—¿Qué haces? —pregunta Zayn cuando lo observa ponerse en puntillas para ver a través de la mirilla de la puerta —¿Lou?

—Sh. Estoy esperando.

—¿Esperando? —sonríe con ternura mientras lleva una mano hasta el vientre plano de su amigo y lo acaricia delicadamente, entonces se inclina y deja un besito sobre éste —Cariño, lamento decirte que por mucho que lo intentes, los hombres no se embarazan...

—¡¿Sigues aquí? Pensé que ya te habías ido —responde sin voltear a verlo.

—¿A dónde?

—¡A la mierda! Estúpido.

La risa del moreno es estrepitosa, se coloca a su lado y ahora ambos están vigilando el pasillo detrás de su puerta.

—¿Por qué estamos aquí?

—Estamos esperando.

—¿Qué cosa?

—Mi aparato para hacer cardio —dice con una sonrisa traviesa mientras sigue esperando por cierto oficial — me bloqueó hace dos días y desde entonces no lo he visto.

—Asqueroso.

—¿Más que eso? —señala la espalda del moreno donde puede ver marcas por toda la piel —lo dudo.

—Ya cállate, mejor vamos a desayunar.

—Pero estoy esperando a mi pre-novio.

—No estoy seguro de la existencia de esa palabra.

—¿Ahora trabajas para la RAE?

—La Diva tiene doble turno, no vendrá ahora, Liam me lo dijo.

—¿Desde cuándo hablas con Payne?

—¿Recuerdas hace una semana que no quisiste salir conmigo? Bueno, conocí oficialmente a Liam y... pasaron cosas —el sonrojo lo delata así que desvía el tema, le toma de la mano para alejarlo de la mirilla y conducirlo hasta la cocina —¿Qué quieres comer?

—Lo que me quiero comer hace días que no me habla —dice con un pucherito.

(...)

Sí, han pasado dos días más desde que Michael llegó y no ha perdido oportunidad de saludar a Louis e intentar coquetear con él.

Por su parte, el castaño está ansioso por ver al policía pero sus horarios y turnos han cambiado, por lo que no se han visto, así que Louis siendo Louis, decide acabar con esto.

Se colocó de nuevo la loción que su madre le dio la última navidad, ropa ajustada con la que sabe que luce malditamente bien y se dirige a la estación, porque si la montaña no viene a Mahoma... no, si Harry no viene a Louis, Louis irá a Harry. 

Es física simple ¿o matemáticas, biología? Bah! Como sea.

—¿Estás seguro de esto? —está afuera de la estación de policías y no es que lo dude, pero que Zayn lo acompañe significa mucho.

—Sí mi amor, recuerda: acecha la presa, garra-patada-garra-patada acecha a la presa —imita al perezoso— Hazle saber que sigues en el juego.

Asiente y se dirige a la puerta principal. Le han informado que, efectivamente el oficial Styles está haciendo su ronda y en un par de horas terminará su turno. Así que decide esperarlo, se sienta cerca de la fotocopiadora junto a Payne y se distrae observando la pared con fotografías que hay, pasan un rato muy agradable charlando y descubren que podrían ser buenos amigos, incluso algo así como hermanos.

Corden, el jefe de los oficiales lo ha conocido desde la primera vez que estuvo aquí buscando a Harry y al parecer le ha caído de la maravilla pero es que, ¿a quién no le agrada Louis?

Durante el tiempo que lleva esperando, han estado platicando, riendo y bromeando. El jefe Corden es un tipo agradable y hace sentir a Louis en confianza, como una especie de familiar. Bromean sobre alguna anécdota graciosa mientras Horan se une a la charla y sacan a relucir desgracias ajenas.

—¡¿Tomlinson?!—se sorprende al verlo ahí, sentado sobre las piernas de Corden, imitando a un gato, ¡un maldito gato! sonriendo, mirándose increíblemente guapísimo con solo respirar —¡¿Qué crees que estás haciendo?! ¡Levántate! —es lo que grita mientras se acerca, sus ojos están rojos debido a la furia que está experimentando y su mandíbula cruje al contener todos los insultos que quiere lanzar contra su estúpido jefe, ese infeliz cretino!

—¡Hola Cap! —Louis corre a su encuentro y tiene ese brillo honesto en la mirada que hace que el corazón del oficial se alborote y solo quiera abrazarlo —Vine a asegurarme de que estuvieras bien.

—¿Por qué no lo estaría? —pregunta todavía enojado, está jodida y maravillosamente celoso mientras continúan de pie cerca del grupo de policías y estos observan en silencio la escena.

—Porque debes estar muy cansado de tanto estar en mi cabeza amor. Dime Cap, ¿por qué no sales de mi cabeza... y te metes a mi cama?

Las risas que se escuchan solo ruborizan más a Harry pero evita mirarlos, él está concentrado en el castañito. Corden se ríe y palmea la espalda de su oficial cuando pasa detrás de él y susurra muy cerca y le extiende una toalla —Ten Styles, para que te sobes el golpe porque ni las manos metiste campeón —y se retira, no sin antes de despedirse de Louis y sugerir que vuelva otro día.

—¡Qué sujeto tan agradable! —responde Louis cuando lo escucha —Como sea Cap, vine a invitarte, ¿Quieres ir a cenar a mi casa hoy? Quiero que pruebes lo que hizo mi mamá.

—¿Qué hizo?

—¡A mí!

—¡Yo quiero! —se escucha la voz de fondo de Payne y es solo para molestar a Harry, el policía lo mira y Liam sabe que estará en problemas pero vale la pena verlo celoso.

—¿Qué hay del pimpollo? —cuestiona porque no lo olvida y sabe que el tipo estará rondando cerca de su... lo que sea Tomlinson en este momento. Caminan hacia la misma pequeña sala donde estuvieron la vez anterior, lejos de miradas indiscretas.

—Bueno Cap, no me van los tríos pero si insistes...

—¡No! Jamás vuelvas a insinuar que ese idiota podría ...no lo quiero cerca de ti ¿escuchaste? —le toma de la cintura y lo sube al escritorio, Louis sonríe triunfante cuando nota la acción pero no lo menciona —No soporto su estúpida cara y esa sonrisa de...¿Te gusta? ¡Te gusta! Claro, ¿cómo no te va a gustar si es músico y seguramente-

—Si me gustara, —lo interrumpe, con esa voz sensual que solo usa con él —no estaría aquí contigo tratando de quitarte lo estúpido mi amor.

—No me convences Tomlinson, el tipo seguramente ha estado detrás de ti y te ha prometido bajarte la luna y as estrellas.

—¿Y qué? —le toma de la mejilla con una mano y con la otra peina su cabello hacia atrás —Deja de gruñir por todo Cap, él puede querer bajarme las estrellas pero; —lo acerca un poco para susurrarle —yo quiero que tú me bajes... los calzones.

—¡Tomlinson! —jadea y se recompone casi de inmediato cuando recuerda dónde están —además, quiero que me expliques ¡qué mierda hacías sentado en el regazo del jefe?!

—Nada, era solo una broma para Horan pero si te molesta, prometo nunca más volver a hacerlo.

—No puedo prohibirte nada pero; me gustaría que no lo hicieras.

—Lo que tu ordenes mi amor.

El policía sonríe, sintiéndose como un campeón verdadero y la sensación de sentirse deseado es algo nuevo y le gusta, inconscientemente Harry es quien se acerca a su cuello y su nariz inhala profundo, buscando más del aroma que desprende el castaño —hueles delicioso.

—Y eso que no me has probado —responde cuando inclina su cuello hacia un aldo para dejarle más acceso —si así es cuando me hueles imagínate cuando...

—Cállate, esas

cosas no se dicen.

—No se dicen, pero se hacen.

—No quiero equivocarme contigo Tomlinson, no quiero cometer errores —y su voz sale más parecido a una súplica.

—Yo tampoco quiero cometer errores Cap, pero si el "error" mide 1.85, es de ojos verdes y viste de policía, con gusto lo haría.

La sonrisa de Harry es monumental y hermosa, él muerde su propio labio aguantando las ganas de besarlo. Se acerca unos centímetros más porque le ha invadido una repentina ola de valor y está dispuesto a cruzar esa línea y arriesgarse porque Louis lo vale y en el fondo, brilla el pensamiento de que quizá él también lo merece. Apenas está acercándose cuando la oficina se abre.

—Oh Styles, te estaba buscando —Sara, la misma chica cuyo uniforme pide a gritos una extensión de tela aparece para cagar la posibilidad de un beso Larry —quería saber si quisieras ir por unas bebidas esta noche y tal vez-

—A ver querida, no sé si es por las extensiones o porque no puedes respirar con ese uniforme pero— baja del escritorio y toma la mano de Harry, la cruza sobre su hombro mientras que lleva su propia mano y la mete dentro del bolsillo trasero del pantalón del policía ganándose un respingo del mismo —¿si captas? Todo esto —señala su propio cuerpo —es lo que se come este angelito que ves acá.

—No te creo, él no es...Styles —llama —di algo.

—Sí mi amor, dí algo.

—Acepto salir contigo esta noche...—responde Harry pero su mirada se dirige a ella. La chica miró con soberbia a Louis y su sonrisa se ensanchó —Tomlinson —completó Harry.

El gesto de sorpresa que se dibujó en la chica fue memorable, casi podía verse el humo saliendo de sus orejas.

—¡¿Qué?! ¿Estás bromeando? ¡No puedes hacerme esto Styles! ¡no puedes!

—¡¿Qué carajos sucede aquí?! Se escuchan los gritos hasta mi oficina —el jefe Corden está en el umbral de la puerta, un poco atrás se encontraban Horan y Payne tratando de conseguir toda la información al instante.

—¡Este tipo que me ha insultado!

—Decir la verdad no es un insulto querida.

—Él me agredió —lloriqueó —Styles nunca creí que tú... yo pensé que tú y yo podríamos...me duele que no me elijas.

—Toma ibuprofeno cada 8 horas... para el dolor —aclara y lanza un guiño hacia la chica mientras se aferra a Harry.

—Basta ya, cada uno a lo suyo...Louisito, toma lo que es tuyo y llévatelo hijo.

Louis no lo dudó. Su salida fue épica y los vítores no se hicieron esperar cuando se inclinó ante Harry, lo tomó de la cintura y lo echó sobre sus hombros y salió de la estación con el hombre a cuestas, al fin y al cabo solo obedeció al jefe Corden y se llevó únicamente lo que le pertenecía.

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"Eres tú, con tu forma de hablarte cuando te caes quien determina si te has caído en un bache o en una tumba", (William James)

¿Qué te vas a decir cuando has cometido un error? todos nos equivocamos, pero es tu derecho recuperarte y perdonarte.

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MAKI <3