diera cuenta de mi conflicto interior. (Se ven bien juntos, se ven bien juntos. Es todo lo que los otros dicen) apreté la mandíbula. (¿Y si terminan juntos?) Me pasó por la mente la pregunta en la que menos quería pensar. A punto de llorar, recordé los momentos que tuvimos juntos.

Puedo decirte que realmente te quiere— susurró la voz.

—Gracias— susurré. (¿Qué m*erda estoy pensando? Él ha demostrado que me ama. Y además, me insistió como loco cuando supo que yo también lo amaba) sonreí y rodé los ojos divertida. (No me preocuparé, él tiene ojos solo para mí como yo los tengo solo para él. No importa que nuevos personajes aparezcan, Adrien será siempre mi número 1, además...) Mi sonrisa creció. (Pronto llegará el Repele Perras Pro que pedí por internet, puede ser útil).

Me tranquilicé por completo. Finalmente me alegraba la distorsión que creé. (Ya no estoy Forever Alone; sin embargo, aún siento pena por Marinette, pero no puedo obligar a Adrien a que la quiera si él ya no lo hace. Estoy segura que encontrará a alguien más. Si no es Luka, será otro).

Mi mamá y yo nos bajamos del tren y fuimos a un café a almorzar. Al parecer estaban pasando las noticias y un gorila gigante apareció en la televisión del lugar.

—Hostia p*ta— boté la taza de (bebida favorita) al ver a Gorizilla. (¿Cómo lo olvidé? Caraj*, me siento como una bruta al sentir celos si se supone que la huida de Adrien y Marinette sucede en este capítulo).

—¡______, botaste tu (bebida favorita)!— Mi mamá exclamó con cierta molestia.

—¿Qué?— Regresé la mirada a ella y luego bajé la cabeza para enfocar mi atención en la bebida esparcida por el suelo. —¡NOOOOOOOOOOO!— Grité al saber que mi jefa no me haría la campaña de comprarme otra para reemplazar la que desperdicié accidentalmente.

Cuando terminamos de comer, pagamos la cuenta y salimos a caminar para conocer los alrededores. Llegamos a unas calles donde habían apartamentos, el lugar tenía varias flores y unos cuantos árboles, haciendo parecer a los callejones como mágicos.

—Antes de venir aquí no eras tan torpe, ¿es qué París hace que vivas en las nubes?— Me preguntó mi mamá.

—N-no es eso... Es solo que...— Suspiré rendida. —Eres una de las personas en quien más confío, y sin embargo no te he dicho lo que sucede en realidad— sobé mi brazo.

—¿A qué te refieres?— Me vio confundida.

—Hablo de...— Volteé a ver en varias direcciones para asegurarme de que nadie estuviese escuchando. —Siempre estoy en las nubes, es decir que, vivo cada día como si fuera un sueño.

Me miró con atención. —...

—Este no es solo París, es el París de Miraculous Ladybug.

Cayó en shock, por lo que aproveché para contarle todo, menos las identidades de Chat y Ladybug. Nuestros pasos se alentaron a medida que continuaba mi historia. Incluso le mostré mi collar de YinYang y le expliqué lo que podía hacer. Decidí que ya no quería ir entre mundos y arrastrar a mi mamá a la fuerza, a pesar de que no supiera lo que estaba pasando. No es justo para ella.

—Y eso es básicamente todo. Créeme por favor. ¿Cómo crees que (M/A) es capaz de venir tan rápido a París?— Pregunté bloqueándole el paso, ya que entraríamos pronto a una calle transitada.

—T-te creo hija... Es muy descabellado, en serio, eh...

—Puedo entender que necesitas un tiempo para analizar— jugué con mis dedos. —Y no me encierres en un manicomio.

—No, no— soltó una risa. —Es tan complicado que tiene sentido. Imagino que yo aparecí aquí porque tú lo hiciste. Dudo mucho que yo sea la que debe hacer algo aquí o está relacionada con este mundo— rió nuevamente. —Básicamente te dijeron que no puedes cuidarte sola y me necesitas contigo—sonrió con las manos en la cintura.

—Siempre te voy a necesitar— nos abrazamos. —Y tienes razón. Yo soy la que debe hacer algo aquí pero aún no sé qué.

—Seguro es algo bueno, ya hasta pareces superhéroe o de esos protagonistas de las películas.

Solté una carcajada. —Sobre todo por tanto superhéroe que se aparece por aquí ¿verdad?

Ambas reímos en conjunto y entrelazamos nuevamente nuestros brazos para apresurar el paso. Cuando me aseguró que tendría su apoyo y comprensión, concordamos en cambiar el tema de conversación, así que le hablé de mis desventuras con Nath y de mis aventuras con Ladybug y Chat. Le conté sobre mi extraña aventura con Bridgette y Félix como si fuese una aventura más con la Ladybug y Chat Noir que conocemos, porque ella no sabía nada del PV.

—Hablando de tus amigos, lamento que te excluyeran— me vio levemente preocupada.

—No me excluyeron. Alya y Marinette me invitaron después de elegir ir a la piscina y pues, no c nadar— :v me encogí de hombros. —Pero no me siento mal, planearon una salida al cine la otra semana para recompensarme— sonreí con cariño.

—Que bie- ¡CUIDADO!— Me empujó a un lado de repente y ella cayó a mi lado.

—¡¿Qué?!— Vi alrededor y varias personas estaban corriendo como locos. —¡¿Mamá estás bien?!— La moví no tan fuerte para que volviera en sí.

—Sí, sí— nos pusimos de pie. —Es mejor irnos.

Estábamos a punto de salir corriendo del lugar pero algo cayó sobre mí, haciendo que me estampara nuevamente en el suelo.

—¡Hija!— Exclamó mi madre.

—Ay, eso no salió bien— se quejó la azabache. —¿En qué aterricé? Está suave.

—Ya te habías tardado, motitas— logré decir por la falta de aliento.

—¡_-______! ¡Perdóname! Gorizilla va tras Adrien y mi plan no resultó— se puso de pie para ayudarme, al estar paradas nos abrazamos.

—No te preocupes, ¡oh! Por cierto, mamá, Ladybug, Ladybug, mamá, rojo, _______, negro, gracias con permiso— sonreí.

Ellas se me quedaron viendo. —Como siempre tus presentaciones son legendarias— la oji azul suprimió una risa.

—Pos obvio— aparté un mechón de pelo cual diva. —Bueno, nos vamos. Suerte motitas, aunque sé que no la necesitas y mándale mis saludos a ya sabes quien— guiñé un ojo.

No resistió y soltó la risa que trató de detener. —Chat estará feliz, nos vemos luego— se despidió con la mano y se fue balanceándose en su yo-yo.

Solté una risita juguetona y miré a mi madre. —Un día normal en mi vida— dije en tono inocente.

—Ja, ya vámonos (T/A), esa fue suficiente acción por hoy— pasó un brazo por mis hombros.

—Créeme, te sorprenderías— sonreí con los ojos cerrados. Antes de continuar con la conversación, mi celular comenzó a vibrar. Miré apenada a mi mamá mientras alzaba mi dedo índice para que me esperara y contesté. —¿Aló?

—¡¿______ estás bien?! Ladybug me dijo que aterrizó sobre ti otra vez y-

—Calma, estoy bien— me alejé un poco de mi mamá. —Y sobre lo que pasó en el metro-

—¡No es lo que piensas! No le creas a las noticias, sabes que eres la única para mí.

Sonreí. —Adrien, lo sé— asentí. —Además, pronto llegará el Repele Perras Pro que pedí por internet, junto al bate con clavos que trae de promoción— mi sonrisa se volvió en una desquiciada.

—Esa es mi chica— habló con su tono de Chat Noir.

—Ya tu sabe— di una vuelta presumiendo mi personalidad XD. —Te veo en la escuela ¿sí?

—Sí, disfruta tu día y aléjate de Gorizilla.

—Claro ángel, hasta mañana— colgué. Regresé con mi mamá, quien me miraba con una expresión de 7u7. Reí ruborizada. —Jeje, mi novio saluda, je...

Negó divertida. —Regresemos a casa, podemos ir a ver "¿Y dónde están las rubias?" ilegalmente por internet.

Sonreí entusiasmada. —Me encantaría.


Continuará...

♥ •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•° ♥ •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• ♥

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro