Capítulo 3
-Vamos a calmarnos un momento-exclama Enid un tanto agobiada-Miércoles, ¿segura que eso significaba tu visión?
No puedo verla, un fantasma bastante enfadado me tapa. Es algo realmente emocionante, nunca creí ser tan afortunada como para poder enfadar un fantasma. Enriquecedor. En cambio, no es la manera en la que me gustaría que me tapasen la vista.
-Había una silueta masculina con una capa como la de la Parca. Además, un cuervo va a su brazo. Él sonríe y dice que está más cerca de su cometido. Ha sido tocando a Alberto, por lo tanto, está relacionado con él.
Estoy a punto de terminar diciendo: "Enhorabuena, vas a tener la suerte de morir joven". En cambio, la mirada intensa de la que parece ser su madre fantasma, me indica que no es una buena idea. Estoy realmente aterrada, esto es realmente estimulante.
-Bueno, eso puede significar muchas cosas-responde Enid-Miércoles, las dos sabemos que estás un poco obsesionada con la muerte.
-Es la mejor parte de la vida-contesto y hago que se aleje el fantasma. Mientras lo hace, me mira confundida, extrañada. Vaya, el fantasma que me ha aterrado es débil. Aburrido.
-Entonces...-Alberto empieza a hablar. Por fin puedo verlo, ya que un fantasma no me está impidiendo hacerlo. Está abrazado a sus piernas, con los ojos abiertos como platos, mirándome desconcertado. ¿Cómo puede ser tan poderoso como dicen y tan sensible? Me intriga.
-No vas a morir-Enid exclama emocionada, con una camisa y una americana del uniforme mal puestos.
-¿Y qué significa entonces?
-Nada tan emocionante como la muerte-respondo
-Significa que podemos enseñarte la academia-empieza a contestar Enid después de mi comentario. Enid me mira de una manera diferente, una mezcla entre admiración y devoción por Alberto la inunda y la ha convertido en un ser poco racional. Le importa lo que piense, por eso, me mira amenazante. Si las miradas hablasen, me estaría amenazando con sus garras. Esta faceta de Enid me parece admirable, debemos de juntarnos más con Alberto.
-Ah, vale... Perfecto-Alberto me mira de arriba a abajo y parpadea. Sigue asustado. Es mejor que me aleje de él un rato, así su pobre ser delicado y sensible podrá asimilarlo.
-Mejor, enséñale la academia tú, Enid. Yo tengo que hablar con mi familia. Te aviso que la nueva profesora ha insistido en protegerlo de las adolescentes con hormonas revolucionadas.
-Será un placer. No te preocupes, siempre puedo sacar las garras si hay peligro
-¿Sacar las garras?-Alberto mira ahora perplejo a Enid. O se espabila o va a durar poco en Nevermore.
-Sí, soy un licántropo. ¿Quieres verlas?
Enid emocionada sacas sus uñas de licántropo y Alberto, sorprendentemente, las encuentras fascinantes. Creo que es la primera vez que se siente seguro entre esas cuatro paredes. La verdad, es que tiene sentido.
-Es muy guay-dice éste
-Gracias. ¿Vamos?
-Será un placer-Alberto se levanta de un salto
Ambos se dirigen a la puerta con una sonrisa y frases torpes. Extraño, ¿no está con Ajax? ¿Había pasado algo ese verano que no sabía? Bueno, estamos hablando de Enid, si ha pasado algo, aunque no quiera, va a acabar contándomelo.
Desgraciadamente, no se han ido todos. Alguien queda en la habitación aparte de mí y Cosa, el fantasma no se ha ido.
-Gracias por no decirle que estoy aquí y lo siento si me he pasado
-No te disculpes, ha sido estimulante. ¿Eres su madre?
-Era su madre-suspira tras decir esto-Morí cuando sólo tenía unos meses. No pude disfrutar con él en vida, así que aquí estoy, velando por él y Marina por la eternidad. No hagas tonterías de vidente y me digas que me vas a ayudar a encontrar el camino hacia la luz porque no me interesa.
-No iba a hacerlo y me parece patético que te lo propongan. La oscuridad es demasiado divertida. ¿Por qué a Marina? ¿Quién es Marina?
-Acabas de hablar con ella, es la mentora de Alberto
-¿Y por qué velas por ella?
-Porque es mi gran amor. Íbamos a formar juntas una familia y bueno, digamos que la muerte lo complicó todo.
Sus ojos se vuelven vidriosos al decir esto. No sabía que los fantasmas podían llorar, fascinante. Aun así, no me fascina más que la profesora era su gran amor. Tiene sentido, la forma en que la miraba y se reía de su humor indicaba que había sentimientos, pero esto me sorprende. ¿Tanto pueden quererse? ¿Es eso sano?
-Si ibais a formar juntas una familia, ¿por qué es su mentora y no su madre? Eráis dos y ella sigue viva.
-Ay, Miércoles, a veces la vida no es tan fácil. ¿Qué sabes de nuestra cultura?
-No mucho, tu amor no me ha respondido a mis preguntas y por eso tengo que llamar a mi familia.
-Bueno, entonces dejo que te enteres en su preciso momento. Ahora, disfruta de la familia, es una suerte poder hacerlo.
Con esa frase tan melancólica, se desvaneció. Miro a Cosa frustrada, la conversación era bastante interesante. Él está confundido, no entiende nada. Puede ser que crea que estaba hablando sola.
-Estaba hablando con un fantasma, no sola
Cosa me indica que ahora lo entiende todo y se dirige a mi escritorio, señalando la bola de cristal. Se le ve emocionado, quiere hablar con la familia, ¿por qué? Es demasiado pronto. Tantas emociones juntas es sumamente agotador para mi persona.
-Ya voy, Cosa. Necesito asimilar antes que debo pedirles ayuda. Sobre todo, con mi madre y los fantasmas. Odio pedir ayuda a mi madre.
Cosa me indica que mi madre es buena persona y eso es muy bonito.
-No es bonito depender de los demás, eso es débil. Da igual que sean familia. Odio estar en esta situación, ojalá todo fuera sólo soledad y oscuridad, eso es más divertido.
Me levanto sin ganas y me siento en mi escritorio. Saco la bola de cristal y me dispongo a llamar a mis padres. ¿Sabéis qué significaba eso? Demasiadas actividades sociales en poco tiempo.
Al poco rato mis padres me contestan. Están emocionados, son muy pesados cuando están emocionados. Demasiados sentimientos. En cambio, es lo que tengo que aguantar si quiero su ayuda.
-Miércoles, pequeña pesadilla. ¿Cómo estás? ¿Ya nos echas de menos?-responde mi padre
-No, pero necesito vuestra ayuda. De los dos.
-¿Has escuchado eso, amor?-contesta mi madre-Nuestra pequeña nos necesita. ¿Ha muerto alguien ya?
-No, pero hay un fantasma
-¿Un fantasma? Nevermore siempre ha sido maravilloso-mi madre se emociona
-Bueno, vamos por partes. Primero, papá, necesito que me cuentes los tipos de brujos que somos y nuestro poder. Mamá, necesito saber cuáles son mis poderes con los fantasmas. Nunca había visto alguien que no fuese de carne y hueso. Además, parece ser que sólo puedo ver yo a este fantasma. Siempre había soñado tener un fantasma a mi merced, puede que sea esta mi oportunidad.
-Cariño, los videntes sólo podemos ver a un tipo de fantasma. Aquellos que han tenido un estilo de vida en común a la nuestra o su propósito es el mismo que el nuestro en esta vida.
-Será lo primero, entonces-contesto extrañada-su propósito es proteger a su familia.
Mis dos padres se emocionan. Genial, ahora creen que mi propósito en la vida es protegerlos, esto es lo que me faltaba ya.
-Padre, te agradecería si me contases los poderes de la familia.
-Miércoles, tormentita mía, en nuestra familia los brujos somos... brujos de... -tiene miedo de continuar, mira a mi madre
-Hija, tenemos nuevos juguetes que probar, te queremos mucho...-comienza mi madre y mi padre asiente rápidamente
-No, he preguntado a la nueva profesora que es bruja del agua y me ha dicho que es algo que tiene que contarme la familia. No quiere que una extraña me lo cuente. ¿Qué tipo somos?
-¿Tienes una profesora bruja del agua? Eso es fascinante, sólo he escuchado leyendas sobre ellos-responde mi padre fascinado
-No cambies de tema, padre
-Pequeña florecita muerta, somos... brujos... de luz
-¿De luz?-exclamo decepcionada
-Sí, de luz. Traemos luz en la oscuridad. Los brujos de luz nacieron de la oscuridad, para crear equilibrio y poder ayudar a aquellos que sólo ven oscuridad. Goody Adams es un ejemplo de ello. En un mundo oscuro para los marginados, fundó Nevermore, para que tuviéramos luz entre tanto odio y sufrimiento. Por eso convivimos con la oscuridad, sin ella, no existiríamos. Además, no todos mostramos poderes, sólo despiertan sus poderes los que lo necesitan, cómo mucho podemos crear rayos como hace el tío Fétido. En cambio, temible planta carnívora, tú no necesitas traer luz al mundo, tú eres vidente como tú madre, algo-mira mi madre de arriba abajo con mucha pasión-fascinante
-Eso ya lo sé, me lo había comentado la profesora. También me dijo que como mucho Plugsey podía ser brujo, yo no. Si somos brujos de luz, me alegro. La verdad es que es una bruja muy poderosa y al parecer, su alumno también. De hecho, el fantasma es la madre de éste, que, al parecer, también era el gran amor de la profesora.
-¿Mentora de brujos?-exclama mi padre emocionado
-¿Fantasma bruja de agua?-exclama mi madre emocionada
Se miran con los ojos abiertos como platos y la boca abierta, de tanta emoción.
-¡Debemos conocer a todos! Avísala, mañana tenemos reunión con ella. Nos vemos entonces, con Plugsey incluido-dicen a la vez
Al instante cortan la llama. Genial, más situaciones sociales. No me gusta. En cambio, me gusta menos que seamos brujos de luz. De luz. No me gusta la luz. Me gusta la parte que ha dicho de que nacemos de la oscuridad, pero yo no podría traer luz a la gente. Es algo bastante repulsivo. Entiendo por qué temía mi padre decirlo, es una mala noticia.
Me dirijo directamente al despacho. Esta vez, una vez en la puerta, llamo. Era interesante que, aunque la academia se representa por su arquitectura gótica, a ella le había tocado la puerta más colorida. Horrible, yo me quejaría de algo así.
-¿Quién es?-responde
-Miércoles
Escucho unos pasos y se abre la puerta. La profesora me mira extrañada y mira a todos lados, hay algo que no le cuadra.
-¿Y Alberto?
-Enid le está mostrando la academia. Es más social y le importa más los eventos de la academia que yo, por lo tanto, mejor guía. Además, es licántropa, así que podrá rajar la garganta de todo aquel que se pase con Alberto.
-Preocupante, pero me parece bien. Entonces... ¿Qué haces aquí?
-Informar de que ya he hablado con mi familia y vienen a verla mañana, con mi hermano incluido. Ya me han contado que en mi familia hay brujos de luz, pero que el poder sólo se despierta cuando la situación lo requiere. Me alegro de sólo ser vidente.
-Vale... ¿sabes a qué hora?-sigue extrañada
-No, les gusta las sorpresas
-Ya... bueno... esperemos que no me pille en clase. ¿Y eso es todo lo que te han contado sobre los brujos de luz?
-Sí, ¿tenían que haberme contado algo más?
-Sí, pero creo que ni ellos lo saben. Bien, hablaremos mañana. Algo me dice que sé más de la historia de la familia Addams que los propios Addams. Esto va a estar divertido.
-¿Tan importante es saber nuestra historia?-ahora, la extrañada soy yo
-Miércoles, quién no sabe su historia está condenado a repetirla. Créeme, no queréis repetir la vuestra.
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