Veintiséis.
¿Entonces por qué correspondiste mis labios, mis abrazos?
¿Era solo por necesidad, pena? ¿Quizás un mero sentimiento de culpabilidad?
¿Jugaste conmigo?
¿O utilizaste mis labios para no sentirte tan sola?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro