¿Te apasiona el cielo y el servicio al cliente? ¿Buscas crecimiento celestial y profesional? Esta es tu oportunidad para pertenecer al equipo que está cambiando la forma de ver la muerte. 

¡Toc, toc! ¡Hora de despertar! ¿Estás listo para una nueva misión? ¡Pues vamos! Ya no eres un simple ángel. Fuiste promovido como: acompañante.

Tu labor ahora es cuidar del alma en pena del difunto para evitar que pierda el camino al cielo. Tras completar tu orientación se te hará entrega de un fragmento de la esencia del verdadero amor de tu cliente, para tomar su forma física y que al mostrarte no tema.

¡Confiamos en ti para cuidar ambas!

No existen dos seres iguales en el mundo, por eso, el cielo busca con sumo cuidado a aquellos cuya esencia ha de tomar prestada, y le selecciona cuando confirma que esta es idónea para purificar el alma en pena del difunto.

Vivo, muerto o por nacer, el alma del idóneo se fraccionará para que el acompañante tome su forma, y consuele al difunto que lo solicitó. Una vez elegido es imposible de modificar.

Cuida de la esencia que se te ha entregado. Y recuerda: no es tuya. Una vez cumplida tu misión de sanar al difunto que la ama, debes devolverla.

Según el decreto 90-97 El departamento de recolección y purificación, en conjunto con "El Cielo.Org" informa que las almas humanas pueden ser dañinas para los mensajeros celestiales.

Estacionamiento gratis los jueves.