Capitulo 7
-¿A donde, rojita?-. Esa sonrisa maliciosa en su rostro no me daba buena espina. Le lance mi mochila a la cara para darme un poco de tiempo y correr en dirección a la salida de la cocina. Estaba a punto de tocar la perilla, pero sentí como algo me jalaba de regreso a la sala, me asuste pero también... ¿Me reía? Supongo que en ese momento me sentí como una niña de nuevo
Cuando menos lo espere, sentí como un peso extra me empujaba bruscamente contra uno de los sofás. Al abrir los ojos, descubrí que el culpable era Rukawa; quien ahora estaba encima mio. Pero alejada de la situación, solo podía reírme a carcajadas, en ese momento solo deseaba que esto jamas se acabara. Hasta que una leve caricia en mi mejilla fue la encargada de sacarme de mis pensamientos
Mis ojos se cruzaron con los suyos, me perdí completamente en ese azul tan profundo como el mar. Sin darle demasiada importancia, nuestros rostros comenzaron a acercarse, realmente no quería detenerlo, así que cerré mis ojos para disfrutar mas aquella sensación. Finalmente nuestros labios se encontraron... Este beso... Era completamente diferente, era muy tierno
Pero a los pocos segundos, mi mente por fin reacciono. Use todas mis fuerzas y logre quitármelo de encima, una de mis manos cubrió mis labios, como si tratara de borrar todo rastro de aquel beso. Rápidamente tome mi mochila y salí corriendo de ese lugar en dirección hacia mi casa, con suerte reconocí la zona en donde estaba, sabia que no estaba muy lejos
-R-Rukawa me beso... Y me gusto- fue lo único que pude pensar apenas entre a mi casa
A pesar de todos mis esfuerzos, mi mente no dejaba de repetir una y otra vez ese beso. En fin... La semana por fin paso, y Ryota me dio la clave para cambiar mi fondo de pantalla; lo curioso es que no lo hice. Una tarde, después de una larga jornada de estudios, me encontraba con Mitsui charlando en el salón (El cual ya estaba vacío). No fue hasta unos minutos después que divise una silueta detrás de la puerta
-Sal de ahí, cara de zorro, ¿Que no sabes que es de mala educación escuchar las conversaciones ajenas?- le reclame, haciendo que saliera de su "escondite"
-¿Quien dice que los estoy escuchando? Vine por mis cosas-
-Se sincero, Rukawa, y di que ni siquiera conoces lo que es la privacidad-
-Lo único que te diré es... Vete al demonio-
No lo negare, en ese momento sentí como la sangre hervía, solo quería golpear su zorruno rostro hasta dejársela como una ciruela pasa. Tome mi mochila y lo seguí, solo para arrojarsela a la cabeza, haciendo que se detuviera -¡¡Eres un imbécil!!- le grite
-Tch... Así que soy un imbécil-. De repente, Rukawa se giro hacia mi para después acorralarme contra la pared, rodeando mi cuerpo con sus brazos -Debo recordarte que tienes una foto de este imbécil en la pantalla de tu teléfono-
-¿H-Husmeaste mi teléfono?- le pregunte completamente nerviosa
-La próxima vez ponle clave a tu teléfono, no quisiera que Mitsui se topara con mi foto- murmuro con una sonrisa mientras se alejaba
Sabia que mi rostro estaba del mismo color que un tomate, me había dejado completamente muda; o bueno, hasta que surgió un leve susurro -Al menos Mitsui es mas hombre que tu-
Tome mi mochila y comencé a caminar, pasando a un lado suyo. En ese momento sentí como algo me jalaba del brazo, justo antes de que mi espalda se impactara contra la pared -¡¿Que te pasa?!-
-Repite lo que dijiste-. Su puño se impacto a un lado de mi cabeza, provocando un sonido seco (Y que todo mi cuerpo se tensara). Claramente estaba muy molesto por lo que había dicho
-¡¿Que quieres que repita?! ¿Que Mitsui es mas hombre que tu? ¡¡Pues te lo diré las veces que quiera!! Mitsui es mucho mas hombre de lo que tu podrías ser-. De pronto, uno de sus brazos sujeto mi nuca; cerré mis ojos esperando lo que fuese a pasar. A los pocos segundos, sentí una leve presión en mis labios, abrí los ojos y vi esa mirada clavada sobre la mía
Rápidamente coloque mis manos sobre sus hombros para tratar de apartarlo, pero sujeto mis muñecas con una de sus manos mientras la otra sujetaba mi cintura. Abrí la boca para reclamarle... Grave error... Rukawa aprovecho esto para meter su lengua, debía detenerlo, así que lo golpee en el estomago con mi puño
Con suerte, logre apartarlo, inmediatamente tome mi mochila y salí corriendo de la escuela. Pero apenas cruce la puerta, choque contra cierto castaño -¿Hanamichi?-
-H-Hachi... ¿Que haces aquí tan tarde?- pregunte, seguramente sonaba como Bill Denbrough de It
-Ah... Es que acabo de salir del club y bueno... Quería preguntarte si sabes si Rukawa aun sigue dentro-. El simple hecho de escuchar su nombre provocaba que quisiera regresar a la escuela solo para moler a golpes su cara
-N-No... Creo que lo vi irse hace unos minutos-
-Que lastima, quería preguntarle si podía acompañarlo a su casa. Hanamichi, ¿Quieres que te acompañe?-
-Me encantaría, pero yo... Este... Tengo algunos pendientes que terminar antes de ir a mi casa- respondí
-Ya veo, bueno, nos vemos mañana- dijo el hermano de Akagi mientras se alejaba en su bicicleta
-¿Tuviste que mentirle para que nos dejara a solas?-. Quizás fue instinto, quizás no, pero apenas escuche aquella voz me gire mientras lanzaba un puñetazo hacia su rostro; el cual detuvo con facilidad
-Y-Yo... Creí que te habías ido. Ademas no confundas las cosas, eso jamas se volverá a repetir-
Las cosas en los siguientes días fueron bastante normal... Hasta esa tarde
-¿Otra vez tu aquí?-. Nuevamente, el estaba en las canchas practicando con su balón
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro