Pov Min Yoongi

Cuando la bajita y castaña chica entró por la puerta del cuarto en el que estábamos la noté igual que la última vez que la vi, esa mirada temerosa que no poseía entes de irse.

Parecía buscar algo en el rostro de cada quien, protección.

No era la misma y eso lo dejó claro cuando noté como tenía la silla contra la puerta cuando fui a recogerla, ¿Seokjin está enterado?

Luego de los chicos ir a atender la posible fuga de gas acompañé a los demás a la entrada, por lo general estaría dormido pero me intrigaba esta nueva manera de esta comportarse, aún así no le pregunté.

No somos lo suficientemente cercanos como para hablar de ese tipo de cosas pero algo si tengo claro, advertirle al idiota de su hermano que algo pasa con ella.

-Pareces detallarle mucho- escuché la voz de Jimin a mi lado.

-¿A quien?

-Sabes a quien, si te gusta déjalo ya. Esta en algo con Namjoon- reí con sorna.

-No me gusta

-Hyung no soy idio...- se cortó -¿Sabes que?, olvídalo, aún estás en negación. Solo evítala, pronto dejará de gustarte.

-No dije que me gustara, pero gracias por el consejo que no pedí, lo tomaré en cuenta cuando quiera ser un fuckboy.

-No soy fuckboy- se quejó

-No dije que lo fueras tú, pero ten en cuenta que quien recibe las llamadas y atiende a esas chicas cuando las botas soy yo, así que conmigo no te sale.

-No les miento, aclaro siempre que solo es  sexo. Ellas son las que se confunden.

-Entiendo que eres joven, que tienes una profesión que llama chicas pero no puedes vivir toda la vida como un adolescente inmaduro, sentar cabeza es bueno. Que alguien te reciba en casa, ver películas juntos, dormir abrazados.

-Si tan Bueno es ¿porque tienes 5 años soltero?- dijo pero mientras hablaba noté como el antiguo vehículo de nuestro difunto jefe se estacionaba frente a los demás.

De él bajaba su viuda furiosa, estaba famélica. -Sácala de aquí- dije a Jimin a sabiendas que este tenía una especie de don para encantar serpientes.

Gritaba cosas horribles y la otra solo escuchaba con ojos llorosos, no se movía. -Seona, vamos a dentro- tomé sus hombros para levantarla colocándome en medio de ambas.

La señora continuaba gritando y se que no se acercaba porque los chicos se encargaban de retenerla.

La llevé al cuarto que compartíamos para dormir y que era el más retirado, -¿Quieres un té?- la vi negar. -No te pongas así solo por las palabras de esa señora, no está bien de la cabeza.

-Así era cuando él estaba vivo- está me miraba con ojos llorosos, parecía un cachorro.

-No dije que enloqueció por la muerte de su esposo, esa está loca desde su concepción.- eso le sacó una riza que poco a poco se convirtió en una mueca. -Eso de los amantes es un tema delicado, pero.. en mi opinión, quien te debe fidelidad es tu pareja no la otra persona, mucho menos alguien más.

-Díselo a ella- dijo esta en modo cansado. -Siempre es lo mismo. ¿Ahora como trabajaré aquí si puede aparecerse cuando quiera?

-No lo hará, te cuidaremos. Descansa, tu hermano esta por llegar. Yo hablaré con él.- la vi negar.

-No le digas- está vez quien negó fui yo.

-Si le diré, es algo que le consiente, debes madurar, las cosas que te guardas solo te dañan, te lo dice un veterano. Duerme.

-¿Dejas la luz encendida?- asentí y comencé a caminar hacia la puerta -¿Te quedas hasta que me duerma?- dijo suplicante -Allá sentado- pidió y así lo hice.

Esta me observó hasta que sus ojos comenzaron a cerrarse solos, la veía obligarse a abrirlos hasta que cayó rendida, hasta entonces me levanté.

-¿Ya se fue?- pregunté a Hoseok

-Si, Jimin fue a llevarla. Estaba como loca.- no dudo que lo esté.

En eso escuchamos el camión ingresar, Taehyung quien conducía se bajó inmediatamente llegamos hasta donde estaban, Jungkook igual y luego de palmearme el hombro se dirigieron al interior.

-SeokJin ven acá

-¿Justo ahora? Quiero darme una ducha.

-Tu madre estuvo aquí, le hizo una escena a tu hermana- dije sin mucho tacto, no veía porque darle vueltas al asunto.

-¿Como está ella?- dijo Namjoon, ni siquiera lo había notado. No respondí, no veo porque le concierna.

-Ahora está dormida. Vas vale que arregles esto, es de muy mal gusto que haga ese tipo de cosas cuando ya quienes de verdad tenían que ver murieron.- dije tajante. -Otra cosa, ¿le teme a la oscuridad?

-¿Quien?- habló su hermano.

-Seona

-No

-Habla con ella, algo le pasa. Para ya, luego empeora por el descuido.

-No deberías meterte Min, si ella no quie...- habló el otro y alcé mi ceja, ¿porque mierda debe importarle?

-Tu sabes ¿no es así?- inquirió su hermano. -Habla

-No lo haré, es su decisión no decirlo. Hay que respetarla.

-No hagas caso al idiota este, presiónala hasta que hable. Con tacto por favor- y casi reí por la ironía, yo no tengo tacto.

-No es tu asusto Min- dijo el alto lanzando al suelo el equipo que hasta ahora organizaba.

-No, estás equivocado. El asunto es de SeokJin por eso se lo digo a él, tú aquí no pintas nada. Y si no recuerdas su padre me pidió cuidarlos, no a ti- dije tajante. -Y no te pongas con actitud de macho alpha conmigo, los instruí a todos aquí y puedo partirles el trasero a cada uno de ustedes.- miré a SeokJin esta vez. -Hablaras con ella en cuanto despierte y con tu mamá en cuanto termine tu turno.- dije por último y salí en dirección a la terraza.

Min de esta historia, macho alpha y protector, me tienes a tus pies. 😍
Cabe destacar que mi macho es el mayor de todos, tiene 35, es mi Suggar

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