-¿qué?-Consulté viendo a Topal.

-¿crees que estés listo para otro?-Consultó mordiendo su labio inferior con timidez.

oh carajo, llevabamos un par de polvos seguidos y aún estábamos lejos del mañanero. Este chico iba a romperme. Me reí, y casi sin darme cuenta rodeé su cuello empujándolo sobre mi. su nariz y su frente tocando las mías para verme a los ojos

-he creado un monstruo-Dije divertido y sí, el monstruo lujurioso oculto en Gabriel me besó tomando las riendas una vez más en la noche.

***

Nunca había sentido que me jodieran tanto y tan bueno, eso o eran las hormonas en mi cerebro recientemente alimentadas como adictas que me impedían recordar otro polvo comparable. Vamos me concidera un hombre con un apetito sexual saludable, pero Gabriel parecía vivir con la polla dura. Jesús, en mi vida había salido con tipos sobre los 30 cuyo apetito sexual comenzaba a uno o dos polvos y un mañanero, o solo un mañanero. Pero gabriel era un chico fuerte, deportista, joven y caliente como una jodida caldera . mi cuerpo ya era mantequilla para el mediodía, y dudaba de que mi trasero volviera a su forma original, pero seguía sin querer salir de la cama de Gabriel y Gabriel seguía sin querer salir de mi.

no fue hasta que nuestros estómagos nos obligaron a movernos que decidimos salirnos de la cama. Los estragos de la noche fueron evidentes cuando al sentarme, la molestia me recorrió, hice una mueca hacia Gabriel que en ese momento nos estaba preparando "el desayuno" helado de vainilla batido con leche y crema con caramelo por arriba.

Debía admitir que mi yo goloso hubiera dado brinquitos en ese momento si mi trasero no se sintiera tan jodido, a la buena manera.

-Eres un salvaje-Me quejé solo para llamar su atención.

Gabriel entonces se giró y me miró preocupado.-¿Te lastimé?

Oh, mierda el cachorrito en serio se veía preocupado.

-Gabriel, fue el mejor sexo que tuve en el ultimo tiempo-Admití porque si no me gustaba ver la cara abatida en el.

Gabriel entonces sonrió y pronto su rostro pasó de la culpa a la coquetería, sus labios curvandose en una mueca que llenó la cocina de chispas electrizantes.

Mierda,mierda, y más mierda.

-¿Si lo fue?-Consultó acercándose y carajo mi estúpida polla palpitó a pesar de todo, malditos demonios lujuriosos alejense de mi cuerpo, pensé pasando mi lengua por mi labio inferior.

-lo fue, pero mantén tu polla alejada de mi, al menos por un par de horas más-le dije pero en vez de apartarlo atrapé sus piernas entre mis tobillos. Gabriel entendió la indirecta acercándose hasta que mis muslos se abrieron y sus caderas apretaron contra las mías y oh sorpresa el muchacho estaba duro de nuevo. sus manos acunaron mi trasero metiendose por debajo de mi pantalón y lo masajearon un poco antes de separar mis mejillas para acariciar mi sensible abertura superficialmente. si seguía haciendo eso yo iba a necesitar que me follara de nuevo, pero entonces suavizó su beso, sus manos se deslizaron fuera de mi ropa para apoyarlas sobre mis muslos y nos separamos solo un poco. él me miraba de esta forma que hizo que mi corazón tartamudee y solo pude decir un: -Eres increible, Gabriel.

Ese niño era jodidamente increíble. Él volvió a inclinarse sobre mi envolviendo mis labios con los suyos. Nos estábamos besando cuando un carraspeo nos obligó a girarnos.

Oh mierda, era el compañero de Topal.

-Cass.-Dijo gabriel irguiéndose a mi lado, joder el chico mi miraba como si yo fuera la cosa más repugnante del planeta. Auch, volví mi vista a Gabriel que parecía un tomate culpable en ese momento. ¿Eran pareja? ¿No que era hetero? Vamos yo no tenía derecho a cuestionarle eso, no si considerábamos que yo estaba casado pero esa idea no me gustó para nada. -¿qué haces aquí?

El chico ludwood se cruzó de brazo en lo que supuse era la puerta de su habitación, era la contigua a la de Gabriel.

-llegué sobre las 8, te hubiera avisado, pero todavía estabas follandote a la Banshee.-soltó con una mirada desdeñosa en mi dirección.

De acuerdo, pestañeé más sorprendido que ofendido. Eso no me lo esperaba, sabia que el chico tenía fama de ser alegre, descarado y llamar la atención como una jodida bola de energía alegre pero no esperaba que me insultara en la cara considerando que muy probablemente yo iba a ser su jefe pronto. Definitivamente el chico tenía algún tipo de rencor personal conmigo y no recordaba haberle hecho nada lo que solo se explicaba con que tuviera sentimientos por Gabriel y me viera como su competencia o...

-Tengo que irme-dije en tono político yendo hasta el sillón de los chicos. Cass me siguió todo el tiempo con su mirada odiosa. Mi abrigo había quedado abandonado allí la noche anterior. Lo junté del suelo pasándolo por mi brazo y junté el almohadón que estaba tirado junto a él para ponerlo de nuevo sobre el sillón. Yo en serio necesitaba comprobar algo ¿no podía ser tan malditamente retorcida la vida o si? Me dirigí a la puerta y entonces por fin Gabriel reaccionó.

-no, espera no tienes que irte-me dijo siguiéndome hasta la puerta.

-lo cierto es que si tengo que hacerlo.-Tenia qué. Gabriel hizo un puchero en ese momento. Él sabía tanto como yo que esto no se suponía que se extendiera tanto. Mierda esto era incómodo. Me removí en mi sitio, todo lo que sea que hubiera pasado esa noche se suponía debía quedar olvidado, incluso si aún podía sentir su olor en mi piel. Había sido una jodida buena noche y decidí que era justo decir eso.

-Fue bueno.

Gabriel asintió.-gracias-Dijo y cerré los ojos con dolor

-oh no me agradezcas después del sexo. Lo odio.Nos vemos por ahí.

-de acuerdo lo siento. -silencio. Yo debía irme pero había más que decir aunque no sabia que-jed?

Alcé una de mis cejas en su dirección invitándolo a que hablara.

-¿volveremos a...?

-es mejor que no.-El volvió a asentir. Miró a los lados y luego de asegurarse de que no había nada me tomó con ambas manos por la cintura y me empujó a la pared más cercana para besarme. Yo lo correspondí profundizando el beso hasta que mi respiración se volvió inestable y tuve que apartarme para tomar aire.

-de acuerdo, hasta luego.

Esta segunda vez me dejó ir y mierda, yo conduje a casa pensando todo el rato en los sucesos de la última noche, repitiendo una y otra vez cada toque y caricia del chico. Olvidate, me dije.

No se suponía que pensara en eso después de hoy, de hecho no se suponía que me quedara a dormir con él anoche de hecho la idea era sacarlo de mi sistema y olvidarme por completo de Gabriel Topal.

Cuando llegué a casa apenas si fui recibido por eddy. Romeo por lo visto aún estaba durmiendo a esa hora. No fui hasta el cuarto a comprobarlo, sino al pequeño cuarto de cachivaches donde aún teníamos un par de cajas con algunos obsequios de boda que no encontramos donde meter, y cosas personales de cuando éramos solteros que ya no tenían cabida en nuestra vida matrimonial pero que no estábamos listos para dejar ir.

De hecho el pequeño armario estaba lleno a botar de mierdas, cajas y cajas apiladas. Eddie se sentó cerca de la puerta a observar lo que hacía mientras revolvía las cajas. Estaba entretenido en eso cuando un par de pasos se acercaron por mi espalda. No se cuanto tiempo había pasado pero yo estaba cada vez más seguro de mi teoría, y cuanto mayor era mi convencimiento mayor la furia con la que comencé a arrojar las cosas al suelo.

-Amore,¿ que hora es? -Romeo sonaba aún ligeramente dormido mientras intentaba comprender que pasaba-¿cuando llegaste? ¿Y qué...? ¿Que demonios estás haciendo?

Apretando los labios en una fina línea me giré a enfrentarlo.-¿Donde demonios están los almohadones de mi abuela?

-¿Por qué fuiste tan grosero?-Me quejé.

-Perdona si estoy de mal humor por haber oído toda la mañana como te lo cogías. Gabriel, no puedo creer que te acostaras con Hitler.

-No es tan malo.

-Definitivamente la polla te licuó el cerebro.-Se quejó yendo hasta la heladera por un poco de leche para armarse su propio batido. Yo por un momento pensé en no convidarle mi helado, no lo había comprado para él, e infantilmente ahora que acababa de ser grosero con Jed yo, como que estaba molesto también ¿Sí? no tenía sentido. Pero me había jodido como la mierda la manera en la que lo había tratado.

-Oye, no entiendo por que estas tan enojado ¿de acuerdo?-Me quejé ignorando mis ganas de mandarlo al carajo. Cass entonces se giró a verme como hacía cuando creía que estaba siendo estúpido.

-Porque es tu jefe y es un maldito sádico que te torturó por meses, no entiendo por qué tu lo defiendes, en realidad no entiendo como terminaste metiéndolo en tu cama. Ese tipo, no es bueno para ti, va a joderte, Gabriel.

-Ese es exactamente el punto por el que estuvo aquí anoche gritando como banshee-Me quejé en tono molesto. no me gustaba que hablara así de jones y ahora si mi temperamento estaba arañando la superficie.

-Si tanto querías joder con un tipo, me lo hubieras dicho, me hubiera acostado contigo. Cuando me dijiste que ibas a traer a alguien a la noche, pensé que me encontraría una bonita muchachita en tetas por la mañana no a él!

Yo estuve a nada de sacar mi lado grosero y decirle que yo no estaba interesado en acostarme con ninguna linda muchachita en tetas, no con él, pero en cambio dije:

-¿Estas celoso? Porque fuiste una perra Cass, y él no te hizo nada.

-Fui una "Perra" porque te estoy cuidando Gabe!-Dijo dejando el pote de helado con más fuerza de la necesaria en la mesa-u no sabes lo que es ese tipo

-¿y tu si?

-Escuché cosas.

-¡tú escuchas cosas de todo el maldito mundo Cass!-Mi voz sonó sufrida mientras intentaba armarme de paciencia con mi compañero, esto era tan jodidamente ridículo.

-¿Y quieres saber lo que escuché de ti? que eres un buen muchacho, que eres un chico listo y amable, nada que ese tipo merezca, por dios es como si quisieras juntar un sol radiante con una nube negra, lo único que hará será taparte hasta que no quede un maldito rayo de luz en ti.

-ni siquiera sabes de lo que hablas-Me quejé apretando la mandíbula. Él no tenía idea de que lo que hablaba, él no había visto a Jed sonriendo en la mañana, no había visto las pequeñas arruguitas que se formaban en su rostro cuando lo hacía, él era todo menos una nube negra. Solo hacía falta detenerte a verlo. él no lo había visto como yo lo había hecho. Yo quería mandar a Cass al demonio, pero incluso en mi cabeza eso sonaba como algo muy cursi, mi compañero lo malinterpretaría sin lugar a dudas, por lo que me limité a cruzarme de brazos.

- Te equivocas,Gabriel, lo sé, he hablado con un tipo que ha salido con él, ¿quieres saber que me dijo? toma tus cosas y huye antes de que sea demasiado tarde. Esta vez no lo oí del amigo de un amigo, lo oí directamente de una fuentes confiables.

-¿Y quien es tu gran fuente confiable?-Consulté sintiendo una ligera molestia que se parecía mucho a celos, sí a mi no me tenía por que importar con quien hubiera dormido mi jefe, pero que encima hablaran tan mal de él, joder eso si me molestaba porque era un tipo que me agradaba, yo definitivamente hubiera defendido la moral de cualquier tipo que me agradara y si él no me consideraba su amigo, no importaba, yo si lo consideraba uno.

-Solo te diré que ese tipo arruina todo lo que toca, cuando andes arrastrándote, no digas que no te lo advertí. -Dijo molesto agarrando el pote entero de helado ¡mi pote de helado!-Y si fuera tu, usaría 5 forros antes de tocarlo, porque si yo me tiré medio chicago, él se volteó medio mundo. Mira que hasta su esposo es internacional ¿Ahora quién demonios es el idiota que sale con un casado? -Me soltó yendo hasta su cuarto y dando un portazo.

-¡Ese es mi problema, Cass!-le grité a la puerta cerrada. -¡Y ese es mi jodido helado!

Si tanto asco le tenía a Jones debería soltarlo, puede que lo haya contaminado durante la mañana mientras lo compartimos ¿no? sí, yo estaba siendo infantil.

Cass entonces volvió a abrir la puerta y arrojó el helado al suelo antes de volver a encerrarse.

Demonios.

Debía ser la primera vez en la que peleaba con mi compañero desde que nos habíamos mudado juntos.

Es decir, en primer lugar no entendía por qué Cass estaba siendo tan jodidamente cabrón con Jones. Sí, él era un imbécil a veces, pero ni siquiera era su residente, si alguien podía decir algo en contra de su trato profesional esos éramos Cali, Justin o yo. Y al final llámalo complejo de Estocolmo o lo que sea. Dudaba que ninguno de los tres dijera algo en su contra. Cali estaba perdidamente enamorada de él, Wyatt estaba cerca de ser extrañamente complaciente y yo...

El punto era Cass no lo conocía, que estuviera esparciendo chismes sobre él me molestaba ¿de acuerdo? Además no entendía por qué tenía que meterse con quien yo me acostara, si tanto le molestaba que trajera alguien a casa podría habérmelo dicho, pero no tenía por que tratar como basura a mi acompañante, vamos, yo había fingido más veces de las que se podía contar con una mano que recordaba al tipo que aparecía en la cocina después de que Cass los trajera a casa. yo solo, yo solo no le encontraba sentido.

A la mierda, junté el resto del helado de vainilla que Cass había tirado y lo boté antes de encerrarme en mi propio cuarto con un portazo aún más sonoro del que había dado mi compañero para dejar en claro que yo también estaba molesto.

sí, definitivamente estábamos siendo dos idiotas.

Bueno, mis amores, les dejo el extra del día, la yapa como dirían aquí jajajjaa para los que sospechaban del amante de Cass pues, creo que ya es bastante obvio aunque nuestro querido Cass no era tan inocente en todo el asunto jajjaja