¿Pero que mierdas le pasa a tu cara?
14 de Agosto, 2020
Lukas Davis.
-Siento un pequeño cosquilleo en mi mejilla.
-Mis ojos pesan y aun lucho por abrirlos.
-Puedo abrir un poco uno de mis ojos y me doy cuenta que ya es de mañana, y que ese extraño cosquilleo es mi prometida dejando húmedos besos por todo mi rostro.
-Me volteo con mucha rapidez hacia ella y eso hace que un pequeño susto junto a un gritito abandones sus labios.
-La tengo envuelta en mis brazos con su nariz rosando la mía, soy el primero en hablar.
—Buenos días pelirroja despeinada— Una pequeña risa abandona sus labios para luego plantar un beso en la punta de mi nariz.
—Buenos días Secuestrador— Sonríe junto a mis labios y es lo más perfecto de este mundo.
—¿Sabes que día es hoy?— Me sonríe nuevamente para luego impulsarse hasta quedar sentada en la cama.
-Mierda, ¿habré olvidado una fecha importante?.
—Ilumíname preciosa— Digo levantándome usando mis codos para quedar sentado, y obvio, disimulando un poco para que no me mate.
—Hoy es día en que tostada vera al veterinario por primera vez— Sonríe colocando un rojizo mechón rebelde detrás de su oreja.
—Ah eso— Paso una mano por mi cabello liberando el aire que contenía.
—¿Como que "eso"?, tostada es nuestra responsabilidad ahora, debemos llevarlo al veterinario— Ella luce cabreada por las palabras que idiotamente acabo de soltar.
—Alístate, nos vamos en 1 hora— Más que suficiente.
-La tomo por el brazo antes de que se levante de la cama y la jalo hacia mi, ella queda justo a horcajadas encima de mi pero de espalda y un sutil rubor empieza a invadir sus mejillas.
—¿Quieres..?— arrastro las palabras y beso su cuello con delicadeza dejando un rastro con mi aliento en el, Ellein se mueve buscando calmar las cosquillas que se que le provocan para luego hablar.
—¿Qué estas pensando?, Ve a ducharte, voy a preparar el desayuno— Es lo que puede decir.
—Tal vez....— Vuelvo hablar rozando mi nariz en el borde de su cuello, pero esta vez una de mis manos viaja al tiro de su blusa y uso uno de mis dedos para jugar con él.
-Puedo ver como Ellein sonríe antes de voltear y darme una mala cara.
-Le devuelvo la sonrisa pero sutilmente me acerco a su rostro plantando un casto beso en su mejilla para luego incorporarme con rapidez y cargarla estilo princesa.
—AAA— Un gritito abandona su boca acompañado de una pequeña risa para luego envolver sus brazos en mi cuello y besarme.
-El beso no es profundo, pero eso no lo hace menos importante, lo hace mejor.
-Camino poco a poco hasta la puerta del baño sintiendo ya el endurecimiento de... mi pen-samientos, Ellein ríe como niña tonta y la escucho decir...
—Se tierno— Sus bonitos ojos me miran y eso me trae a memoria..
-Que el día en que hicimos el amor por primera vez Ellein aun conservaba su castidad, y yo no me había dado cuenta de ello, hasta que me lo dijo, recuerdo que sus mejillas aun estaban rojas y que el dolor en su abdomen no la abandonaba, pero que con Dylan nunca llego hasta ese limite, ya que el no pasaba tiempo con ella a menos que quisiera pedirle dinero prestado.
-¡Que maldito!
-Y enserio, que puto y maravilloso privilegio haberla encontrado y haber sido el primer chico que se haya llevado su primera vez, no querría que alguien más se hubiera aprovechado de ello y la hubiese visto como una virgen que sólo hay que estrenar.
—Descuida pequeña, sere cuidadoso— Ellein aun tiene su periodo, eso también me consta, pero esta pequeña muñeca tiene las hormonas revueltas gracias a el, y lo voy a aprovechar al máximo.
-La impulso hacia arriba sujetándola mejor y con mas agarre, acción que hace que de nuevo un gritito abandone sus labios para luego reírse.
-Las ansias la invaden y me besa con desesperación, me pongo delado frente a la puerta del baño para abrirla con mis caderas, pero la pelirroja se me adelanta y la patea para luego entrar.
—Vamos, quiero una ducha caliente contigo— Me sonríe y eso hace que mis pies se pongan en marcha y atraviese por fin la puerta del baño.
***
—Este es el lugar— Ellein mira por la ventana del taxi señalándome el edificio que tiene afuera un gran anuncio que dice en letras grandes HappyPets.
-Le cancelo al chofer y soy el primero en bajar, Ellein me sigue y su bonita blusa de mariposas acompañada con un suéter de lana marron me deja cautivado, pero mas cautivo me trae esos Jeans negros ajustados que se pegan a esa silueta encantadora.
-Ellein termina de bajar y se inclina en el asiento tomando el porta mascotas donde yace tostada durmiendo, eso me hace tener unos maravillosos segundos de una hermosa vista de ese culo de corazón que luce apretado y respingado en esos pantalones que lleva.
—¿Ya terminaste de comerme con esos ojitos?— Ellein me saca de golpe de mi mundo de maravillas a lo que respondo haciendo un pequeño puchero.
—Quiera el postre, por favor— Ella ríe ante mis palabras, le da las gracias al taxista y nos adentramos en el edificio.
-Al entrar nos encontramos con una linea de personas sentadas con sus mascotas, de frente teníamos la recepción, detrás de ella había una chica más o menos como de nuestra edad, eso si no es más joven.
—Hola, venimos a la cita de tostada— Mi prometida es la primera en hablar y de reojo puedo notar que aun lleva su cabello húmedo que le dan forma a esos hermosos risos rojos.
—Si por su puesto, el doctor Carter ya los esta esperando, consultorio once— Todas estas personas esperan, ¿Por que nosotros no?, algo no me da buena espina.
—Gracias— Ellein sonríe y me toma la mano para guiarme hasta estar frente a la puerta numero once.
—Ten a tostada— Ellein me extiende el pequeño bolso que tomo sin chistar y tostada esta ansioso, creo que ya se dio cuenta de que hoy le darán una mala noticia que determinara la existencia de sus pequeñas pelotas.
Te comprendo tostada, yo tampoco querría ir al desboladero.
-Ellein toca la puerta un par de veces y un "Adelante" nos invita a pasar.
***
-Estoy sentado en la esquina de la sala viendo como mi prometida parece conocer muy bien al veterinario, mis ojos no se apartan del sujeto, mis piernas están estiradas ligeramente y mis brazos cruzados, escuchando atentamente lo que dice.
—Ya esta apunto de cumplir los tres meses, significa que con mayor seguridad lo podremos esterilizar cuando cumpla cuatro, ya lo vacunamos y realmente se porto de maravilla, y también le dimos es desparasitante, te aconsejo que le pongas un collar, aquí mismo a la derecha imprimen placas, y cepilla mucho su pelaje, te lo agradecerá.
—Esta bien Martin, muchas gracias por tomarte el atrevimiento de atendernos antes— La chiquita habla y la veo muy feliz, eso me calma un poco, aun no tengo buena espina de esto.
—Descuida pelirroja, haría lo que fuera por ti— Hasta crees.
-Me levanto de golpe y no se me ocurre mas nada que soltar...
—¿Pero que mierdas le pasa a tu cara?— No tiene nada, pero es mi método de distracción y anti coqueteo hacia MI chica.
—Ah, ¿Qué tengo?— El veterinario toca su rostro y mira a Ellein que ya capto lo que trate de hacer y me mira furiosa.
—Nada Martin, sólo tienes algo allí en la mejilla, quítalo con tu mano— Ellein disimula la situación y la sigo muy divertido.
—Si Martin— Acentúo su nombre imitando a Ellein, —Es algo en tu mejilla, a ver— Extiendo mi mano y actuó como si algo estuviese en tu mejilla y lo quito dando un pequeño manotón a su rostro, lo que hace que el veterinario de un pequeño salto.
—Suficiente Lukas, ya se lo quitaste— Ellein me mira y luego me hace un gesto con sus ojos de... "Para ya" lo que obedezco volviendo otra vez a mi silla, satisfecho.
—Gracias amigo— Martin sonríe incómodamente.
—Quisiera haberte pegado más fuerte— murmuro entre dientes.
—¿AH?— Suelta Ellein antes de mirarme.
—Nada— Digo riendo un poco.
—Eso pensé— Creo que tendré serios problemas al salir de aquí.
***
-Nos encontramos en una heladería que esta cruzando la calle justo frente a la clínica, la chiquita estaba enojada y no queria mas problemas, asi que le di en su punto débil.
-Helado.
—Yo quiero uno de cereza y chocolate por favor— Dice la pelirroja malcriada junto a mi.
—Ok señorita— El empleado es muy joven, creo que tendrá unos 19 años.
—¿Y usted, que va a pedir?— Se dirige a mi esta vez amablemente.
—Un calmante para las hormonas de mi prometida, por favor.— Río y Ellein estampa su puño en mi brazo para luego tomar el porta mascotas e irse dando zancadas a la mesa.
—Creo que se enojo— Digo divertido al chico del mostrador.
—Por favor, agrégale dos porciones mas de helado a su pedido y mucho chocolate— Mi estrategia es infalible, la pelirroja sangrienta tiene un punto débil, la comida.
-Y con su periodo atormentándola, creo que le agradara más.
—Pero cuando lleguemos lo sirves por favor, saldré un momento con ella— El chico asiente y se aleja del mostrador y yo lo imito acercándome a la pequeña berrinchuda.
—Vamos chiquita—
—¿Ah donde?— Me mira aun con enojo mientras juega con tostada desde su pequeña casa.
—Debes de desayunar antes de comer tu helado— Miro mi reloj y son las 09:12am.
—¿Quieres huevo y pan tostado?— Se que es su favorito.
—Lo acepto, sólo porque tengo hambre y porque la comida no se le desprecia a nadie— Se levanta, toma a tostada y camina hacia la salida, la sigo y aunque fui el ultimo en caminar soy el primero en llegar.
-Tiene piernas cortas.
—Adelante— Abro la puerta para ella.
—Sigo enojada contigo— masculla para luego salir del edificio.
-Tomo su mano trayéndola hacia mi haciendo que su cuerpo colisione de frente con el mío, planto un pequeño beso en su frente mientras la tengo de la cintura.
—No iba a permitir que Martin se pasara de amabilidad— Rio por lo bajo.
—Le gusto desde la universidad, pero eso no me interesa— Con su mano libre sostiene mi abrigo y me mira intensamente.
—Por eso la malas vibras que tenia— Ellein enarca una ceja mirándome confundida.
—No me daba buena espina, y ahora se porque, le gusta mi prometida, y eso no lo iba a tolerar— Ellein ríe y parece entender que sólo tuve un pequeño pinchazo de celos.
—Eres sumamente hermosa, debo de protegerte— Hablo con suavidad y planto un beso en su cabeza.
—Se cuidarme sola superman, pero descuida, confía en mi, sufro perdidamente del síndrome de Estocolmo por ti— Se para de puntas y deja un pequeño beso en mis labios.
—Confía en mi, yo confío en ti— Después de soltar esas palabras toma mi mano con su mano libre y dice emocionada.
—Ahora vamos, mi estomago me esta declarando la guerra— Ríe, —Tostada también debe desayunar, pidamos algo extra para él— Y con eso tengo a una pelirroja emocionada arrastrándome a la cafeteria que esta bajando la calle.
—¿Que pasa?— Se detiene de golpe.
—¿ves a la rubia que se esta tomando una foto por allá?— Ella señala y miro de quien se trata.
—Ella será mi peor pesadilla— Aun no se de que habla, pero se de quien se trata.
-Wendy Breich.
-Si que es un dolor de bolas.
Mis amoreees, le dejo la foto de nuestra muy amada Wendy, jaja, noten el sarcasmo.
Lukeins se esta volviendo mi pareja de ensueño, ustedes que dicen? se viene drama?
LOSAILOVIU.
IG: Alexlonif23
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro