(antes de iniciar, debo decir que este tipo de ceremonias las desconozco, pero haré lo mejor que pueda)

11:27 am

Cuando menos lo esperaban, comenzaron a escuchar pasos acercándose cada vez más cerca de donde estaban, al momento de no escuchar más aquellos pasos, llegaron a sorprenderse con tener que encontrarse con él, quien vestía ahora con un traje azul marino junto a un chaleco gris, una camisa blanca, una corbata del mismo color que su traje y un pañuelo blanco en su bolsillo izquierdo del sacó.

Garu, se encontraba frente a las escaleras, acercándose cada vez más hacia donde ellos estaban.
Quienes se acercaron de la misma forma que él, únicamente fueron su madre, hermanos y abuelo.

Aika: al fin podrás estar con ella, te felicito

Sara: estoy orgullosa de tí hijo, por fin podrás estar con la chica que en verdad quieres a tu lado [comienza a sollozar]

Gura: no llores mamá, no hay por que llorar ahora, esperemos a la ceremonia

Garu: [ríe] si, hay que esperar.

Isao: [se acerca] estoy feliz por tí, felicidades

Garu: muchas gracias abuelo [se acercan sus amigos]

Ching: [lo abraza] esperamos que sean muy felices apartir de ahora [se separa]

Tobe: [lo abraza] felicidades amigo [se separa]

Abyo: al fin lo lograste amigo [lo abraza]

Garu: gracias chicos

Isao: bueno será mejor que ustedes se adelanten, los dos deben encontrarse en la iglesia, no antes

Sara: es verdad, será mejor adelantarnos, no queremos que las cosas se arruinen

Garu, Isao, Sara, sus hermanos y únicamente los chicos se adelantaron a la iglesia.
Mientras que en la casa únicamente se encontraban, las chicas, Sia y Yoana esperando a que la novia bajara a la sala para poder dirigirse la iglesia y poder encontrarse con Garu.

Cuando se dieron cuenta Pucca se encontraba en la puerta que se adentraba a la sala.

Sia: te ves muy bien hija, en verdad vas a impresionar al novio

Yoana: bueno ya que estás lista hay que dirigirnos a la iglesia para que te encuentres con el

Todas se dirigieron a la iglesia.
Para cuándo llegaron vieron fuera de la iglesia demasiada gente rodeando la puerta. Y justo cuando estaban por llegar, vieron que las personas voltearon a mirar a donde ellas estaban y comenzaron acercarse hacia donde estaban para poder recibirlas, felicitar y mencionarle que la estaban esperando dentro de la iglesia.

La gente comenzaba adentrarse dentro de la iglesia y tomar su propio asiento.
La canción comenzaba a escucharse, las personas se ponían de pie, y miraban a la puerta, donde se veían a los tres tíos de Pucca acompañándola a cada lado de ella.
Los tíos llevaban puesto un traje negro y corbata.

Pero lo mejor que todos veían, era el hermoso vestido que tenía Pucca.
El vestido está conformado por un escote de forma de corazón, con un encaje sobre de esta hasta la cintura sin mangas. La falda del vestido, traía detrás una cola de novia, ambas estaban hechas de una tela lisa y brillosa y de igual manera tenía un encaje transparente sobre de el, pero al final de la falda se veía un conjunto de flores blancas.
Pero el mejor detalle del vestido, era la capa que era parecido a un velo de novia, que se desprendía desde los hombros hasta ser un poco más larga que la cola de novia siendo de una tela transparente, y teniendo conjuntos decorativos al inicio, en las orillas y al final.

Entre sus manos, llevaba un pequeño ramo de flores que consistían de flores blancas y azules.

Su cabello era recogido por un pasador de flores blancas del lado derecho, haciendo que tuviera un flequillo, el resto de su cabello estaba completamente libre de algún pasador o liga, siendo ondulado desde el agarre hasta el final de su cabello, teniendo un pequeño velo que están siendo sostenido por el pasador.
Su maquillaje, es a un tono adecuado para su tono de piel. Tenía unas sombras en los ojos de un color lila, sus mejillas eran resaltadas por un ligero color rosa, y su labial era de un rosa claro y brilloso.

Ella, junto a sus tíos estaban caminando entre la gente, todos viendo detenidamente a la novia, que con solo verla se veía lo feliz que estaba en este momento, esperando con ansias el estar al fin en el altar junto al novio.

Pero esto es con ella, en cambio Garu. No tenía palabras para describir lo que ahora sentía; amor, cariño, nerviosismo, bastantes sentimientos lo invadieron en el momento en el que la vio entrar por la puerta, no sabía si el tiempo comenzó a ir cada vez más lento para verla detalladamente y ver mejor lo bella que se vía en ese momento o acaso siempre la vio de esa forma y únicamente en ese momento fue cuando en realidad podía verla de la mejor manera posible, para así nunca olvidarlo.
Pero claro, quien podría olvidar este tipo de momentos, la persona por la quién en realidad has luchado, guardado tu corazón y un lugar dentro y fuera de tí solo para ella, esa persona con la que al fin podrás estar con ella y con testigos frente a tí, solo está a momentos de estar plenamente a tu lado. Nadie podría olvidar este tipo de momentos donde por fin tendrás la gran excusa de que estás casado con ella y no puedes separarte de ella cuando en realidad no quieres que eso suceda.

Cuando llegaron al altar...

Ho: Garu, te entregamos a nuestra pequeña

Dumpling: esperamos que la hagas feliz apartir de ahora

Linguini: porque si eso no pasa, como buenos tíos te haremos corresponder [dijo metiéndose entre Garu y Pucca]

Garu: así lo haré señores no se preocupen [se retiran]

Sia: Garu, aquí y frente a toda esta gente, te entrego a mi hija al igual que Yoana, son mis más grandes tesoros, cuídala bien

Garu: la trataré y cuidare como es debido señora

Sia: [abraza a Pucca y se retira]

Sara: [se acerca] Pucca, aquí te entrego a mi hijo, espero y lo cuides y quieras igual como él lo hará contigo

Pucca: así será señora, jamás lo dude.

Sara: [se retira, no sin antes darle un abrazo a Garu]

Al retirarse, los únicos que se quedaron en el altar se miraron por un momento para después sonreír entre ellos, darse las manos y mirar hacia el frente

La ceremonia comenzó, todos desde sus lugares escuchaban atentamente las palabras del padre.
Todos se mostraban felices de este día, de todas las personas presentes muy pocas de las que se encuentran reunidas en este momento y lugar, sabían lo difícil que tuvieron que pasar ambos para que al fin estén en este momento a tan solo de unos instantes a que los declaren marido y mujer.

Y así fue, tras decir su juramento ante todos, se procedió a colocar los anillos, Ching fue quien se acercó al centro para entregar los anillos y que entre Pucca y Garu se los colocarán.
Ambos anillos son del mismo color y material, la única diferencia es que el anillo de Pucca tenía rodeándolo pequeñas piedras blancas y en el centro una de mayor tamaño.

Al ser entregados y colocados los anillos, y tras decir otras palabras del padre, tanto Garu como Pucca aceptaron ser fieles, amarse y respetarse, fue cuando entre todos ellos fueron dichas al fin las palabras que al parecer deseaban escuchar.

>Siendo así, los declaró marido y mujer<

La gente se puso de pie, todos sonriendo mirando al mismo tiempo al mismo sitio, entre todo el salón se escucharon cientos de aplausos, ¿La razón?, Es simple. Frente a toda la gente o para ser más específicos, en el altar todos veían la misma escena. Ambos novios se encontraban besándose. Después de las palabras de declaración, ambos se encontraban de igual manera felices, tanto que por la felicidad que sentían en ese momento se dedicaron un cálido besó, Garu tomo la mano izquierda de Pucca con la que sostenía el ramo, mientras que la mano izquierda de Garu tomaba el rostro de Pucca, y ella con su mano libre sostenía el brazo izquierdo de Garu. Esto sólo duró unos segundos, pareciera muy poco tiempo, pero para ellos fue lo suficiente tiempo para su afecto, cuando se separaron ambos tenían en su rostro una gran sonrisa, cuando su vista se fijó ante todas las personas lograron ver qué Sara, Sia, los tíos de Pucca y uno que otro conocido trataban de no llorar de la felicidad que se presentía en el aire.

~narra Pucca~

'No puedo creer que al fin esto está pasando, lo que una vez creí que sería solo un sueño, lo tengo frente a mí.
Puedo ser parte de su vida, podremos tener ambos una sola y única familia, puedo decir que fue difícil pero al fin estoy con él, no lo dejare solo en ninguna ocasión, voy a poder cuidarlo y darle el amor que siempre quise, nunca voy a olvidar este día, el día en el que me entregué plenamente a él, para nunca más volverme a separar.'

~fin de narración~

Todos comenzaron a salir de la iglesia, teniendo frente suyo a Pucca y a Garu, al estar fuera de la iglesia todos se acercaron a felicitar a la feliz pareja, entre ellos había tanto personas cercanas como lejanas, y de igual manera la que menos se esperaban que llegaría.

Pucca: ¿Rin Ring?, ¿Que haces aquí?

Rin Ring: Dada me invitó

Garu: aguarda, ¿aceptaste venir con Dada?

Pucca: ¿Desde cuándo le haces caso a mí primo?

Rin Ring: no me había fijado en el hasta que note que era el que más me visitaba y se preocupaba en el momento que estuve en el hospital

Pucca: hablas de la última vez que...

Rin Ring: correcto, desde esa ocasión me di cuenta que puedo ser feliz con él, así tú con Garu. Por ende los felicito, espero y sean muy felices, y de paso me disculpó por lo que intente hacerte Garu, no debí interponer me en algo que desde un inicio ya tenía un final.

Garu: no tienes por qué disculparte Rin Ring, en cambio agradecemos que estés aquí

Rin Ring: gracias [los abraza] que sean muy felices

Después de hablar fuera de la iglesia, todos se dirigieron al gran salón donde se llevaría a cabo el resto de la fiesta, teniendo frente a todos a la feliz pareja que estaban agarrados de las manos.

Al momento en el que llegaron los invitados se dispersaron, las sillas fueron ocupadas por todos, la comida comenzó a ser servida, todos gozaban de este momento, veían desde sus lugares la gran sonrisa que tenían los novios, que tal parecía que nunca acabaría.

La fiesta siguió, la voces se escuchaban por doquier, entré ellas las risas, aplausos, felicitaciones. Entre la fiesta se comenzó servir un poco de vino o cualquier otro tipo de bebida alcohólica. La mayoría quien la consumía comenzaba a notarse que se habían excedido al tener que beberla. El resto de la gente seguía divirtiéndose, charlaban entre ellos, otros incluso se reunían para bailar.

Yoana, quien veía esto desde lejos, se acercó a los novios, que se encontraban hablando con algunos conocidos del clan.

Yoana: vamos chicos, cuando piensan mostrarle a la gente lo lindos que se ven los dos bailando

Señora: hay si, ya quiero verlos bailar, ¿a qué hora pensaban bailar?

Pucca: pues, tal vez en un rato más

Señor: bueno, entonces hay que anunciar que en unos momentos se iniciará el baile [ambos señores se retiran]

Pucca: gracias Yoana, pero Garu y yo pensábamos hacerlo más tarde

Yoana: mientras más pronto mejor ¿No? [se va]

Pucca: genial

Garu: ya tranquila no te enojes amor, al fin de cuentas, esto tenía que llegar

Pucca: si pero... [La interrumpe]

Garu: pero nada, solo hay que disfrutar está noche

Pucca: está bien [le da un beso]

Su baile fue anunciado por medio de un micrófono, la gente que estaba cerca de ellos les dedicaban palabras sobre las ansias que tenían por verlos bailar.

Así paso hasta que al fin, se mando a llamar a los novios hasta la pista de baile improvisada, ya que entre la gente se organizaron para abrir un espacio entre las mesas, y tuvieran el espacio suficiente.

La canción comenzó a dar su inicio, la gente estaba rodeando el lugar donde se presentaría el baile.
Ambos se pusieron en su lugar indicado para iniciar a bailar, ambos estaban nerviosos, pero al parecer trataban de no hacerlo notar.

Las personas aplaudían, no había ninguno que no lo hiciera, tal parecía que la felicidad estaría abundando por toda la noche.

Tras terminar de aplaudir, las mesas se ubicaron en su lugar para así todos regresar a su lugar y desde sus lugares, vieran como Garu y Pucca partían la tarta.

La fiesta siguió, continuaban todos divirtiéndose entre diversas actividades, hasta el momento en que todas las chicas se reunieron detrás de Pucca, esperando a que lanzará el ramo de flores.

Todas gritaban de emoción, esperaban con ansias poder atrapar el ramo de flores, Pucca solo reía por la forma algo infantil en que todas se comportaban, tardo un poco, hasta que al fin lo lanzó al aire. Pero lo que la sorprendió al tener que darse la vuelta fue que la chica que tomo el ramo, no fue otra que Mei, quien se encontraba detrás de todas las chicas, ella tenía una expresión de sorpresa, nunca se imaginó que el ramo llegaría hasta donde estaría.

Mientras que con los chicos, todos comenzaron a burlarse y a darle pequeños empujones en los hombros a Ryo, quien se encontraba de la misma forma que Mei, solo que en su rostro tenía pequeños rastros de estar sonrojado.

Este tipo de cosas continuaron hasta que los novios tuvieron que irse. Todos o la mayoría que seguía consciente salieron a despedirlos, a como algunos se enteraron, Garu tenía planeado llevar a Pucca a pasar unos días por la ciudad.

Ambos se retiraron siendo ya las 12 de la noche, ya que estando en esta aldea el camino a la ciudad era mucho menos largo, fue rápido en realidad, pero cuando estuvieron a punto de llegar, frente a ellos se encontraba un auto blanco.

Ya dentro del auto...

Pucca: ¿Cómo?

Garu: Un amigo de mi abuelo le hace el favor de llevarnos al departamento donde estaremos

Pucca: ¿Por cuánto tiempo estaremos aquí?

Garu: mmm...un par de días, quería traerte a que conocieras la ciudad

Pucca: ¿Ya habías venido?

Garu: cuando podía lo hacía

Pucca: está bien, te creo [ríe]

Durante el viaje que estuvieron en el auto, Pucca no dejaba de asombrarse de todo lo que estaba a su alrededor, y que más siendo a estas horas.

Llegaron a un edificio bastante alto, casi a la altura del restaurante de Sooga, incluso un poco más alto. Mientras Pucca observaba el gran edificio que al parecer por dentro estaba bastante amplio y lujoso, Garu le estaba dando las gracias al hombre que les hizo el favor de traer los hasta aquí.

Ambos entraron al hotel hasta tener que llegar a su habitación.
Ambos se encontraron con una habitación algo lujosa, de color blanco, está tenía una ventana y una puerta corrediza que tenían unos cortinas de color marino, al parecer fuera de la puerta había un pequeño balcón, dentro se encontraba una cama matrimonial con un covertor blanco con algunas franjas marino, a un lado se veía una pequeña mesa de noche con una lámpara sobre de esta, en la habitación también se lograba ver un tapete de igual manera marino y un espejo. A un lado de la puerta corrediza, se encuentra la entrada a un cuarto más pequeño, que dentro de este se lograba ver que era el baño.

Al entrar a la habitación lo primero que hicieron fue quitarse de encima la prendas que ahora les incomodában, Pucca fue al baño para poder cambiarse, mientras que Garu su quedó en la habitación dejando en la silla que estaba a un lado suyo, su sacó, chaleco y corbata.

Él se encontraba mirando a través de la ventana, las luces que adornaban a la ciudad, aún siendo las 2 de la mañana.
No pasó mucho tiempo para que escuchará que al lado de él se habría la puerta y se acercara Pucca por detrás suyo y lo abrazará.

Garu: ¿Ocurre algo?

Pucca: mm..mm... [negó con la cabeza]

Para poder hablar mejor con ella, Garu se dió vuelta para poder devolver el abrazo, dándose cuenta que Pucca traía puesto pijama, de un color crema haciendo que se sonrojara un poco.

Pucca: gracias, nunca creí que esto pasaría

Garu: pues ya pasó y como prometí, no te voy a dejar de querer

~Lemon~

Ambos comenzaron a acercarse hasta el punto en el que lograban sentir la respiración del otro sobre la suya, ambos podían terminar con esa distancia con un solo movimiento.
Pero al final ambos terminaron acercándose, Garu acercó más a Pucca abrazándola de la cintura, mientras que ella lo abrazaba por el cuello, comenzando a jugar entrelazando su mano con su cabello.
Por un momento, el beso era de una forma tranquila y suave, Garu acercaba a él cada vez más a Pucca abrazándola de la cintura.
Pucca, al no tener suficiente aire, entre el beso, abrió un poco su boca para respirar un poco. Ante eso, Garu aprovecho para dar paso su lengua al interior de su boca, explorando su interior, comenzando una pelea entre ellas.

Garu con cuidado levanto a Pucca en el aire para poder cargarla en sus brazos, mientras que ella lo rodeaba su cintura con sus piernas.

Aún sin separarse, Garu se llevó cargando a Pucca hasta la cama donde la recostó con cuidado de no dejarla caer, quedando él sobre de ella.
Comenzó a bajar hasta el cuello dejando un camino de besos, mientras que Pucca le daba el espacio necesario, exploraba aquel lugar como si estuviera buscando algo, fue así hasta que encontró la parte sensible de Pucca cerca de su clavícula, haciendo que por su boca saliera un pequeño gemido cuando sintió que su piel era ligeramente marcada.
Mientras su mano derecha acariciaba su cadera, su mano izquierda comenzaba a explorar su piel. Tal pareciera como si tuviera cuidado de no lastimar su blanca y suave piel.

Por otro lado, Pucca dejo salir un ligero gemido al sintir un escalofrío que inicio desde la parte baja de su abdomen, donde al parecer Garu comenzaba a tener tacto con su piel.
Él siguió explorando con sus manos el frágil cuerpo de Pucca, comenzando a dejar a un lado la ropa que comenzaba a ser molesta, hasta que por fin se decidió en desacerse de la parte de arriba de la pijama de Pucca, dejando expuesta su piel pálida y desarrollado cuerpo.

Garu solo miro por un momento, admirando el cuerpo de Pucca, y la escena que tenía frente de él; el rostro de Pucca siendo decorado por un ligero rubor, tratando de al menos regular su respiración, con una ligera marca que tardaría en desaparecer en su parte más sensible. Garu, únicamente sonrió y volvió a darle un delicado beso.

-Ah~

Entre el beso dejo salir un pequeño gemido, al momento de sentir que Garu comenzó a jugar con sus pezones, ella, con movimientos torpes, poco a poco retiro por completo la camisa de Garu, hasta que su torso quedo completamente desnudo, mostrando el gran trabajo al que se ha dedicado estos últimos años con sus exagerados entrenamientos, y una que otra cicatriz que aún está visible. Tal parece, esto logro ser lo suficiente para ella, como para no retirar la vista de enfrente.

Al darse cuenta de esto únicamente sonrió y siguió con lo que actualmente estaba, con cuidado, Garu llevo sus manos hasta las caderas de Pucca despojandola de lo único que la cubría.

Pucca, recorría con sus manos la espalda de Garu, hasta tener que llegar a su cinturón, desabrochó su pantalón y con sus piernas le retiró sus prendas.

Pucca comenzó a besar el cuello de Garu, dejando de igual manera una masca cerca de su hombro derecho, mientras que sus manos, explotaban el cuerpo de Garu, él por el contrario, gruñía cerca de su oído por tal acaricia, continuando masajeando los pezones de Pucca.

-Ah~ Ga-Garu...

Pucca soltó un gemido de dolor, mientras se aferraba a él abrazando espalda de Garu escondiendo su cara en su hombro, al momento de sentir una extraña sensación en su parte íntima.

-Tranquila, ya pasara.

Hablo con la voz un poco ronca, haciendo que a Pucca le causará un escalofrío por su espalda, solo se dedicó a esperar a lo que dijo su amado.
Él por lo contrario, comenzó a besarla de una forma algo húmeda para poder distraerla del dolor que sentía, mientras que delicadamente, comenzaba a prepararla moviendo su primer dedo en pequeños círculos, hasta notar que Pucca quería un poco más de aquella sensación, continuando con un segundo dedo realizando movimientos parecidos a tijeras, al final introdujo un tercer dedo simulando pequeñas embestidas.

Siguió así, hasta el momento en que Pucca soltó un gemido al sentir una sensación dulce en una pequeña embestida.
Ante eso, Garu retiro su mano y con cuidado comenzó introducir su miembro con cuidado de no dañar a Pucca.

-Ah~

Soltó un gemido de dolor.

-No me movere hasta que estés lista

De igual forma, distrajo a Pucca del dolor dandole un beso, explorando su cuerpo con sus manos y dejándole alguna marca en su cuerpo.
Comenzó a moverse con cuidado, cuando sintió que Pucca movió un poco sus caderas, dandole la señal a Garu de poder moverse.

-Mmm...más, Garu~

Garu comenzó a dar embestidas más rápidas a cada momento, Pucca no dejaba de soltar gemidos por las embestidas que le daba Garu.
Ambos llegaron al clímax, Garu termino corriéndose dentro de Pucca, retirándose de ella con cuidado de no lastimarla. Pucca, trataba de recuperar la respiración, dando un último gemido al sentir que Garu salió de ella.

Ambos se recostaron al lado del otro, Pucca se recostó en el pecho de Garu, mientras que él la acercaba a él abrazándola por la cintura, para que al final ambos terminarán profundamente dormidos.