Las noches pasaban y yo seguía ayudando a los cazadores con su entrenamiento, muy pocos son lo que noche a noche han venido sin faltar, de los cuales solo son cinco: Tanjiro, Zenitsu, Inosuke, Genya y Kanao.

Rara vez un pilar repite el entrenamiento y es porque tienen otros asuntos que atender, incluso Kyojuro se ha disculpado conmigo en un par de ocasiones. Pero no los culpo, ya que como mi entrenamiento es en las noches, las personas deben descansar en algún momento.

El entrenamiento de esta noche está a punto de terminar, Kanzaburo está sobrevolando el área para anunciar que pronto amanecería por lo cual todos debíamos regresar, por lo que salí de mi escondite justo enfrente de Inosuke.

- ¡¿Qué?! ¡¿Estabas ahí?!

- Si, casi me encuentras jefe Inosuke, siga así.

Nuevamente, alrededor de la cabeza de Inosuke aparecían burbujas, eso significa que estaba feliz.

- ¡La próxima vez te encontraré!

- Si. Por ahora regresemos a la finca.

Los dos caminábamos de regreso a la finca, solo que Inosuke venia hablando de lo asombroso que era él y cosas por el estilo. Yo solo le respondía animadamente con una sonrisa en el rostro y asentía a todas sus afirmaciones.

Al momento de llegar a la finca, vi que todos los cazadores ya habían regresado, el único pilar que había en esta ocasión era mi hermano.

- Inosuke, Tsutako san

Tanjiro nos saludó y yo levente mi mano derecha para regresarle el saludo. Zenitsu, Genya y Kanao, además de Nezuko y mi hermano, son los únicos que me miran normalmente, los demás cazadores de menor rango aun me miran con cierta sospecha en sus ojos.

Duele un poco ser observada de esta manera, no lo voy a negar, pero sé que poco a poco todas esas miradas desaparecerán. Mucha gente ya me ha aceptado y solo es cuestión de tiempo para que todos lo hagan.

Los cazadores se despidieron de mi hermano, al retirarse solo se quedaron los cinco de siempre, nuevamente me sentí un poco mal de que ni siquiera se despidieran de mí, pero debo dejarlo pasar.

- No se preocupe Tsutako san – Tanjiro me habló – Ya verá que dentro de poco se llevaran bien contigo.

- ¿Cómo...?

Iba a preguntarle cómo supo que eso me afectaba, pero Tanjiro se rasco un poco la nariz y eso me dio la respuesta a mi pregunta.

- Si, tienes razón.

- Si.

- Tsutako san – Me habla Zenitsu – Nos vemos en la noche.

- Si, traten de descansar.

- ¡Yo no necesito descansar, veras que la próxima vez te encontraré!

- Jefe Inosuke, también debes descansar, y espero que...

- Oi oi.

Una voz que denota cierto recelo en ella me interrumpió en mi plática con Inosuke, al levantar la mirada, vi como el pilar del viento Shinazugawa se acercaba a nosotros con cara de pocos amigos.

- ¿Shinazugawa?

- ¿Nii chan?

Mi hermano se veía sorprendido de que el pilar del viento estuviera aquí en nuestra finca, desde que llegué, nunca lo había visto pararse en la entrada, ni siquiera lo había visto pasar a saludar. Otro que estaba bastante sorprendido era Genya.

- Así que los rumores eran ciertos – Shinazugawa cada vez se veía más enojado – Mientras nosotros nos partimos el alma para derrotar a Muzan, ustedes solo se la pasan jugando.

- No es un juego – Mi hermano le dijo – El entrenamiento de nee san les ayuda a mejorar sus sentidos.

- ¿Oh? ¿Y tú que haces Tomioka? Dejas que tu hermana demonio juegue a las escondidas mientras tú te das un descanso.

- No hago eso.

- ¿O será que no valemos lo suficiente para merecer tu tiempo?

- ¿Qué?

Shinazugawa se acercó tanto a mi hermano que lo sujetó del cuello de su uniforme.

- El grandioso pilar del agua no entrena con nadie que no esté a su altura ¿Verdad?

- Eso no es verdad – Le dije a Shinazugawa

- ¡No te pregunté a ti!

Shinazugawa me veía de una forma muy enojada, por un instante sentí un escalofrío.

"Mátalo"

- ¡No le levantes la voz a mi hermana!

Giyuu había colocado su mano derecha sobre el brazo de Shinazugawa para hacer que lo suelte.

- Tú no me dices que hacer, solo eres un creído que presume todo lo que tiene.

- Yo no soy...

- ¡Eres un odioso Tomioka! Realmente este mundo estaría mejor sin ti.

Los ojos de mi hermano se abrieron mucho por lo que escuchó, y no fue el único.

- ¡Eres una mierda Tomioka! Todos en la corporación te odiamos y maldecimos ¿Por qué no mejor te largas con la desgraciada de tu hermana demonio?

"Sé que quieres hacerlo, solo deja salir tu verdadero ser y mátalo con tus propias manos"

Yo luchaba mucho para controlarme, realmente estaba molesta con la actitud del pilar del viento, por lo que me acerqué a él y coloqué mi mano sobre su hombro para llamar su atención.

- ¡Suéltalo!

- ¡Oh! ¿Acaso el gran pilar del agua no tiene tiempo para mí que manda a su hermana, la pe...?

No le deje terminar con lo que iba a decir porque aprete mi mano clavando ligeramente mis garras en su hombro.

- ¡Qué lo sueltes!

- Je je.

Shinazugawa no parecía adolorido por lo de su hombro, solo estaba riendo. El pilar soltó a mi hermano y cuando parecía que iba a bajar su brazo, de improvisto y de un rápido movimiento me dio un golpe en la cara.

- ¡Ah!

- ¡NEE SAN!

Cuando abrí los ojos, porque el golpe me hizo cerrarlos por un momento, vi como ahora una patada venia directamente hacia mí y me golpeo en la boca del estómago, eso me hizo salir unos cuantos metros disparada lejos de ellos.

- ¡Eres un...!

- ¿Oh? ¿El grandioso y frio pilar del agua se enojó?

- *Cof, cof*

Yo estaba tirada en el suelo tosiendo un poco por como la patada de Shinazugawa me había sacado el aire, además de que me estaba sobando un poco la mejilla por el golpe que recibí en la cara.

- ¡¿Tsutako san?! – Tanjiro junto a los demás se acercaron a mi – ¿Se encuentra bien?

Pude ver el rostro de preocupación de todos a excepción de Inosuke porque llevaba su mascara puesta. Cuando quité mi mano de mi rostro, el olor de algo muy agradable me llegó a la nariz.

Por unos segundos, vi mis garras y en estas había un poco de la sangre de Shinazugawa.

"Él es un marechi, devóralo y serás mucho más fuerte"

- ¡Uhm, uhm!

Nezuko se había arrodillado y colocó sus manos en mi rostro, ella era la que se veía más preocupada que los demás. Al ver su expresión me tranquilicé un poco.

- Nezuko...

Le iba a decir a Nezuko que estaba bien, pero el sonido de algo cayendo al suelo hizo que todos volteáramos en dirección de mi hermano y lo que vimos fue como el pilar del viento tenía sometido a Giyuu.

- ¡Realmente no eres la gran cosa!

Shinazugawa comenzó a golpearlo y mi hermano se defendía como podía, antes de poder ir a socorrerlo, Genya se había levantado y se fue corriendo en su dirección.

- ¡Nii chan, detente!

Genya se había puesto por detrás de Shinazugawa e intentó separarlo de mi hermano.

- ¡Piérdete, yo no tengo hermanos!

Shinazugawa logró levantarse y sujetó a Genya del cuello, después le dio un fuerte golpe en la cara.

- ¡Tú no tienes nada que hacer aquí, así que lárgate!

- ¡Oye!

Tanjiro también se había puesto de pie.

- ¡No trates así a tu hermano menor!

- ¡Él no es mi hermano!

- ¡Lo es, se ha esforzado mucho para estar contigo aun si eso signifique que devore demonios para pelear!

¿Qué?

- ¡¿Devorar... demonios?!

Shinazugawa se veía aún más molesto e intentó darle otro golpe a Genya, pero mi hermano detuvo su brazo y fue el quien ahora le dio un golpe en la cara.

- ¡Ya basta!

Es la primera vez que veo a mi hermano tan enojado.

- Je je je, así que finalmente me ves cómo alguien digno de tu tiempo.

- ¡Jamás me he visto superior a ustedes! ¡De hecho yo creo que todos ustedes son geniales!

Shinazugawa miraba un poco asombrado a mi hermano y después de unos segundos se comenzó a reír.

- Ja ja... no me digas... no me digas que no te sentías digno de estar entre nosotros.

- Así es, yo siempre creí que yo no tenía el derecho de estar con ustedes.

- Ja ja ja...

Shinazugawa seguía burlándose de mi hermano y eso solo me hacía enojar aún más.

"Nadie se va a burlar de ti, nadie... No... Yo no permitiré que se burlen de ti."

La risa de Shinazugawa poco a poco se empezaba a alejar, y no era lo único, poco a poco deje de escuchar sonido alguno a mi alrededor, solo había un zumbido que era lo que se hacía más fuerte tapando los demás sonidos.

Me fui colocando de pie y comencé a caminar hacia el pilar del viento a paso lento, sentía como mis funciones cognitivas iban desapareciendo, sentía que la oscuridad me estaba envolviendo.

"Así es, deja salir tu verdadero ser"

. . .

- Ríete si quieres Shinazugawa, pero es la verdad.

- Eres patético Tomioka, siempre andabas por ahí con tu cara de chulo cuando en realidad no podías ni vernos a la...

Shinazugawa no pudo terminar su discurso por fui testigo de cómo mi hermana le daba un fuerte puñetazo en toda la cara, el golpe fue tan duro que Shinazugawa salió volando solo para estrellarse en la barda de mi finca.

- ¿Nee san, por qué...?

- ¡Grrr!

No pude preguntarle nada a mi hermana, porque ella se veía como ida, es como si mi hermana mayor ya no estuviera aquí y solo estuviera una feroz fiera con la apariencia de mi hermana.

- Pero que mierda...

Shinazugawa se levantaba con un poco de dificultad, ese golpe jamás lo vio venir por lo que no pudo amortiguarlo. La sangre salía de la comisura de sus labios, es posible que mi hermana le haya fracturado la mandíbula.

Mi hermana y Shinazugawa se estaban mirando por un tiempo, hasta que Shinazugawa volvió a sonreír.

- Ja ja... así que finalmente mostraras tus colmillos ¿Eh demonio? Vamos ven, aquí hay de la sangre que tanto te gusta.

- ¿Nee san...?

Iba a detener a mi hermana, pero...

- ¡Roar!

Mi hermana salió disparada en contra de Shinazugawa, en menos de un segundo ya estaba por enfrente de él y le dio un tremendo zarpazo a la altura de su cabeza, Shinazugawa logró hacerse hacia un lado para esquivarla. Mi hermana seguía zarandeando sus brazos para golpearlo con sus garras y en un movimiento hacia atrás de Shinazugawa, este chocó su espalda contra la puerta.

- ¡Raa!

Otro zarpazo iba directo a su cuello, Shinazugawa logró agacharse justo a tiempo y mi hermana destruyó la puerta con sus garras. Shinazugawa aprovechó que estaba agachado para abrazar la cintura de mi hermana y cargarla por unos segundos para después dar unos giros y arrojarla por los aires.

- ¡Tsu...Tsutako san, deténgase por favor!

Tanjiro había gritado desesperado mientras mi hermana caía al suelo quedándose semi arrodillada en el suelo. Yo seguía en shock, no podía creer que mi hermana se estuviera comportando de esta forma.

- ¡¿Hermana haori, qué haces?! – Inosuke le grita a mi hermana.

- ¡Uhm! – Nezuko se veía bastante preocupada.

- ¡Kanao! – Tanjiro le llama a Kanao

- S-sí.

- Por favor ve por tus hermanas.

- Pero...

- ¡Por favor!

Kanao parecía dudarlo un poco, pero después asintió y se fue corriendo. Después Tanjiro se giró para mirar a Zenitsu y a Genya.

- Que alguien vaya por Himejima san por favor.

- Nii chan – Genya estaba más enfocado en su hermano.

- ¡Por favor!

La desesperación se escuchó en la voz de Tanjiro y Zenitsu reaccionó.

- ¡Yo iré!

Zenitsu salió corriendo de la finca y pude escuchar a Tanjiro hablarme.

- Tomioka san...

Yo solo miraba a mi hermana.

- ¡Tomioka san...!

Miraba como mi hermana trataba de matar a Shinazugawa sin ninguna duda en ella.

- ¡GIYUU SAN!

Reaccioné ante el grito y zarandeo de Tanjiro, solo con eso pude reaccionar.

- Tenemos que detenerla antes de que haga algo horrible.

- Pero... ¿Cómo?

- Tenemos que hacerla reaccionar, cuando Nezuko paso por algo similar, solo pude tranquilizarla con la canción de cuna que mamá nos cantaba.

¿Nezuko también paso por esto?

- ¿Una canción de cuna?

- Así es. Inosuke, tenemos que separarlo para que Giyuu san pueda tranquilizarla.

- ¡Eh! ¡No me des órdenes, yo lo haré!

Así los dos salieron corriendo para poder separar a mi hermana de Shinazugawa, si lo que dijo Tanjiro es verdad, entonces aun puedo hacer que vuelva a ser la de antes, pero ¿Una canción de cuna? Yo no me sé ninguna, la que las conocía era Tsutako, ella siempre me las cantaba cuando era niño y...

. . .

- Ja ja, lo sabía, sabía que esta era tu verdadera naturaleza, demonio.

El pilar del viento parecía disfrutar de su intercambio de golpes con Tsutako y justo cuando le iba a lanzar un derechazo en la cara, llegamos justo a tiempo para detenerlos.

- ¡Ataque porcino! – Inosuke había logrado taclear al pilar.

- ¡Qué demonios haces!

Mientras Inosuke estaba forcejeando con el pilar del viento, yo detuve un golpe de Tsutako y di un giro sobre mi eje para arrojarla lo más lejos de Shinazugawa.

- ¡Deténgase por favor, Tsutako san!

Tsutako volvió a caer al suelo, pero en esta ocasión lo hizo en cuatro como si fuera un felino, y en cuanto levantó su rostro, ella abrió la boca y una bola de agua comenzó a crearse por delante de ella.

- ¡Suéltame mocoso, ella va a utilizar su arte demoniaca!

- ¡No lo hare!

Por detrás de mí se escuchaba al pilar del viento e Inosuke pelear, pero no podía voltear a verlos porque mi atención estaba al frente con Tsutako, ya que, si nos golpea con eso, realmente estaremos en problemas.

Cuando me iba a preparar para dar media vuelta e intentar alejarme con lnosuke y el pilar del viento, vi como una espada de madera era colocada en la boca de Tsutako y ella era obligada a irse hacia atrás.

- ¡Nee san, calmante!

Era Giyuu quien había detenido el ataque de Tsutako y ahora ella estaba forcejeando para librarse de su hermano, fue en ese momento en el que Giyuu comenzó a cantar.

- ♪ Donguri korokoro, donburiko. Oike ni hamatte, sā taihen ♫

Tsutako poco a poco dejo de forcejear.

- ♪ Dojō ga dete kite, konnichi wa. Botchan, issho ni asobimashō ♫

El olor en Tsutako comenzó a cambiar, ese olor a ira comenzó a cambiar por la nostalgia y tristeza.

- ¿Pero qué...?

La voz del pilar del viento se escuchaba muy sorprendido, y es que todos comenzamos a ver como Tsutako se había hecho pequeña para comenzar a llorar en los brazos de Tomioka.

- *Buaa*

Todos veíamos esta escena en silencio, es como ver a un padre consolando a su hija, me recuerda mucho cuando papá abrazaba a Nezuko para calmarla cuando ella lloraba.

Un amor fraternal puro.