Pov May

La verdad es que justo ahora quería echar a la mierda el plan y dejarme hacer de ese par, las manos de Taehyung no paraban de tocarme de manera descarada y deliciosa.

Los tres nos encontrábamos en el ascensor camino al cuarto de hotel, Jimin miraba mi rostro sonrojado mientras Taehyung me metía los dedos hasta el fondo. Y es que hasta el día de hoy no sabía que era lo que le veían las personas a los tríos, reitero. Hasta el día de hoy.

Mi cuerpo se tensó cuando el orgasmo llegó y acabé recargada sobre los hombros del otro. Mi respiración era errática y junto a mis piernas temblorosas me vi obligada a salir con rumbo a la habitación con la tenue risa de ambos guiándome, creo que aquello me dio el valor para hacerlo.

-¿Les han hecho un baile exótico alguna vez?- a ambos los vi negar -Yo lo haré por ustedes.- recogí mi cabello lentamente mostrándoles mi cuello y haciéndolos mirar mi escote con descaro.

Dejé mi teléfono grabando el espejo, el reflejo de la cama mientras fingía solo poner una música y me perdí con dirección al baño. -¿Por qué no se desvisten para mí?- no esperé a que respondieran y me metí al baño para fingir darme un ducha.

Escuchaba tras la puerta como reían y hablaban animadamente, cuando creí tener grabado lo suficiente salí del baño. Me acerqué nuevamente al teléfono y sonreí al verlos a ambos con solo unos bóxers en la cama. Caminé con paso rápido hasta la puerta -¿Solo me creyeron muy inocente o tienen la idea de que las latinas somos promiscuas?- salí de ahí ignorando sus llamados, que agradezcan que no robé su ropa. La idea original era esa, luego mi hermana propuso humillarlos de otra manera.

-Hola

-Hola, ¿lo tienes?

-Lo tengo- puse el altavoz y le envié el video a mi hermana.

-Listo, subiré las fotos más comprometedoras a la red.

-Ok, gracias- cerré la llamada y subí al primer taxi que vi, apenas hasta ahora alcancé a ver a Taehyung correr tras de mi.

Que estupida

Aún guardaba dentro de mi la esperanza de que el se arrepintiera al último momento, era mi amigo después de todo. Al menos así lo creía yo. Jimin me gustaba, mucho. No creí que saliera tan idiota, nunca he sabido elegir a los hombres de mi vida.

Me detuve en una tienda de conveniencia y compré papas fritas, alcohol y otros bocadillos, quizás eso sea una buena forma de alejar este arrepentimiento que ahora siento.

Porque es que... si con solo un par de dedos en un ascensor fui capaz de sentirme tan bien, puede que no solo me guste el idiota que propuso el trio, sino también el imbecil que entregó el mensaje.

...

-¿May?- abrí los ojos como pude ante el llamado, habían gritos afuera, mi hermana reía y a medida que me daba el tiempo para despertar estos se acallaban. -Los idiotas están super molestos, ya bajé las fotos pero circulan por todo Seúl, un programa amarillista habla de "La noche de pasión de un par de bomberos de una estación de Seúl"- volvió a reír -¿Y esa cara?¿Te arrepentiste?

-¿Y si les cuesta el trabajo?- negó

-Los bomberos no tenemos un régimen de conducta que seguir. Solo no debemos cometer crímenes y la última vez que revisé darle de espadasos no es uno- reí ante su comparación. -Hoseok está que se muere de risa, ya los echó, puedes irte al trabajo.

-¡Marika!- salí de la cama con prisas y me bañé tan rápido que parecía irreal y prácticamente corrí al trabajo.

Apenas llegué cuando comenzaban a abrir la cafetería, -¿Tu lo sabías?- mi jefa se había acercado a mi apenas comencé a prepararme, era raro que la dueña se dirigiera a mi persona. -Sobre la verdadera preferencia sexual de Jimin, el te recomendó, supuse que como eran amigos... ahh, supongo que lo guardó muy bien- dicho esto salió del lugar en el que estábamos.

"¿Cual fue ese amigo tuyo que me recomendó para el trabajo?"

Apenas escribí esto guardé mi teléfono entre mis cosas y comencé con mi día laboral. Cuando obtuve mi descanso de 10 minutos noté el mensaje de mi hermana en el celular. Había sido el.

...

-Disculpe- dije apenas se me dió paso

-¿Si? ¿Que pasa?- me acerqué a paso lento y le tendí la carta de renuncia.

Apenas el día anterior me había enterado que tenía el trabajo gracias a él y la culpa me carcomía, no vi más remedio que renunciar y conseguir un trabajo por mis propios medios, así que no le dije nada a Clau.

Será mi primer paso para ser independiente.

...

Si, en aquel momento en que tuve la maravillosa idea de renunciar fue genial, y lo habría seguido siendo. De no ser porque no encuentro otro, nada. Incluso ahora me negaron el entrar a lavar platos a un restaurante. No había sentido tanto el peso de ser extranjera nunca en mi vida.

Y dado el hecho a que casi la mitad de mi vida la pasé en un país que no es el mío, deja mucho que desear. Supongo que no todos los países tienen la misma hospitalidad que Mexico.

Había asistido a la universidad y prácticamente corrido de las garras de Taehyung toda esta semana, solo pedía explicarse. Eso habría sido lindo antes de que intentara algo como aquello.

Creo que lo que más me molestó no fue aquel acto. Sino que decidiera como buena idea no ser sincero conmigo e intentar aquello sin siquiera consultarme. Era el primer amigo que sentía tener en este país y acabó rompiendo mi corazón.

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