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Parte: Única



Lo mejor puede llegar de lo peor...


Cuando lo volvió a ver estaba completamente destrozado, sin embargo encontró en sus brazos comodidad y una sincera amistad aunque no duró demasiado ya que su terco corazón se había prendado de ésa persona, aquella que desveló varios de sus secretos tras una simple mirada, aquella que le encontró mientras corría llorando bajo la fuerte lluvia sin el mas mínimo rumbo, aquella que lo llevo de la mano un largo tiempo y le dio el coraje de enfrentarse a esos dos malditos que decidieron jugar... mentira no sólo jugaron con sus sentimientos y su corazón sino que se atrevieron a decir que fue un error, cual fue el error las promesas con las que había caído en tan bello hechizo llamado amor o él a quien estaban en verdad dirigidas tales palabras porque aquel hombre en realidad nunca le quiso y sólo fue el daño colateral de hacía quien estaban dirigidas tan bellas palabras, tan efusivas cartas y hermosos pensamientos que él escuchaba en cada momento. Al inicio no sabía a quien odiaba más a el hombre que se volvió su todo con lindas palabras, obsequios y una que otra carta con bellos pensamientos no eran solo bellas mentiras o aquel que fue su torturador durante años aquel que le destrozaba con cada palabra cuando sólo quería ser su amigo... ¿A quien estaba realmente dirigido todo ese rencor que sentía?
¿A quien odiaba más a el que se dejó seducir o al que sedujo?
¿Al que ayudo sin esperar nada o al que toda su vida intentó seguir?
¿A Todoroki Shouto o a Bakugou Katsuki?
¿A su amor ahora imposible o aquel que lo volvió imposible?
No lo sabía y aunque nunca lo admitiera no lo sabría, porque para una traición se necesitan ambas partes, lo que si sabía era que lo que más dolió fue el hecho de que aquella traición vino de la única persona que pensó y juro nunca lo dañaría, porque al verlos aquella tarde devorándose a besos y recorriendo se con caricias, las cuales estaban llenas de pasión y lujuria algo con lo que a él nunca lo tocó si bien lo pensaba siempre fue tan cálido y amable casi como si fuera de cristal pero con el rubio incluso aquellos ojos de mirada heterorcromica misma que demostraba tantos sentimientos lujuria, amor, incluso admiración, no de aquella por alguien al que deseas seguir sino con la que miras una pieza de arte, un perfecto monumento o incluso aquel libro que te enamora desde su portada hasta su epílogo, en el que cada palabra y desarrollo te llevan a esperar ansioso la siguiente pagina y la comparación volvió a golpearlo, a el no lo miraba así, incluso muchas veces no le miraba, era tan fácil de distraer y aquella admiración que veía hacia el no era nada en comparación de la que veía en tal mirada hacia Katsuki... En determinado punto la realización le obligo a salir corriendo sin rumbo u con un inmenso hoyo en su interior, se sentía traicionado, destrozado e incluso apuñalado pero no había sangre por ningún lado nada que le digiera que moriría a pesar del dolor en cual muy por el contrario le decía que seguía vivo corrió un largo rato y a cada paso se sentía más perdido ¿Desde cuando? Se preguntó, desde cuando él era el que sobraba en su propia relación, desde cuando su corazón ya no latía con el de aquel que amaba, desde cuando el sólo era el amante, porque no admitía por más que doliese aquella escena había de todo menos el sentimiento de ser un amorío fugitivo, no parecía un simple acoston y dolía más el poder entender que desde hace tiempo Todoroki era indudablemente frío con el pero no lo noto o no quiso notarlo y ahora se dio cuenta que a el nunca lo había visto de aquella forma tal vez calidez y ternura pero nunca con aquel grado de admiración y si lo pensaba podría decir que parecía contenerse el otro a su lado, corrió un largo rato hacia los dormitorios ni siquiera se dio cuenta cuando sus lágrimas fueron ocultas por la fría lluvia hasta que chocó con él y fue entonces que por primera vez lo vio como un rayo de sol en una tormenta, al chocar casi cayó de no ser por aquella mano que consiguió sujetarle, ese pequeño contacto fue cálido y apacible posiblemente nunca lo olvidaría y al verle directamente a los ojos el nombre salió de sus labios con un tinte ronco
-Shinsou-
Fue todo lo que salió y todo lo que necesito antes de ver una pequeña sonrisa de reconocimiento en el otro chico, no supo porque o que lo orillo pero lo siguiente que paso fue tan rápido se lanzó contra el más alto y dejo que las lágrimas volviesen a salir de sus ojos, el calor que desprendía el peli morado era tan reconfortante para su frio cuerpo, mientras un confundido peli morado sólo atinaba a abrazarle intentando reconfortar un poco al mas bajo, ciertamente no era bueno para ello y tampoco para ninguna clase de sentimentalismos, esas cosas nunca le habían interesado eran complicadas y poco útiles a su punto de vista sin embargo en aquellos momentos hubiera deseado saber que decir...Tras aquel pequeño encuentro el estudiante de estudios normales terminó haciendo caso a aquellas emociones que lo habían atosigado desde el festival de la UA y por simpleza e incluso parsimonia prefirió olvidar sólo para darse cuenta del porque de la necesidad que resurgió en esos momentos de ayudar a Midoriya y ver su sonrisa una vez más, aquella sonrisa que tenía mientras le hablaba de forma animosa ante todos mencionando que su quirk era genial, no fue tan difícil saberlo a pesar de todo al enterarse de la razón de aquellas lágrimas odio a aquellos dos hombres pero a la vez sentía que le hicieron un favor, no entendían que Izuku era alguien tan especial, una persona cálida, con una sonrisa tan reconfortante como el calor del verano, sus ojos brillosos casi le recordaban al mar aunque su color fuera el mismo de las junglas e igual de misteriosos, su piel era suave y sobretodo su voz era hipnotizante como el canto de cualquier creatura mitológica cada palabra que salía de su boca era simplemente perfecta porque era el quien le hablaba haciéndolo perderse en infinidad de ilusiones donde sólo ellos existían y al mismo tiempo sabía nunca serían reales ya que el menor seguía dolido, lo miraba en sus ojos estaban empapados por una neblina de tristeza y resignación que el se encargaría de borrar.Tras unos meses ya no sabía si era buena idea callar, le era imposible no sonreír de forma tonta al estar al lado de aquel chico, era un martirio cuando veía a aquellos dos y su mirada de tornaba dolida, quería ayudarle acabar de curar su corazón pero como un amigo no podría ni tampoco quería conformarse por serlo solamente, quería poder estar más cerca que los demás abrazarle sin razón, cuidarle sin poner después una boba excusa... pensaba decirle todo a el menor porque no se resignaría a perderlo sin luchar, así fuera que hubiera que arreglar el corazón ajeno con el suyo propio, antes del almuerzo tomó sus cosas y compro en la tienda de dulces algunos sabía que al menor le gustaban u se le hacia mejor que simples flores serian algo que disfrutaría y al probar cada uno le recordaría o eso prefería pensar aunque todos le miraran raro nunca había comprado dulces, normalmente si no dormía estudiaría algún libro o para las clases particulares de Aizawa sensei, después fue lo más rápido posible a la clase sólo para encontrar con que la clase normalmente ruidosa y bulliciosa estaba en un incomodo silencio observo a todos y vio el porque todas las miradas demostraban reproche en una de las butacas Shouto esperaba por katsuki por alguna razón, algunas miradas de dirigieron a Izuku con rastros de pena ambos miembros salieron pasando a su lado en completo silencio pero no les prestó atención. Entro rápidamente y se acercó al peli verde entregando el paquete ante una mirada sorprendida esperaba solamente no arruinar las cosas, ni siquiera sabía si sus amigos ya conocían el hecho de haber estado con el todo aquel tiempo que permanecía perdido al no querer estar cerca de la gente que le recordaba a aquellos infieles...
Salieron del salón y en completo silencio se dieron cuenta que estaban en el mismo sitio de la primera vez donde un corazón roto pudo ver los ojos de uno que ignoraba lo que había nacido en su interior, el más alto se volteó y apretando los puños hablo.-Se que aún estas dolido, no quería que esto pasará pero no me malentiendas sólo no quería que fuera de esta manera... pero no puedo ni quiero seguir callando y mintiéndote. No bajes la mirada- mencionó al ver como el menor veía el concreto del suelo- Midoriya, yo no se cuando o porque pero me gustas... no es más que eso me encantas, sabes cada momento a tu lado es un minuto en mi propia utopía, cada que me hablas me siento en los mismos Campos Elíseos y cada que sonreías se sentía como una inmensa victoria. Sabes yo... bueno me enamoré de ti si así se le puede llamar porque lo que siento no lo puedo expresar en palabras, siempre que cierro los ojos te veo sonreír y este tiempo en el que te he visto sufrir me ha partido el alma, quiero verte reír y ser yo la razón de esa sonrisa...- hablo con calma soltando algunos ademanes de vez en cuando y al ver que el menor iba a contestar le cayó con una sonrisa - No es necesario que me contestes ahora puedo esperar y lo haré porque vale la pena poder estar a tu lado aunque sea un segundo más Midoriya...- No continuó cuando el menor le estaba abrazando dejándole sorprendido -No te diré que no me duele aún lo ocurrido pero a tu lado me siento seguro y si, así puedo curar aquella vieja herida que importa sólo dejaré que se cure junto a ti, mientras disfruto cada momento contigo porque me has demostrado todo este tiempo que te importo al estar ahí para mi sin importar nada- dijo con algunas lágrimas antes de sentir los labios del más alto sobre los suyos en un cálido beso que solo duro unos segundos. Uno que le encantaba sentir era cálido y dulce.. pero también lograba que su mente volará a un lugar en el cual sólo los dos existían y eso era lo que importaba incluso diría que nunca se arrepentiría de aquello, si aquel chico lo vio en sus peores momentos y lo saco adelante peleando con sus demonios valía la pena intentarlo y si no se podía... No tenía que pensar en ello ahora porque algo muy en el fondo le decía que Shinsou sería su Orfeo siempre aquel que permanecería en un infierno por el y si no era así como querían que llamase a aquella experiencia...

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