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Capítulo 25

Ahí estoy, en frente del lugar donde casi muero. En frente del lugar donde tuve mi primera y única cita. En frente del lugar donde me colgaron del techo, como un cochino recién asesinado para realizar los embutidos correspondientes. Ese lugar, ese maldito lugar. Ese maldito lugar que ya no contenía ningún cadáver sólo estaba ahí para recordar a alguien que no merecía ser recordado. Quería entrar, quería entrar para hacer que ardiera, que ardiera al igual que él hizo que ardieran tantos que no lo merecían.

Fuerzo la puerta queriendo entrar, pero está cerrada. Zarandeo la puerta varias veces y lo único que consigo es hacerme un corte en la mano. Genial, ahora no sólo soy una chica cabreada, sino que soy una chica cabreada que está sangrando. Cuando soy yo quién sangra no es tan divertido. 

Noto mi mano mojada. ¿Mojada? Miro mi mano y tengo una tira de agua a lo largo de mi herida. Entonces, empieza a curarse sola, quedando totalmente curada. ¿Qué ha sido eso? ¿Quién ha sido?

Miro a mi alrededor buscando respuestas y no encuentro nada. Miro la cripta, y recuerdo lo que allí pasó. Recuerdo a Goody formando parte de mí, curando de esa manera mis heridas. ¿Esto era obra de Goody? ¿Seguía formando parte de mí?

De repente, la tierra empieza a temblar, al igual que empezó a temblar cuando Marco apareció la primera vez que lo conocí. Necesito un momento a solas, y tener al chico demasiado emocional no está dentro de mis planes. Cuando salga de la tierra se lo comento, exigiendo que de una vez respete mi espacio personal. 

Me quedo mirando la tierra, fijamente, esperando el momento en el que atacar. Para mi sorpresa, no sale la figura de Marco, si no una mucho más pequeña. Lleva la misma túnica. Se quita la capucha y es Juan. ¿Qué hace Juan aquí?

-Sí, te pega que vengas a una cripta a meditar

-¿A qué has venido?

-Marina estaba preocupada. No me lo ha confesado, pero tenía los ojos muy abiertos mientras hablaba y alguna vez, te sacaba en la conversación sin venir a cuento, eso lo hace cuando está preocupada por alguien,-hace media sonrisa mientras dice esto y mira al suelo, es una mirada llena de cariño, extraño - así que, te he buscado para asegurarme que estabas bien y quitarle el malestar. Tienes la misma cara de enfadada de siempre, así que, me lo tomaré como que sí que lo estás e iré a tranquilizarla-bromea, esperando que me ría. No me río y él respira hondo.

-¿Cómo me has encontrado?

-Sabes muy poco de los brujos de la tierra, Miércoles. Los brujos de la tierra somos uno con la tierra, la sentimos y la escuchamos. La tierra nos responde a la pregunta que le hacemos. Si le preguntamos dónde está alguien, nos ayuda a buscar las vibraciones de esa persona y así encontrarla. Además, tus vibraciones dicen que algo te enfada, aunque tus vibraciones siempre indican que algo te enfada, pero esta vez era más fuerte. 

-¿Mides la gente en vibraciones?

-No la mido, la entiendo, que es distinto. Por ejemplo, sé que cuando miras esta cripta te arde la sangre. ¿Quieres hablar del tema?

-No-respondo tajante

-Vale, ¿y decirme de quién es? ¿Eso sí?-pregunta curioso mientras se acerca a la puerta y la mira, analizándola

-Es Joseph Crackstone, el fundador del pueblo y aniquilador de marginados. Fue el gran enemigo de mi antepasada Goody Adams. 

-¿Fundador del pueblo humano? No me sorprende mucho. Sin embargo, sabes que, aunque fuese enemigo de tu antepasada, eso no lo hace el tuyo, ¿verdad? Puedes pensar que fue un ser despreciable y seguramente tengas razón, pero era una guerra de tu antepasada, no la tuya. 

-El curso pasado la convirtieron en la mía. Resucitaron a Joseph Crackstone y me mató, me salvé porque Goody Adams usó todo su poder, Enid luchó contra mi primer amor cuando iba a matarme y mis compañeros me ayudaron a vencerlo. 

-¿Tu primer amor?-pregunta extrañado

-Sí, se quejaba de que creía que nos gustábamos y yo no estaba siguiendo sus sentimientos y al final era él quién no tenía sentimientos por mí. A lo mejor si los tuvo. No lo sé, sólo sé que duele y que no me gusta. Espera un momento, ¿por qué te estoy contando esto?

-Porque doy paz, aunque Ango me supera con creces. Ese chico suena a que es imbécil, Miércoles. 

-Espera un momento, ¿has dicho que puedes encontrar a cualquiera? ¿Podrías encontrarlo a él? No sé dónde está-me acerco a él, interesada en su poder. Él abre los ojos de par en par y mira a todos lados. Luego, vuelve a mirarme y parpadea varias veces. Me mira de arriba a abajo su gesto cambia completamente. Cambia a un gesto serio, totalmente serio. 

-Miércoles, eres lo suficientemente inteligente para saber que ni loco haría eso. Mereces algo mejor, sé que ahora parece el fin del mundo, pero el tiempo pasa y el corazón olvida. Olvidar es mejor que estar con alguien que iba a matarte. Muchas veces nos dejamos llevar por los buenos recuerdos, por los momentos felices donde no había problema ninguno. Nos dejamos llevar tanto que se nos olvida porque ya no están en nuestra vida. Intenta recordarlo de vez en cuando. Pasa página, Miércoles, aferrarse a un recuerdo de alguien no te lleva a ningún sitio. 

-No te dirijas a mí como una adolescente imbécil que se deja llevar por el amor-me enfado

-Deja de comportarte como tal y lo haré. Por cierto, Marina se sentía culpable por lo que te había dicho de Tyler, pero después de saber que estuvo a punto de matarte, la verdad es que no debería sentirse culpable. Está bien que de vez en cuando te lo recuerden. 

-¿Qué me recuerden qué? ¿Qué estoy haciendo el tonto porque no supero a alguien que me traicionó y no vale la pena?-grito mientras noto que se acelera mi respiración

Noto algo en mis ojos, están como húmedos, calientes. No sé qué es eso, pero no me gusta esta sensación. Otra vez la punzada en el pecho, esta vez más fuerte. 

-No, que estás haciendo el tonto porque es algo por lo que todos pasamos tarde o temprano. Que te recuerden por qué es buena idea para pasar página, que, entre otras cosas, es porque mereces más que él. 

-¿Y se te ha ocurrido pensar que a lo mejor no? Daño a lo que hay a mi alrededor, a lo mejor no merezco algo mejor que él. 

-Entonces, mereces a alguien a quién no puedas dañar y te complete, Miércoles, no alguien como él. No seas tan imbécil como fui yo, que luché por asombrar a una madre que lo único que piensa es que soy un desecho. 

-¿Qué?-pregunto extrañada y el dolor en el pecho empieza a irse poco a poco-¿Tienes madre?

-Sí, nací de algún sitio, Miércoles. Vengo de la familia Ijyfg, hoy habéis conocido a mi hermano Miguel. Las familias importantes tienen hijos como conejos, quedándose y reconociendo sólo los que nacen en los meses de su elemento. A los demás, le retiran el apellido y los tratan como deshechos. Yo soy uno de esos deshechos. Me metí a mentor para enorgullecer a una familia que no me reconocía, y hasta que Marina no me habló de mi madre, mi abuela y mi hermano y me contó los imbéciles que eran, no se me pasó. Luego me los he encontrado y lo he corroborado. Nuestros antepasados no dicen nada de nosotros, Miércoles, por eso, esta no es tu guerra, aunque fuese de una antepasada tuya. Tú eres tu vida y tu familia es la que te ha criado y creado. La genética está sobrevalorada. 

-¿Ese era tu hermano? ¿Cómo puede ser que alguien poderoso como tú, tenga un hermano mediocre como él?-pregunto extrañada y él empieza a reírse

-Después de todo, el deshecho es él y no yo. No te dejes llevar por una ilusión, Miércoles, las ilusiones no son reales y por eso, pueden no tener sentido ninguno y nublarnos la vista. Cuando eso pasa, es difícil ver lo qué realmente vale la pena y que no lo vale. 

Me quedo pensando sobre lo que ha dicho. La verdad es que me resulta bastante interesante, entiendo perfectamente por qué Marina y él son tan amigos. No sé cómo se ha formado esa amistad ni dónde. Sin embargo, algo me dice que no tardaré en enterarme. Aunque, algo me dice, que hay algo más que una simple amistad.

-Bueno, Miércoles, ¿volvemos?

-Sí, pero me apetece ir directamente a mi habitación

-Me parece bien

Volvimos a Nevermore y fui directa a mi balcón. Saco el violonchelo y empiezo a tocar el preludio de la suite número dos de J.S.Bach. El compositor la escribió después de la muerte de su primera mujer, con el corazón destrozado, buscando una respuesta a la gran pregunta de no saber cómo seguir su vida sin ella. Era una suite llena de dolor, de pena, de sufrimiento. Algo me dice que el dolor que me había dado antes en los ojos indicaba que había estado a punto de llorar. Yo no lloro, en cambio, puedo hacer que el chelo llore por mí. Cierro los ojos y me dejo llevar, me convierto uno con el chelo y siento lo que la música quiere que sienta. Es la única forma que realmente vale la pena sentir. 

Recuerdo todos esos momentos con Tyler y recuerdo que son pasado, que son parte de un pasado tan lejano que ya no sé qué parte de mis recuerdos son reales y qué parte son obras de mi imaginación. Recuerdo que no está, que no está y que lo peor es que es lo mejor. Me pregunto por qué, por qué no podía ser el típico romance, por qué tenía que ser un psicópata, con una psicópata en la relación ya había suficiente. Me pregunto por qué me sigue doliendo y sobre todo por qué no olvido. ¿Por qué no olvido? Soy Miércoles Addams, ¿por qué no olvido?

Cuando me doy cuenta, he terminado de tocar el preludio. Cosa está en mi atril, esperando a que le diga si pasa o no la página, escuchándome atentamente. A veces me pregunto si Cosa también lo echa de menos o ya lo ha olvidado. En ese momento, escucho unos aplausos a mi derecha. Es Marco, apoyado en el filo del balcón. ¿Cómo ha llegado ahí?

-Ha sido impresionante, por un momento no tenías cara de muerta enfadada

Marco sonríe de oreja a oreja mientras dice esto y aplaude con gran energía. Me pregunto si la labia que tenía viene por genética. 

-Marco...

Empiezo a decirle, pero no sé cómo seguir. Sé que no es lo que debería decir, sé que no es lo que debería pedirle, pero necesito respuesta. 

-Sí, dime

-¿Puedo pedirte algo?

-¿Tú? ¿Pidiendo un favor? Por supuesto

Marco se levanta y se acerca hacia donde estoy. Me mira con atención, como si lo que dijese fuese lo más importante en este mundo. Yo respiro hondo antes de continuar. 

-Necesito que encuentres a alguien por mí. Necesito que encuentres a Tyler

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