[ IX ]
Pasó el tiempo y se desató una guerra,
matanza absurda por un pedazo de tierra,
conflictos e intereses que nada tenían que ver con ella,
pero que destrozaron la vida
que hasta entonces conocía.
Su padre y sus hermanos fueron llevados al frente
y allí se encontraron con la muerte.
La muchacha, desde siempre huérfana de su afecto,
no supo llorar por ellos:
no se alegraba,
pero tampoco le dolía.
Ni una sola lágrima,
indiferente, anestesiada.
Entre tanta miseria y desolación
sobre un suelo antes fértil y acogedor,
tomó la decisión de dejar de esperar
por el destinatario de sus botellas entregadas al mar:
ella misma se terminaría de salvar
y, lejos de la patria destruida,
buscaría una nueva vida,
una vida mejor.
Recordando a aquella niña
y la esperanza que siempre hizo latir a su corazón,
fue por última vez al mar y de ella se despidió:
lanzó una última botella con un mensaje de amor.
Encuéntrame
y ámame.
¿A quién se dirigía?
Tal vez a alguien
o tal vez a nadie,
quizás a la fortuna,
quizás al aire
o simplemente a la vida.
Esa vida mejor que tanto soñó...
pero que le fue arrebatada,
robada, ultrajada y destrozada;
dejó de ser suya.
Confió en quien no debió
y a cambio recibió la más cruel traición.
Víctima de trata: perdió su libertad, su nombre, su voz.
En una ocasión trató de huir de su cautiverio:
el ausente lóbulo en su oreja era recordatorio permanente
de que no habría más intentos.
Su cuerpo dejó de pertenecerle
—medio de pago para una deuda cada vez mayor—
y a duras penas conservaba un alma
que cada noche clamaba a la muerte
para que pusiera fin al dolor.
A pesar de su desgracia,
mantenía viva aún una ínfima esperanza;
recordaba aquella última botella
y rezaba con todas sus fuerzas
por un milagro, un imposible,
un camino de luz intangible
de regreso a ser libre,
a ser suya, a ser ella.
Mas la botella acaba en manos de la obsesión,
de un hombre ahogado en vacío y dolor,
náufrago en alcohol y desesperación,
que haría desaparecer la última esquirla
de aquella muchacha de mirada limpia
que un día quiso hacer su ilusión realidad
ofreciéndosela a la inmensidad.
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