En esta vida, cuando tratas de hacer lo correcto sin esperar algo a cambio, sin duda en un futuro tiene su recompensa.
Deuteros apostó todo por el bien de Degel y ahora tenía la dicha de ser correspondido con la misma fuerza del amor.

Preparó todo para llevarse a Degel a su casa. Hoy saldría del hospital. Mientras esperaba que llegara la hora, recordaba ese día cuando despertó y toda la tarde se la llevaron platicando, sobre la editorial, el tiempo que lo cubrió en su trabajo para que nadie más le quitara su lugar... Lo más triste para Deuteros fué platicarle que aquella casa donde vivía con Kardia, era de alguien más.

Degel a pesar de que estuvo en coma muchos meses atrás recordaba a la perfección lo que ocasionó que acabara en ese estado.
Las infidelidades de Kardia ese día hicieron que terminara de caerse la venda de sus ojos y darse cuenta sobre el tiempo que le llevó aceptar algo que era ya imposible, una relación donde la costumbre prevalecía dejando solo el recuerdo de un amor que no se logró.

Mientras recordaba todo eso, Deuteros estaba en una tienda terminando de comprar suficientes alimentos para prepararle al ruso cuando llegaran a casa, solo estaba haciendo un poco de tiempo en una hora saldría, pero no contaba con encontrarse nuevamente con su gemelo, justo quedando frente a frente en el mismo pasillo.

El moreno quiso evadir al mayor pero no lo logró justamente cuando lo llamó.

-¡Deuteros Espera!- Tomó al moreno de los hombros justamente en el momento preciso para evitar que se fuera.

-¡Ah Aspros!- Exclamó con desgano- ¿Que quieres?- Preguntó un poco incómodo.

-¿Esta es tu cara de siempre? Veo porqué nunca haces vida con alguien... Por eso terminaban en mis brazos- Esto último lo dijo en un tono audible para ambos mientras trataba de molestarlo.

El moreno solo rodó los ojos- Dime que se te ofrece Aspros  llevo prisa por si no lo has notado-

-Bien, bien... Que mal genio te cargas, pero en fin. Dentro de medio año voy a terminar mi carrera y quiero hacer una fiesta en grande  para celebrar y quiero que asistas... - No terminó de hablar  justo en ese momento Deuteros le dio la espalda.

-No necesito tu fiesta- Comenzó a caminar pero  nuevamente fué detenido por el gemelo mayor.

-¿Ves lo que te digo?... Contigo no se puede-

-Sabes que no me gustan las reuniones, mucho menos las fiestas-

-Deuteros, es hora de que dejemos a un lado el pasado. Por favor, hazlo por mi y por ti... Quiero comenzar de cero  el lazo de hermanos que somos, lo sé papá y mamá siempre te hicieron a un lado solo por tu color de piel... Incluso hasta papá decía que quizá ni eras su hijo y a mí me llenaron de las mismas ideas. He pensado la cosas y quiero remediarlos, tuve una discusión con ellos ayer, pero mi pareja Sasha  pudo ayudarme a comprender todo lo malo que estaba haciendo. Ella misma me dijo que tratara de buscar a mi hermano y sobre todo me hizo hincapié que te debo una gran disculpa por todo lo que te hice pasar- Aspros se sentía extraño al decirle aquellas palabras a su gemelo, un gran nudo en su garganta por aceptar la realidad donde vivió manipulado por sus padres.

Deuteros no sabía que responder, era muy extraño ver como su hermano trataba de disculparse, dio un gran suspiro- Es difícil para mi asimilar todo lo que me dices pero acepto tus disculpas, algo muy en el fondo me dice que estás siendo sincero y respecto a tu invitación, lamento no darte una respuesta en estos momentos llevo prisa pero sabes donde trabajo y te prometo que pensaré todo lo que me estás diciendo-

-De acuerdo yo... No te quito más tu tiempo, después te busco hermano... ¡Suerte!- Gritó Aspros despidiéndose de él para seguir con las compras que tenía pendiente.

-Eso fué raro pero no puedo perder más el tiempo, Degel pronto saldrá y debo estar listo- Deuteros tomó las cosas que llevaba y caminó hasta caja para pagar.

Cuando salió de la tienda guardó todo en el auto y después tomó su camino al Hospital.
Al llegar trató de dejar su auto lo más cerca que pudo de la entrada para poder subir a Degel.

Corrió hasta la puerta y una enfermera estaba esperando que llegara para poder entregarle a su paciente.

-Joven Deuteros, su paciente está listo para regresar a casa, solo le pedimos que sea constante con sus ejercicios de rehabilitación para que pueda nuevamente caminar- Respondió la enfermera entregándole unos papeles para firmar.

El moreno firmó, después la enfermera entró para poder llevar a Degel en silla de ruedas.

Cuando logró ver que venía Degel, no pudo evitar sonrojarse... El tiempo de esperar el día que despertara ya pasó, ahora solo le quedaba cuidar de él para que todo volviera a la normalidad.

-Deuteros- Susurró el ruso justo en el momento que quedó frente a él.
Deuteros sonrió y tomó con sumo cuidado a Degel en sus brazos para poder subirlo al auto, no sin antes agradecer todas las atenciones que recibieron de ese lugar donde siempre mantuvo la esperanza firme por su amado ruso.

El heleno caminó hasta su auto y teniendo a Degel en brazos, ambos se perdieron en la mirada  del contrario.

-Lamento todas las molestias que te causo Deuteros- Respondió el ruso sonrojandose un poco ante la cercanía del heleno.

-Jamás serás una molestia Degel, sabes muy bien que daría todo por ti- Deuteros se acercó cada vez más, pero una voz conocida interrumpió el momento.

-¿Eres tú Degel? ¡No puede ser!- Gritó impresionado dejando caer el vaso de café que llevaba sus manos al suelo.

Deuteros y Degel voltearon para ver que se trataba nada menos que- ¡Kardia!- Respondió molesto el heleno mientras lo miraba con desprecio.

-¡No puede ser estás vivo...!- Exclamó asombrado al ver que estaba bien después de pensar que jamás despertaría.

Degel recordaba lo que había pasado, no dudó en responder en un tono despectivo- Kardia- Susurró...

Kardia estaba confundido, ahora no sabía que hacer, si quedarse ahí o salir corriendo, pero en el fondo le molestaba ver a Degel en brazos de Deuteros
Apretó los puños molesto...

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Buenas noches mis queridas lectoras de esta hermosa parejita, bueno ahora ya apareció Kardia, y el resto de lo que pasa aquí lo tendremos la próxima semana.

Los quiero, besos y muchos abrazos para todos ustedes 🥰🥰🥰