—¡Louis!

—Michael.

—Hola lindura, ¿Cómo estás?

—Inalcanzable para ti —murmura el castañito.

—Quería invitarte a salir, ¿Qué te parece si vamos por un helado?

—Lo lamento Michael, no estoy disponible.

—Pero no te he dicho cuándo.

—Pero no estaré disponible ese día tampoco.

—¿A dónde vas?

—A ver a Harry.

—De nuevo con ese policía, ¿por qué insistes con él? Es un poco tosco y grosero, parece que no le agradas mucho... a ti ¿Te gusta?

Harry desciende por las escaleras en silencio, ha escuchado sutilmente la conversación y reconoce claramente que es Louis, se detiene y cierra sus ojos un momento para apreciar la voz de Louis y se concentra en cómo ese sonido acaricia su alma, nunca nadie apreciará tanto la voz de Louis como lo hace Harry.

—A mí no me gusta Harry...—declara Louis. El policía abre sus ojos de golpe cuando escucha la respuesta del castaño y no puede evitar sentir un tirón en su pecho que se relaja a continuación cuando su hermoso vecino exclama sin pudor —¡A mí me encanta!

—Pues a mi me parece huraño y no me gusta que estés tan cerca de él —Michael responde con un deje molesto, intenta jugar con una pelusa inexistente en la ropa de Louis pero es un mero pretexto para acercarse, sin embargo Louis se aleja antes del contacto como si el aire le intoxicara —en cambio; ¿Sabes lo que me caería bien?

—Un rayo —la respuesta es cortante en la voz del oficial Styles que ha llegado hasta el pasillo, es evidente el enojo que siente cuando observa la cercanía entre los dos hombres. Cuando Louis lo escucha dirige su mirada y le sonríe, orgulloso de cómo su pupilo aprende rápido el fino arte del sarcasmo, eso es vida.

—¡Vaya! si es nuestro amable vecino —dice con desagrado —¿No se te hace tarde para el trabajo?

—Días Cap —la sonrisa que muestra para Harry es única y ese simple acto hace que el corazón del ojiverde se inquiete, ambos ignoran olímpicamente a Michael —¿Dormiste bien?

—Harry, no queremos retrasarte ¿verdad lindura?

—...

—Tomlinson... —el tono que usa es diferente, todo el ambiente entre ellos es diferente. Está totalmente concentrado en el castañito y los recuerdos de la noche anterior le causan escalofríos, su cuerpo todavía reacciona a las sensaciones que dejó Louis, él lo llevó a otro plano con tan solo unos besos y el calor de sus manos tocando un poco de piel. Es probable que el mismo recuerdo los sorprendieran porque ambos muestran cuán afectados están —Mejor que nunca ¿Y tú?

—Si crees que esto es un buen día, esperar a despertar conmigo, con mis pies entre los tuyos, y tu boca en mi cuello y mis manos en tu cintura.

—Seré la cuchara pequeña.

—Obviamente que sí, yo te cuido no importa que estés más alto que yo —hay un par de hoyuelos más pequeños que aparecen en las mejillas de Louis, no es tan común verlos pero esa sonrisa que muestra es amplia y ahí están.

—¿Por qué sonríes así?

—No sé de qué hablas Cap —responde con una sonrisa aún más brillante y un color rosa se asoma en sus mejillas, imaginando cuando aquello suceda.

—De esa sonrisa —señala. Harry siente que la manera en que Louis lo mira es única, como si en cada respiración le estuviera diciendo que nunca encontrará a alguien como él.

Y Harry se está enamorando y ambos lo saben.

—¿Cuál? ¿Esta? —señala con su índice hacia su boca —Hmm, no lo sé —se acerca mientras lo escanea de arriba abajo y deja salir un suspiro —es una traidora, me delata, aparece en cuanto escucho tu voz.

—Pero estabas hablando con el pimpollo —responde de la misma manera, en un susurro; aunque con ese ceño fruncido que solo Louis identifica como celos. Le dedica una rápida mirada a Michael pero Louis le toma de la barbilla para atraer su atención.

—Sí, pero solo sonrío contigo —guiña —Oye Cap —la manera en como pronuncia esa simple palabra le eriza la piel a Harry porque Louis usa un tono exquisitamente seductor cuando lo dice y Harry es solo un hombre y nadie podría culparlo por ceder a una sola palabra y a un solo hombre —tengo que hablar contigo.

—¿Sobre qué?

—Sobre ti, sobre la mesa o el sofá, tú dime dónde y yo me adapto amor.

—¡Tomlinson!

—¿Si mi amor? —el tono es quizá un poco más alto de lo esperado, tienen un espectador en primera fila y tal vez deberían ser más discretos, pero es que Louis jamás intenta poner celoso a Harry, su propósito es en todo caso; que los demás se sientan celosos de ellos.

—Tengo que irme, se hace tarde —Louis le entrega el recipiente con su almuerzo y el oficial lo toma como si fuese un tesoro, tal vez para él lo es.

—Ya era hora —masculla entre diente Michael.

—Estaré fuera hoy—parece que Michael no existe y no es a propósito, es solo que cuando Louis está, el mundo desaparece— ¿te puedo llamar? Por nuestra cita de esta noche.

—Cap, tu me puedes llamar, besar, morder, azotar, todo lo que tú quieras.

—Hablo en serio, ¿te puedo marcar?

—Márcame, aráñame, pellízcame ¡Soy tuyo!

—Listo, me voy.

—¡Por fin! —responde Michael con un tono serio y los brazos cruzados e inmediatamente suaviza su tono cuando se dirige a Louis —Podemos ir por ese lado que te debo ¿Qué dices lindura?

—¿Quieres helado? —Harry pregunta antes de retirarse, se muestra sorprendido y su enojo solo crece al imaginar a Louis con ese tipo.

—Quiero de lado, de frente, encima. Si es contigo siempre quiero todo.

—Deberías gritarlo —responde arrogante, hay un hilo muy notorio de soberbia y la sonrisa petulante solo confirma que justo en ese momento, Harry se siente como un ganador.

—Prefiero escucharte gritar a ti —Louis guiña.

—¡Louis! ¡Lindura! —interrumpe Michael, cansado de ser ignorado —¿Nos vamos?

Ambos lo escuchan y saben que deben ignorarlo pero ese psicópata que todos llevamos dentro decide aparecer —Pensándolo bien —dice Harry, hoyuelos marcándose en sus mejillas cuando anticipa la cara de fastidio que pondrá Michael —¡Me la pasé increíble anoche! ¿Lo repetimos hoy?

—¡Por supuesto amor!

Michael muestra cuánto detesta esta interacción y su color sube hasta las orejas, está furioso pero ¿a quién le importa? —Oh basta oficial, este bebito y yo tenemos una cita.

—De hecho no tenemos nada pendiente Michael —corta Louis.

—Te daré tres razones del por qué no saldrá contigo, Jackson —argumenta Harry, su mirada está diciendo más de lo que siente, sabe que ha nombrado erróneamente al chico y no podría importarle menos.

—Es Michael —corrige.

Harry lo ignora una vez más y extiende su mano izquierda para comenzar a enumerar las razones pero Louis se adelanta y a medida que las menciona él mismo señala con su mano derecha los dedos de la mano de Harry haciendo el trabajo en pareja mientras el oficial no deja de mirarlo, totalmente perdido y su sonrisa cómplice le deja una tremenda satisfacción —Número uno, no me interesas Michael, lo lamento en serio, eres lindo pero no. Número dos, estoy interesado en alguien más, y número tres ese alguien es Harry.

—Pero bebé, Lou no puedes decir eso, quedamos en que yo te llevaría a tomar ese helado.

—No amigo, yo no necesito que nadie me lleve a ningún lado —hay una emoción cuando lo declara porque ésa es su verdad. Louis no encaja en el molde de la típica princesa, él es original, alegre, sarcástico, pervertido e inteligente, es autosuficiente y si requiere de alguien, ese no será Michael —si quiero un helado iré a comprarlo yo mismo, y si las estrellas, pues me las bajo yo solo.

Harry siente su pecho hincharse de orgullo, muerde su labio y un amago de sonrisa se dibuja, los nervios y la emoción por tocarlo le consumen a borbotones. Decide que él también puede ser un buen rival para Michael si se lo propone y, misteriosamente esa parte de él está más presente cuando mira a Louis —¿Me das un beso?

La sonrisa de Louis es inmejorable y siente cómo su interior se calienta de satisfacción por la actitud de su policía. Es admiración, apoyo y complicidad lo que ellos dos están experimentando —¿Dónde lo quieres? —pregunta, sus manos ya están sobre la cadera del oficial y lo atrae hacia él con un fuerte empujón que libera un jadeo en el policía.

—Sorpréndeme.

Harry siente a Louis en su boca, en su lengua y en su piel como un incendio que arde, pero no lastima. Su estómago se contrae y su genera una experiencia nueva. Había sido besado antes por supuesto, pero nunca sintió esto. Ahí es cuando él comprende que sin amor, todos los besos saben igual.

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"Busca el amor lejos de la herida, en tu interior está la fuerza de un huracán."

¿Qué tal tu día cariño?

¿Dudas, preguntas sobre algún personaje o algo que no haya quedado claro, sugerencias?

¿Dedicatorias?

GRACIAS por estar aquí, nuestro pequeño refugio.

MAKI <3