Llego a mi sexto día de trabajo un tanto cansada, y con muchas ganas de dormir. Tal vez no fue una buena idea quedarme hasta tarde escribiendo, pero bueno, es el único tiempo en donde puedo hacerlo. Siempre y cuando no tenga la mente quemada y ninguna idea.

Una vez que tengo el uniforme puesto, sé que me espera un día largo y cuanto más piense en ello, más tedioso será. Así que sólo debo encarar el día con la mejor de las sonrisas, y con un buen rostro amistoso.

Cuando salgo del vestuario me topo con Ethan, quien acaba de llegar. El hecho de habernos casi chocado, nos provoca una leve risa.

—Buenas tardes —dice para luego pasar por mi lado, sin siquiera esperar una respuesta por mi parte. En cuanto a mí, sólo me quedo ahí, estaqueada, perdida con el aroma de la colonia que dejó en su camino.

Y cuando por fin reacciono, bajo al minimercado, hago el cambio de turno con la guía de Kyle, y empieza así mi jornada laboral.

Hoy sólo somos Kyle y yo, Chelsea tiene el día libre. Así que hoy sólo somos nosotros, los chicos nuevos, y no sé qué va a salir de esto. Pero mientras hagamos las cosas según nos enseñaron, supongo que todo va a estar bien.

Mientras Kyle se encarga de hacer el conteo, yo me encargo de atender a las personas.

Café por aquí, por allá.

Cigarrillos. Cigarrillos. Cigarrillos.

Más café.

Sandwich tostado.

Y más cigarrillos.

Hasta el momento, así vienen siendo las ventas. Y aunque sólo pasaron cuarenta minutos, desde mi cansancio, siento que pasaron diez minutos.

Demonios, sí que va a ser un día largo.

Troy, uno de los chicos que carga combustible, entra al minimercado con el rostro rojo a causa del calor. Cuando llega a la cocina, se saca la gorra y respira profundo.

—No sabes el calor que hace afuera —me dice.

—Creo que prefiero no saberlo —le digo y se ríe.

Ethan entra al minimercado seguido de Mark, y así se conforma el equipo de afuera de la tarde: Troy, Ethan y Mark.

Los tres aprovecharon la ausencia de autos para refrescarse un poco con el aire acondicionado y también para beber agua.

Son muy amigos entre ellos, se hacen bromas constantes, y se nota los buenos compañeros que son entre ellos. Aunque ninguno quiere hacerse cargo del auto que acaba de entrar a uno de los surtidores.

—O van ustedes, o voy yo y hago un desastre —dice Kyle.

—Uff, bueno, voy yo. Pero que uno de ustedes se pague mi sándwich para comer —se queja y pide Troy antes de salir a atender al dueño del auto rojo.

—¿Van a encargar comida? —pregunta Kyle.

—Si, ¿quieren? —agrega Mark mientras teclea un mensaje desde su móvil, en un punto ciego donde la cámara no puede verlo para así no tener problemas.

Miro a los tres de manera interrogante, ya que no entiendo cómo es que se manejan en este sentido.

—Tenemos un amigo cerca de aquí que vende comida —dice Ethan, mirandome especialmente a mí, cómo si hubiera leído lo que pasaba por mi mente.

—Pero aquí tienen comida —digo y entro a la cocina para beber agua. Mark sale con la llegada de un nuevo auto, y antes de salir le dice a Ethan que se encargue de comunicarse con ese amigo antes mencionado.

Ethan se ríe por lo que digo.

—¿Y has visto los precios? —articula con una sonrisa divertida en su rostro.

—Bueno...

—¡Son descabellados! —me interrumpe y me río.

—¿No nos hacen descuento o algo?

Ethan se vuelve a reír. O soy muy graciosa o estoy diciendo pavadas. Graciosa no soy, así que seguro sólo estoy diciendo pavadas.

—Descuentos, si claro.

Claramente dije una pavada. Pero en mi defensa, aún estoy conociendo el sistema de todo esto.

—Entonces, ¿te sumas a pedir comida? —me pregunta posando sus ojos café en los míos.

—¡Cohen, auto! —le informa Kyle, pero Ethan lo ignora.

—No veo por qué no —me encojo de hombros.

Sonríe para luego decirme los diferentes menúes que hace su amigo, mientras que sigue ignorando a Kyle diciéndole que ya va y que él pida lo suyo también.

—Mmm... algo simple nada más. Sándwich de jamón y queso —digo—. Con mayonesa.

Ethan vuelve a sonreír y se acomoda la gorra por encima de su corto cabello oscuro.

—Justo lo que yo pedí.

Y una vez más, sin esperar una respuesta por mi parte, se dirige a seguir con sus actividades.

Aunque bueno, mejor que no se haya quedado a esperar una respuesta, porque ¿qué se responde a algo así cuando apenas conoces a la persona?

En fin, yo también debo continuar con mis actividades, y hay dos café por preparar para dos amables señoras.

Cuando Kyle vuelve de tomarse su pequeño tiempo para el almuerzo, subo a la sala de descanso para tomarme el mío.

Una vez allí, saboreo el sándwich como si fuera el último existente en el mundo. Debo verme lo menos "señorita" en estos momentos, pero ¿qué más da? ¡Que se joda todo!

Y mientras mastico, saco el móvil de mi pantalón gris, y en vez de responder a los mensajes de Max, me dispongo a ver las redes sociales para reírme de los memes y distraer así un poco mi cansancio y ganas de estar en casa.

Pero supongo que si quiero ser una buena novia, no debo ignorar por mucho tiempo a Max.

¿Acaso soy una buena novia? Pues... no sabe no contesta ¡Siguiente pregunta!

Te extraño, cuándo tienes el día libre?
15:25

Aún dudo que tenga un día libre, no es hace mucho que entré, Max
15:27

Lo sé... pero te extraño, Emm
15:28

Si, yo igual. Pero ya nos vamos a ver
15:30

Debo volver al turno, hablamos más tarde
15:31

¿Yo igual le dije? Sí, eso le dije.

¿Le mentí? Pues...

Soy un ser muy horrible, lo sé. Y antes de castigarme por ello, decido volver a mis actividades. No quiero focalizar mi mente en insultos hacia mi.

Cuando vuelvo al minimercado, me encuentro con Ethan en la cocina, apoyado sobre la pared en donde la cámara no llega.

—¿Qué tal el sándwich? —me pregunta.

—Fue sólo un sándwich de jamón y queso con mayonesa, nada elaborado como para darle una calificación.

—Pues te equivocas. Hay que saber elegir muy bien el jamón, queso y mucho más la mayonesa. No le quites el mérito. Además, si no tiene un buen pan que lo acompañe, ¿acaso no suma?

Me rió, no lo había visto así en absoluto.

—Vale, de acuerdo. No pensé que ibas a ser tan crítico de un simple sándwich de jamón y queso. Pero estuvo bien.

—¿Sólo bien? —ruedo los ojos provocando una risa por su parte— Bien, vuelvo a lo mío antes de que me revolees con algo.

Me río negando con la cabeza.

—No es algo que haría.

—Eso dices ahora que no estás con toda tu confianza.

Pasa por mi lado y me sonríe. Nuevamente me encuentro estaqueada, perdida en el aroma de su colonia.

—¡Emma! —me llama Kyle, y es él quien me trae devuelta al presente ¿qué a dónde me fui? No lo sé.

—¿Si?

—¿Me preparas dos tostados? —me pide el favor desde la cafetera.

—¡Claro!

Y es así cómo continúa mi largo día, con más café y tostados.

¡Aquí el capítulo prometido!

Hace mucho no actualizaba tan tarde (00:18 en Argentina) pero bueno, les había dicho que lo iba a hacer, y la inspiración ayudó :)

De a poco, de a poquito, pasito a pasito (suave, suavecito) van habiendo acercamientos entre Ethan y Emma, y eso me pone LOCA DE CONTENTA!!❤

¿Les va gustando esta historia especial?❤